¡Vamos a romper este compromiso! — Capítulo 74: Una sugerencia

Traducido por Shröedinger

Editado por Ayanami


Fue duro por un tiempo después de leer la carta, pero parece que todos se han calmado.

Mientras esperaba eso, el abuelo me habló.

—Lillina, estaba pensando, ¿Quieres hacer un pequeño viaje con nosotros?

¿Viajar con mis abuelos?

¿Eso significa que es un viaje para asegurar que los demonios no aparezcan?

¡Su… suena divertido!

Como nunca he estado de viaje y porque puedo salir de este lío. Quizás, el príncipe León y la señorita Sumire se casen mientras viajo.

—¡Quiero ir! —Mi voz traicionó mis emociones.

Pero siento que es lo mejor. Sin embargo, el príncipe Chris no tomó mi respuesta en silencio.

—Por favor, espera. ¿Vas a llevarte a Lillina? A un país diferente, de ninguna manera… Entiendo, voy contigo…

—Eso no es bueno. —La voz del príncipe Chris fue interrumpida por el señor Soul, quien comenzó a elegir cuidadosamente las palabras.

—Por favor, no digas que evidentemente la seguirás. Hay algunos problemas en nuestro país que aún no se han resuelto, algunos de ellos solo pueden ser resueltos por usted, príncipe Chris. No importa cuánto ames a la señorita Lillina, es imprudente emprender un viaje.

—Pero, pero…

—¡“Pero, pero”, sin peros! Para empezar, los demonios se han calmado, así que volvamos tranquilamente a casa. —El señor Soul está a la ofensiva.

No es algo que puedas hacer normalmente cuando te enfrentas al príncipe Chris. Sana me habló mientras miraba a esos dos de reojo.

—Señorita Lillina, por supuesto que me tomará como su asistente ¿verdad? —Sana me dijo con un tono inusualmente serio.

Sí, claro que quiero que me sigas, pero ¿Qué piensa el abuelo? Mi hermano está actuando de manera sospechosa después de escuchar lo que dijo Sana. Se mueve de un lado a otro y murmura algo con una expresión seria.

Ahora, ¿Qué está diciendo…?

—¿Vas a seguir a Lillina? Y se desconoce cuándo volverás. Más que nada, si ella no está a mi alcance, la posibilidad de que tipos extraños se acerquen aumentará…. Eso es malo, extremadamente malo. ¿Qué debo hacer? ¿Dejar de ser el capitán? Pero si hago eso, puede que me odie. Ah, es inútil. No quiero que Sana me mire con ojos fríos. Ah, ¿Qué debo hacer~?

Está murmurando esas cosas sin cesar.

¡Bien! Dejémoslo tranquilo.

Poco después, el joven Allen y la señorita Ange se acercaron con expresiones ansiosas.

—Ah, um, señorita Lillina… ¿Podemos ir contigo?

La señorita Ange parece que está a punto de llorar.

—Señorita Lillina, yo, no, absolutamente no perturbaremos su viaje, así que… queremos ir con usted. —El joven Allen me cautivó con una expresión inquieta.

Sí, dije que quería hacer un viaje descuidadamente, pero no consideré a los tres que siempre me apoyan… No sirve de nada pensar en ello por mí misma. De todos modos, preguntémosle al abuelo.

—Abuelo, sí deseo hacer un viaje, ¿me permitirías traer a esos tres que me han apoyado hasta ahora?

—Hmm, si es posible, preferiría ir con la menor cantidad de gente posible… Sí, esos tres están bien. Parece que son lo suficientemente fuertes como para protegerse y, sobre todo, parecen entender bien a Lillina.

El abuelo miró a los tres mientras lo decía.

¡Hurra!

Obtuve el permiso del abuelo ~~.

Una sonrisa volvió a sus rostros gracias a la respuesta del abuelo.

—Lamento haber causado angustia a todos al decidir arbitrariamente que iba a emprender un viaje. Pero es de gran ayuda si ustedes tres me acompañan.

Sin embargo, el príncipe Chris, que estaba peleando con el señor Soul, irrumpió aquí.

—Lillina… ¿De verdad te vas de viaje? …Debería abandonar mi título de príncipe y convertirme en tu sirviente.

Escuché una declaración peligrosa.

—Príncipe Chris, cálmate por el momento. Dije que llevaría a Lillina de viaje, pero todavía no he mencionado el destino. Estoy pensando en mostrarle a Lillina el País Occidental primero. El rey también dijo que le gustaría reunirse con Lillina una vez. Solo entonces consideraré ir a otro país. —El abuelo le dijo tal cosa al príncipe Chris.

Entonces, el destino del primer viaje es el País Occidental. Aunque nunca he estado cerca de ese lugar. Sé que es un país grande. Bueno, aprendí mucho debido a la educación para ser reina.

—Entonces, Lillina visitará mi país. Estoy tan contento, no me importa si Lillina se instala allí. Prepararé una casa. —Chris, que está de buen humor, dice alegremente tal cosa.

Pero el humor de los gemelos se volvió amargo debido a ese comentario. Sí, es poco probable que el estado de ánimo de alguno de ellos mejore.

Por otro lado, mi hermano parece abatido. Lo siento, pero me llevo a Sana.

 

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