Sentido Común de una Casa Guerrera – Capítulo 49: La austeridad de la belleza

Traducido por Lugiia

Editado por Sakuya


—Qué agridulce…

Unos pocos días después de eso, voy a visitar sola el local de la Señora para una consulta.

El propósito de la consulta es preguntar sobre lo que debo hacer para ser más femenina como todas las hermanas mayores de aquí… si puedo o no convertirme en una chica encantadora.

Estaría mintiendo si digo que no me ha importado en absoluto hasta ahora, pero… aun así, últimamente ha sido especialmente preocupante.

El hecho de que no tenga ni una sola pizca de feminidad.

Cabello corto por el bien de la esgrima. Un cuerpo que está cubierto de heridas. Nunca me he arrepentido o menospreciado por ello. Por otro lado, incluso he pensado que es algo de lo que estar orgullosa. Sin embargo, cuando estoy de pie junto a Louis… empiezo a pensar en ello después de todo.

¿Ha notado que soy una chica?

¿Me está mirando como un miembro del sexo opuesto?

Ese tipo de pensamientos vienen a mi mente…

Aunque puede ser el caso, cuando pienso en las personas de la Casa del Marqués a quienes puedo consultarles sobre esto…

No se me ocurre nadie.

Para empezar, tengo miedo de exponer el hecho de que saldré a la ciudad por mi cuenta. Además, desde que las conocí, siempre he pensado que… las hermanas mayores del local de la Señora son bonitas y simpáticas.

Con eso en mente, he venido a visitar el local de la Señora, pero…

Como resultado, las hermanas mayores comenzaron a interrogarme a fondo y termino contándoles la mayoría de los detalles sobre mis circunstancias. Todas ellas me miran amablemente con una mirada poco entusiasta.

De alguna manera, eso me hace sentir más avergonzada.

—Ha… volvamos al tema principal. ¿Qué debo hacer para ser bonita como ustedes, hermanas mayores?

Cuando pregunto eso nuevamente, ellas se ríen.

— ¿Qué estás diciendo, Mel?

Mientras se ríen, Luluria dice esas palabras.

Como se espera, para que alguien como yo quiera ser linda… es imposible ya que no tengo ni lo básico… o eso es lo que pienso mientras estoy a punto de rendirme.

—Vamos, chicas. No es bueno si no lo dicen correctamente, ¿saben? Porque están haciendo que Mel lo malinterprete.

La Señora dice eso y reprende a todas.

—Oh, lo siento, Mel. Pero una vez que empecé a preguntarme sobre lo que decías en ese momento, me sentí muy extraña.

Comienza a reírse… como es de esperar, se ríe de mí. Mientras tanto, Luluria extiende su mano hacia mi mejilla.

—Incluso cuando Mel ya tiene consigo la magia número uno en hacer que una chica se vuelva linda. Me preguntaba qué podríamos hacer más allá de eso cuando dices que quieres ser linda.

— ¿La magia número uno para volverme linda…?

—Son los sentimientos, tus sentimientos. Yo también lo dije antes, ¿verdad? Las chicas que piensan que quieren ser lindas siempre se volverán más hermosas.

—Totalmente. Las doncellas enamoradas son un buen ejemplo de ello.

Todas las hermanas mayores me acarician las mejillas, estrujándolas.

— ¡¿Enamoradas…?!

—Estás enamorada, Mel.

—Así es… No importa cómo lo mires, esos pensamientos son los de una doncella enamorada, ¿sabes?

Las hermanas mayores se ríen de mi exagerada reacción.

Amor, amor… ¡¿Amor?!

—Oh Dios, ¿así que debemos empezar desde ahí?

Hermana mayor sonríe amargamente al verme hirviendo de vergüenza.

—Sentiste que querías ser más linda para él, ¿verdad?

Asiento con la cabeza de manera preocupada a las palabras de Luluria.

—Puedes pasar de una gran alegría a una gran tristeza por un simple comentario suyo… y, sin embargo, te sientes feliz por eso, ¿verdad?

Una vez más asiento a sus palabras.

—Mel, ¿hay alguna otra persona aparte de él que te haga sentir así?

Niego con la cabeza.

— ¿No es esa tu respuesta? Si llego a decir tal cosa directamente sería una grosería. Si te vuelves honesta, la respuesta estará dentro de ti.

De repente, pienso en Louis.

Sin pensar en cosas innecesarias, simplemente pienso en él.

Sólo por pensar en él, mi corazón se estremece. Me siento feliz y afortunada a la vez. Es un sentimiento especial que sólo obtendría de él…

Si ese sentimiento especial es lo que llaman amor. Entonces ciertamente estoy enamorada de él.

—Dejando eso a un lado, una doncella enamorada se volverá cada vez más hermosa sólo por eso.

Inclino mi cabeza ante las palabras de otra hermana mayor.

—Oh, no me crees, ¿verdad?

Las agudas palabras de Luluria me dejan sin palabras.

—Entonces diré esto. Mel, a diferencia de antes, ahora estás cuidando tu cabello todos los días, ¿verdad?

Eso es verdad…

Sintiendo que quiero hacer algo, cuido mi cabello todas las noches con el método que me enseñó Granny.

—Antes de volverte consciente de él, ¿estabas haciendo eso?

Niego con la cabeza ante su pregunta.

—Tu piel también es más brillante que antes. Le estás haciendo algo, ¿verdad?

Cuando otra hermana mayor señala eso, esta vez asiento con la cabeza.

Tal como dijo, al igual que mi cabello, cuido mi rostro todas las noches con un método que también me enseñó Granny.

—Así, esas pequeñas cosas que empiezas a poner en tu mente empezarán a acumularse. No hay ningún atajo para ser hermosa. Es algo que se avanza poco a poco.

—Bueno… la base de Mel es buena después de todo. Creo que rápidamente se convertirá en una hermosa chica a la que todos voltearán a mirar.

—Así es. En primer lugar, Mel, ten un poco de confianza. Si no crees en ti misma, ¿entonces quién se supone que debe creer en ti?

Ya veo, pienso, incondicionalmente dándome cuenta que esas palabras son profundas mientras asiento con la cabeza.

—Está bien. Entonces, trabajemos duro para que te vuelvas aún más linda poco a poco de aquí en adelante. También te animaremos.

—Muchas gracias, hermanas mayores.

—Pero… antes de eso, Mel. Cuéntanos un poco más sobre tu historia agridulce.

Destellando, los ojos de las hermanas mayores brillan sospechosamente.

— ¿Eh…?

Después de eso, las hermanas mayores se divierten completamente conmigo.

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