¡Vamos a romper este compromiso! – Capítulo 105: Incidente repentino

Traducido por Lucy

Editado por Ichigo


Al día siguiente, por la mañana me preparé para el ataque del hermano, pero al contrario de lo que esperaba no estaba armando ningún escándalo. No, eso es inexacto. Se lo pregunté a papá durante el desayuno.

—Me enteré del alboroto de ayer… Siento molestar siempre a Alek, pero le hice venir temprano por la mañana y llevar a Ricardo al trabajo. También quería hablar con Sana a gusto…

Alek… Siendo honesta, muy honesta, lo siento cada vez. Me alivia que mi hermano tenga un ayudante así. Debo agradecerle la próxima vez.

—Así que es así… Entonces, parece que el alboroto ocurrirá por la tarde.

—Bueno, haré algo a esa hora. Por cierto, Sana, ven un rato a mi habitación después de esto. Quiero hablar contigo. Ah, por favor, no pongas esa cara de intranquilidad. En realidad es solo una pequeña charla.

Sana se abstuvo de contestarle a mi padre. El abuelo que la observaba habló.

—Hmm, entonces hablemos juntos.

Diciendo eso, el abuelo y la abuela le sonrieron. Ooh, ¿están preocupados por ella?

—Entonces Lillina. Tomaré prestada a Sana por un rato.

—No pasa nada. Ni papá, ni el abuelo ni la abuela te regañarán. No has hecho nada malo. Siendo sincera, me gustaría acompañarte, pero no puedo. Lo siento —susurré a la ansiosa chica.

Ella sonrió en respuesta.

—Sí, está bien.

Diciendo esto salió de la habitación siguiendo a mi padre. Supongo que será por mi hermano… Me pregunto qué pasará.

Mientras hablaba con él, me mostraron las artes ninjas de Sasuke en el jardín. La razón es que fui invitada por Ange. Parece que lleva mucho tiempo pidiéndole que le enseñe las artes ninja.

Hoy nos está mostrando el arte de la ocultación. Ange, Sasuke, Allen y yo nos reunimos frente a un árbol.

—Entonces, Sasuke, como prometiste, muéstranos.

Ange le preguntó con voz alegre. Por el contrario, él tiene una expresión de que está muy cansado. ¿Está bien?

—Aah, entiendo, solo una vez.

Cuando dijo eso, las hojas secas de repente se arremolinaron en el aire. Y después de un momento, desapareció, para cuando todas cayeron al suelo ya no se le veía por ningún lado.

—¡Kya~~! ¡De verdad desapareció! Asombroso. ¡Eh, Sasuke! ¿Dónde estás?

Ella lo estaba buscando con ojos brillantes. Allen y yo no hablamos, pero nos sorprendió.

—Es muy impresionante. Aunque no tuve la oportunidad de analizarlo, como he pensado, las artes ninja son convenientes. Me pregunto si algún día me las enseñarás…

Parece haber despertado el interés de Allen. Pero, en verdad fue bueno~. 

—¡Oye, Sasuke~!

Parece que no aparece. ¿Podría haberle molestado y haber huido? Cuando empecé a tener esas dudas, oí una voz por detrás.

—Aquí.

En respuesta a esa voz, me giré para verlo allí de pie. Oh, cuando apareció…

Al verlo, Ange se acercó a él corriendo. Se tomó las manos.

—¡Por favor! ¡Enséñame a mí también!

Le imploró. Allen, que lo estaba observando, se acercó también y le pidió que también le enseñara cuando fuera posible.

—De ninguna manera, es problemático. Además, son artes ninja, tú no eres uno. Imposible.

—¡Entonces, me convertiré en ninja!

No, no, Ange, ¿qué pretendes?

—Estúpido.

—¡No es estúpido! Lo he pensado bien. Porque, soy más débil que Allen, no puedo hacer el trabajo de criada como Sana… En ese caso, por el bien de la hermana Lillina pensé que sería bueno convertirme en ninja.

¿Eh? ¿Convertirte en ninja por mi bien? Pero, aunque digas que eres más débil que Allen, sigues siendo muy fuerte para una mujer, y en principio no eras una criada. Creo que ahora mismo tenemos una buena relación como amigas…

—¡Um, umm! Ange, no necesitas convertirte en ninja. Estoy muy feliz de que lo hagas por mi bien, pero puedes quedarte como estás ahora.

