Soledad – Capitulo 10

Traducido por BeeMiracle

Editado por Ayanami

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Después de que Chen Dong Lan regresó, sus vidas volvieron a ser como antes. Él ya estaba satisfecho con esto.

Esta mañana temprano, recibió una llamada de su hermano, Xiao De. Con miedo de despertar a Yuan Yuan, caminó hacia el balcón y cerró la puerta por completo, antes de responder a la llamada.

El sol no había salido y el viento en el balcón era muy frío.

—¿Xiao De?

—¿Ge? —La voz de Xiao De no había cambiado. Fue tan claro y enérgico como cuando estaba en la secundaria. —Ge, mi amigo y yo llegaremos alrededor de las diez de esta noche. Mamá insistió en que te llamara antes de abordar el avión para que pudieras venir a recogernos.

—Ok. —Chen Dong Lan cruzó sus brazos debido al frío. —Los esperaré a las nueve.

Xiao De murmuró: —En realidad, no siento que necesites venir…

—Tengo que. Esta es la primera vez que vienes a la ciudad T, además de que llevas mucho tiempo fuera del país. Si sucede algo inesperado, no sería fácil para mí explicárselo a mamá y al tío Xu. —Chen Dong Lan, generalmente, hablaba muy pocas palabras, pero con Xiao De, seguía regañando.

Xiao De, absolutamente, no podía encontrarse con un percance cuando estaba aquí.

—Bien, bien. Entonces gracias, Ge. —Xiao De parecía haberse burlado de sus amigos y su agradecimiento sonaba descuidado.

Chen Dong Lan colgó el teléfono. No tenían ningún tema en común y no se acercaron mucho al crecer. Después de no verse durante tanto tiempo, se entendían menos aún y simplemente no tenían de qué hablar.

Al regresar a la habitación, Chen Dong Lan no podía dormir y miró al techo, perdido en sus pensamientos.

♦ ♦ ♦

Esa noche, cuando llegó el momento, Chen Dong Lan se vistió antes de lo previsto y salió de su habitación. Tomar el taxi hasta el aeropuerto requería mucho tiempo y no sería bueno llegar tarde.

Aunque a Yuan Yuan podría no importarle que saliera, fue a la habitación de Yuan Yuan y llamó a la puerta. —Yuan Yuan, voy a salir por un rato.

—Está bien… —Yuan Yuan hizo un esfuerzo para apartar los ojos del documento. —¿Adónde vas?

Chen Dong Lan no quería contarle sobre Xiao De, pero como Yuan Yuan había preguntado, no quería mentirle y trató de ser lo más simple que pudo. —Hay un pariente que regresa al país. Necesito recogerlo.

Esto despertó la atención de Yuan Yuan. —¿Recogerlo? No tienes coche. ¿Por qué querría que lo hicieras?

Chen Dong Lan no tuvo más remedio que aclarar. —Es mi hermano menor.

Yuan Yuan lo miró sin comprender. Fue la primera vez que escuchó a Chen Dong Lan decir que tenía un hermano menor. —Entonces, toma mi coche.

Chen Dong Lan estaba avergonzado. —No tengo licencia de conducir.

Estaba avergonzado de decirlo. Como hombre, Chen Dong Lan nunca había tenido ningún interés en los autos. Se sentía bien tomando el metro y el transporte público. Si eso no era posible, caminar también estaba bien. Si fuese realmente un inconveniente, tomaría un taxi. Nunca había considerado obtener una licencia de conducir.

Quizás, era hora de obtener una licencia de conducir. De esa manera, no necesitaría molestar a Yuan Yuan para que lo llevara todo el tiempo.

Yuan Yuan cerró la carpeta de documentos. —Entonces, iré contigo.

Chen Dong Lan se sorprendió y sintió que no funcionaría. Esto no era lo mismo que en otras situaciones y Yuan Yuan no conocía a Xiao De. Además, Xiao De estaría en el país durante varios días. Si había una primera vez, podría haber una segunda o tercera vez, y no podía permitir que eso sucediera.

Yuan Yuan vio su expresión y supo que quería negarse. Para él, como era Chen Dong Lan, este pequeño favor no era nada.

—Simplemente tomaré un taxi —se negó Chen Dong Lan. —Además, mi hermano trajo algunos amigos. No podrían caber en un solo automóvil.

Yuan Yuan no insistió. Después de todo, era la reunión familiar de otra persona. Si no querían que los forasteros se unieran, entonces, él sería el grosero.

Chen Dong Lan tomó un taxi. En la sala de llegadas del aeropuerto, mostró un tablero con “Xu Ming De” escrito en él. Mientras esperaba, estaba un poco nervioso porque no se habían visto en más de ocho años.

El vuelo de Xiao De llegó un poco tarde. Chen Dong Lan esperó desde las nueve hasta las once antes de que finalmente llegara su hermano.

