Escapó otra vez – Capítulo 111: Los guardias capaces

De repente, el salón se quedó en silencio. Una gota de sudor frío resbaló de las mejillas de Lord Lu y goteó sobre el suelo, haciendo un pequeño sonido, pero… la persona que rompió el silencio primero no era una persona dentro del pasillo.

—¿Qué bastardo se atreve a intimidar a mi pequeña aprendiz? Será mejor que te des prisa y pidas clemencia, de lo contrario, este anciano te golpeará en la cara hasta que florezcas. ¡Entonces sabrás por qué las flores son tan rojas!

—Pu…

El trago de vino que Xia Yuqing se había vertido en su boca cuando Feng Tingye no se dio cuenta salió a borbotones. Esto provocó la mirada secreta de Feng Tingye. Parpadeó con la conciencia culpable, pero sintió que algo era extraño. ¿Su maestro no estaba entrenando a puerta cerrada? ¿Por qué salió esta vez? Además, mirando las circunstancias, parece estar… buscando pelea.

Así es, el invitado era Xu Lao, que no había podido ir en estos días. Ese día, la tía Meixi envió a alguien a la Mansión Xu para hablar sobre los eventos que ocurrieron con el pequeño erudito que servía en la casa. El pequeño erudito recordó la conversación y hábilmente se la mencionó a Xu Lao durante la cena de ese día.

Cuando Xu Lao escuchó la noticia, tiró las cosas que tenía en la mano y corrió directamente al palacio. Su pequeña aprendiz solo había regresado al palacio después de mucho tiempo, ¿y ahora alguien buscaba molestarla? ¡¿Creen que este maestro está muerto?!

Zhang Sunshi parecía haber esperado que Xu Lao se apresurara a entrar en este momento, por lo que había ordenado que si alguien veía a Xu Lao entrar al palacio hoy, nadie podía detenerlo.

Por lo tanto, Xu Lao se apresuró al lugar del banquete de cumpleaños sin obstáculos y gritó independientemente de lo que estaba sucediendo adentro.

—Xu… Xu Lao…

Mientras el duque Lu exhaló un suspiro de alivio, miró a Xu Lao, quien de repente se apresuró a entrar con una mirada de sorpresa.

Cuando Xu Lao escuchó que alguien lo llamaba, detuvo sus pies. Siguiendo el sonido, vio al feliz Lord Lu:

—¿Eres… Huo Xiaozi[1]? ¿Por qué volviste?

—…

La boca de Xia Yuqing se volvió en forma de O. Su maestro realmente conocía a Lord Lu, además, se refería a él como si le hablara a una generación más joven, ¡como “Boy Huo”!

—Cuánto tiempo sin verte, Xu Lao sigue siendo como el viento.

Lord Lu, naturalmente, sabía la importancia de la persona frente a él, por lo que sonrió apresuradamente y trató de acercarse a la persona frente a él. De esta manera, tal vez podrían ayudar a hablar bien de él. Desafortunadamente, su ilusión estaba destinada a ser solo eso, una ilusión.

—Pequeño, has envejecido bastante —Xu Lao respondió sin ceremonias.

Lord Lu estaba avergonzado, pero no se atrevió a tener la más mínima insatisfacción hacia Xu Lao. Después de una pausa, quiso decir algunas palabras más cuando vio a Xu Lao agitar la mano con impaciencia:

—Su negocio será discutido más tarde. Primero buscaré a mi pequeña aprendiz

—¿Pequeña aprendiz?

Lord Lu se sorprendió, un poco de duda apareció en sus ojos. Como todos sabían, Xu Lao estaba obsesionado con los mecanismos y no le gustaba aceptar aprendices. Solo tres se habían ganado su favor. Incluso escuchó que los tres aprendices eran líderes de una famosa organización de asesinos de la zona. Ahora que Xu Lao vino aquí a buscar a su pequeña aprendiz, ¿podría ser que este misterioso líder también haya venido a la fiesta de cumpleaños? 

Xu Lao siempre ha actuado con indiferencia. Cuando era discreto, incluso si alguien cavaba a un metro de profundidad en el suelo, no podrían encontrar ni rastro de él. Pero cuando estaba presumiendo y sacando algo al público en general, lo hizo en todo el mundo pugilista, incluso en todo el país. Para Xu Lao, Xia Yuqing era la pequeña y preciosa aprendiz que finalmente había encontrado e iba a heredar su manto en el futuro. Si alguien descubre el talento de Xia Yuqing, puede que se la arrebaten. Este es el llamado «el talento de una persona despertará la envidia de los demás» y esta es una verdad que Xu Lao conocía mejor que nadie.

Por lo tanto, aparte de la gente en el palacio, Xia Mingyuan que se enteró accidentalmente y el hermano mayor de Xia Yuqing, pocos sabían que tenían una relación maestro-discípula. Lord Lu vivió en su feudo durante mucho tiempo y finalmente llegó a la capital. Naturalmente, no sabía que Xu Lao había tomado a una pequeña aprendiz como tesoro, así que… estaba condenado a la tragedia.

—Hermano Xu, estoy aquí

Al ver a Xu Lao mirando a su alrededor, Xia Yuqing finalmente no pudo soportar que el anciano estuviera demasiado cansado, por lo que tomó la iniciativa de agitar su mano.

