Mi prometido ama a mi hermana – Arco 2 – Capítulo 1


Si lo que has dicho es cierto, entonces debo de preguntar ¿por qué sólo tú?

¿Por qué sólo eres tú quien se mantiene regresando en el tiempo?

♦ ♦ ♦

Por qué, por qué, por qué.

Solo después de tener las memorias de mi vida anterior devueltas, sería capaz de controlar mi vida.

Cada vez que comenzara de nuevo aquel ciclo, incluso a pesar de que llegasen a existir algunas diferencias, mi prometido se enamoraría gradualmente de mi hermana menor sin falta.

Y yo… terminaría enamorándome de mi prometido una vez más.

Eso era algo que no cambiaría, sin importa qué.

Todo lo que ha ocurrido, sucedió debido a esto.

Incluso aunque yo dije que es así, solo existe un acontecimiento que no cambiaría sin importar que.

En todas aquellas veces, siempre es después de la fiesta de té, cuando me doy cuenta de que había regresado en el tiempo.

Tal vez si mi prometido y mi hermana menor no se hubieran conocido, nuestros destinos podría haber sido diferentes.

Pero, como si algo como eso fuese inevitable, ellos dos podrían lograr alcanzar su fatídico encuentro en esa fiesta de té.

No me atreví a reír, ya que a pesar de que los presenté, era yo quien había estado enamorada de él.

No importa lo que hice para impedirlo, era un suceso imposible de evitar.

Ellos dos se conocerán y terminarán enamorándose.

Al principio, creyeron que su amor no era correspondido, pero eventualmente, se dieron cuenta que su amor era mutuo y entre ellos se expresaron en secreto sus sentimientos para no dejar que nadie lo supiera.

Cerca de ellos, observaba cómo comenzaban a albergar ese tipo de sentimientos el uno por el otro.

O más bien, “me lo mostraron” probablemente era una mejor manera de decirlo.

Si yo no hubiera existido, ellos dos nunca se hubieran conocido. Pero es debido a que yo estoy de por medio, que ellos no pueden estar juntos.

En mi primera vida, ese momento se había convertido, sin lugar a dudas, en un infierno.

Los ojos de Soleil, que me miraron cometer una indiscreción en la fiesta de té que fue organizada para permitir a mi prometido y a mi hermana menor conocerse, habían perdido por completo su color.

Antes de que este momento ocurriera, había acosado a todas y cada una de las mujeres que se aproximaban a Soleil con duras palabras, y en cada ocasión, él me había hecho una franca advertencia.

Diciendo “Incluso si tú haces tal cosa, eso no nos hará ningún bien a ambos”.

A pesar de eso, nunca me detuve.

Nunca, incluso… en esa fiesta de té.

“No guiñes los ojos a Soleil-sama”, “tu chica horrible, haciéndote pasar por una frágil doncella”. “solo intentas arrebatarme a Soleil-sama, ¿no es así?”

Mientras lloraba… mientras que casi gritaba… exprese todos los insultos irrazonables que me vinieron a la mente.

Debería estar bien llamar a mi apariencia de aquel entonces, verdaderamente horrible.

De hecho, después de haber escuchado mi escena en la fiesta de té, mis padres se enojaron lo suficiente para casi golpearme. “Qué cosa más vergonzosa has hecho” ellos me reprendieron, e incluso inclinaron profusamente su cabeza frente a Soleil.

Con una apasionada mirada, que todavía tenía que sosegar por haberse enamorado instantáneamente de mi hermana, aparentaba haber aceptó la disculpa de mis padres, mientras que en el fondo me comenzaba a despreciar cada vez más, a mí, a quien pudo decir a su propia hermana todas aquellas horribles palabras.

Pero, él sabiamente no dejo que se apreciará en su comportamiento.

En cuanto a la razón del por qué, fue debido a que el matrimonio de Soleil conmigo se había decidido hace ya mucho tiempo, por lo que era una circunstancia difícil de revertir.

