Príncipe Cautivador – Capítulo 59: El agravio del zorro de nieve

Traducido por Akatsuki

Editado por Sakuya


— ¡Príncipe Heredero! —Una voz llegó a los oídos de Shang Wu Xin cuando se preparaba para descansar. Aquella persona parecía estar alegre por algo.

Acostada sobre la cama de color blanco, Shang Wu Xin respondió con una voz débil y cansada: — ¿Qué sucede? —Ella siempre tuvo el sueño ligero, y por eso se despertaba fácilmente. Incluso cuando caía un pequeño objeto a la distancia, se despertaba, lo que a menudo la hacía sentir fatigada.

—Príncipe Heredero, capturé un zorro de nieve en frente de la puerta. Ahora mismo lo tengo aquí para mostrarle. —El Jefe Hai estaba muy alegre por haber capturado un zorro muy extraño. Cómo sabía que el Príncipe Heredero era en realidad una chica, y a las chicas siempre les gustaban las cosas lindas, tan pronto como lo capturó pensó en dárselo como regalo para hacerla sentir feliz.

‘¿Zorro? ¿Nieve?’ Shang Wu Xin recordó que había visto uno en la montaña de la ciudad de Feng Zhou. El pequeño zorro era muy astuto y parecía agradarle mucho, pero recordó que Ye Yi Zhe se lo había llevado con él. Nunca pensó en ver uno otra vez, ya que eran extremadamente raros de ver.

—Adelante. —Respondió Shang Wu Xin.

Mientras ingresaba al dormitorio, el pequeño zorro logró zafarse de las manos del Jefe Hai y salió corriendo en dirección a Shang Wu Xin. El Jefe Hai estaba sorprendido y comenzó a perseguirlo por temor a que llegara asustar al Príncipe Heredero.

Cuando entró en el dormitorio, el Jefe Hai sintió que no podía creer en lo que estaba viendo. El zorro, que era realmente muy escurridizo, estaba recostado sobre la cama blanca de manera desagradable, mientras hacía ruido como si estuviera reclamando algo como suyo.

El Jefe Hai estaba sorprendido, el pequeño zorro era tan sensible y listo como un niño.

—Príncipe Heredero, el… —El Jefe Hai estaba confundido ya que no estaba seguro de si debía deshacerse del zorro o tomarlo y dejarlo en el suelo.

Shang Wu Xin miró al zorro sin expresión alguna. Cuando vio al zorro, Shang Wu Xin se dio cuenta de que Ye Yi Zhe debía de haber llegado a la capital. Por cierto, el pequeño zorro fue tan inteligente que pudo llegar a la Mansión del Príncipe Heredero. Ahora que podía ocultar su género, ella sintió que era necesario encontrarse con Ye Yi Zhe.

[Akatsuki: “Presiento que ocurrirá algo interesante… 🙂 ]

—Puedes retirarte ahora. Este zorro será mi mascota de ahora en adelante. —Dijo Shang Wu Xin. Ya que era posible que sus subordinados intentasen cazar al pequeño zorro. Definitivamente ella estaría en problemas si esto llegase a suceder cuando Ye Yi Zhe fuera a visitarla.

El Jefe Hai estaba algo sorprendido por la respuesta. Era cierto que a las chicas les gustaba las cosas lindas y su Príncipe Heredero no era la excepción, pero no pudo evitar sentir que era increíble que realmente lo conservará. Después de todo, ¿cómo podría la gente creer que una persona atroz como el Príncipe Heredero estuviera interesado en algo tan lindo? Sin embargo, se sintió satisfecho, ya que su Príncipe Heredero finalmente obtuvo un pasatiempo femenino. Realmente estaba preocupado de que Shang Wu Xin se acostumbrara a tratarse como un hombre de verdad.

Cuando el Jefe Hai salió de la recámara, el zorro de nieve estiró las patas traseras e intentó acomodarse sobre la cama blanca. Sin embargo, Shang Wu Xin lo detuvo antes que lograra hacerlo. Con el zorro en el suelo, este la miró amargamente. Shang Wu Xin sabía que este zorro de nieve era muy inteligente, por lo que dijo en un tono serio: —Estás sucio.

El zorro se giró para decirle a Shang Wu Xin que estaba limpio. Además, su maestro lo arrojaba al agua para que se limpiará todos los días, por lo que debería estar más limpio que cualquier otro animal, pero Shang Wu Xin no le prestó atención. Ella ciertamente sabía que estaba limpio e incluso podía oler la fragancia especial de hierbas. ¿Fue porque se había quedado con Ye Yi Zhe mucho tiempo que podía oler así?