Lord Lu estaba pensando, cuando de repente escuchó una voz femenina familiar detrás de él. Su figura se puso rígida de repente, se volvió para mirar al maestro de la voz con incredulidad.

Cuando Xu Lao escuchó la voz de Xia Yuqing, sus ojos se iluminaron. Ignoró a todos los demás y corrió hacia Xia Yuqing:

—Jajaja, pequeña aprendiz, finalmente has vuelto. El hermano Xu te extrañó mucho

—Hmm, ¿me extrañaste? No lo creo. He regresado desde hace días, pero el hermano Xu, ¿alguna vez ha venido a verme? Y, sin embargo, ¿dices que me extrañas? Por desgracia, ahora que tienes al hermano mayor, no necesitas a esta pequeña aprendiz.

Xia Yuqing levantó la cabeza en un ángulo de cuarenta y cinco grados con ojos brillantes y tristes. La gente del costado temblaba con la piel de gallina, mientras Xu Lao enfrentaba su debilidad. Inmediatamente tomó la mano de Xia Yuqing para confesar:

—Pequeña aprendiz, el Maestro no lo decía en serio. Es solo que cuando regresaste, descubrí un problema que me había enredado durante mucho tiempo. Tenía tantas ganas… pequeña aprendiz, por favor, perdóname. Por favor, perdóname esta vez

El halago casi asustó a Lord Lu y sus ojos casi se salieron. ¿Es ese hombre realmente Xu Lao a quien incluso el primer emperador tuvo que darle tres puntos de cortesía? Debe ser viejo y estar deslumbrado…

Feng Tingye miró la mano de Xu Lao que sostenía a Xia Yuqing con fuerza, su rostro estaba ligeramente oscuro. Dio un paso adelante, quitó la mano del cuerpo de Xia Yuqing sin dejar rastro y sonrió levemente:

—No importa qué, a los ojos de Xu Lao, Ai Fei en última instancia no es rival para las habilidades mecánicas. Ai Fei no debe estar triste, Xu Lao no te quiere, pero todavía está Zhen. A los ojos de Zhen, Ai Fei siempre está en primer lugar.

—Oh ~

Una vez más, el grupo de personas no pudo soportarlo y quiso vomitar en el acto. Incluso Xia Yuqing, que estaba bajo fuego con esas conchas cubiertas de azúcar, no pudo evitar temblar. ¿Por qué no sabía que el Lord Ultra Seme tenía un lado tan nauseabundo antes? Es realmente… horrible, ¡por favor déjame ir!

Xu Lao tocó su mano derecha, la cual se puso roja por el golpe. Cuando escuchó las palabras de Feng Tingye, no pudo evitar gritar:

—Feng Xiaozi, despreciable villano, ¿estás tratando de sembrar la discordia?

¿No tocó a su pequeña aprendiz dos veces? Este chico mezquino, que ni siquiera entiende lo que es respetar a sus mayores, cómo se atreve a sembrar la discordia frente a él. ¡Esto es un ultraje, insoportable!

—Los comentarios de Xu Lao están equivocados, Zhen acaba de decir la verdad, siendo como frascos de consejos leales en los oídos[2], si Xu Lao no quiere escuchar, está bien. Ai Fei, podría ser…

—¡Pequeña discípula, no escuches sus tonterías! Debes creer en el maestro

—Eh…

Xia Yuqing miró a las dos personas que la miraban de izquierda a derecha y no pudo evitar sentirse incómoda. ¿Por qué se volvió así? Solo quería fingir ser una joven literaria y afligida, ¿cómo desencadenó la guerra del siglo? ¡Esto no es racional!

—Ejem…

Incapaz de ver a Xia Yuqing en un dilema, Zhang Sunshi tosió ligeramente y les recordó a los dos:

—Podemos hablar de eso más tarde, hablemos primero del problema que tenemos ante nosotros.

¡¿Problema?! Los rostros de Lord Lu y Huo Feiyan eran un poco feos. ¿Su existencia es solo un problema a los ojos de estas personas? 

Con las palabras de Zhang Sunshi, Xu Lao finalmente recordó su intención. Al ver a Xia Yuqing mirando hacia arriba y hacia abajo durante un rato, preguntó: —Pequeña aprendiz, ¿dónde te lastimaste? Dile al hermano Xu, ¿qué persona fue? ¿Quién se atrevió a intimidar a mi pequeña aprendiz?

El rostro de Lord Lu palideció de repente. Feng Tingye miró pensativo a su madre. Después de ver la sonrisa en la esquina de los labios de Zhang Sunshi, algo en sus ojos brilló. Eso es todo.

—Hablando de quién quiere intimidar a tu aprendiz, ¿no es la persona a la que Xu Lao acaba de saludar?

La oportuna adición de Zhang Sunshi de agregar combustible hizo temblar el corazón de alguien. Su rostro se puso muy feo.

—¿La persona a la que este anciano saludó?

Xu Lao se sorprendió. Volvió la cabeza rápidamente y enfrentó el rostro pálido de Lord Lu.