Se me educó para que sea una pareja adecuada para Soleil, en otras palabras, había estudiado por el bien de gobernar el territorio. Era algo imposible de hacer en un día. Aprender la historia, conocer a la gente, conocer los territorios y estudiar sobre su administración. Para dominar los idiomas, memorizar números, y estar bien informada sobre el clima social.

Fue debido a que se burlaron de mí por no coincidir con su estatus familiar, que memorizaba frenéticamente todos los conocimientos para sobresalir incluso ante los hombres.

Y, después de muchos años de soportar a través de tantas dificultades, finalmente lo hice.

Fue debido a que se me había criado para convertirme en la Señora heredera de mi Casa Marqués, que la más adecuada para tal posición había sido yo.

Ninguna otra mujer estaba calificada.

Era claro para todo aquel que miraba.

Por encima de todo, el hecho de que yo amaba a Soleil hacía aún más difícil el terminar la relación.

Era muy raro dentro de los matrimonios políticos el albergar  afecto hacia tu pareja al comienzo. Las personas a mi alrededor, especialmente mis padres y los de Soleil, vieron gratamente el hecho de que tenía sentimientos por él.

Ellos probablemente nunca habrían imaginado que Soleil acabaría albergando sentimientos por Sylvia.

Que aquellos ojos que se parecían al fino hielo, terminarían cubriéndose completamente por sus emergentes sentimientos.

Soleil mismo había estado aceptando este matrimonio político a pesar de que no parecía pensar favorablemente de mí. No había desviado su camino para romper el compromiso, tratándolo como una estrategia política y tratándome adecuadamente como su prometida.

En cierto sentido Soleil había sido un hombre ordinario que se había enamorado.

Pero, al mismo tiempo, se convertiría en un noble que podría gobernar sobre un territorio.

Con el fin de cumplir con sus deberes y responsabilidades, eligió tomarme como su esposa.

Eso era lo que significaban los matrimonios políticos en un principio, después de todo.

Estaba insatisfecha de que Soleil no me prestara atención, pero incluso entonces, había pensado, “así debería estar bien por ahora”.

Pensaba que era la actitud apropiada a tomar como la prometida de Soleil, pero lo había meditado incluso más allá.

También me había estado diciendo que, sin duda, todo saldría bien una vez que llegáramos a conocer más el uno del otro a medida que pasaramos los días después de casarnos, compartiendo nuestras vidas juntos, gobernando el territorio y finalmente, teniendo hijos.

Había sido amor.

Simplemente amor.

Aquel sentimiento que había albergado desde la infancia y, que se fue incrustando e impregnando a mi corazón como una huella.

Por eso, nunca he querido imaginar que esto podría no funcionar.

Y es así que de esa forma Soleil y yo terminamos casandonos.

♦ ♦ ♦

Yo tenía 18 años de edad, Soleil tenía 20, y Sylvia estaba en los 17.

Me gradué de la escuela alrededor del mismo tiempo que me casé.

Dos años han pasado desde que Soleil y Sylvia se conocieron en aquella fiesta de té.

Y en ese tiempo, Soleil ha estado demasiado ocupado debido a que había sido aceptado como un caballero en toda regla, lo que hacía difícil para él regresar a su territorio.

Eso había nublado mis ojos una vez más.

Nuestra relación no tendría ningún aspecto tormentoso si una persona ajena nos mirara a Soleil y a mí desde el exterior, incluso yo había pensado lo mismo.

No es como si el me tratara con frialdad tampoco. Si fuera a hablar con él, me respondería con gentiles palabras.

Dado que él siempre había actuado adecuadamente como un prometido, no fue una sorpresa que por consiguiente, él actuaría adecuadamente como un marido después de que nos habíamos casado.

Él trató a su esposa como una esposa debe ser tratada.

Si mostraba que estaba cansada, no sólo iba a llamarme con un “¿estás bien?”, Él amablemente me dirá también que tome un pequeño descanso.

Si quería discutir algo con él, él sería considerado. Si yo estaba preocupada por algo, tendría la amabilidad de ofrecerme un consejo.

