Katarina – Capítulo 9: Convirtiéndose en Keith Claes

Traducido por Kaori

Editado por Kaori

Corregido por Sharon

---

Me convertí en Keith Claes en la primavera en la que cumplí ocho años. Fue la segunda vez que cambié de nombre, aunque apenas pueda recordarlo. La primera vez era demasiado pequeño.

Sin embargo, hasta que cumplí tres años, siempre me habían dicho que estuviera en silencio en una pequeña habitación, la cual desprendía un aire de inquietud. Entonces, un día, un hombre que nunca había visto antes envió un carruaje tirado por finos caballos para llevarme a una hermosa mansión. Y así, me encontré con esta persona que se hacía llamar mi padre, así como una madrastra y dos hermanastros.

Todo el mundo me miraba muy fríamente, y a pesar de que era muy joven, me di cuenta de que no era bienvenido. Más tarde, al escuchar los rumores de los sirvientes, supe que era porque mi padre me había tenido con una prostituta.

En la nueva familia, no tenía permitido llamarles “papa” y “mama”. También fue así con mis hermanos, a quienes siempre tenía que llamar con honoríficos. Debido a que al principio no estaba acostumbrado, a menudo era castigado. Asimismo, no tenía permitido comer con la familia, y en su lugar, comía solo en mi habitación.

Mi padre y mi madrastra simplemente hacían como si yo no estuviese allí, y realmente no me afectaba en nada, pero… Mis hermanastros, al contrario, siempre que me veían me daban puñetazos o patadas sin descanso, y una vez me encerraron durante todo un día en el granero. Fue por esto que, con el fin de evitarlos tanto como pudiera, pase la mayor parte de mí tiempo solo en mi propia habitación.

Sin embargo, sucedió algo.

Hacia un buen tiempo ese día y había algunas aves haciendo un nido en el árbol que se veía desde la ventana de mi habitación. Quería observar a los lindos pájaros con todo mi corazón mientras construían su nido desde una distancia más cercana. Caminé tratando de no hacer ruido cuando salí de mi habitación, y me dirigí hacia el árbol.

Me encontré a mis hermanastros que también estaban afuera. Ellos me rodearon y me golpearon varias veces dándome patadas, y llamándome “hijo de la puta”, así que me acurruqué de la forma en la que siempre lo hacía, mientras esperaba a que se aburrieran.

En ese momento, uno de ellos notó al pájaro en el árbol.

—Mira, hay algunas aves allí.

—Oh, eso es verdad, están haciendo un nido. ¡¡Vamos a destruirlo!!

Mis hermanos comenzaron a lanzarles piedras a los pájaros como habían dicho. El nido en el que las aves habían trabajado tan duro para construir estaba a punto de ser destruido. Cuando las rocas fueron lanzadas contra ellos, los pájaros comenzaron a chillar por el dolor y el miedo.

—¡¡Deténganse!! —grité.

Y entonces, sentí como si algo caliente saliera de mi cuerpo.

En ese momento, algo grande cayó del cielo. Antes de que me diera cuenta, mis hermanastros habían caído postrados delante de mí. Alrededor de ellos, había muchos pedazos de tierra del tamaño de un puño que fueron esparcidos alrededor.

Lo que cayó del cielo era ese montón de tierra. Además, también vi que faltaban pedazos de tierra en el suelo. Al parecer, mis hermanos fueron heridos de alguna forma por toda esta tierra.

¿Qué demonios pasó? 

Me quedé aturdido.

Después de eso, mis hermanastros fueron llevaron a la casa por los sirvientes que vieron lo que sucedió y llamaron al médico.

Los dos tenían contusiones por todo el cuerpo, y lo peor fue que al parecer tenían algunos huesos rotos. Aprendí que los pedazos de tierra que les hirieron fue producto de la magia accidental que usé.

Desde ese día, el lugar donde originalmente no pertenecía se hizo aún menos acogedor. Tenía prohibido salir de la habitación excepto de que fuera necesario.

