Traducido por Bee
Editado por Sakuya
Después del descanso de media hora en la noria, Ye Zhou sintió que finalmente había vuelto a la vida.
—Vamos a recoger a la princesita de tu familia. —Ye Zhou miró a su alrededor y no pudo encontrar un regalo para Shang Youyou—. Antes de recogerla, vamos primero al centro comercial y compremos algunos regalos para ella.
—No hay necesidad de pasar por todos estos problemas. No hay suficiente espacio en casa para todos los juguetes.
El auto estaba estacionado en el estacionamiento abierto y salió una ráfaga de aire caliente cuando se abrió la puerta. Shang Jin se quedó afuera y esperó a que el calor se disipara un poco. Encendiendo el aire acondicionado, esperó a que bajara la temperatura antes de dejar entrar a Ye Zhou.
Cuando el globo estaba en el cielo, no parecía grande, pero ocupaba un poco de espacio en el auto.
Ye Zhou sostuvo una muñeca en su brazo y después de que la ventana se cerró, colocó directamente el globo en la parte posterior. Se abrochó el cinturón de seguridad y dijo: —No entiendes esto. Tú eres grande, pero ella es una niña. Para una niña, no importa cuántos regalos, nunca es suficiente. Pero tampoco sé mucho sobre regalos para niñas. ¿Qué le gusta? ¿Muñecas, Barbie, Lego?
—Siento que los tenemos todos en casa. —Shang Jin salió del estacionamiento y se dirigió a la carretera más cercana, dirigiéndose al centro comercial más grande de la ciudad—. Vayamos y veamos.
Cuando era niño, no sabía mucho sobre los juguetes de las niñas.
Ye Zhou sintió que todas las muñecas Barbie se veían similares, al igual que la pegatina de princesa que había comprado antes. Miró lo que compró la niña a su lado y compró el mismo. También había escuchado al empleado de la tienda recomendar esta muñeca princesa.
Por otro lado, Shang Jin eligió un juego de castillo de Lego.
Ye Zhou miró a la edad de 6 a 12 años en la caja y abrió su boca.
—¿Estás seguro de que puede jugar a esto?
Shang Jin señaló a los personajes de la caja y dijo: —Mira, hay dos princesas en ella. Ciertamente le gustará.
—No olvides que Youyou aún no tiene cuatro años.
—No importa. En el peor de los casos, puedo ayudarla a armarlo. —Shang Jin objetó.
—¿Por qué no admites que quieres jugar tú mismo?
Shang Jin fingió no escuchar nada y fue a la caja registradora.
Cuando llegaron al jardín de infancia, ya eran las tres y media. En ese momento, ya había muchos padres parados en la puerta del jardín de infancia. Cuando Shang Jin y Ye Zhou se detuvieron hacia el medio con un globo atado a la mano de Ye Zhou, de repente atrajeron la atención de muchas personas.
Cuanto más tiempo permanecía con Shang Jin, más se acostumbraba Ye Zhou a las miradas a su alrededor. Ahora podía bostezar y apoyarse directamente en el hombro de Shang Jin para cerrar los ojos y descansar.
Las dos personas charlaron ociosamente.
Después de que sonó la campana de la escuela, Ye Zhou y Shang Jin se pusieron de pie. Los niños continuaron saliendo del aula uno tras otro. Ye Zhou abrió los ojos y miró a su alrededor hasta que no quedó nadie al final. Entonces, Shang Youyou salió lentamente con una pequeña mochila.
—Youyou. —Shang Jin se acercó en unos pocos pasos e intentó sostenerla, pero Shang Youyou lo evitó y caminó lentamente frente a él.
Shang Youyou bajó la cabeza. Sabía que su hermano estaba detrás de ella y no le preocupaba perderse. Estaba tan enojada que no quería preocuparse por nadie.
De repente, un globo de gatito apareció frente a ella.
—¿Por qué esta pequeña princesa no es feliz?
Shang Youyou miró fijamente el globo del gatito y dijo: —Es claramente rosa. ¿Por qué es la voz de un hombre?
Ye Zhou se rió disimuladamente y levantó el globo. Se agachó al mismo nivel que Shang Youyou y dijo: —¿Todavía me recuerdas?
—Hermano Zhou Zhou…
—El globo es para ti. —Ye Zhou ató el globo sin apretarlo alrededor de la muñeca de Shang Youyou y se inclinó junto a su oreja—. Tu hermano te lo compró especialmente.
Shang Youyou levantó la cabeza y admiró el globo. Dio unos pequeños pasos al lado de Shang Jin y tomó su mano.
—No dije, la princesita de tu familia podría ser persuadida. —Ye Zhou caminó hacia el otro lado de Shang Youyou y tomó su mano, diciendo—: Ven, princesita, columpio.
Ye Zhou y Shang Jin jugaron con ella y Shang Youyou finalmente se rió.
En el auto, Shang Youyou se sentó en el asiento para niños y vio el juguete Lego a la izquierda y la muñeca princesa a la derecha. Cogiendo la caja de la muñeca, preguntó tentativamente: —¿Esto es para mí?