Mientras armábamos lío en el jardín, Sebastián se acercó a nosotros.

—Señorita Lilliana, el maestro te ha llamado.

¿Eh? Mi padre me llamó. Me pregunto qué habrá pasado con Sana. Dejé a los tres que seguían peleando y me dirigí a la casa.

Cuando entré en la habitación, no estaba Sana, dentro estaban el abuelo, la abuela, además un hombre cuya cara no reconozco. Esa persona tiene un rostro ceniciento. Además, parecía bastante impaciente.

—Ah, Lilliana. También he llamado a Ricardo hace un momento. Le he informado de que es urgente, así que volverá dentro de un rato. Conde Kukuul, ella es mi hija Lillina. Lilina, él es el conde Kukuul, el padre de la señorita Elise.

Ah, en verdad sus ojos son parecidos… No es eso, ¿por qué está aquí? Además, una cara azul… ¡No puede ser, abuelo! Aunque lo mire con tanto recelo, parece que está pensando algo.

—Lilliana, para dejarlo claro. La señorita Elise fue secuestrada.

¡¡Eh~~!! ¿Por qué?

—Umm, ¿qué quiere decir con que fue secuestrada?

Le pedí a mi padre que resolviera el misterio.

—Um, ummm, padre… ¿por qué Elise fue… secuestrada?

—Hmm. Me he enterado por el Conde Kukuul, al parecer fue secuestrada cuando salió de la ciudad.

Ciudad… ¡Ah! ¿Podría ser, el caso de salir de incógnito?

—Aaah, por qué Elise estaba sola… Como ya había corrido peligro antes, le dije que no saliera sin compañía.

¿Antes, cuando se enamoró de su hermano? 

—Los secuestradores exigen dinero, ¿no? —preguntó el abuelo al conde.

Ante la pregunta, él sacó un papel de su bolsillo.

—Un criado me informó de que Elise había desaparecido, y cuando la estaba buscando me entregaron esta  carta en la mansión.

Se la mostró al abuelo y a mi padre. Los dos la leyeron con una expresión complicada.

—Esto… fue cometido por dinero.

—Sí, tal vez la señorita Elise fue el objetivo desde el principio. Hay una alta posibilidad de que el culpable se diera cuenta de que estaba saliendo a escondidas. De lo contrario sería extraño que hubiera una carta tan pronto después de que ella salió por la mañana.

En efecto, tal vez la hayan visto ir de incógnito a la ciudad. Además sin ningún nadie acompañándola.

—¡Ah! Si hubiera sabido que ese sería el caso le habría dado una escolta. Si le pasa algo, yo…

El conde se agarró la cabeza. Me pregunto dónde estará ahora mismo. No me atrevo a interrumpirles, lo único que puedo hacer es observar el curso de los acontecimientos. Entonces, se oyeron unos golpes en la puerta.

—Es Ricardo. Alek también está aquí.

—Ah, entren.

Al oír las palabras de mi hermano, mi padre les dejó entrar.

—Acabo de volver. Alek dijo que era un asunto urgente, ¿qué pasó?

Él parecía sorprendido de vernos a todos en la habitación. Siguiéndole, Alek entró, con la misma expresión. Por supuesto, no se reflejaba tanto en su cara como en la de mi hermano.

—Por el momento, por favor, no se lo digas a nadie más. La señorita Elise fue secuestrada.

—¡Eh! ¿La señorita Elise?

—Sí. Parece que la atacaron cuando hoy salió sola al pueblo.

Mi padre les explicó. Entonces el conde, que estaba escuchando su charla, se levantó con energía y se acercó a mi hermano.

—¡Por favor! Ricardo, ¡por favor, coopera! Elise, por favor, ayuda a Elise.

—Sí, por supuesto. Padre, ¿nos has llamado a Alek y a mí para movilizar la orden caballeresca?

Él negó con la cabeza en respuesta.

—No, no lo hice. Es todo lo contrario. Esta historia no puede hacerse grande. Si se extiende la historia del secuestro de una hija de la nobleza, invitará a especulaciones innecesarias. Así que debe resolverse rápido con unas pocas personas poderosas. Por esa razón, los llamé a ambos. Por supuesto, Lilliana también cooperará.