Mis hermanastros ya no se acercaban a mí. Si me veían, simplemente gritaban, “¡Es un monstruo!” y salían corriendo con expresiones de miedo. No fueron solo ellos, también mi padre, mi madrastra, y los sirvientes me evitaban.

Aunque no era tan obvio, mis hermanastros siempre tenían miedo en sus miradas. Pasé todos los días recluido en mi habitación siéndome sofocado.

Estuve un tiempo así durante varios años.

Un día, me dijeron que otro hombre, del que no sabía nada, había venido a verme.

—Después de escuchar acerca de tu poderosa magia, el duque Claes ha decidido adoptarte como su hijo.

Y como tal, me llevaron otra vez a una nueva familia en un carruaje tirado por caballos. A pesar de que yo había vivido en esta mansión durante cinco años, nadie me despidió.

Al llegar no pude evitar comparar esta mansión con la que había estado viviendo antes. La diferencia era tan grande que hacía a la anterior verse como una casa pequeña. Todo, desde las ollas a la alfombra, estaba decorado con una aterradora sensación de clase alta.

El hombre que se convirtió en mi nuevo padrastro adoptivo, era el jefe de esta familia, un hombre llamado duque Claes.

—Hola, eres Keith, ¿verdad? Bienvenido a la familia Claes.

Como el duque Claes me recibió con una amplia sonrisa, me sentí avergonzado, ya que no estaba acostumbrado a ser tratado de esta forma. Él me presentó inmediatamente a su familia.

La duquesa Claes parecía ser un poco fría y distante. Y entonces, vi a su única hija, Katarina Claes.

Ya que había sido atormentado todos los días por mis hermanastros anteriores, tenía miedo de tener hermanos. Si es posible, no quiero involucrarme con mi nueva hermana.

El día en que llegué, fui a descansar a mi habitación justo después de saludar a todo el mundo. Puesto que me trajeron de repente de mi anterior hogar, estaba agotado, y aunque la cama era desconocida y excesivamente grande, pude dormir profundamente esa noche.

A la mañana siguiente, desayuné con el duque Claes y su familia, fue la primera vez en que participé en una cena con otras personas y fue la comida más deliciosa que he tenido. De alguna manera, regresé a mi habitación con una extraña sensación de calidez en mi pecho.

♦ ♦ ♦

Por alguna razón, Katarina ha venido a verme. Si era posible, pensé en no querer involucrarme con ella… Nunca pensé que vendría a verme y hablarme.

—Yo te guiaré por el jardín.

—Ah sí, muchas gracias, Señorita Katarina.

Se puso de mal humor de inmediato al escucharme.

—Keith, somos familia ahora. Está bien que me llames hermana.

Estaba conmocionado. En mi familia anterior, al ser el menor no se me permitía llamar a mis hermanos sin el respeto adecuado.

Incluso agregó algo más.

—Es mi sueño ser llamada hermana, así que por favor te pido que me llames de esa forma.

—Voy a estar a su cuidado, hermana.

Después de decir eso, Katarina se rió felizmente.

Y entonces, fuimos al jardín juntos, Katarina me guió alegremente por el jardín, y había un buen clima.

Después de un tiempo hablando con ella, me di cuenta de algo. Esta chica llamada Katarina Claes es un poco diferente de las hijas de otros nobles.

—Soy bastante buena en la pesca. ¡Vamos a pescar juntos!

Ella me invitó, y también me explicó con pasión acerca de su campo. Tal vez porque pasé la mayor parte de mi tiempo encerrado en mi habitación y nunca había hecho nada como pescar o hacer un campo, pero tampoco veía que mis hermanos tuvieran tales aficiones. Creo que la mayoría de los otros niños nobles no tendrían este tipo de pasatiempos.

Eso era lo que estaba pensando, mientras seguía siendo sorprendido por Katarina.

—Keith, sígueme, te llevaré a mi lugar favorito.