Lu Rui recibió una mirada de la Reina Madre, rápidamente dio un paso adelante y agregó:

—Sí, Xu Lao, ha estado en entrenamiento a puerta cerrada estos días, por lo que es posible que no lo sepa. Pero, Lord Lu trajo a su nieta a la capital y dijo que era la mejor opción para la reina. Por esta razón, cuando la emperatriz viuda acaba de decir que deberíamos otorgarle a Niang Niang el título de reina después de dar a luz al príncipe, la señorita Huo abusó verbalmente de nuestra Niang Niang. Dijo que nuestra Niang Niang había ocupado su lugar. Incluso dijo que era un espíritu de zorro e hirió profundamente a nuestra Niang Niang.

—¿Qué?

Xu Lao tenía los ojos muy abiertos por la ira, cuando escuchó a Li Yuan intervenir:

—No, Xu Lao, ni siquiera lo sabe. Esta señorita Huo era muy imponente. Tan pronto como entró en el palacio, arremetió contra Niang Niang de la nada. Incluso la amenazó con hacer los preparativos para cuando entrara al palacio. Niang Niang no ha tenido muchos días buenos

—¿Qué? ¡¿De dónde vino este pájaro salvaje para atreverse a arrebatarle el puesto a mi pequeña aprendiz?! ¡¿Incluso se atrevió a amenazar a mi pequeña aprendiz?! ¿¡Ella no quiere vivir más!?

Las palabras de Li Yuan equivalían a agregar aceite al fuego. Esto hizo que Xu Lao saltara como sorprendido por un rayo y saltara hacia Lord Lu.

Xia Yuqing estaba a punto de ver un buen espectáculo cuando, de repente, escuchó una voz agraviada de su lado:

—¿Por qué Nu Bi no sabía que Niang Niang había visto a este pájaro gordo?

Xia Yuqing tembló. Tan pronto como giró la cabeza, hizo contacto visual con Lu Rui y vio dos ojos resentidos con dos lágrimas de fideos flotando.

¿Cómo olvidó que, para no ser sermoneada, ocultó el hecho de que había conocido a Huo Feiyan? Como resultado… waahhh, Xiao Yuan, ¡me has jugado!

—¿De dónde vino este anciano? ¿Cómo se atreve a tratar así a mi abuelo? ¡Mi abuelo es el duque Lu, a quien el emperador anterior le otorgó el título! ¡Déjalo ir, déjalo ir!

Xia Yuqing estaba un poco preocupada cuando escuchó el grito de Huo Feiyan. Su mandíbula cayó de inmediato.

—¿Viejo malo? Jaja, viejo malo. ¿Me llamaste viejo malo? —Xu Lao tomó el cuello del duque Lu y se detuvo. Miró a la arrogante Huo Feiyan a su lado y pateó.

—Ah… viejo, ¿te atreves a pegarme? Sabes quién soy… Tú…

Huo Feiyan gritó y pataleó mientras se agarraba el abdomen pateado.

Xia Yuqing la miró con vergüenza. No tenía miedo de los oponentes como dioses, sino de compañeros de equipo que eran como cerdos. ¿Esta golondrina no vió la apariencia de su abuelo frente a Xu Lao? Una persona común habría visto durante mucho tiempo que esta persona no puede ofenderse y guardaría silencio.

Es solo que esta golondrina era una cosa extraña. Incluso rasca la barba debajo de la boca del tigre… Tsk Tsk Tsk, su maestro odia a los demás por llamarlo viejo. Efectivamente… siempre hay personas en este mundo que incluso si otros no los molestan, seguirán buscando problemas. ¡Comúnmente se conoce como buscar la muerte!

—¿Qué hay de malo en golpearte? ¡Te lo digo ahora, te voy a golpear hoy! Je je, no me importa quién seas, ¡este anciano no le ha tenido miedo a nadie en su vida! Incluso si eres el rey del cielo, todavía ganaré.

Huo Feiyan estaba asustada por la apariencia cruel de Xu Lao y gritó: —Abuelo… abuelo sálvame. Emperatriz Viuda, ¿no vas a encargarte de esto? ¡Se profetizó que ayudaría al emperador a beneficiar al país y a dominar el mundo! ¡Soy su estrella de la suerte! Si me pierdes, definitivamente te arrepentirás.

—¿Profecía? ¿Estrella de la suerte? —La acción de Xu Lao se detuvo.

Cuando Huo Feiyan vio esto, pensó que Xu Lao estaba escuchando e inmediatamente se sintió segura. Ella resopló con frialdad:

—Eso es, déjame ir, de lo contrario…

Lord Lu cubrió la boca de Huo Feiyan y sonrió:

—Xu Lao, ¿todavía recuerdas el quinto cumpleaños del emperador, cuando Qin Tianjian usó un hexagrama para el emperador? El hexagrama mostró que si el emperador puede conocer a su persona destinada, podrá tener éxito en esta vida, abrir la frontera y expandir la tierra, logrando el éxito final y obteniendo grandes logros. Esa persona…

—¿No me vas a decir que esa persona es la chica salvaje frente a mí?

—Exactamente. Eh…

¿Chica salvaje? Lord Lu pareció notar que algo andaba mal. Levantó la cabeza para encontrarse con la burla de Xu Lao.

—Cuando dijiste eso, lo recuerdo ahora. Pero con una chica tan salvaje, ¿cómo podría ser la madre del mundo? ¿Cómo podría ser comparable a mi pequeña aprendiz?

