Rehabilitando al villano – Capítulo 5

Traducido por Maru

Editado por Sakuya

Corregido por Sharon


Después de viajar sin parar durante tres días seguidos, fueron capaces de completar la mitad de su viaje. Por suerte, esa área montañosa era relativamente plana y carecía de poder espiritual, por lo que no había ninguna bestia mágica, grande o mediana, que pudiera atacarlos. Además, Song XiaoHu y Yu ZhiJue tenían mucha experiencia en viajar con rapidez y, hasta ese momento, habían progresado bastante bien.

En la tarde del tercer día, estaban cerca de llegar a la ciudad de ChongMing.

Ling Xia estaba agradecido de que en los últimos días, la actitud de Yu ZhiJue hacia él había mejorado debido a sus repetidos y sutiles esfuerzos para ganarse su favor. A pesar de que el joven lo ignoraba de vez en cuando, al menos su expresión no estaba llena de rechazo y desprecio como antes.

Saltaba a la vista que la pequeña ciudad por la que estaban cruzando era más próspera que la ciudad de LongFei, y había mucha más variedad tanto de comida como de entretenimiento. Tras haber comido carne asada en la intemperie durante varios días, cuando el olor de comida caliente y deliciosamente cocinada entró por la nariz de Ling Xia, se lamió los labios de manera inconsciente. Song XiaoHu tampoco pudo resistir mirar, tragando una gran cantidad de saliva.

No había ninguna forma de gobierno en los continentes de ese mundo. Cada región era gestionada por la secta más importante de la zona. Las más famosas y grandes sumaban alrededor de la docena, y las más pequeñas formaban un número demasiado grande como para contarlas.

La secta ShaoYang, que estaba a cargo de las miles de millas alrededor de la ciudad de ChongMing, solo se consideraba por debajo de la media.

La moneda de allí tampoco estaba hecha con los minerales tradicionales como oro, plata o cobre, sino a partir de piedras energéticas de diferentes niveles. Cuanto más alto fuese el nivel de la piedra utilizada, mayor era el valor de la moneda; las más comunes eran las piedras de energía de nivel uno. Por supuesto, también se podían cambiar por la moneda común.

Las piedras de energía por lo general se encontraban en lugares con altas concentraciones de energía espiritual. Eran usadas tanto para refinar las herramientas mágicas y píldoras medicinales, así como para ayudar en el cultivo; y cuanto mayor era el nivel, más rara era la piedra. Ling Xia prestó especial atención mientras viajaban, pero aun así no pudo detectar una simple piedra de nivel uno siquiera.

Entonces, miró a los niños que estaban a su lado. La cabeza de Song XiaoHu parecía un poco grande para su cuerpo, fuerte y robusta, pero Yu ZhiJue era notablemente más delgado y débil que otros niños de su edad. Ambos habían crecido bastante con respecto a la edad de sus cuerpos, y si vivieran en la Tierra, aún seguirían siendo niños de primaria. Pero, en ese momento, esos dos estaban desnutridos… No comían nada más que conejos o peces, o lo que fuera que hubieran capturado; resultaba obvio que carecían de la nutrición necesaria.

Un anuncio escrito en una pared capturó de inmediato la atención de Ling Xia. Decía que una tienda que estaba llevando a cabo un trabajo de construcción estaba buscando trabajadores temporales, ofreciendo un pago de diez monedas de energía de nivel uno, que era aproximadamente el equivalente a 100 ¥ en la Tierra.

Los ojos de Ling Xia brillaron; lo que a su cuerpo actual no le faltaba era fuerza física. Ya lo había probado en secreto, levantando con facilidad rocas de más de cincuenta kilos, confirmando que debía poseer fuerza hercúlea.

Por supuesto, dicha fuerza no podía compararse con la del protagonista y del villano en el futuro, pero, incluso así, era una habilidad rara de ver. Si se entrenaba como era debido, había mucho potencial de crecimiento.

En cuanto a trabajar como un trabajador físico de bajo nivel, Ling Xia no tenía ningún problema con ello. Durante la universidad, él y sus compañeros de clase trabajaban a menudo como vendedores, promocionando materiales relacionados con la enseñanza los fines de semana, y en cualquier caso, ganarse la vida gracias a los propios esfuerzos no era algo vergonzoso.

Ling Xia llamó con prisa a los otros dos y les contó sus planes.

—Entonces, iré contigo, ¡también soy bastante fuerte! —declaró alegre Song XiaoHu. Yu ZhiJue dudó por un momento, pero también asintió.

—Yo también voy.

Ling Xia declinó sus ofertas de inmediato. No podía permitir que niños de escuela primaria trabajaran en construcción. En su lugar, sonrió y frotó la cabeza de Son XiaoHu e insistió:

—No necesitan ir. Vayan allá y miren la actuación, yo volveré pronto.