En lugar del grupo de jóvenes adolescentes que estaba esperando, caminando hacia Chen Dong Lan era una pareja joven. La niña llevaba un par de tacones rosas y sostenía íntimamente la mano del niño.

—¿Ge? —Xiao De estaba un poco indeciso.

La niña, sin embargo, era cálida y de buenos modales. Saludó a Chen Dong Lan con una sonrisa juguetona. —Hola, Gege. —Terminó con una nota demasiado dulce.

Xiao De fue un poco tímido e hizo las presentaciones. —Olivia, mi novia.

Chen Dong Lan podía sentirlo más o menos. Xiao De, probablemente, les había mentido a sus padres y vino al país con su novia a pasear. No estaba calificado para comentar sobre las acciones de Xiao De, así que todo lo que hizo fue preguntar: —¿Han reservado el hotel?

Olivia negó con la cabeza. Esta pareja, obviamente, no había planeado nada y miró a Chen Dong Lan con inocencia.

Chen Dong Lan pidió un taxi y planeó organizar un hotel en la ciudad. Pero Olivia se quejó. —Gege, ¿por qué no podemos quedarnos en tu casa?

Xiao De también tenía curiosidad. —Ge, ¿no has comprado una casa y un coche? En casa, conduzco a la escuela todos los días.

Antes de que pudiera terminar, Olivia lo abrazó y lo elogió en inglés. —Conducir es súper sexy.

Chen Dong Lan no sintió que hubiera nada que esconder y dijo: —No compré un automóvil y ahora estoy alquilando un lugar con un amigo, por lo que no es conveniente que te quedes allí.

Olivia hizo un puchero. —No importa. Estaremos bien.

Chen Dong Lan estaba un poco molesto. —A mi amigo no le gusta que los forasteros lo molesten.

Olivia no estaba muy feliz y quería decir algo más, pero Xiao De pellizcó su rostro con amor y logró consolarla.

Después de organizar el hotel, ya era pasada la medianoche. Xiao De dijo que no habían comido, por lo que Chen Dong Lan los llevó a un restaurante de cocina occidental para comer.

Xiao De y Olivia ordenaron de inmediato un licor importado. Chen Dong Lan no estaba seguro, así que no los detuvo. Pero él preguntó: —¿Mamá y el tío Xu te permiten beber?

Olivia hizo un puchero. —Pensé que Gege era joven y no nos controlaría.

Xiao De se rió. —Mamá no lo permite. Papá lo hace. Pero no fue fácil para mí llegar aquí. Ge, solo finge que no lo viste.

A Chen Dong Lan le dolía un poco la cabeza. Pero nunca había cuidado a Xiao De y no estaba seguro de qué hacer, así que decidió dejarlo en paz.

Después de comer, Chen Dong Lan los llevó de regreso al hotel y luego se fue a casa. Era tarde en la noche, por lo que tuvo que quedarse en la carretera durante mucho tiempo, antes de poder tomar un taxi.

Estaba un poco preocupado por Xiao De. Había reservado habitaciones individuales separadas para ellos, pero nadie velaba por la joven pareja. Si pasara algo por la noche, era difícil de decir.

Cuando llegó a casa, Yuan Yuan ya estaba dormido. Abrió y cerró la puerta tan suavemente como pudo. Sin encender las luces, se quedó cerca de la puerta durante un rato para acostumbrarse a la oscuridad antes de entrar.

Lógicamente, debería haberse bañado de inmediato y haberse ido a dormir porque necesitaba trabajar mañana. Después del trabajo, todavía tenía que entretener a Xiao De y a Olivia. Pero como Xiao De estaba aquí, significaba que el año estaba llegando a su fin y Yuan Yuan se iría por un período de tiempo.

Estaba feliz viviendo con Yuan Yuan. Todas las mañanas, era el primero en verlo. Todas las noches, él era el que le daba las buenas noches a Yuan Yuan antes de dormir. En estos días, no estaba seguro de cuántas veces iban al supermercado o cenaban juntos.

Pero…

Chen Dong Lan pasó junto a la habitación de Yuan Yuan y no entró.

Acostado en la cama, Chen Dong Lan se regañó a sí mismo en su corazón.

¿Por qué había alguien tan inútil como él?

Ni siquiera se atrevió a echar un vistazo.

♦ ♦ ♦

Al día siguiente, Chen Dong Lan terminó el trabajo temprano y se apresuró al hotel en el que se alojaban Xiao De y Olivia, pero no estaban allí. Después de una llamada telefónica, descubrió que Olivia, en realidad, tenía una licencia de conducir nacional. Alquilaron un automóvil, lo condujeron para hacer turismo y se olvidaron de informar a Chen Dong Lan en su momento de disfrute.

Chen Dong Lan pensó que algo le había sucedido a Xiao De. Sabiendo que estaba bien, no estaba enojado, pero preguntó preocupado: —¿Qué pasa con el permiso de conducir de Olivia? ¿Realmente puede conducir?