—Xu Lao…

—¿Una vida tranquila abriendo fronteras, expandiendo la tierra y logrando grandes logros? Que risa. ¿De dónde viene esta chica salvaje que cree que tiene la capacidad de ayudar a Feng Xiaozi a abrir las fronteras, expandir la tierra y obtener grandes logros? Incluso si hay una persona así en este mundo, seguramente será mi pequeña aprendiz. Por lo menos, mira el talento de mi pequeña aprendiz para las habilidades mecánicas. Hmm, escuché que la presa construida en el río Huai no estaba allí hace un tiempo. Pero, una vez que se construyó la presa, se detuvieron las inundaciones provocadas por el río Huai durante todo el año. El alivio dado hizo que toda la gente se apresurara a elogiar la bondad de la persona que la construyó. Bueno, los planos de la presa fueron cuidadosamente completados por este anciano y esta joven aprendiz.

Los dos bigotes de Xu Lao en su boca se movieron.

Al escuchar esto, hubo un poco de claridad en los ojos de Zhang Sunshi. Bajo las instrucciones de Xia Yuqing, pocas personas sabían que ella había participado en los planos de esa presa. Zhang Sunshi solo sabía que Xu Lao conoció a Xia Yuqing por accidente, descubrió su talento y la aceptó como discípula, pero no sabía por qué. Ahora resultó ser por esto. La mirada hacia Xia Yuqing se volvió más satisfecha.

—Ella…

Lord Lu también se sorprendió. No esperaba que esta chica débil pudiera ser tan sorprendente.

—¿Ahora sabes que mi pequeña aprendiz es increíble? ¿Que en realidad está beneficiando a la gente? Pero, mira a tu nieta, ¿cómo se atreve a decir que puede ayudar a Feng Xiaozi? ¿Qué puede hacer ella por él? ¿Ayudarlo a cavar una esquina? Hmph… —El viejo Xu resopló con frialdad —Huo Xiaozi, sé lo que has calculado en tu corazón. No pienses en cosas que no te pertenecen, de lo contrario… pagarás un precio inimaginable.

Terminado, Xu Lao ya no quería hablar con ellos dos, felizmente le pidió a su pequeña aprendiz que consolara su alma herida.

Las palabras de Xu Lao equivalieron a romper los últimos planes de Lord Lu. La emperatriz viuda y Xu Lao, una tenía autoridad absoluta en el harén, mientras que el otro tenía un puesto insustituible en la corte. Si la emperatriz viuda se negaba a estar de acuerdo y Xu Lao estaba de su lado, todavía tenía la oportunidad de que Xu Lao lo ayudara a contactar a esos viejos cortesanos para presionar al harén y al emperador para que cumpliera sus propios objetivos.

Lo que Lord Lu nunca esperó fue que Xu Lao se preocupara por esto. Xu Lao estuvo fascinado por los mecanismos toda su vida, por lo que nunca se preocupó por la política. Incluso pensó que estas cosas eran una gran molestia. Además, el Duque Lu era una de las personas a las que más despreciaba. Así que estaba condenado… a la tragedia. Sin embargo, esta es también la razón por la que la emperatriz viuda llamó a Xu Lao para apoyar la escena.

Mirando a Huo Feiyan, que todavía estaba perdida y al Duque Lu que colapsó en el suelo, frustrado, los ojos de Zhang Sunshi brillaron un poco:

—El Duque Lu probablemente ya conoce el resultado. En ese caso, dado que Qing Er está embarazada y su nieta realmente no entiende las reglas, debe elegir una fecha y llevar a su nieta de regreso al feudo.

—Emp…

Lord Lu quería decir algo, pero de repente escuchó a Zhang Sunshi continuar hablando:

—Ai Jia puede decir que la expresión de la nieta de Lord Lu no es correcta y que ya no es temprano, Lord Lu por favor llévala de regreso a casa para descansar.

El rostro de Lord Lu cambió ligeramente. Sabiendo que la emperatriz viuda estaba empezando a ahuyentar a los invitados, supo que el asunto realmente parecía ser irreversible. Solo pudo inclinarse y retirarse con el rostro pálido. Tirando de Huo Feiyan, quien no dejaba de gritar, se levantó y se fue.

—No me iré, no me iré, ¿por qué despedirme? Soy la futura reina del reino de Ye, la futura emperatriz, perras. Cuando me convierta en la reina, definitivamente las haré… Hmm…

Los gritos de Huo Feiyan se desvanecieron gradualmente, se restauró la tranquilidad inicial en el salón.

Xia Yuqing sostenía una pera a medio comer en su mano. Ella se quedó atónita por un tiempo antes de darse cuenta.

¿Eh, esa golondrina de grasa fue arrastrada así? ¿El espectáculo ha terminado? Oye, todavía no he visto lo suficiente, ¡¿por qué se acabó?! De todos modos, ¡debería haber durado hasta que el banquete estuviera a punto de terminar! Este tipo de cosa mágica que termina a mitad de camino simplemente está inacabada, ¡hará que la audiencia lance huevos y tomates podridos!

Entonces, lo más poderoso de una persona realmente increíble no es lo increíble que es, sino si tiene un grupo de guardias capaces que la respalden, que la protejan para evitar que sufra algún daño.