Al final de la calle había un escenario en el que se desarrollaba una obra. Su estilo era similar al de las óperas de Pekín, excepto que era mucho más humorística y con más bromas.

Song XiaoHu miró con ansia hacia el animado escenario, pero aun así lo siguió obstinadamente y, sin una palabra, Yu ZhiJue hizo lo mismo. Por lo tanto, Ling Xia no tuvo más remedio que llevarlos consigo.

No había forma de que él permitiese a dos menores hacer un trabajo manual, pero que se quedaran cerca sin provocar ningún problema no era una mala idea.

El lugar de construcción de la tienda estaba lleno con una docena de trabajadores, y el que parecía ser el mánager estaba gritando instrucciones a todos para que llevasen losas de piedra. Ling Xia ordenó a los dos niños que se quedaran a un lado y entró solo.

Primero, saludó al hombre con una sonrisa y luego, de forma ni deferente ni altiva, explicó la razón por la que allí estaba.

El supervisor de la construcción le dirigió una mirada, vio su cuerpo de aspecto débil envuelto en ropas lamentables, e impaciente le espetó:

—Los enanos deberían ir a jugar a otro lado; ¿qué tipo de trabajo puedes hacer?

Ling Xia miró a su alrededor, arremangándose, y caminó hasta quedar frente a una losa de piedra caliza. Entonces, reuniendo su fuerza, de repente levantó una roca de un metro de largo y medio de ancho y la movió a otro sitio, haciendo todo parecer fácil y sin esfuerzo.

No la encontró muy pesada, pero como esa roca era un poco más grande, mantenerla firme era un poco difícil.

El resto de trabajadores eran fuertes y corpulentos, pero aún se necesitaban al menos a dos de ellos para llevar a cabo con dificultad esa tarea. Al ver que un chico delgado y frágil poseía una fuerza como esa, los hombres comenzaron a aplaudir y animar.

El supervisor era experimentado y razonable, y aunque ese joven no tenía nada de especial, el estar dotado de una fuerza sobrehumana podría llevarlo a convertirse en discípulo de alguna de las sectas famosas un día, por lo que de inmediato su actitud se volvió más educada.

—Nadie podría imaginar que un niño como tú tenga tanta fuerza bruta. Bien, te pagaré veinte al día —exclamó con una sonrisa.

De hecho, no era desventajoso para él del todo. Con el ritmo de Ling Xia, era más que suficiente para cubrir el puesto de dos personas.

Al recibir un salario mayor de lo que él esperaba, Ling Xia se sintió muy feliz, uniéndose al vuelo a los demás para ocuparse de su trabajo.

Song XiaoHu y Yu ZhiJue también se apresuraron para ayudarlo, pero este agitó sus manos con energía, indicándoles que se mantuvieran alejados.

Disgustado, Song XiaoHu se agachó para levantar una losa, pero no importó cuánto lo intentara, ni siquiera se movió, lo que lo llevó a quedarse abatido a un lado. Yu ZhiJue, quien observó la escena, pensó que era probable que tampoco pudiera moverla y, con un resoplido, retrocedió.

Después de trabajar de forma constante y sincera durante un día entero, cuando terminaron, aunque Ling Xia poseía una fuerza colosal, sentía sus dedos sin vida a causa de la fatiga. El supervisor miró su cara polvorienta y su ropa empapada en sudor e, inesperadamente, le dio dos monedas de energía adicionales.

Asimismo, Ling Xia no las rechazó, aceptándolas con gratitud. En ese mundo, se podían comprar tres o cuatro tazones de fideos con dos monedas de energía.

—Hermano mayor Ling, ¿estás cansado? —le preguntó Song XiaoHu al verlo lavarse un poco las manos y cara. Ling Xia negó con la cabeza y le devolvió la sonrisa.

—Vamos, primero necesitamos comer.

La boca de Yu ZhiJue estaba ligeramente abierta, mirando en silencio su espalda empapada en sudor. Ling Xia tintineó las monedas en sus manos un par de veces, sonrió encantado y luego les preguntó:

—¿Qué quieres comer?

Yu ZhiJue contuvo su respiración a modo de defensa; sin embargo, su tono de voz conservaba rastros de incómoda vergüenza cuando dijo:

—Arroz.

Song XiaoHu, por su parte, tenía gustos del todo carnívoros, pidiendo una gran porción de carne de cordero con pan y sopa, mientras que Yu ZhiJue solo pedía un poco de arroz. Ling Xia miró el menú y escogió unos cuantos platos de vegetales no muy costosos aunque nutritivos y, lento, pero seguro, Yu ZhiJue comió de todos y cada uno de ellos.

