Traducido por Yonile
Editado por Sakuya
Estaba empezando a hacer frío cuando empezó a nevar.
Había estado esperando con entusiasmo que, con toda esta nieve, la escuela se cancelara, pero, por desgracia, no llegó tal anuncio y no tuve más remedio que prepararme para ir.
Probablemente fue bastante difícil para aquellos que viajaban en tren, pero yo estaba bien en mi auto.
Honestamente, no había nada más peligroso que usar mocasines en un día de nieve. Y también se metia nieve en tus zapatos. Los tiempos eran difíciles en mi antigua vida como plebeyo.
Solo los niños de primaria se sentirían felices con la nieve.
Mientras miraba desde la comodidad de mi automóvil, vi a varias personas resbalar en la nieve. Seguro que era peligroso.
La mayoría de los estudiantes de Zui’ran fueron llevados, pero algunos de los que vivían cerca caminaban con amigos. Recogí a algunos de ellos aquí y allá. Los mocasines se hundían en la nieve, por lo que les costaba caminar.
A pesar de eso, había un estudiante que lo atravesaba correctamente.
Fue Wakaba, llevaba botas de lluvia.
No los sencillos que llevaban los pescadores. En el costado de sus botas había patrones de flores.
Aun así, podía respetar que eligiera la practicidad sobre la moda. Justo lo que esperarías de ella.
La nariz de Wakaba estaba toda roja y su rostro estaba enterrado en su bufanda.
Bufanda…
Tuve la repentina necesidad de tejer una bufanda.
Casi siempre me dejaban en coche, así que no había muchas razones para tener una. Excepto como moda, claro.
Inmediatamente me dirigí al Club de Artesanías con un poco de hilo.
Tejer era popular aquí en invierno, por lo que muchos de ellos estaban sentados con agujas de tejer.
Parecía divertido. No era muy hábil, por lo que mi tejido estaba suelto o torcido en algunos lugares.
—¿Tejer, Reika? ¿Podría ser que volviste a tener un lío? —preguntó la senpai que se convirtió en la presidenta del club.
—No, simplemente estaba pensando en probar una bufanda esta vez.
—Vaya, una bufanda. ¿Para su propio uso? ¿O estabas pensando en dárselo como regalo a alguien?
—No lo había considerado realmente… solo quería hacer uno.
Estoy bastante segura de que incluso hermano o padre se molestaría si les pusiera una de mis bufandas. Había comprado algo de la lana más suave, así que planeé desenredarla en casa más tarde.
—Ummm… Hablando de eso, Reika, necesito hablar contigo sobre algo.
—¿Cuál podría ser el problema?
La presidenta del club parecía tener dificultades para encontrar las palabras. Tuve un mal presentimiento. Todos los demás también parecían estar mirando hacia este lado. La sensación empeoraba cada vez más.
—Realmente has venido mucho a nuestro club, Reika-sama…
—Sí…
Uohhnn, ¿finalmente era hora? Después de un año de venir aquí con indiferencia, ya era hora de que alguien me preguntara qué diablos estaba haciendo aquí. A pesar de su rostro amable, parecía que la presidenta del club podía lidiar con los conflictos.
¿Qué iba a hacer yo? Eh. ¿Qué pasa si es mi desalojo?, simplemente fingí no escuchar…
—Señorita Reika, ¿le gustaría unirse a nuestro club?
—¿¡Eh!?
La presidenta me entregó gentilmente un formulario de solicitud.
—El año pasado, en el último día de actividades del club, todos lo discutimos. Parece que te encantan las artesanías y nos ayudaste con el ramo para el festival escolar, ¿no? Así que nos preguntamos por qué no te unes a nosotros oficialmente.
¿¡Estaban hablando de eso durante esa fiesta de té a la que no me invitaron!?
—¿Puedo realmente unirme al club?
—Sí, por supuesto.
—… Pero ¿no ha sido una molestia al principio?
—¡No, en absoluto!
Los ojos de la presidenta estaban húmedos. Lo sabía…
—Um, también estaríamos felices si te unieras a nosotros, Reika —habló uno de los miembros.
¿En serio? Miré a mi alrededor, solo para encontrar a los otros miembros asintiendo con sonrisas.
