Una generación de militares – Capítulo 23: Ao Tian es enviado a prisión (2)

Traducido por Lucy

Editado por Sharon

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En la mañana de otoño, el frío viento de la cosecha soplaba gradualmente hojas amarillentas en los árboles. Algunas de ellas cayeron, dando la bienvenida a la estación. Bajo un gran árbol, una mujer vestida de seda estaba acostada en el suelo, pero no miraba el paisaje. Respiraciones pesadas seguían los movimientos de su cuerpo de arriba a abajo. Su frente estaba cubierta de sudor.

299… ¡300! Finalmente, terminando la sesión, Gu Yun abrazó sus rodillas. Su aliento aún era pesado. No pudo dormir anoche porque no dejaba de pensar en el caso. Los testimonios de las víctimas de los primeros casos fueron prácticamente inútiles, especialmente el de la víctima de violación. Ella solo podía recordar muy pocas cosas, y el investigador no se atrevió a presionarla.

En este punto, estaba pensando en ir a entrevistarlas ella misma para entender mejor la situación. Además, debía investigar si se había realizado el informe de la noche anterior o no. A diferencia de los otros, ese fue hecho de manera apresurada. Se dio cuenta con claridad al ver el lugar en que se cometió el crimen.

¿Lo hizo así a propósito… o estaba ansioso?

Su mente estaba completamente enfocada en el caso. Al final, concluyó que lo mejor sería ir a comprobarlo con Xing Bu. Se puso de pie, se limpió la frente con las mangas, y caminó hacia el patio exterior. Acababa de salir de la Corte de Yi Tian cuando vio a Leng Xiao y a Ge Jing Yun parados en la puerta. Parecía que habían estado esperando durante mucho tiempo. Viendo a Gu Yun salir, los dos la acogieron rápidamente.

—Jefe.

—¿Cómo está su lesión? —le preguntó a Ge Jing Yun con una sonrisa. Por su voz emocionada, no parecía tener más problemas.

—Se ha curado completamente —respondió él, golpeándose su pecho con fuerza.

—¿Por qué me buscas? —le preguntó luego de asentir satisfecha. Los dos se miraron el uno al otro.

—Hemos oído que el General tiene la intención de entrenar a algunos soldados, y que tú serás la encargada. ¿Es eso cierto? —preguntó al final Leng Xiao.

—Sí. 

—¿Tenemos la oportunidad de seguir el entrenamiento? —volvió a inquirir Leng Xiao en voz baja. La muchacha sonrió un poco. 

—Habrá una prueba de selección en ese momento. Si eres lo suficientemente bueno, tendrás una oportunidad. Sólo necesito cien personas. 

Cuando escucharon que necesitarían hacer una prueba, suspiraron al mismo tiempo y sonrieron. 

—Sólo espera.

Antes, temían que el General fuera quien seleccionase a los soldados, pero si debían pasar por una prueba, no debían preocuparse. Si terminaban perdiendo, no tendrían a nadie más a quien culpar por su inutilidad.

—¡Está bien, esperaré! —sonrió Gu Yun, de mejor humor al verlos satisfechos.

Los tres se miraron y sonrieron al llegar a un entendimiento. Luego, Leng Ziao y Ge Jing Yun corrieron alegremente hacia el campo de práctica. Al verlos, Gu Yun recordó su entrenamiento en las fuerzas especiales. Aunque Su Ling no lo había mencionado, había aceptado, así que no podía ser indiferente. Pensando en eso, decidió irlo a buscar primero y luego a Xing Bu.

Al llegar a la puerta de la sala de estudio, casualmente se encontró con Su Ren que acababa de salir.

—¿Estás buscando a mi hermano? —le preguntó al verla entrar.

—Sí, ¿está adentro?

—Sí —asintió Su Ren con una sonrisa.

Este hombre era un zorro. Viendo su descarada y extraña sonrisa, Gu Yun frunció el ceño. 

—No se enojara de nuevo, ¿verdad?

Ayer, se había enojado en el camino de regreso a la Mansión del General, y no había dejado de mirarla con frialdad. Justo cuando Gu Yun pensó que iba a explotar, saltó silenciosamente a su caballo y salió cabalgando. A veces, ella realmente no sabía lo que Su Ling pensaba.

Suspirando ligeramente, Su Ren sonrió.

—Entra, yo iré a trabajar.