—Ge, no te preocupes. Nos estamos divirtiendo mucho ahora. Voy a colgar.

—Xiao De. —Chen Dong Lan lo llamó apresuradamente. —No juegues demasiado. Cualquier cosa que hagas aquí debe ser permitida por mamá y el tío Xu, ¿de acuerdo?

El tono de Xiao De no era muy feliz. —Ge, no te has preocupado por mamá y papá durante ni siquiera dos días. Ni siquiera llamas durante todo un año. ¿Cómo sabrías que no me permitirían jugar?

Chen Dong Lan estuvo en blanco durante dos segundos y casi no emitió ningún sonido. —Yo…

No pudo continuar.

Xiao De se dio cuenta tardíamente de que podría haber cruzado la línea. Después de todo, no había visto a Gege en muchos años, y su relación no era cercana, a diferencia de sus padres que lo malcriaron incondicionalmente, así que ajustó su actitud. —Ge, déjanos divertirnos libremente. Me aseguraré de que no pase nada.

Chen Dong Lan no tenía nada más que decir. —Ok. Siempre que puedas tomar tus propias decisiones.

Colgó el teléfono y no recuperó el ánimo durante mucho tiempo.

Pensó que nunca volvería a estar triste por su familia.

Al salir del hotel, Chen Dong Lan fue a comprar algunas verduras. Mientras llevaba algunas bolsas a la casa, Yuan Yuan, que estaba a punto de pedir comida, se sorprendió mucho. —¿No dijiste que estabas comiendo con tu hermano?

Chen Dong Lan llevó las verduras a la cocina. —Los jóvenes quieren comer solos.

Yuan Yuan lo siguió hasta la cocina. —¿Cuánto más joven es tu hermano? —Miró las bolsas y sacó dos patatas, colocándolas en la palangana. —¿Patatas y cerdo a la brasa? ¿Es suficiente?

—Sí, solo agrega otro poco. —Chen Dong Lan lo ayudó a abrir el grifo y dijo: —Aproximadamente… un poco más de tres años más joven.

Yuan Yuan frotó la papa entre sus dedos. —Entonces, no hay mucha diferencia. ¿Por qué te excluyen de las filas de los jóvenes?

Chen Dong Lan habló sin pensar: —Probablemente, porque soy demasiado aburrido.

Yuan Yuan se quedó sin poder hablar.

Aunque no estaba equivocado, ¿quién fue tan honesto al admitir sus defectos? Y ni siquiera estaba un poco avergonzado de ello.

Pero en lo que respecta a Chen Dong Lan, no hay nada de malo en ser aburrido.

Frotando las patatas, Yuan Yuan pensó en algo de repente. —Correcto. He adelantado la fecha en la que regresaré a la ciudad A, así que me voy mañana.

Solo se oía el sonido del agua que fluía del grifo de la habitación. Chen Dong Lan hizo una pausa y no respondió durante mucho tiempo.

—¿Chen Dong Lan? —Yuan Yuan lo miró con curiosidad. —¿Me has oído?

—Te oí. —Era como si Chen Dong Lan acabara de despertar de un sueño. —Te oí. Regresas a casa mañana. ¿Por qué lo adelantaste de repente?

—Me las arreglé para tener dos días libres adicionales. —Dejando que las patatas se escurrieran, Yuan Yuan preguntó: —¿Necesitas que las pele? Siento que no pelarlas también está bien.

—Pelar. Lo haré. Déjalas ahí. —Chen Dong Lan le arrebató las patatas de las manos y sacó el pelador del armario. Estas acciones parecían ágiles, pero parecía más apropiado describirlas como apresuradas.

Yuan Yuan sintió que algo no estaba bien, pero no podía decir exactamente qué estaba mal.

Cuando estaban comiendo, Chen Dong Lan había reanudado su comportamiento normal.

—Pasado mañana, no estaré en casa. ¿Quieres entretener a tu hermano y su amigo con una comida aquí?  —Preguntó Yuan Yuan.

Chen Dong Lan casi deja caer sus palillos en estado de shock. —¿Cómo podría?

Yuan Yuan sintió que su respuesta fue muy extraña.

—Me cocinas todos los días, pero tu hermano no puede comer nada después de haber venido hasta aquí. ¿Es así como eres como hermano? —Yuan Yuan dijo en broma.

Chen Dong Lan negó con la cabeza. —No es lo mismo.

¿Qué no es igual?

—¿Tu hermano prefiere salir a comer? —Yuan Yuan solo podía pensar en esta razón.

Chen Dong Lan apretó los palillos con fuerza y ​​estuvo de acuerdo tácitamente con Yuan Yuan.

Simplemente, no quería a nadie en la casa además de ellos dos, incluso si era Xiao De, su pariente.

Si lo hubiera, no podría seguir engañándose, pensando que esta era su casa.

Solo eran coarrendatarios.

Solo amigos que viven juntos por casualidad.