Al principio, ella pensó que él no se quedaría con este pequeño, ya que parecía ser indiferente a todo. Pero para su sorpresa, lo cuidó y alimentó muy bien.

En cuanto a Ye Yi Zhe, salvó al zorro solo por su sangre al principio y solo aceptó conservarlo por Shang Wu Xin. Él podía sentir que le gustaba al zorro, y a él(SWX) también.

—Si sigues haciendo ruido, te echaré. —Le advirtió Shang Wu Xin mientras volvía a dormir.

El pequeño zorro abrió ligeramente el hocico e inmediatamente lo cerró al escuchar estas palabras. Al ver a Shang Wu Xin cerrar los ojos, empezó a caminar lentamente hacia ella, parecía no darse cuenta de que se acercaba por lo que el zorro se volvió más intrépido. Tan pronto como tuvo la intención de meterse entre los cálidos brazos que había deseado durante mucho tiempo, Shang Wu Xin abrió los ojos.

Al ver esto, el pequeño zorro cayó al suelo. Cuando se levantó, desvío la mirada hacia cama para encontrar a Shang Wu Xin con los ojos cerrados nuevamente mientras dormía. Por ahora, este pequeño había aprendido la lección y no se atrevería a colarse entre los brazos de Shang Wu Xin una segunda vez. Aunque no se dio cuenta de ello, una sonrisa había aparecido en los labios de este joven príncipe.

Al mismo tiempo, un hombre vestido de blanco, que permanecía en silencio en el tranquilo patio de su casa en la ciudad capital, frunció las cejas cuando descubrió que el pequeño animalito se había escapado, pero una sonrisa apareció en su rostro. Recordó que había pasado mucho tiempo desde que conoció al joven que le dejó una buena impresión, por lo que el animalito debió de ir en su búsqueda.

Ye Yi Zhe guardó todas las hierbas, mientras pensaba en el comportamiento anormal del zorro en los últimos días. Siempre lo miraba y era obvio que quería ir a ver al Príncipe Heredero. No sabía la razón del porqué, pero finalmente lo llevó a la ciudad capital. Desde que llegaron, Ye Yi Zhe se había mantenido ocupado organizando sus hierbas medicinales y tratando sus negocios en la ciudad. Así que no tenía tiempo para visitar al Príncipe Heredero. En contraste, el pequeño zorro parecía estar demasiado impaciente por seguir esperando.

Ye Yi Zhe no se dio cuenta de que fue él quien lo liberó a propósito. Si no, ¿cómo podría un pequeño zorro escapar sin su permiso?

— ¡Zhu! —Dijo Ye Yi Zhe, y un hombre que parecía inteligente ingresó a la habitación. Él no se acercó a Ye Yi Zhe, solamente bajó la cabeza y preguntó: —Maestro, ¿qué puedo hacer por usted?

—Tengo algo que hacer en estos días. Así que quiero que cuides el negocio por mí. —Mientras hablaba, Ye Yi Zhe se mantenía acomodando sus hierbas. Xiao Zhu miró a su maestro con curiosidad, aunque tenía muchas preguntas que hacerle, sabía que no le respondería. Así que solo dejó el lugar en silencio, preguntándose qué le sucedió a su maestro. Ye Yi Zhe usualmente pasaba todo su tiempo en hierbas y negocios, ¿acaso encontró algo más interesante?

El día fue simplemente un día tranquilo para Shang Wu Xin, pero las cosas en la Mansión del Príncipe Mayor eran totalmente diferentes.

Ese día, todos los invitados fueron al patio trasero de la mansión del Príncipe Mayor con la guía del mayordomo. Para su asombro, presenciaron la escena en la que el Príncipe Mayor abusó de la señorita Wan Wan. Ella no era del tipo débil en absoluto, ya que se puso tan furiosa que cortó la cosa más importante del Príncipe Mayor como hombre. Eso significaba que el Príncipe Mayor sería un eunuco a partir de hoy.

Shang Chen Zhao quería insultarla, ¿cómo podría fingir que no sucedió nada?

El Príncipe Mayor no pudo estar más enojado que independientemente de lo que sucediese después, mató a la chica en frente de todos sus invitados. Aunque todos sabían que era arriesgado ver tales cosas, aun así, difundieron la noticia al público. Cuando Shang Wu Xin se despertó al día siguiente, casi todos en la ciudad capital se encontraban discutiendo sobre el hecho de que el Príncipe Mayor abuso de una joven y la mató después de que ella lo privara de su cosa especial en su entrepierna.

Mientras tanto, muchos oficiales escribieron memoriales al trono para acusar al Príncipe Mayor, y el General Leng fue uno de ellos.

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