Viendo a Su Ren escabullirse, Gu Yun no quiso entrar. En ese momento, pensó que Su Ling definitivamente no podría ser provocado. La última vez que entró al estudio, él la abrazó con fuerza, se rehusó a dejarla ir y le habló groseramente. El rostro de Gu Yun se puso rojo rápidamente, un poco asustada. 

Mmm… Probablemente debería esperar y buscarlo cuando haya mucha gente dentro, pensó, dándose la vuelta, pero solo dio unos pasos antes de enojarse. ¿Desde cuándo soy tan cobarde? ¡Es solo un hombre! La última vez solo bajé la guardia. 

Respirando profundamente, Gu Yun entró una vez más en el patio de la sala de estudio. Pensó que se encontraría con un volcán en erupción al entrar, pero inesperadamente, Su Ling estaba en silencio frente a la mesa, con un pincel en la mano. No podía ver lo que estaba escribiendo, y su rostro resuelto parecía distante. Los gestos de sus manos parecían tan elegantes como cuando sostenía una larga espada. 

Desde el momento en que Gu Yun entró, Su Ling había notado su presencia. Tenía la intención de ignorarla, sin embargo, al ser observado así por la muchacha, no pudo evitar comprobar cuánto tiempo permitiría el silencio.

Después de un cuarto de hora, Su Ling fue finalmente derrotado. Viendo que las palabras frente a él perdían su significado, maldijo en silencio y dejó el pincel.

—¿Qué quieres? —preguntó Su Ling fríamente, gradualmente mirándola.

La voz grave y los ojos profundos hicieron que la muchacha volviera a la realidad. Le había estado mirando fijamente por demasiado tiempo.

¡Maldita sea! 

Sentado en la silla más cercana a la salida, Gu Yun fingió estar ociosa. 

—Solo quería discutir el entrenamiento de las fuerzas especiales. Ahora que Su Ren regresó, el ejército principal también volvió a la capital. Quiero preguntarle cuándo quiere que el ejército comience el entrenamiento. 

—Después de que la celebración termine.

Su Ling miró hacia abajo otra vez y tomó un libro. Ya no la miraba más. 

Gu Yun frunció un poco el ceño. No estaba acostumbrada a este tipo de Su Ling. 

¿No suele rugir, pelear o buscar una batalla de miradas? ¿Cómo se volvió tan tranquilo?

—¿Estás enfadado? —le preguntó en voz baja, sintiéndose extraña.

La mano de Su Ling que estaba volteando las hojas se detuvo un momento, pero luego reanudó su movimiento.

—No —respondió frío, sin levantar la vista.

¿Llama a eso no estar enojado? ¡Este no es el primer día que nos vemos! 

Contemplando por un momento, decidió que lo mejor sería no provocarlo. No se le ocurrió ninguna razón para que se enfadara, así que le preguntó directamente. 

—¿Te he ofendido?

¿Todavía se atreve a preguntar? 

Su Ling levantó la mirada una vez más. Esta vez, los fríos ojos de águila no podían permanecer en calma. Si las vistas pudiera matar, Gu Yun ya habría muerto muchas veces. Tragó su saliva y se sintió como una miserable. ¡Este tipo de Su Ling más familiar también era más peligroso!

—Sólo ve y trabaja. Perdón por molestar —sonrió al final, levantándose de la silla. Ya le había contestado lo que quería saber, así que pretendió irse rápidamente.

—Espera, ¿a dónde vas? —la detuvo Su Ling cuando solo dio unos pasos.

—A Xing Bu para ver el informe del caso —le respondió con sinceridad, dándose la vuelta.

Realmente quiere involucrarse en este caso.

—Estás muy interesada en investigar. ¿Es por que está conectado con Ao Tian?

Gu Yun suspiró en silencio. 

De nuevo esto… 

Sin embargo, en comparación con su continua frialdad, ella estaba mucho más dispuesta a tratar con este tipo de Su Ling. Al menos, estaba más familiarizada con esta versión. Ella rara vez estaba de buen humor, pero explicó. 

—Estoy muy interesada en investigar todos los casos. Ao Tian me ha salvado y ayudado antes. Por lo tanto, naturalmente espero que podamos llegar al fondo de este caso pronto. Sin embargo, incluso si se tratase de un caso ordinario, también estaría así de entusiasmada. ¡Todos los criminales deben ser llevados a la justicia! ¡No importa quién esté involucrado! Si fuera usted, también usaría la misma dedicación. 