Ya veo, para un noble, y mucho más para una noble dama soltera un escándalo así sería fatal. Debemos hacer algo antes de que se convierta en un alboroto.

Escuchando la historia de mi padre, Alek abrió la boca.

—Primer Ministro, siento interrumpir. En realidad, me ha llegado un rumor. No están ocurriendo incidentes… Al menos eso es lo que se dice, pero creo que las partes implicadas solo no los denuncian, así que las habladurías sobre secuestros son solo un rumor. Además, solo se apunta a los hijos de los nobles que salen de incógnito. No se denuncia porque las víctimas son devueltas sanas y salvas. Pero como son secuestros, significa que darán muchos problemas.

¿Eh? ¿Significa eso que los secuestros proliferan? Pero, el criminal solo toma dinero sin armar escándalo, ¿conoce las circunstancias de los nobles? Por lo visto hay gente que usa la cabeza para delitos tan inútiles.

—Pues bien, en primer lugar, el conde entregará el dinero en el lugar designado. Eso ya fue pactado. Después existe la posibilidad de que el criminal no libere a la señorita Elise de inmediato. En ese momento, me gustaría que le hicieran seguimiento…. ¿Podrías pedírselo a ese ninja Sasuke? Si lo hace, creo que la probabilidad de éxito aumentará bastante.

—Ah, sí, le preguntaré a Sasuke.

El abuelo está preguntando por él. En el último tiempo se le pide de todo. ¿Es tan confiable?

—Después de averiguar su escondite, el suegro con Lilliana, Sana y quizás Allen y Ange se irán juntos y castigarán a los criminales. Tengan cuidado de no apuñalarlos hasta la muerte. Si actúan con violencia, Ricardo y Alek se desplazarán como representantes de la orden caballeresca para arrestarlos. Atacar sin parar a los hijos de los nobles es demasiado sospechoso. Por supuesto, rescatar a la señorita Elise tiene prioridad. Rescátenla sin falta.

Tras escuchar la explicación de mi padre, todos empezaron a desempeñar sus respectivos papeles. Yo también salí de la habitación para buscar a Sana, Allen y Ange.

Llegué al patio buscando a todos. Los tres parecían seguir discutiendo.

—Por eso, es imposible.

—¡No es por eso que te pregunto si puedes hacer algo al respecto! Sin dudas lo aprenderé de memoria.

Por lo que parecía las historias de Sasuke y Ange trazan líneas paralelas. Allen está observando su intercambio. Los llamé.

—Todos, ¿están bien?

Los tres se giraron en la dirección de mi voz.

—¡Ah, hermana Lillina! ¿Podrías preguntarle tú también? Sasuke me está diciendo que es imposible.

—Es imposible. Ninja, artes, se enseñan en el País del Este, imposible.

En efecto, las artes ninjas solo se enseñan en el País del Este. Me pregunto si es imposible aquí. Pero ahora no es el momento para esto. Porque sus habilidades son necesarias.

—Hablemos de eso más tarde. Hay algo más serio que sucedió…

Expliqué la historia hasta ahora. Todos tenían una expresión complicada después de escucharlo.

—Por eso, Sasuke, me gustaría preguntarte. También es una petición del abuelo, queremos que sigas en secreto al criminal después de la entrega del dinero.

—Entendido. Solo seguirlo, ¿verdad?

—Sí, por favor encárgate de ello.

Mientras hablaba con él, el abuelo y Sana llegaron juntos al jardín. Los ojos de ella están un poco rojos. ¿Eh? ¿Ha llorado un poco? Cuando intenté hablarle, el abuelo me interrumpió.

—Lillina, ¿les explicaste a todos?

—Sí. Sasuke también estuvo de acuerdo.

—Ya veo. Sasuke, por favor, hazlo lo mejor que puedas.

—Ah, entendido.

—Bien, entonces vamos. Sasuke, sigue al Conde Kukuul. Aunque no creo que haga falta decirlo, no te dejes descubrir por el culpable. Y yo junto con el grupo de Lilliana esperaremos cerca del lugar de entrega del dinero. En cuanto reciba un informe de Sasuke, entraremos en su escondite. Por cierto, Ricardo y Alek actuarán por separado. Representarán a la orden caballeresca.

