Cenicienta – Capítulo 17: Noche de “Noche bajo la luz de la luna en la hierba” (1)

Traducida por Den

Editada por Sakuya


Cuando el cielo comenzó a mostrar los colores del crepúsculo, el General Brennan vino a llevarme al teatro. A diferencia de la armadura que lleva puesta cuando nos encontramos en los campos de entrenamiento, vestía un abrigo azul caballeroso, con un bordado hermoso. Bajo del reloj de Oliver, tomó mi mano y me escoltó hacia el carruaje.

Me sentí como en un sueño mientras decía “Gracias”.

Su mano era cálida.

Mientras las doncellas y los sirvientes nos observaban junto a Oliver, nos dirigimos hacia el carruaje.

Era como si estuviéramos caminando sobre nubes esponjosas.

♦ ♦ ♦

Anteayer por la noche, mi padre anunció casualmente:

—El General vendrá a recogerte para ir a ver una obra de teatro pasado mañana.

En ese momento, había decidido comer mi pastel de gasa con la mano en lugar del tenedor. Oliver reprendió mi comportamiento poco propio de una dama. Pero entre la familia, estaba bien.

¿Por qué me diría padre tal cosa en este momento?

Mi boca se abrió y el pastel se cayó.

Padre se cruzó de brazos.

—El general se adelantó y compró las entradas antes de preguntarme. Quería ir a ver la obra contigo.

¡Oh cielos!

¡¿El General Brennan quería ir conmigo?!

Miré a madre, que me regaló un pulgar arriba desde el otro lado de la mesa.

Estoy tan feliz que no sé qué hacer conmigo misma.

¿Era seguro decir que… no le desagradaba al General Brennan?

Padre sonrió y sostuvo mi rostro entre sus manos.

—Fredericka, ¿cuándo vas a cambiar? —preguntó.

Madre le dio un codazo en las costillas. No parecía doloroso, pero padre se derrumbó en su silla como si se desmayara.

—Debes comportarte como una dama. Sé una buena chica y no causes ningún problema al General. Da lo mejor de ti para que no puedan decir que eres grosera por ser rica.

Padre se recuperó rápidamente y me agarró las manos.

—No, la dirección en la que tienes que trabajar duro es diferente —dijo un poco triste. —Solo os habéis encontrado tres veces. No os conocéis bien; no cometas ningún error ¿está bien?

Es verdad.

Nuestro primer encuentro no fue realmente un encuentro, dado que pretendí desmayarme cuando perdí mi ropa interior. Realmente, se podría decir, fue un encuentro superficial; solo nos hemos encontrado correctamente dos veces.

Es sorprendentemente un oscuro contenido. Pretendí desmayarme porque perdí mis bragas delante de él. Luego dimos vueltas alrededor, después en nuestro tercer encuentro, me caí y solté mis sándwiches.

Siempre quedará grabado en mi memoria, aparte de sus gustos y disgustos.

—Oh, ¿de qué estás hablando? ¡Me besaste cuando nos conocimos! —dijo madre riendo antes de tomar un sorbo del té.

Parece que padre no solo es rápido en los negocios, también era lo mismo en el amor.

Sin embargo, padre está preocupado de que las cosas vayan por esa dirección. Me hace sentir avergonzada que padre se esté preocupando por cosas como esas.

Pero no creo que tenga que tener tales preocupaciones; para el General, solo soy una criatura inusual o la hija de su amigo. ¡Quiero que me reconozca como una persona llamada Fredericka!

Está bien, ¡haré lo mejor que pueda con este objetivo en mente!

Me comí rápidamente el pastel, y me retiré de la mesa.

Tiré de Marie y me apresuré a mi habitación. ¡Tenemos que pensar en mí ropa y accesorios a juego que me harán ver linda!

Y en esta ocasión, podría intentar un vestido corto, ¿no? ¡Con el collar que acabo de comprar en Kalome!

—Milady, —llamó Marie — ¿con qué estilo quiere ir? ¿Hada? ¿Princesa? O…

¿Iba a decir algo emocionante y de ensueño?

—O, puede ser una dama ordinaria.

¡Envía ese pensamiento de regreso de donde vino!

La respuesta es… hada.

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