En medio de los días laboriosos, fui engañada por la bondad que yo alcancé a vislumbrar.

Él había sido un buen marido.

Era como si hubiera estado mostrando una apariencia adecuada como la viva imagen común de un “marido”.

Dos años habían ido y venido de esa manera.

Alrededor de ese tiempo, poco a poco yo empecé a darme cuenta.

Aquellos ojos suyos no tenían pasión en absoluto.

Él había sido un cortés caballero y un gentil marido incluso con sus palabras y actitudes.

Al igual que un “marido ideal”.

Sí, eso es correcto… solo ideal.

¿Desde cuando su forma de pensar; “Si hago esto, mi esposa se comportará” o “Si digo esto, mi esposa se quedará tranquila”, se habían vuelto transparente a mí?

Supongo que fue después de ver la mirada, la actitud y el comportamiento de Soleil hacia mi hermana con mis propios ojos.

Aquello que llamamos familia era realmente molesto.

Incluso si se pudiera medir la distancia, no se puede cortar la conexión.

Esto es especialmente cierto para aquellos que han nacido en la nobleza.

Incluso si fuera sólo en público, llevarse bien era imprescindible.

Después de todo, había una posibilidad de que los rumores sobre problemas familiares, por más pequeños que fueran, lleguen a ser desventajosos para la “familia”

Por eso, hemos hecho un esfuerzo para reunirnos varias veces para tratar de profundizar nuestra amistad después de la primera fiesta de té.

Bueno, sin embargo, la única que realmente tenía que hacer un esfuerzo había sido solamente yo.

Siempre me sentí medio obligada a tomar asiento en la mesa para compensar esa primera fiesta de té que terminó en fracaso.

Así, en la fiesta de té que se organizó, en las inmediaciones de Soleil y Sylvia, quienes fijamente se miraban a los ojos, simplemente los observaba a ambos mientras apretaba mis manos debajo de la mesa.

Me dije que absolutamente no debía cometer un error como la última vez.

Después de todo, antes de que la fiesta del té diera inicio, Soleil me convenció amablemente para tratar gentilmente a mi hermana.

Delante de Soleil, que actuó el papel del marido adecuado, tenía que hacer el papel de la esposa adecuada también.

Si hacía eso, estaba convencida que él dirigiría su mirada hacia mí.

Sin embargo, eso nunca llegó a ocurrir.

Los largos dedos de Soleil entraron en contacto con el fino cabello plateado de mi hermana, que lucía como si fuera a romperse tan solo al ser tocado.

Mi hermana, sonrió como si ella estuviera avergonzada.

Aquellos labios bien formados que parecía como si fueran pétalos de flores, hicieron una descarada, pero gentil sonrisa.

Si yo pudiera cerrar mis ojos, lo habría hecho al instante.

No obstante, esta era una situación que no me permitía hacerlo.

Yo era la esposa de Soleil, después de todo.

“Te agradezco por ser amable con mi hermana”, dije, sin poner una sonrisa forzada.

Si lo hiciera, Soleil podría sonreír con una fría mirada y diría “eso es algo natural” como siempre.

El diría: “Somos familia, así que eso es una cosa obvia a hacer”

Mirándonos con una inocente expresión, mi hermana murmuraba “Onee-sama es realmente afortunada. Tiene un marido muy amable”

Sin embargo, yo sabía que envidia y celos estaban mezclados en esos ojos.

Incluso hoy en día, debido a su frágil cuerpo con el que le sería difícil dar a luz, no tenía un prometido.

Tal vez a sus ojos, yo, su hermana, tenía todo lo que ella no tuvo.

Me pregunto qué es lo que mi hermana pensaba de mí, quien solo podía sonreír y aparentar.

Para otros, quizá yo lucía como alguien bendecida, teniendo el estatus de ser la esposa de un Marqués, el prestigio, la fortuna, e incluso un marido quien se había distinguió como un caballero.

Así es, yo había deseado y obtenido todo eso por mí misma.