Asentimos a su explicación. Aunque estoy preocupada por Sana, la seguridad de Elise es lo primero.

Nos movimos para escondernos cerca del lugar de entrega del dinero. Mi hermano y Alek están a la espera a poca distancia. Y Sasuke fue tras el Conde Kukuul y partió hacia el lugar de la entrega.

El lugar es el parque de la ciudad, en concreto es una llamativa fuente en medio de una plaza. En la historia que escuchó de Alek, los rumores dicen que el lugar de entrega del dinero siempre es así de prominente. Además, la persona que recibió el dinero fue ordenada por el autor, parece que no son compañeros directos.

De todos modos, si tal cosa continúa puede conducir a una aparición a gran escala de demonios en nuestro territorio. Debemos detenerlo aquí, para que tal cosa no suceda.

Se vería poco natural si esperamos en el parque, así que decidimos ir a un café cercano. Parece que Ange y Allen lo visitaban a menudo. Nunca he estado en una tienda así, todo me parece nuevo. Pensé que sería extraño no pedir nada, así que cada uno pidió una bebida. Esperamos el contacto de Sasuke.

Sentí que estábamos esperando hace mucho tiempo, pero solo fue alrededor de media hora. Sasuke apareció en la tienda.

—Los he hecho esperar. Los encontré. ¿Vamos?

—Ah, buen trabajo. ¿Qué tal? ¿Está cerca?

Él respondió a la pregunta del abuelo.

—De hecho, sí. La chica secuestrada está a salvo, por ahora. Pero, después de todo, no la liberaron de inmediato. El conde regresó.

Ya veo, después de todo no la soltaron después de recibir el dinero. Pero, hasta ahora las víctimas eran liberadas con seguridad siempre y cuando se pagara el rescate.

—Bien, entonces Sasuke, muéstranos el lugar.

—Entendido.

Decidimos dirigirnos al escondite de los criminales de inmediato. Como dijo Sasuke, no está muy lejos. La ubicación… ¿es aquí?

Volvimos la mirada hacia él para confirmarlo. Él, que lo siguió, asintió en silencio. Entonces, no hay duda.

El lugar donde nos guiaron sin duda tiene una atmósfera de residencia de un noble. O más bien, es la mansión de uno, ¿no? ¿Eh? ¿El culpable es un noble?

—Sasuke, ¿confirmaste que la señorita Elise está allí?

—Lo hice. Miré dentro, desde el techo.

Este es de verdad el escondite de los criminales. Sin embargo, sería difícil apuntar solo a los hijos de nobles. Si son liderados por uno, es un asunto diferente.

—Abuelo… ¿qué vas a hacer?

—Hmm, veamos. Sasuke, ¿dónde está retenida la señorita Elise?

—En la parte de atrás, en el segundo piso. Vi más o menos ocho personas, haciendo guardia.

En la parte trasera del segundo piso… ¿Se quedarán allí si nos apresuramos a entrar? Estábamos tratando de revisar nuestro plan para la situación en la que el escondite era la mansión de un noble.

Mientras considerábamos nuestras próximas acciones, el abuelo abrió la boca como si recordara algo.

—Si la memoria no me falla, este lugar debería ser la residencia del marqués Varshava. Sin embargo, él estaba desahuciado en el momento de la revuelta, su hijo debería haberle sucedido… Parece que no ha reflexionado sobre esa situación.

El abuelo lo dijo con expresión asombrada. La revuelta anterior fue causada por el padre de Allen y Ange, un duque. En realidad, en aquella época, otras casas que cometieron fechorías también deberían haber sido castigadas, así que ésta es una de ellas.

—Pero aunque estuvieran involucrados en la revuelta, es difícil entrar con brusquedad en la mansión. Si nos ocultan a Elise solo estaremos invadiendo.

Cuando el abuelo y yo estábamos reflexionando sobre ello, Sasuke dijo algo en voz alta.

—¿Eh? ¿Sasuke? ¿Has dicho algo?

—Ah. Una entrada secreta, ¿vamos a usarla?

