Dicen que nací hija de un rey – Capítulo 04: ¿Papá o prometido? (2)

—¡Papi! —grité entusiasmada, corrí hacia él y me aferré a su pie.

No, no estaba fingiendo. Tenía tanto miedo, que estaba feliz de que él estuviera allí. Aunque no sabía qué hacía en ese lugar.

Su expresión fría no cambió. Tal vez estaba molesto porque me metí en problemas. Seguí leyendo “Dicen que nací hija de un rey – Capítulo 04: ¿Papá o prometido? (2)”

¡No quiero ser Princesa! – Capítulo 124: El día a día del hermano mayor

—Aaah, supongo que no hay nada bueno.

Sosteniendo un paquete de documentos que había recibido de mi padre, volví a la oficina de Freed. Desde que mi pequeña hermana comenzó su estancia en el Castillo Real, el estado de ánimo de Freed no había dejado de aumentar. Su encaprichamiento con ella se aceleraba cada vez más, en el castillo ya existía un acuerdo tácito para mirar hacia otro lado al ver a estos dos. Los intercambios azucarados en exceso, de los que hacen gala ante los ojos, son bastante dañinos en mi mente. Seguí leyendo “¡No quiero ser Princesa! – Capítulo 124: El día a día del hermano mayor”

¡Juro que no volveré a acosarte! – Capítulo 44: Una cara no es toda la historia

Klaude miró hacia donde Violette trabajaba en silencio.

Su espalda, habitualmente recta, estaba encorvada, y se sujetaba el cabello con una mano mientras sus ojos escudriñaban el papel que tenía delante, sin desviarse ni una sola vez. Oyó el roce de la pluma unas cuantas veces, y una pequeña arruga apareció en su frente, haciendo que su expresión pareciera casi severa. En el pasado, él habría asumido que esto significaba que a ella no le gustaba este trabajo y que estaba de mal humor. Lo utilizaría como excusa para pensar mal de ella.

Seguí leyendo “¡Juro que no volveré a acosarte! – Capítulo 44: Una cara no es toda la historia”

error: Contenido protegido