Quiero decir, después de todo, me había casado dentro de una “Familia Marqués”

Fui criada tanto como fuera posible para ello.

Por eso, habría sido una tonta si no me hubiera dado cuenta de ello.

Que yo no estaba casada realmente con Soleil.

—Onee-sama es realmente afortunada.

La voz de mi hermana continuó resonando.

—-Y Así, pasaron de esa forma, alrededor de tres años…

Cuando repentinamente, mi hermana murió.

Dado su frágil cuerpo, todo el mundo había asumido que si ella llegaba a morir, podría ser bajo causas naturales.

Sin embargo, la realidad fue otra, ella había sido asesinada durante un robo, asaltada en el camino mientras se dirigía a casa después de ir al teatro para despejar la mente de varias cosas.

Cuando llegó la noticia, Soleil y yo estábamos juntos en la mesa cenando solo nosotros dos.

Yo había sido quien se lo sugirió a Soleil, que rara vez volvía a la mansión debido a su apretada agenda de trabajo.

—Por favor, guarda algo de tiempo para mí de vez en cuando, así podremos compartir una cena nosotros dos —le pedí.

A pesar de que ya han transcurrido tres años, yo no había mostrado signos de haber sido bendecida con un niño, y los continuos ojos alrededor nuestro estaban empezando a crecer implacablemente, así que tal vez Soleil lo había tomado en consideración.

Mirándome fijamente a los ojos, asintió con consentimiento.

Había sido una cena sin mucha conversación.

Pero aun así, me sentía satisfecha.

Saboreaba la alegría de ser capaz de tener una comida, mientras que veía a mi amado.

Sobre el escenario de lo que debería haber sido una comida normal, una oscura sombra descendió.

El mayordomo susurró algo al oído de Soleil.

Yo estaba mirando la situación con atención, preguntándome si era quizá respecto a su trabajo, cuando repentinamente Soleil me miró con una expresión que no había visto hasta ahora.

Había sido una mirada que proyecta una oscuridad que era mucho más profunda que el odio que había expresado hasta este momento, como si hubiese descartado toda emoción, como si me sumiera en un abismo negro.

— ¿Fuiste tú?

Sin saber qué era lo que había sucedido, Soleil me dijo esto.

Arrojando los platillos de la mesa con su mano y poniendo una pálida expresión en mi dirección.

— ¿Tú lo hiciste?

Dijo en voz baja pero en un tono claro.

Incluso si me preguntas eso a mí de repente, no se de lo que me estas hablando.

Incapaz de confirmarlo o negarlo, sólo podía temblar bajo su mirada acusadora. Y entonces, quizás tomando eso como confirmación, Soleil lentamente tomó un cuchillo de la mesa del comedor.

—¡¡¡MI SEÑOR!!!

Si… si en ese momento, el mayordomo no lo hubiera detenido, yo sin duda habría sido asesinada.

Temblando de miedo, me encontraba tirada a los pies de la mesa mientras que mi marido me dijo:

—– Tu mataste a Sylvia.

♥ ❤ ♥

12 respuestas a “Mi prometido ama a mi hermana – Arco 2 – Capítulo 1”

  1. Que bastardo loco, pobre chica su vida si q fue sad… solo queria un poquito de amor y su desgracia se repite para completar nose como lo aguanta tantas vidas

  2. Esperen!! Esto fue los recuerdos de su vida pasada verdad?? o en esta reencarnación termino casandose con el idiota de su prometido?? Sinceramente espero que esto sea el relato de lo que sucedio en su vida anterior.

  3. “Cuando repentinamente, mi hermana murió.” *Shock* no imagine que muriera DD: que se enamore de otro hombre (o mujer xD) ya!

  4. Yo quiero que se quede con el mayordomo o el amigo del imbécil ese. Maldito cretino…el y su hermana. Ellos no merecen nada.

  5. Que hdp, en verdad quiero que está historia tenga un giro en el que no tenga que estar enamorada de ese desgraciado y encuentre a alguien que si la valore 🙁

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