¿Eh? ¿Una entrada secreta? ¿Existe algo así? Entonces el abuelo le preguntó de inmediato.

—Sasuke, ¿conoces la entrada secreta a esta mansión?

—Ah. Porque el culpable la usó. Desde allí, me colé en el techo de la mansión.

Entonces, dilo desde el principio… ¿Se comunicó tal pensamiento nuestro? Sasuke mostró cara de preocupación.

—De alguna manera, lo siento. No me lo pidieron, así que pensé que podríamos entrar.

Bueno, no sería un problema si se tratara de cualquier otro secuestro reciente, pero esta vez es diferente. No es como si siempre fuéramos a irrumpir.

—Entonces Sasuke, muéstranos el camino.

Él, por el pedido del abuelo, guió el camino hacia la parte trasera de la mansión. El lugar del que nos habló era un supuesto callejón sin salida rodeado de muros de piedra.

—Es un callejón sin salida.

—Sin duda es uno.

Cuando lo miramos, empezó a empujar una parte del muro de piedra. Parecía que no estaba poniendo mucha fuerza, pero la piedra se movió revelando una cavidad.

—En verdad, es una entrada secreta. Por cierto Sasuke, ¿a dónde se conecta?

—A una habitación sin usar, dentro de la mansión.

—¿Cuál es la distancia?

—Si nos damos prisa, alrededor de un minuto.

Es problemático encontrar a los perpetradores, pero en cualquier caso, debemos invadir. Si no los sofocamos ahora, continuará durante mucho tiempo. Y lo más importante, no puedo perdonar en absoluto a los criminales que hicieron que Elise viviera una situación tan aterradora.

—Bien, entonces entremos corriendo en la mansión. Sasuke, estarás en la vanguardia, Allen, te dejo la retaguardia a ti. De todos modos, nuestra prioridad es rescatar a la señorita Elise. Por supuesto, también aplastaremos a los criminales, pero garantizar su seguridad es lo más importante. En principio, las víctimas son liberadas si se paga el rescate, pero a este paso seguirán haciéndolo sin cesar. Vamos a detenerlos ahora.

En respuesta a las palabras del abuelo, Sasuke entró primero. Luego él, yo, Sana, Ange y Allen le seguimos.

Sasuke dijo que era una entrada secreta, pero parece que se usa bastante a menudo. No hay telarañas, el aire tampoco está mal. Nos apresuramos a seguir adelante con vigilancia. Como dijo Sasuke, en un minuto llegamos a un callejón sin salida. Y cuando él movió algo con un crujido, se hizo más brillante.

Parece una chimenea sin salida. Hablamos de pasadizos secretos, ¿es una chimenea otra vez?

Por el momento, hemos tenido éxito en entrar en la mansión. Seguro no pensaron que alguien vendría por aquí, ¿está bien haberlo logrado tan fácill?

—Sasuke, ¿está cerca la habitación donde está retenida la señorita Elise?

—Cuando salimos, la habitación está a la izquierda al final del pasillo.

—¿Subiste al techo desde aquí y viste esa habitación?

—Mira, allá arriba. Quité esa tabla y trepé.

Mirando en la dirección que Sasuke señaló, una esquina del techo está un poco desprendida. Es fácil de quitar…

—Entonces, lo siento Sasuke, pero por favor confirma la situación actual. Si el criminal no está cerca de la señorita Elise, entraremos de inmediato.

—Entendido.

Diciendo esto, él saltó y se subió al techo. Ange le miró fijo. En sus ojos refleja un deseo absoluto de aprender. Cuando acabe este alboroto, me pregunto si volverá a discutir por ello.

—Esta vez Sasuke nos ha salvado.

—Tienes razón. En el peor de los casos pensé en llamar a Hanzou.

Eh, ¿Hanzou? Un nombre nostálgico, que no he escuchado desde hace bastante tiempo, surgió. Mientras el abuelo y yo hablábamos, la frustrada Ange murmuró.

—Lo haré, me convertiré en una espléndida ninja. Demostraré que soy más útil para la hermana Lillina que Sasuke. Debería capturarlo cuando regrese…

Ah, Sasuke, haz lo mejor que puedas huyendo. Los ojos de Ange son los que apuntan a una presa. Recé por su seguridad.

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