Si fuera usted, también usaría la misma dedicación… 

La ira de Su Ling se redujo significativamente. Recordó la operación de los bandidos, cuando ella había hecho mucho por él. Su Ling la miró más profundamente, sus sentimientos eran todavía un poco complicados.

¿Por qué la miró así? Su Ling una vez más se volvió “raro”, y el corazón de Gu Yun se sentía inquieto. Subconscientemente dio un paso atrás y sonrió.

—Ve a hacer tus cosas, me iré ahora.

—Espera.

¿Qué quiere ahora?, se lamentó Gu Yun, sintiéndo sus piernas rígidas. Su Ling se levantó y caminó a su lado. Parecía estar de buen humor.

—Te acompañaré. Después de todo, Xing Bu no es un lugar ordinario donde cualquiera puede ir y venir a voluntad.

¿Quiere venir conmigo? ¿Puedo negarme?

Su Ling ya había salido de la sala de estudio. La respuesta obvia era… ¡no!

Gu Yun lo siguió en silencio al patio exterior.

—Reportando al General, un asistente del ministro del Ministro de Ritos, Yu Ze Si, pidió reunirse —anunció un joven soldado acercándose.

¿Yu Ze Si? Las cejas rectas de Su Ling se juntaron. ¿Por qué quiere reunirse conmigo?

En realidad, la familia de Yu y la familia Su podrían ser consideradas como amigos. Cuando su madre casi muere al dar a luz a Su Ren, la señora Yu que nació de una familia con antecedentes médicos extendió una mano para ayudar. Por lo tanto, podría decirse que la familia Yu era su benefactora. Sin embargo, después de la muerte de sus padres, el contacto se redujo gradualmente, por lo que Yu Ze Si no se acercaría para una visita casual. 

¿Cuál es su propósito al venir?

Aunque no conocía los motivos de Yu Ze Si, ya que había venido hasta aquí personalmente, debía darle la cara. Levanto suavemente la mano. 

—Déjenlo entrar —dijo al joven soldado.

Viendo su rostro solemne, Gu Yun pensó que algo serio había sucedido en la corte. Aprovechó la oportunidad y sonrió. 

—Iré por mi cuenta. Podría ayudar a Dan Yu Lan a resolver el caso, así que no me pondrá las cosas difíciles.

Como había estado perdiendo el tiempo, era casi mediodía. Gu Yun quería irse lo antes posible para regresar temprano. Se dio la vuelta, pero un par de manos fuertes le agarraron la muñeca.

—Siéntate un rato. Iré contigo más tarde —le susurró una voz profunda al oído.

¿Qué le pasa hoy? ¿Por qué insiste tanto?, se preguntó, atónita.

Al ser arrastrada a la silla más cercana, junto a la esa de la sala de estudio, sólo pudo esperar. De acuerdo con el carácter de Su Ling, si insistía en irse, se pelearían de nuevo y perdería todo el día. Uno debía saber las batallas que debía pelear, así que solo le quedó esperar.

Pronto, el joven soldado trajo a un hombre de setenta años a la sala de estudio. Viendo con cuidado, se dio cuenta uqe había una joven detrás del anciano. La mujer bajó un poco la cabeza al encontrarse con su mirada. Era alta y delgada con un aura elegante. Todos los que la veían sabían que era una señorita que venía de una familia noble. De repente, Gu Yun sintió curiosidad por la apariencia de la mujer. Cuando volvió a levantar la vista, se sorprendió. 

¿Cómo podría ser?

Yu Ze Si entró en la habitación y la vio sentada en la silla. Nunca había visto a una mujer que pudiera estar tan a gusto en la sala de estudio de Su Ling.

—Gracias por recibirme, General Su —saludó, recuperándose de la sorpresa.

—El Ministro Yu es demasiado educado —respondió Su Ling con modales que raramente usaba.

—General Su —saludó Yu Han Dan, detrás del anciano.

Su voz era cálida y su gesto elegante. Quien la mirara, vería un hermoso paisaje. Sin embargo, Su Ling no mostró ningún signo de felicidad. Sus cejas estaban ligeramente entrelazadas y él solo asintió con la cabeza, luego miró a Yu Ze Si. 

—¿Qué le trajo aquí, Ministro Yu?

Yu Ze Si una vez más hizo un gesto de saludo y habló avergonzado. 