Feng Tingye miró la apariencia aturdida de Xia Yuqing. Él sonrió y, silenciosamente, extendió la mano para tomar su mano de debajo de la mesa. Esta persona solo necesita tener una vida feliz y sin preocupaciones bajo su protección. En cuanto a esas dos personas, las trataría bien.

La atmósfera en el salón volvió gradualmente a la paz desde que las personas que se interponían en el camino se fueron. Poco a poco, la gente empezó a hablar y reír. Pero no se dieron cuenta de que una figura salió lentamente del pasillo y caminó en la dirección donde los dos se fueron.

♦ ♦ ♦

—Maldita sea, esa perra… algún día, definitivamente la haré sufrir mil veces más dolor que los insultos que he sufrido hoy.

Huo Feiyan gritó bruscamente, deteniendo a los guardias que patrullaban en el palacio uno por uno. Sus ojos mostraban una mala intención.

—¿Qué estás mirando, no has visto una belleza antes? Ten cuidado de que no te saque los ojos

—…

¡Resultó ser una enfermedad de serpientes[3]! Niang Niang dijo que hay dos tipos de personas en este mundo que no pueden ofenderse. Una es una loca, comúnmente conocida como perra de té verde, y la otra es la enfermedad de las serpientes. Aunque no entienden qué es dicha enfermedad, probablemente sea la mujer frente a ellos.

Niang Niang también dijo que si te encuentras con una persona con la enfermedad de serpientes o una perra de té verde, tienes que rodearlos, de lo contrario, si te enredas, te quitará la mitad de la vida. Además, la persona frente a ellos era obviamente una combinación de ambos, ¡la evolución definitiva!

Como resultado, el grupo de guardias que se había detenido y observado parecía haber visto un fantasma, luego evacuó rápidamente, lo que hizo que la cara de Huo Feiyan volviera a hundirse.

Su cara de Huo Feiyan era fea y la de Lord Lu no era mucho mejor.

Justo cuando el abuelo y la nieta caminaban solos en la brisa del atardecer, de repente escucharon un susurro desde atrás:

—Lord Lu, por favor no se vaya

Lord Lu estaba conmocionado, había una onda de esperanza en su corazón. ¿Podría ser que la emperatriz viuda cambió de opinión y quería llamarlos? 

En el momento en que se dio la vuelta, la anticipación y la alegría en los ojos de Lord Lu fueron reemplazadas instantáneamente por conmoción y alerta.

—¿Eres tú? ¿No acompañas a esa perra? ¿Qué haces aquí? ¿Es posible que hayas venido aquí para reírte de nosotros? Oh, lo sé, esa perra…

La figura escondida en la oscuridad salió lentamente. Bajo el reflejo de la luz de la luna, se reveló que su verdadero rostro era Cui Er, la sirvienta que debería haber estado al lado de Xia Yuqing.

Al escuchar la maldición de Huo Feiyan, los ojos de Cui Er brillaron con un frío helado, pero volvió a la normalidad en un instante. Ella interrumpió la maldición de Huo Feiyan:

—Lord Lu y la señorita Huo no entendieron. Nu Bi solo vino a entregar algo.

—¿Entregar algo?

La mano derecha de Cui Er reveló un trozo de jade. Cuando Lord Lu vio la pieza de jade, su rostro cambió ligeramente. Se tocó apresuradamente la cintura, luego descubrió que el jade que colgaba de su cinturón realmente faltaba.

—El Duque lo dejó caer accidentalmente cuando hizo una reverencia hace un momento. Nu Bi lo recogió y vino aquí para entregárselo.

Cui Er se acercó lentamente y le entregó el colgante de jade al duque Lu. Cuando retiró la mano, la mayor parte de su brazo quedó expuesto “accidentalmente”, justo a tiempo para que Lord Lu viera claramente el tatuaje rojo de llamas en su brazo.

El rostro de Lord Lu cambió ligeramente, el colgante de jade en su mano casi cayó al suelo. Sus ojos se agrandaron:

—Tú, tú…

Cui Er sonrió levemente. Desde la antigüedad, además de los miembros de la familia real, los únicos que sabían lo que representaba esta marca eran esas personas falsas de Qin Tianjian y esta persona frente a ellos era obviamente uno de ellos.

Los labios de Cui Er se crisparon levemente. Ella susurró con una voz que solo ellos dos podían escuchar:

—La profecía de hace una docena de años ha pasado por una batalla y las estrellas han cambiado. ¿Cómo puede el cielo estrellado seguir siendo el mismo? Tu error es tomarte a ti mismo demasiado en serio. Lord, la gente tiene un buen dicho: «Las personas que revelen la voluntad del cielo serán castigadas severamente por el mismo». Estas personas a menudo no viven mucho, así que… tenga mucho cuidado. Cuide a su nieta. Si se atreven a decir algo malo sobre Niang Niang, le sacaré la lengua.

Huo Feiyan no pudo escuchar los susurros entre los dos. Ella solo vio a Cui Er entregándole el colgante de jade a su abuelo y no irse. Ella resopló:

—Ya que las cosas han sido entregadas, ¿qué sigues haciendo aquí, por qué no te apuras y te vas?

