¡Vamos a romper este compromiso! – Capítulo 79: El País Occidental

Traducido por Schröedinger

Editado por Ayanami


El carruaje avanzó de manera constante sin que tuviésemos mucha interacción con Sasuke. Tengo curiosidad sobre su razón, pero cuando le hablo, la conversación no dura.

Señor Hanzou, tu forma de entrenar discípulos es incorrecta.

¿O un ninja debería permanecer en silencio?

Finalmente, llegamos al País Occidental.

Aunque todavía estamos cerca de la frontera, como se esperaba de un gran país, el camino está pavimentado y el carruaje se mueve suavemente. Los caminos irregulares son malos para tu trasero. Hasta ahora, las carreteras en un excesivo mal estado hacen que asuma una postura extraña.

Al ver mi terrible apariencia, el rostro de Sasuke se relajó un poco. Solo ríete si quieres. Pero la risa, desesperadamente sofocante, del joven Allen y la señorita Ange era simplemente demasiado impactantes.

♦ ♦ ♦

Decidimos quedarnos en una posada por esta noche. La primera posada que visitamos en este viaje no parece ser para nobles. Bueno, la verdad es que eso me tranquiliza.

Mientras cenaba en la posada, le pregunté al abuelo sobre el futuro.

—Abuelo, ¿Nos dirigimos a la capital real del País Occidental?

—Ah, ese es el plan. Estoy planeando presentar a Lillina al rey del País Occidental, así como informar sobre el asunto de los demonios.

Um, algo parece raro. Si tuviera que decir qué, es mi presentación. Podría haberme preguntado por qué el abuelo puede conocer al rey del País Occidental directamente, pero ahora que conozco la causa detrás de los demonios, lo entiendo.

Tal vez, el abuelo tenga un apodo genial aquí como el que el señor Hanzou lo llamó.

Sin embargo, después de la cena solo quiero irme a dormir… Habiendo regresado a nuestra habitación, me espera una divertida charla de chicas.

Esta vez, la asignación de las habitaciones son mi abuelo y abuela juntos, yo estoy en la habitación con Sana y la señorita Ange, y ​​a un abatido joven Allen le tocó estar con Sasuke.

¿Esos últimos dos están bien?

Bueno, me pregunto si está bien irse a la cama… No lo está, ¿verdad?

—¡Entonces, Sana! ¿Cómo es estar con el joven maestro Ricardo?

Por alguna razón, la señorita Ange está interrogando a Sana. Además, el contenido es bastante delicado.

—…Nada particularmente llamativo, no está mejorando.

Sana respondió con una expresión preocupada.

—¡Eeeh~~! Pero Sana siempre está en la mente del joven maestro Ricardo ¿No es así?

Se podría decir que le importa, pero es solo su instinto. Mi hermano no es, en absoluto, consciente de sus sentimientos por Sana. Será aterrador cuando se dé cuenta.

—Señorita Ange, mi hermano mayor está actuando inconscientemente con respecto a Sana. Se mueve de acuerdo con sus instintos. Sana, siento lo de mi hermano mayor.

Sana, honestamente, lo siento. Cuando seas capturada por mi hermano en el futuro, ¡Te apoyaré!

—No es consciente de su comportamiento… In…increíble, ¿No?

La señorita Ange también está sorprendida.

¿No se ha dado cuenta?

—Ah, es cierto, señorita Lillina. Hay algo que he estado pensando en decir…

—¿De verdad? ¿Qué podría ser? Señorita Ange.

—¡Sí, eso! Por favor, deje de dirigirse a mí con ‘señorita’. Si es posible, me alegraría que se dirigiera a mí sin un honorífico.

—¿Sin un honorífico? Pero…

—Es injusto que solo hagas eso con Allen. También me gustaría que la señorita Lillina me llamara Ange. ¿No está bien?

La señorita Ange apeló con ojos llorosos. Umm, hacerlo solo con Joven Allen es injusto… Bueno, ¿Está bien dejar el honorífico?

—Entiendo. A partir de ahora te llamaré Ange.

—¡Yay, yaay! Wow ~~ ¡Estoy tan feliz! Gracias, señorita Lillina.

Señorita Ange… Estoy sonriendo feliz. Aprovechando el impulso, la señorita Ange me hizo una pregunta delicada.

—Umm ~, ¿Qué piensa la señorita Lillina de Allen?

¿El joven Allen?

Hmm, eso es difícil ~

Si me preguntas si me gusta o no me gusta, me agrada. Pero creo que sería diferente si estuviéramos hablando de matrimonio. Sin embargo, puedo confiarle mi espalda.

—Confío en Allen.

Parece que mi respuesta no fue del agrado de Ange. Al decir —¿Es así…? —Evidentemente, está abatida.

Qué extraño, el decir que confío en él debería ser el mayor cumplido.

Por cierto, Ange hizo muchas preguntas, pero me pregunto, ¿Qué pasa con Ange?

—Oye, Ange. ¿No hay alguien que te interese?

A mi pregunta, Ange inclinó la cabeza.

—Hmmm… Ah, honestamente, hay una persona por la que tengo curiosidad. Sin embargo, me interesa más como persona que en un sentido romántico.

—Ara, me pregunto quién es.

—Es el ninja.

¿Te refieres a Sasuke?

Bueno, estoy de acuerdo contigo.

—¿Estás interesada en Sasuke?

—No. Tengo curiosidad por los ninjas. No un individuo, sino la propia organización.

Ya veo.

Entonces, tienes curiosidad por los seres llamados ninja.

Pero, parece poco probable que Sasuke nos enseñe algo.

Para empezar, ni siquiera charla con nosotros.

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