Cuando lo dijo, ella me agarró del brazo y empezó a caminar rápidamente. Y entonces, me llevó al árbol más alto del jardín.

—Puedes tener una vista impresionante del paisaje, si subes este árbol —dijo con sus ojos brillosos.

Entonces me preguntó si alguna vez había escalado. Le dije que no.

—Pues bien, te voy a enseñar. En primer lugar, empieza a ver como subo, ¿bien?

Al terminar, se quitó los zapatos, enrolló su vestido y comenzó a subir. Observé aturdido como subió al árbol sin problemas. Mirando a Katarina desde abajo, pude ver lo tenía por debajo del vestido.

De cualquier forma, parecía que no le importaba una cosa así, o no se dio cuenta, y siguió subiendo el árbol sin problemas. Luego, alrededor de la mitad, Katarina se detuvo y se volvió para saludarme con una gran sonrisa. Fue en ese momento.

Su cuerpo se sacudió.

—¡Cuidado! —Rápidamente me puse debajo de Katarina.

Ella cayó sobre mí con un ruido sordo, y en el momento del impacto, perdí la conciencia durante un rato.

Un poco más tarde, cuando mi conciencia regresó, yo estaba en sus brazos.

—Keith, por favor no mueras~

Conforme ella lloraba, no parecía que se diese cuenta de que había despertado, no importaba cuántas veces tratara de llamar su atención. Sólo lo logré una vez levanté mi tono de voz y le hice saber que estaba bien.

—¡¿Keith?! ¡¿Por dios, estas vivo?!

Y me abrazó fuertemente, Me quedé paralizado involuntariamente, esta era la primera vez que alguien me abrazaba.

—Oh, no, Keith, ¿te duele en algún lugar?

Katarina me miraba con ansiedad. Es la primera vez en la que he preocupado a alguien más, sentía vergüenza. En serio, a pesar de que no sentía dolor, parece que ella está muy preocupada por mí, no tengo idea de que es lo que debo hacer. Pero parece Katarina malinterpretó que estaba demasiado herido como para moverme.

—Keith, espera un poco por mí, ¿bien? Voy a correr de inmediato a la mansión y traeré a algunos sirvientes para que te lleven de vuelta.

Después de decir eso, Katarina empezó a correr hacia la mansión descalza y con su vestido todavía enrollado.

Mientras veía su espalda hacerse cada vez más pequeña en la distancia, una extraña sensación cálida volvió a invadir mi pecho, tal y como esta mañana en el almuerzo.

♦ ♦ ♦

Esa noche, hubo un gran alboroto cuando la duquesa Claes de repente le exigió el divorcio al duque, pero se resolvió de inmediato.

Después de que se aclararon los malentendidos, la duquesa comenzó a tratarme más amablemente. Por supuesto, el duque también me trataba muy bien.

Entonces, mi hermanastra Katarina me enseñó varias cosas. Primero fue la pesca. También me enseñó a trepar a los árboles mientras me pedía que lo mantuviese en secreto de madre. Y cuando era elogiado por el maestro de esgrima, ella se ponía feliz como si la estuvieran elogiando.

Cada día era emocionante, divertido y feliz… Que me hizo olvidarlo…

Yo era un monstruo con magia incontrolable.

♦ ♦ ♦

Un día después de terminar la práctica de esgrima, me encontré con Katarina en el campo. Ella era muy feliz al ver que sus cultivos estaban creciendo con éxito.

Cuando me contó la historia de su campo y me mostró algo de su magia, ella dijo esas fatídicas palabras.

—¡Quiero ser capaz de manipular un golem de tierra!

Un golem de tierra mágico es una creación hecha de tierra que puede moverse libremente cuando se usa magia en él. Es el hechizo que usé antes, pero fue una coincidencia que fuera el mismo.

En mi habitación, tenía una muñeca de arcilla hecha a mano. Como tenía escaso contacto con mi familia anterior, había hecho una muñeca de barro para que me acompañara en las comidas y fuera mi amigo.