Esa carne les costó ocho monedas de energía de nivel uno, y recordando todo el trabajo duro que costó ganarlas, Ling Xia notó un poco de dolor en su corazón. En cualquier caso, no estaban lejos de su destino, por lo que decidió quedarse y trabajar algunos días más. No estaba garantizado que el resto del camino hasta la ciudad de ChongMing fuese tranquilo y, al menos, necesitaba ahorrar lo suficiente como para comprar ropa nueva a esos dos niños. Quedaban cinco días más hasta que la secta ShaoYang llevara a cabo su reclutamiento, y desde esa pequeña ciudad, tomaría alrededor de un día de viaje hasta la ciudad; así que ellos tenían tiempo de sobra.

Ling Xia también tenía las manos atadas; antes, él solo era un hombre friki que trabajaba en el departamento de tecnología, pasando sus días rodeado de ordenadores y códigos. En ese mundo, habilidades como esa ni siquiera podían usarse para comerciar una triste manzana.

Aunque ese mundo era controlado por los fuertes, estos dos solo eran niños normales en ese momento, y llevar ropa tan vieja y desgarrada inevitablemente sería motivo de vergüenza y burla para los demás.

Era probable que a Song XiaoHu no le importaría, pero Yu ZhiJue… Que ese mocoso no se lo tomara en serio era improbable. ¡Cualquier factor que pudiera acercar a Yu ZhiJue al lado oscuro debía evitarse a toda costa!

Después de tres días de trabajo duro durante el día y de dormir al aire libre por la noche, por fin consiguió acumular aproximadamente cuarenta y cinco monedas de nivel uno; suficiente para comprar dos juegos de ropa confeccionados con tela común.

Ling Xia hizo que los niños tomaran un baño y luego los llevó a una tienda que vendía ropa para niños.

La ropa en ese mundo estaba bastante de moda; estilos que mostraban el pecho o la espalda eran comunes, junto con todo tipo de variedades exóticas que recordaban a lo que se veía en los videojuegos online. Song XiaoHu deprisa encontró una camisa azul de manga corta con adornos dorados que le gustó y que acentuaba su aspecto ya fuerte y robusto cuando la llevaba puesta. Yu ZhiJue eligió una prenda de algodón y cáñamo muy simple sin adornos, que cubría su fino y esbelto cuello, haciendo que su pequeño rostro pareciese aún más elegante y lindo.

Tras el trueque, el total ascendió a treinta y seis monedas de energía, pero Ling Xia estaba bastante satisfecho.

—Hermano mayor Ling, ¿no vas a comprar algo? —preguntó Song XiaoHu con tono despreocupado.

—Si no hay suficiente dinero… entonces, no lo quiero —añadió Yu ZhiJue sin resistirse a entrometerse en la conversación.

Ling Xia estaba muy conmovido; ¡esa era una oportunidad perfecta para la reeducación! De inmediato, miró a Yu ZhiJue con los tiernos y amables ojos de un anciano y con gusto respondió:

—No necesito comprar nada. Las ropas que tengo aún pueden usarse. —Reflexionó un poco y añadió—: Soy su hermano mayor, así que es lógico que cuide de vosotros.

El corazón de Song XiaoHu se llenó a la vez de calor y pena y miró a Ling Xia con un par de ojos brillantes, más grandes y oscuros que las uvas más dulces, mientras las lágrimas corrían por su rostro. Nadie lo había tratado tan bien antes.

Por otro lado, Yu ZhiJue desvió la mirada avergonzado hacia un lado, y suavemente prometió:

—En el futuro, definitivamente te lo devolveré más de mil veces.

—Está bien, no lo olvidaré —contestó Ling Xia, luciendo complacido al extremo, y se acercó para dar palmaditas en el hombro de Yu ZhiJue. Esta vez, el gran señor villano no lo esquivó, por lo que no pudo evitar sentirse en éxtasis.

Sí. Necesitaba convertirse en una figura paternal, benevolente y santa, que guiara y cuidara como correspondía al villano.

Maru
¡Hola a todos! Soy Maru, la nueva traductora asignada a este proyecto. Aún tengo poca experiencia, pero espero ir mejorando poco a poco mientras os traigo esta novela. Espero que la disfrutéis tanto como yo. ¡Nos vemos pronto! 😉

Sakuya
Mientras regresa Haru, yo estaré ayudando como editora :3

4 respuestas a “Rehabilitando al villano – Capítulo 5”

  1. No quiero, pero es inevitable… Esta historia me recuerda a ejem *preparando sus dedos para él título extremadamente largo* El Sistema de Auto-salvación del Villano Escoria… Es inevitable, amo mucho esa historia y leyendo esta, me recuerda mucho como Binghe se enamoró de su Shizun, es H E R M O S O, me encanta 💞.

  2. OMG ¿Cuándo vuelves a actualizar? ¡Gracias por la traduccion! Amo esta historia realmente y me encanta como es el protagonista y es hermoso que los pueda cuidar

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