Cui Er ignoró el clamor de Huo Feiyan y se rió entre dientes:

—Nu Bi se retirará ahora

Terminando su discurso, se giró y se fue.

Huo Feiyan suspiró y se volvió para mirar al Duque Lu, pero vio que su mirada estaba aturdida. Su rostro estaba lleno de pánico, ella saltó hacia adelante para sostener su figura temblorosa y preguntó con ansiedad: —Abuelo, abuelo, ¿qué sucede?

—Así que es por eso… eso… ¿Me he sobreestimado? ¿Soy yo… tos… slurp…? —En su estado de sobresalto, el duque Lu tosió violentamente y luego vomitó. Vomitó una bocanada de sangre y cayó de bruces.

Huo Feiyan estaba aterrorizada. Quería aferrarse a Lord Lu, pero era menos capaz de lo deseado. Finalmente cayó al suelo:

—Abuelo, ¿qué te pasa? No me asustes, abuelo… abuelo…

El viento frío sopló por encima de la calle vacía y oscura del palacio acompañado de gritos y quejidos horrorizados. Las personas que escucharon esto se sintieron muy asustadas en la fría noche de invierno.

De esta manera, sin que nadie lo supiera, Huo Feiyan y Lord Lu fueron abusados ​​una vez más.

♦ ♦ ♦

Cuando Cui Er regresó al banquete, la atmósfera en el salón se había calentado gradualmente. Xia Yuqing la vio desde la distancia y la saludó con alegría:

—Cui Er, ven aquí

Cui Er sonrió y asintió. Caminó hacia Xia Yuqing. Entonces, la escuchó quejarse:

—Cui Er, ¿a dónde fuiste? Te he estado buscando durante mucho tiempo

—Nu Bi acaba de ir a ver la sopa de pollo que Lu Rui estaba cocinando en la cocina cuando se iba, así que Nu Bi llegó tarde. Niang Niang, perdóname

Los ojos de Xia Yuqing se iluminaron cuando escuchó que Cui Er fue a revisar la sopa de pollo. Estaba a punto de preguntar cómo estaba la sopa, pero alguien la interrumpió primero.

—¿Cui Er? ¿Es esa la nuera elegida por esa loca para mi hijo? —Cuando Xu Lao escuchó la llamada de Xia Yuqing, saltó un metro de altura. Luego saltó hacia Cui Er con alegría y comenzó a dar vueltas.

Ese día, Su Linlang conectó aleatoriamente a una pareja, pero no pensó mucho en eso. Inesperadamente, después de que su hijo regresara con Xia Yuqing esta vez, bajo circunstancias sospechosas, Xu Lao atrapó al pequeño erudito y le preguntó al respecto. Solo entonces, se dio cuenta de que su hijo corrió al palacio de Xiefang solo para conocer a su futura nuera.

En este momento, Xu Lao no podía quedarse quieto. Inesperadamente, la aleatoriedad de esa loca dama dio en el blanco y encontró una nuera para su hijo.

Alguien, obviamente, no esperaba que su hijo, que él pensaba que era digno y estable, en realidad se pareciera más a Su Linlang por dentro. Este fue especialmente el caso de su gusto.

Aunque Xu Lao quería ver a su nuera, estaba tan ocupado con todo lo que tenía a mano que lo había arrastrado hasta ahora. Su intención original era ayudar a su pequeña aprendiz en el palacio, pero afortunadamente también pudo ver a su futura nuera, ¿cómo no podría estar emocionado?

—Tos tos, ¿qué le pasa? ¿Cuándo se convirtió esa niña en la nuera de Xu Lao?

La boca de Yan Ran casi escupió el vino de nuevo. Aunque lo frenó a tiempo, se atragantó con sorpresa. Miró a Feng Tingye.

Incluso Shao Zitong, Leng Ruofeng y Zhang Sunshi miraron a Feng Tingye con sospecha. Originalmente, se sorprendieron al escuchar que Xu Lao tenía un hijo, pero no esperaban que la chica que había estado con Xia Yuqing, escondida detrás de ella todo este tiempo, resultaría ser… ¿la nuera de Xu Lao?!

De repente, recordando haber conocido a Su Linlang ese día y que estas personas no estaban allí, Feng Tingye se obligó a curvar los labios y dijo de mala gana:

—Es difícil de explicar, te lo diré más tarde

Feng Tingye giró la cabeza y miró a Cui Er, que estaba atrapada por Xu Lao. Con la habilidad de Su Linlang, Cui Er no habría podido mantener sus habilidades ocultas. Quizás, sea precisamente por esto que… en cuanto a la actitud de Su Wuduan, ¿es… un acto falso?

—Nuera, nuera, tsk tsk, te mereces ser del palacio de mi pequeña aprendiz. Te ves realmente encantadora, no es de extrañar que Su Wuduan se sintiera tentado. Después de todo, mi hijo tiene buen ojo, jajajaja.

—…

Ahora, lo que causa problemas es que este suegro vea a su nuera. ¿Qué es esto de cada vez más agradable a la vista? Aunque hermano Xu, eres mi maestro y mi mayor, ¿por qué quieres crear problemas cavando los rincones de mi palacio tan descaradamente?