Sabía cómo utilizar un poco mi magia, pero le había hecho una promesa al duque Claes. Debido a que mi magia parecía poderosa y aún no podía controlarla, causando de esa forma que lastimara a mis hermanos anteriores, prometí no usarla hasta que me enseñaran adecuadamente.

Sin embargo, cuando vi Katarina mirándome tan ansiosa, decidí usar sólo un poco. Cuando el golem de tierra se movió, Katarina se veía feliz y me pidió que lo hiciera un poco más grande.

Y así, el golem creció demasiado y ya no se movió como yo quería. Katarina se acercó y fue… Enviada a volar por el brazo descontrolado.

El pequeño cuerpo de Katarina voló en el aire, y al caer, se golpeó en la cabeza.

Después de que los sirvientes llamaron a un médico para que la revisara, descubrimos que sólo se desmayó por el golpe, pero no tenía heridas graves.

Eso es lo que duque Claes, quien había estado preocupado sobre Katarina, me dijo.

—Sé que rompí la promesa de no usar magia, e incluso lesione a mi hermana. Todo es mi culpa, por favor, por todos los medios castígueme. Realmente lo siento mucho, lo siento, no me importa si incluso me expulsa de la familia.

El duque Claes me observó suavemente.

—Hablaremos sobre el incidente cuando Katarina se despierte, ya que también debo oír su versión. Keith, te ves muy pálido, como si pudieras desmayarte en cualquier momento. Ya que Katarina está bien, también deberías ir a tu cuarto a descansar.

Y como me lo pidió, me volví a mi habitación.

Esa noche, yo estaba sinceramente aliviado al saber que Katarina despertó sin problemas. A pesar de que quiero ir a verla, no puedo… Yo tenía miedo…

♦ ♦ ♦

Al día siguiente, no pude salir de mi cuarto. Es la primera vez que echo de menos el desayuno desde que llegué.

Y entonces, el tiempo de desayuno terminó.

—Keith, soy yo Katarina. ¿Te sientes mal? No bajaste a desayunar.

Katarina estaba frente de mi habitación.

—Hermana —contesté por reflejo.

—Sí, soy yo. ¿Qué pasa, Keith? ¿Te duele el estómago? ¿Estás bien?

A pesar de que fue gravemente herida por mi culpa, aún se preocupaba por mí.

—No es nada, pero más importante, ¿tus heridas están mejor?

—Sí, estoy bien, fue solo un pequeño golpe en la cabeza. De todas formas, Keith, tengo algo que decirte ¿puedo pasar?

Me sentí aliviado al oír a Katarina sonar tan enérgica. En verdad, quiero ver su cara ahora mismo, pero…

—Lo siento, no se puede.

—¿Q-Qué?

—No puedo estar cerca tuyo nunca más.

Realmente quiero ver su cara ahora mismo. La última vez que la vi, ella había perdido la conciencia y su cabeza estaba boca abajo. Quiero comprobar que está bien.

Pero, ya no me puedo quedar cerca de Katarina nunca más.

Si un monstruo como yo, que puede perder el control de su magia en cualquier momento, se mantiene cerca, Katarina podría hacerle daño de nuevo. No quiero hacerle daño a mi agradable hermana que me enseñó muchas cosas.

Katarina estaba hablando mucho fuera de la habitación, pero sólo me quede en mi cama, acurrucado.

Había estado viviendo solo en mi cuarto desde el principio de todos modos, y si estoy solo… Nunca más lastimaré a alguien importante para mí.

Después de unos minutos, ya no oí la voz de Katarina.

Probablemente se dio por vencida por mi frialdad, después de dejarle de responder y volvió a su habitación.

Mientras pensaba en eso distraídamente…

—Keith, si estás cerca de la puerta en este momento, aléjate de ella por favor.

Oí su voz de nuevo, cuando ya había pensado que se había rendido.