Shang Jin miró a Shang Youyou en el espejo retrovisor y dijo: —Es el regalo del hermano Ye Zhou para ti. ¿Te gusta?
—Gracias, hermano Zhou Zhou. —La mirada de Shang Youyou recorrió la caja de Lego y dijo—: Entonces esto, ¿el hermano Zhou Zhou se lo está dando al hermano pequeño?
—Esto es lo que te compró tu hermano mayor. —En la luz roja, Ye Zhou se dio la vuelta directamente—. Los elegimos especialmente para la pequeña princesa Youyou.
Shang Youyou deseaba laboriosamente sostener ambas cajas en sus brazos, pero sus brazos eran demasiado cortos y ambas cajas eran grandes. También se unió un globo y, como resultado, apenas pudo agarrarse a uno. Sin embargo, debido a que ninguno de estos dos regalos era para su hermano pequeño, la hizo muy feliz. No podía mirar lo suficiente y empezó a charlar sin parar.
—Hermano Zhou Zhou, ¿cómo supiste que me gusta la princesa Elsa? Hermano mayor, este castillo es donde viven la princesa Elsa y la princesa Anna. Me gusta mucho.
—Siempre que le guste a nuestra princesa. —Ye Zhou tenía la sensación general de que Shang Youyou no era una persona con un fuerte deseo de monopolizar. Las cosas que le gustan, también estaba feliz de compartirlas con los demás. Pero ahora, tenía miedo de que no olvidaran a su nuevo hermano cuando le dieran regalos. Temía que ella todavía careciera de un sentido de seguridad y temía que su amor tuviera que dividirse.
Todavía era temprano, por lo que los dos llevaron a Shang Youyou a jugar en un patio interior para niños pequeños. Las dos personas se sentaron a un lado mientras Shang Youyou se quitaba los zapatos y se dirigía al parque infantil, subiendo y bajando por el tobogán con los otros niños.
Después de jugar durante más de una hora, la oscuridad de la mañana había desaparecido por completo del rostro de Shang Youyou.
Llevaron a Shang Youyou a un restaurante infantil con temática de gatitos por la noche, y la mayoría eran niñas. Esta fue la primera vez que Ye Zhou y Shang Jin vinieron aquí. Si no hubieran traído a Shang Youyou, ciertamente estarían fuera de lugar en el restaurante.
Mirando a su alrededor, vio que estaba todo cubierto de rosa, con dibujos de gatitos y muñecos de gatitos por todas partes. Shang Youyou estaba encantada y tuvo que tomarse una foto frente al modelo de gatito gigante.
Shang Youyou miró al niño de la mesa de al lado comiendo helado con una cuchara pequeña y tiró de la ropa de Shang Jin.
—Hermano mayor, ¿puedo comer helado?
—Por supuesto, puedes comprar lo que quieras hoy.
Después de ordenar, Shang Jin se levantó para ir al baño. Ye Zhou se sentó junto a Shang Youyou y preguntó: —Cariño, escuché que tienes un nuevo miembro en tu familia.
Al mencionar esto, la pequeña boca de Shang Youyou se aplanó de inmediato.
—Es mejor tener un hermano menor. Más tarde, alguien jugará contigo. —Ye Zhou dijo a la ligera.
—No es bueno. A todo el mundo sólo les agrada el hermano pequeño y no les agrado yo. —Shang Youyou resopló.
—¿Cómo es posible? —Ye Zhou bajó la cabeza y tocó la pequeña cara de Shang Youyou—. No hay límite para gustar, este tipo de sentimiento. No dejarás de gustarle a todo el mundo porque les guste tu hermano pequeño.
Shang You no entendió.
—¿Te gusto?
Shang Youyou respondió de inmediato: —Me gustas.
—Tú también me gustas, pero… —El tema de Ye Zhou dio un giro—. No teníamos ningún sentimiento entre nosotros antes de que me conocieras. Fue porque me regalaste una flor que me hizo saber que te gusto. Entonces ambos nos hicimos buenos amigos. No dejarías de gustarle a tu hermano mayor porque yo te guste, ¿verdad?
La cabeza de Shang Youyou se sacudió como un cascabel y rápidamente explicó: —Me gusta el hermano mayor. También me gusta el hermano Zhou Zhou.
—¿No es así? A tu mamá y a tu papá les gusta tu hermano pequeño, pero tú también les gustas. Si puedes tomar la iniciativa como lo hiciste conmigo y tomar la mano de tu hermano pequeño, entonces también le agradarás a tu hermano pequeño, así que tendrás una persona más que te ama. ¿No es mejor?
Shang Youyou frunció los labios y dijo: —Pero no me gusta mi hermano pequeño.
Shang Jin acababa de regresar y escuchó esta oración. Se sentó frente a Ye Zhou y escuchó las tonterías que Ye Zhou podía soltar.
—Le gustas tanto al hermano pequeño, pero en realidad no te agrada, ¡qué triste se siente! —Ye Zhou dijo exageradamente.