—Hoy, vine aquí porque es… mi último recurso. Este anciano tiene una petición audaz. Realmente espero que el General esté de acuerdo. 

—Por favor, dígalo, Ministro Yu. 

Recordando a la señora Yu que había ayudado a su madre, Su Ling no podría rechazar su petición. Sin embargo, Yu Ze Si nunca le había pedido nada durante muchos años. ¿Qué le hizo venir de repente? Viendo a Yu Han Dan parada tranquilamente a su lado, Su Ling tuvo un mal presentimiento. 

—Gracias a la emperatriz viuda de Dong, Han Dan ha sido elegida para actuar en la ceremonia —suspiró el ansiano con ansiedad—. Este el mayor honor de nuestra familia Yu. Sin embargo, anoche Yu Han Dan fue testigo de un caso de asesinato y también se encontró con el asesino. He oído que el asesino es muy cruel y tengo miedo de que dañe a Han Dan; así que me gustaría pedirle al General Su que envíe a alguien para protegerla.

Su Ling no dijo nada, pero Gu Yun, que había estado perdida en sus pensamientos, se recuperó al escucharlo. Sin preocuparse si interrumpía su conversación, miró a Yu Han Dan y comenzó a hacerle preguntas.

—¿Te encontraste con el asesino? ¿Así que presenció un asesinato? ¿Viste su aspecto?

Yu Han Dan se sorprendió. Miró en silencio a Su Ling, pero no estaba enojado. Por el contrario, su rostro ni siquiera mostraba un signo de ira, como si la acción de Qing Mo no fuera gran cosa. En cambio, encontró una expresión cariñosa y paciente.

—Anoche, mi sirviente personal y yo fuimos a la tienda Miao Yin para llevarnos un Qin [1] recién ordenado —comenzó a explicar en voz baja, recuperándose de la imagen del General—. Encontramos que tenía un defecto y lo afinamos varias veces pero aún así no estaba arreglado. Por lo tanto, nos fuimos a casa a las 9 pm. Como era tarde, tomamos un atajo para volver a casa. Cuando llegamos a un pequeño camino, vi… —Había tratado de mantener la calma, pero pensar en la noche anterior la hizo temblar un poco, así que respiró hondo antes de continuar—. Vi a un hombre de pelo plateado sosteniendo a una mujer mientras su otra mano sostenía un cuchillo. El cuchillo… Todavía había algo de sangre goteando de él. Grité de inmediato. El hombre se dio la vuelta y nos vio. Estaba aterrorizada, así que no supe cómo responder cuando sus ojos se encontraron con los míos. De repente, algunas personas comenzaron a acercarse, así que el hombre se dio la vuelta y salió en otra dirección. Estaba parado en el callejón oscuro, así que no pude ver su rostro claramente. Solía pude ver vagamente su cara y sus ojos como que parecían una espada.

Así que, cuando gritó, el asesinato estaba en progreso. En ese momento, Ao Tian solo la había dejado por menos de un minuto. La distancia desde donde se fue hasta el oscuro callejón era bastante grande, ¡no podría haber llegado a tiempo! Con eso confirmaba que no era el asesino. Sin embargo, ¿cómo es que su aparición coincidió con la presencia del asesinato? ¿Quería Ao Tian encubrir al criminal? O… ¿el asesino quería atrapar a Ao Tian?

El cerebro de Gu Yun giraba a toda velocidad, analizando todas las posibilidades mientras los demás esperaban su respuesta. Sin embargo, ella había entrado en su propio mundo y era ajena a cualquier otra persona. La atmósfera dentro del estudio era un tanto incómoda.

Su Ling se sentía indefenso. Después de pensar por un momento, se enfrentó a Yu Ze Si.

—En cuanto a este caso, debe ser discutido con el Ministro Dan y Xing Bu.

No era como si no quisiera ayudar, pero el caso del juicio estaba bajo la investigación de Xing Bu.

—Este viejo acaba de llegar de Xing Bu —sonrió Yu Ze Si con amargura—. El Ministro Dan dijo que en estos días, todos sus recursos estaban a la investigación del caso, por lo que no tenían suficiente mano de obra. Además, la seguridad de la celebración está bajo la responsabilidad del General Su, por lo que este anciano espera que pueda proteger a mi pequeña hija. Esto también involucra el éxito de la celebración. ¡Realmente espero que el General esté de acuerdo!