Entonces, la puerta que había sido cerrada hizo un crujiente sonido, y después de eso, se rompió. En la entrada, por alguna razón vi a Katarina con una cara desesperada mientras sostenía un hacha. Me quedé mirándola aturdido mientras entraba a la habitación. Y después…

—¡¡Lo siento mucho por lo de ayer!!

Se arrodilló delante de mi cama e inclinó la cabeza hacia mí.

—Injustificadamente te pedí que usaras la magia que no podías controlar, ¡¡por eso realmente lo siento!! Por otra parte, no escuché tu advertencia y traté de tocar el golem de tierra… ¡¡Lo siento por hacer que te preocuparas!!

Me levanté de la cama, y me agaché junto a Katarina.

—¿Por qué te disculpas…? Fue mi culpa…

—¿Qué estás diciendo? ¡Fue mi culpa! ¡Porque le hice una petición tan irrazonable a Keith!

¿Por qué? ¿Por qué esta persona todavía trata de estar conmigo? ¿Por qué está diciendo cosas como esta? Ella debe tener miedo de mi magia, e incluso se ha lesionado… Pero, sin embargo…

—¿No tiene miedo de mí, hermana?

—¿Asustada?

—En mi anterior casa, lesioné a mis hermanastros con la magia. Y esta vez, te he herido. A pesar de que mi magia es fuerte, no puedo manejarla de forma adecuada y por eso, porque no puedo controlar mi poder mágico, puedo herir a las personas… ¿Hermana, no tienes miedo de mí?

Incluso le dije sobre mi incidente pasado. De esta manera, Katarina no debería querer de acercarse.

Estaba asustado. Le hice daño a Katarina. Si ella me mirase con ojos asustados, como mi familia anterior… Mi mayor miedo era ser odiado como un monstruo.

Entonces, miré a los ojos de Katarina por primera vez desde que había entrado en la habitación, y me sorprendí. No había miedo en sus ojos…

Esperé sus palabras con la respiración contenida.

—Oh, así que fue algo como eso~.

Fue tan inesperado, que levanté mi rostro involuntariamente, y me encontré con sus ojos azules.

—Si no puedes controlar tu magia, todo lo que tienes que hacer es trabajar duro en dominarla. Nuestro tutor de magia llegará pronto, ¿No quieres practicar conmigo? —dijo sin miedo y una gran sonrisa… Sus ojos eran tan cálidos.

—¿Todavía quieres estar conmigo?

—¡Por supuesto! Siempre estaré contigo, ¿o acaso me odias?

Estar solo era tan triste y doloroso… Yo siempre había querido que alguien estuviese conmigo, sin embargo, nadie quería. Todos los que se me acercaban me llamaban por nombres como “el hijo de la puta” y “monstruo”. Pensé que nadie volvería a ser bueno conmigo… Ya había renunciado…

La chica que estaba frente a mí dijo con una sonrisa que estará conmigo para siempre.

—Por lo tanto, incluso si pasa algo malo, no te encierres en tu habitación… Umm… Keith ¿acaso sucede algo?

Katarina tenía una voz sorprendida mientras me miraba ansiosamente.

Entonces me toqué la cara, que estaba húmeda por alguna razón. Las lágrimas se desbordaban de mis ojos. Ahh… Estoy llorando.

Antes siempre lloraba en silencio en mi habitación. Siempre caían cuando me sentía solo o estaba lastimado. El llanto, que siempre venía desde lo más profundo de mí, siempre era doloroso, pero ahora…

Algo era diferente. Mientras más lloraba, me sentía más reconfortado, y aprendí por primera vez que las lágrimas también salen cuando estas feliz.

Katarina me miraba con preocupación mientras acariciaba mi espalda. Tiene una mano muy cálida y suave.

Sintiendo esa calidez, me inundó un presentimiento.

Quiero estar con esta chica llamada Katarina Claes, quiero estar con ella todo el tiempo que pueda.

Voy a entrenar mi magia, y aprenderé a usarla correctamente. Quiero estar a su lado y, un día, protegerla.