—Eso… Hermano Xu, Cui Er, a ella en realidad…

¡No le gusta el hermano mayor! Ese mismo día, pateó a su hermano mayor tres veces. Si realmente se convirtieran en una familia en el futuro, ¡la violencia doméstica definitivamente sucedería!

—Lo sé, lo sé, esta niña debe ser tímida. Puedo decir que es delicada y tímida. No tengas miedo niña. El hermano Xu no es una mala persona. No te haré nada. Como eres mi futura nuera, este anciano, naturalmente, no te tratará mal. Vamos, este es el colgante de jade reliquia de los antepasados ​​de mi familia Xu. Hay dos piezas en total. Esta pieza es para ti y la otra ya se la he dado a ese niño. Considéralo como un regalo de primer encuentro del suegro a la nuera.

Xu Lao sacó un pequeño colgante de jade de su cuerpo y sonrió como un Buda Maitreya.

—…

¿Intercambiando fichas tan pronto? Maestro, ¿ha solicitado las opiniones de las partes involucradas en esta transacción forzosa? ¡Los matrimonios concertados pueden conducir fácilmente al asesinato!

Cui Er le dio una expresión en blanco a Xu Lao. No estiró la mano para recoger el colgante de jade. Ella solo escupió dos palabras con calma:

—No quiero…

—…

Xia Yuqing estaba aturdida. ¿Por qué las personas a su lado actúan cada vez más mal? La otra parte es una figura poderosa en el reino de Ye, ¿puedes negarte a respetarlo tan directamente? ¡Si no tienes tacto, lastimarás el corazón de cristal del anciano!

Xia Yuqing de repente entendió los sentimientos de Lu Rui, ¡realmente le rompió el corazón! Cansado, sintiéndose no amado, Lu Rui, te he culpado incorrectamente, ¡definitivamente te trataré bien en el futuro! ¡Ya no voy a resentir tus quejas!

Aunque Xu Lao estaba un poco avergonzado, no estaba irritado. Sólo retiró la mano, se golpeó la cabeza y dijo:

—Mira mi cabeza gruesa, ¿cómo puedo darte esta muestra de amor? Debería dejar que ese chico apestoso te lo envíe. Hija, no te enfades, el padre no pensaba bien. El padre vino apresuradamente hoy, por lo que el padre no trajo nada bueno. Lo compensaré la próxima vez.

Antes de que la voz de Xu Lao terminara de salir, Cui Er dijo fríamente:

—No quiero

—¿Qué?

Xu Lao no podía creerlo, ¡en realidad fue rechazado dos veces! Se tocó la nariz en secreto, frunció las cejas y pensó: ¡Esta nuera parece tener un gran temperamento! 

Cui Er finalmente se dio la vuelta, se encontró con la mirada de Xu Lao y sonrió.

Xia Yuqing no pudo evitar temblar cuando vio esto. Sintió que algo trascendental estaba a punto de suceder, como se esperaba…

—Mayor Xu, el colgante de jade en su mano, me temo que no es suficiente. Hasta donde yo sé, hay más de una docena de nueras además de mí.

¿Qué? ¿Una docena de nueras? Su rostro se puso pálido, mirando a Cui Er con una cara apagada.

Cui Er levantó una sonrisa gentil, pero peligrosa y dijo lentamente:

—Sí, cuando la señora Linglang me conoció por primera vez, me dijo que me dejaría ser su decimoctava… concubina.

—…

La gente del palacio se sorprendió por la impactante noticia.

—…

Este es Yan Ran, quien se maravilló del enérgico hijo de Xu.

—…

Este era el Viejo Xu que estaba electrificado por las palabras de Cui Er.

Después de un largo tiempo, hubo un rugido que hizo temblar la tierra en el Pabellón Fangcui originalmente silencioso. Se estremeció tanto que los pájaros que apenas sobrevivieron al sonido mágico de Xia Yuqing gritaron y cayeron al suelo.

Xia Yuqing escuchó el sonido, luego miró al cielo en silencio debido al rugido en el pasillo. Hermano mayor, esta vez realmente no fui yo.

Como dice el refrán: “si quieres ser ignorante, no debes hacer nada”. Como dice el otro refrán, “hay injusticia y siempre hay que pagar por la injusticia”. Por favor busque a su futura nuera si tiene algún problema, la apoyaré espiritualmente. Te encenderé una hilera de velas, amén ~

Así terminó la fiesta de cumpleaños de la emperatriz viuda. En cuanto a si ciertas personas sufrirán después del banquete de cumpleaños, esa no es una cuestión que Xia Yuqing deba considerar.

♦ ♦ ♦

Xia Yuqing pensó que Huo Feiyan continuaría causando problemas, pero no esperaba escuchar noticias sobre ellos, diez días después. La noticia vino de su feudo.

—Escuché que Lord Lu estaba gravemente enfermo después del banquete de cumpleaños. Estaba postrado en cama, pero todavía quería obstinadamente dejar la capital y regresar al feudo. Huo Feiyan no tuvo más remedio que llevarlo de regreso. Inesperadamente, cuando llegó al feudo, antes de entrar, murió. No mucho después, la familia Huo cambió al cabeza de familia. En cuanto a la Golondrina Gorda, ahora sin la protección de su abuelo, quién sabe cuántas personas se habían sentido ofendidas por su actitud dominante habitual. Al nuevo patriarca tampoco le agradaba. Ahora que no había ninguna posibilidad de que ella fuera la reina, las gracias pasadas se han convertido en ironía. Todos han derribado el muro. Ahora toda esa gente está tratando de atormentarla tanto como sea posible. Escuché que Huo Feiyan no pudo soportar el cinismo de esas personas y ya está loca.