Después de todo un año, ¡finalmente entré! ¡Podría deshacerme del ‘Provisional’ ahora!
Agarré el formulario de solicitud con fuerza en mis manos.
—¡Me uniré al Club de Artesanías!
Todos aplaudieron en bienvenida.
¡Estoy tan feliz!
Mi estado de ánimo de repente se disparó. Tan feliz estaba que antes de darme cuenta me había levantado y puesto mis manos en mis caderas.
—Entonces, como socia oficial, no escatimaré esfuerzos en trabajar para el club. ¡Mi primer acto será negociar con el consejo estudiantil, reclamar el presupuesto que nos merecemos y garantizarnos un club más grande y mejor!
—Eh-, nadie realmente pidió eso…
—¡Déjenmelo a mí, todos! ¡Se nos asignará el lugar más visible en el próximo festival escolar!
—¡Señorita Reika estamos felices como estamos!
—Y estar en un lugar demasiado llamativo es un poco…
—¡Por favor, Reika! Por favor, olvida eso…
Los nuevos miembros de mi club me detuvieron en pánico.
Ups. La felicidad casi se me sube a la cabeza. La nueva presidenta del club ya estaba medio tirando de mi formulario de solicitud. ¿Qué estás haciendo? No lo devolveré ahora. Lo traeré de vuelta mañana con los sellos. Acéptalo sin arrugarlo, ¿de acuerdo?
Y esa última chica, no me estabas diciendo que abandonara este club, ¿verdad? No me iré de este lugar hasta la graduación.
Hoy, Kisshouin Reika se convirtió en miembro de pleno derecho del Club de Artesanías. ¡Uhohooi!
Le envié un mensaje de texto a Aoi y Sakura sobre mi aceptación en el Club de Artesanías.
—¡Estoy tan feliz por ti! ¡Sabía que verían lo buena persona que eres! —fue la reconfortante respuesta de Aoi.
—Después de presionarlos en silencio durante tanto tiempo, no es de extrañar que se dobleguen. Como siempre, la obstinada persistencia triunfa —dijo Sakura. Lengua afilada como siempre.
Después de eso, Sakura me envió un correo sobre la situación de Maihama-san. Aparentemente, en Yurinomiya casi se jactaba de ser la novia del Emperador. Les contó a todos cómo la madre del Emperador y la mujer a la que idolatraba como hermana mayor ya la habían aprobado.
—Uheeh~
Maihama estaba segura de que estaba murmurando, solo porque fue a una escuela diferente. Si esto hubiera sucedido en Zui’ran, la hubieran linchado en un día.
A pesar de que solo había venido a buscarlo a Zui’ran una vez, según la información de Sakura, había ido a la casa Kaburagi varias veces.
De todos modos, tal vez gracias al aliento de Enjou, Kaburagi estaba mejorando lentamente. Sin embargo, el daño todavía parecía bastante profundo porque aún no se había ocupado de Maihama.
Siendo perfectamente honesta, creo que la mejor manera de recuperar su energía sería celebrar un torneo de bolas de nieve.
No sería sorprendente, considerando la forma en que trataba las batallas de caballería. Ya podía verlo reuniendo un ejército de seguidores y gritando “¡Alas izquierda y derecha, flanqueadlos!”
No obstante, dudaba que la escuela organizará un torneo de bolas de nieve solo por su bien.
Volviendo a Maihama, ella era como una mini Kimidol-Kisshouin Reika, ¿no es así?
♦ ♦ ♦
Después de unirme oficialmente al club, quería ser un miembro modelo, así que me aseguré de venir todos los días y tejí furiosamente. Gracias a eso, mi bufanda se había vuelto extrañamente larga y tenía una forma algo extraña, así que la convertí en una manta de regazo.
Una vez hecho, aunque no era muy buena, se lo di a padre
Por supuesto, el tanuki se adelantó y dijo “Reika es una niña tan lindo con papi”, enojándome.
Y luego escuché de su secretaria Sasajima sobre cómo padre estaba corriendo mostrando la bufanda, así que en este momento estaba en medio de un profundo, profundo arrepentimiento…