Efectivamente, el corazón de Shang Youyou de buen corazón se ablandó, pero tampoco se dejó engañar tan fácilmente.
—Hermano Zhou Zhou, no has visto a mi hermano pequeño, entonces, ¿cómo sabes que le agrado?
—Porque… —Los dedos de Ye Zhou tocaron la mesa, todo tipo de mentiras y excusas dando vueltas en su cabeza, y le dio a Shang Jin una mirada de pasada.
Shang Jin casualmente inventó algunas tonterías.
—Debido a que el hermano Ye Zhou te dio a la princesa Elsa hoy, la princesa Elsa le contó este secreto al hermano Ye Zhou para agradecerle.
Ye Zhou miró a Shang Jin. ¿Qué mala razón fue esta? ¡Ni siquiera puede engañar a un niño de tres años!
Pero Shang Youyou lo creyó. Ella se arrodilló con entusiasmo en su asiento y dijo: —¿De verdad, hermano Zhou Zhou?
—De verdad, de verdad. —Ye Zhou siguió su ejemplo y dijo—: Cuando vayas a casa hoy, puedes intentar acercarte a tu hermano primero, incluso con un dedo está bien. Seguramente lo sostendrá porque quiere ser tu amigo. —De todos modos, un bebé agarraría cualquier cosa a su alcance. A Ye Zhou no le preocupaba en absoluto que la mentira fuera descubierta.
Después de la cena, Shang Jin envió a Ye Zhou de regreso a la escuela primero y luego llevó a Shang Youyou a casa.
Al abrir la puerta, Qin Fei sostenía a Little Ji y escuchaba música en el sofá. Shang Youyou caminó lentamente hacia Qin Fei bajo los ojos alentadores de Shang Jin.
—Youyou, has vuelto. —Qin Fei dijo con una sonrisa y besó la mejilla de Shang Youyou. Preguntó—: ¿Te divertiste hoy?
Shang Youyou asintió y miró a Little Ji en los brazos de Qin Fei, miraba a su alrededor con los ojos abiertos. Shang Youyou acercó un dedo y Little Ji lo agarró de inmediato. Shang Youyou miró a Shang Jin con sorpresa. —¡Es verdad!
Shang Jin medio se agachó y frotó la cabeza de Shang Youyou.
—Debido a que el hermano mayor está en la escuela y no puede acompañarte a menudo, el hermano pequeño tiene miedo de que estés sola y especialmente vino a estar contigo. Después de llegar a casa todos los días, puedes ver a Little Ji.
—¡Bueno!
♦ ♦ ♦
Cuando Ye Zhou salió del coche, fue a una frutería y compró una sandía grande. Luego corrió de regreso al dormitorio.
A las 8 de la noche, Ye Zhou convocó a los amigos al 405 y dijo solemnemente: —Tengo algo que anunciar.
Zhou Wendao miró la sandía en la mesa y babeó. Silenciosamente extendió su mano para tomar un trozo y fue golpeado por Chen Shao.
—Zhou está diciendo algo. ¡Sea un poco serio!
Ye Zhou respiró hondo y dijo: —Estoy con Shang Jin.
Después de un momento de silencio en todo el dormitorio, inmediatamente se relajó, como si la atmósfera tensa en ese momento fuera una ilusión.
Zhou Wendao tomó un trozo de sandía y le dio un mordisco.
—¿Cuándo no estaban ustedes dos juntos?
—Sí, y estaba pensando en lo que ibas a decir. Me asustó. —Liu Yutian se hizo cargo de una rebanada de sandía en dos bocados e inmediatamente tomó otra—. Es bueno que te hayas reconciliado. Hiciste las cosas tan serias que pensé que ibas a celebrar una conferencia de ruptura.
—En realidad… —Zhang Xing se tragó la sandía y se secó la boca con un pañuelo de papel—. En realidad, preferiría saber si ustedes dos tuvieron discordia sexual al final.
Wen Renxu se unió a la animada conversación.
—Prefiero saber quién es el top. ¿Quién es el bottom?
Xu Yangjun salió por detrás y dijo: —Quiero saber aún más, ¿se siente bien o no?
—¿No pueden ser un poco más puros? ¡¡Dije antes que Shang Jin y yo aún no hemos dado ese paso!! —Ye Zhou dijo enojado.
—¿Ustedes dos han estado juntos durante tanto tiempo, pero no han dormido juntos? —Zhou Wendao dijo sorprendido—. ¡Son unas tortugas! Ninguno va a quedar embarazado, así que ¿por qué son tan reservados?
Ye Zhou se enfureció por la humillación.
—Ya que no podemos quedar embarazados, ¿qué quieres saber si se siente bien? ¿Por qué no lo pruebas tú? ¿Qué hay en tu cabeza? ¡No es de extrañar que tengas que esforzarte para los exámenes!
Esto golpeó el punto doloroso de todos y todos se dispersaron como pájaros y bestias, sin olvidar tomar unas rodajas de sandía antes de irse.
—¿Qué personas son estas? —Ye Zhou dijo indignado.