Cui Er y Li Yuan, que estaban limpiando la habitación de Xia Yuqing detrás de ellas, escucharon que Huo Feiyan se volvió loca y sus acciones se detuvieron. Se miraron tácitamente y luego de una sonrisa, volvieron a hacer sus tareas.

Xia Yuqing acababa de despertar, por lo que estaba somnolienta. Quién sabe cuánto escuchó. De hecho, ella realmente no escuchó mucho.

Anoche, tuvo una pesadilla. Soñó con un montón de pollo asado que exudaba una fragancia tentadora frente a ella, pero cuando estaba a punto de subir a comerlo, ¡todos tenían patas largas y se escaparon!

—¡Lu Rui, quiero comer pollo asado al mediodía!

¡Hmph, no creo que no pueda comerte hoy! 

Lu Rui se sorprendió por un momento, luego se rió y se comprometió: —Bueno, Nu Bi irá a la cocina imperial a recoger un pollo gordo para asarlo yo misma

—En.

Entonces, la tragedia de Huo Feiyan y Lord Lu fue olvidada intencional o involuntariamente con la comida solicitada por la maestra. Después de todo, para ellas, estas dos personas eran simplemente transeúntes insignificantes.

Después de desayunar, la atención de Xia Yuqing volvió a ser atraída por las cosas cercanas.

—¡¿Llegó la carta de Xiang Er?! ¡Muéstrame ahora!

Xia Yuqing miró el llamativo pájaro mecanismo no muy lejos y corrió felizmente, asustando a las chicas en el costado:

—Más despacio, más despacio, Niang Niang. ¡Por favor más despacio! No corras tan rápido.

Xia Yuqing no podía esperar para abrir la pequeña nota en el mecanismo del pájaro.

—Niang Niang, ¿qué dijo la señorita Liu en la carta?

Lu Rui miró a Xia Yuqing y vio alegría, a veces pérdida y otras indignación, por lo que no pudo evitar sentir un poco de curiosidad.

—Xiang Er quiere que la ayude a desearle a la Madre Real una felicidad tan inmensa como el mar del este y el mejor cumpleaños. Se siente muy culpable por no desearle un feliz cumpleaños personalmente y que el regalo de cumpleaños está en camino. Lo recibirá dentro de unos días

—La señorita Liu todavía recuerda el cumpleaños de la emperatriz viuda, qué cariñosa. Pero al poder darle a alguien un regalo de cumpleaños, parece que a la señorita Liu le está yendo bien en el reino Xia, Niang Niang puede estar tranquila

—Mn…

Xia Yuqing dijo a la ligera y continuó:

—Xiang Er también me dijo que después de que nazca el niño, no me olvide de decirle al niño que todavía tiene una tía que está sufriendo en el país de Xia.

La boca de Lu Rui se crispó:

—La señorita Liu todavía recuerda esto.

Si le enseñan eso al principito y a la princesita en su camino, ¿no desencadenarán una guerra entre los dos países?!

Xia Yuqing asintió, su pequeña boca se hundió:

—Hmph, no tiene conciencia. ¡Recuerda al niño, pero ni siquiera me recuerda a mí!

—…

Entonces, Niang Niang, ¿estabas triste solo por eso?

—Xiang Er también dijo que el quinto príncipe del Reino Xia no ha podido salvar la situación, el cuarto príncipe se ha separado completamente de él. ¡Eh, una escoria Gong!

—…

¿Por qué la señorita Liu se olvidó de saludarme, pero recuerda este hecho? Además, ¿qué tiene esto que ver con la escoria Gong? Niang Niang, siempre dices cosas que la gente no entiende tan fácilmente, ¡solo di en voz alta que no eres del mismo mundo!

—Eh, ese gong barato, no importa lo que sea, es solo un cobarde

—¿Eh? Xiao Xi, ¿acabas de decir algo?

Xia Yuqing se dio la vuelta y preguntó cuándo escuchó los sonidos.

Yun Xi se dio cuenta de que en realidad había dicho lo que tenía en el corazón, luego respondió de manera culpable:

—No es nada, Qing Jiejie, me escuchaste mal

—Oh.

Xia Yuqing no dudó de ella y no preguntó más.

Xia Yuqing no lo escuchó, pero las dos sirvientas entrenadas detrás de Xia Yuqing escucharon claramente las palabras de Yun Xi. Inmediatamente se miraron la una a la otra. Los ojos de Cui Er y Li Yuan mirando a Yun Xi eran un poco más inquisitivos.

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[1]Huo Xiaozi = similar a decir niño pequeño Huo

[2]Frascos de consejos leales en los oídos – Significa que los buenos consejos a menudo entran en conflicto con nuestras opiniones y, por lo tanto, pueden ser difíciles de aceptar.

[3]enfermedad de serpientes – estar loco, finge ser dulce, pero en realidad esconde sus garras