¡Maldito Dan Yu Lan! ¡Realmente envió problemas! Aunque su corazón era infeliz, su rostro permanecía en calma. Su Ling al final asintió. 

—Enviaré un grupo de soldados a vigilar la casa del Asistente del Ministro para proteger la seguridad de la señorita.

Yu Ze Si dudó por un momento. Al ver a su preciada hija, al final continuó. 

—Este anciano se enteró de que el asesino posee un alto nivel de artes marciales, así como sed de sangre. Me temo que… 

Bajo la cada vez más oscura expresión de Su Ling, la voz de Yu Ye Zi se hizo más pequeña. Nadie podía hablar con normalidad bajo sus fríos ojos de águila. Por supuesto, Gu Yun era una excepción. 

—Quieres que la señorita Yu se quede en la Mansión General ya que es el lugar más seguro. ¿Es eso cierto? —sonrió habiendo escuchado la petición del anciano.

Yu Ze Si estaba a punto de asentir cuando Su Ling se negó fríamente. 

—No. No hay mujeres en esta Mansión General, así que sería un inconveniente para la señorita Yu vivir aquí. 

Cuando Su Ling terminó, también se sorprendió por sus propias palabras. Qing Mo estaba sentado a su lado, esta frase…

El rostro de Yu Han Dan fue decorado con una sonrisa forzada mientras Yu Ze Si miró a Gu Yun con una expresión extraña. En contraste con sus torpes expresiones, la muchacha se rió libremente de sí misma. Parecía que no era una mujer a los ojos de Su Ling. 

No ser considerada una mujer podría ser tratado como un insulto. Sin embargo, ella no tenía ningún problema con ello y se rió libremente. La cicatriz en su cara había arruinado su belleza pero no podía ocultar los brillantes y magníficos ojos. Yu Ze Si finalmente se dio cuenta de su identidad. Era el regalo que el emperador envió… Qing Mo. Sin embargo, Su Ling le había permitido entrar en la sala de estudio. Esto superaba sus expectativas. Además de ser conocido como un General consumado, conocedor de los aspectos literarios y militares, Su Ling también era conocido por su fría actitud hacia las mujeres. Después de mirar intensamente a la tranquila mujer sentada de forma casual, Yu Ze Si apartó la mirada.

—Este viejo sabe que es descortés alegar esto, pero el asesino vino una vez anoche —habló después de un rato—. La familia Yu sólo tiene una hija, así que este viejo… 

—Espera —le interrumpió Gu Yun. Mirando a la tranquila Yu Han Dan, la presionó—: ¿El asesino vino a buscarte anoche?

Anoche Ao Tian había estado en prisión, así que si el asesino apareció, entonces probaría que no era el culpable. 

Yu Han Dan dudó un momento antes de responder.

—Estaba dentro de la habitación así que no lo vi. Fue Fu Er quien vio una sombra oscura.

¿Solo una sombra oscura? Gu Yun estaba un poco decepcionada. Parecía que esa chica estaba en pánico e imaginaba cosas. 

¡¿Cómo podría estar viva si en verdad hubiera visto al asesino?! La paciencia de Su Ling se había agotado. 

—En un rato, enviaré a Su Yu y a 500 personas a vigilar la casa, para que el ministro Yu pueda estar seguro —respondió.

Llegados a ese punto, Su Ling no ofrecería más, así que Yu Ze Si no podía quejarse. Sin embargo, a punto de acceder, la mujer que había estado sentada con calma a un lado se puso de pie y se paró frente al General.

—Esta celebración es importante. Como intérprete, la señorita Yu representa Qiong Yue, así que su seguridad no debería ser considerado un asunto menor. En este momento, Su Yu probablemente esté muy ocupada, así que, ¿qué tal si la dejamos quedarse aquí? De todos modos, hay un par de habitaciones vacías en la corte de Yu Tian. Vivir sola es muy aburrido, así que me gustaría pedir a la señorita Yu como mi compañera.

¡¿Ella era capaz de aburrirse?! La expresión de Su ling parecía como si estuviera viendo un fantasma al mirarla. ¡Nunca te vi permanecer quieta haciendo nada!

De espaldas al padre y a la hija de Yu, Gu Yun gesticuló para que accediera mientras le enviaba señales visuales desesperadamente. En el momento en que comenzó a acalambrarse y se preparó para rendirse, Su Ling habló:

—¡Está bien!

¡Mejor que me de una explicación apropiada! De lo contrario… ¡Hum!