Categoría: Al borde de lo impresionante

La atmósfera en el estudio era tan densa que se sentía sofocante.

Nadie habló. Todo lo que existía era el sonido de la respiración.

—Espero que cumplas tu promesa. —Claire dijo indiferente y fríamente. Seguí leyendo “Al borde de lo impresionante – Capítulo 10: El valioso pergamino de teletransporte espacial”

Claire miró fríamente a la temblorosa Lashia debajo de ella, cuyos ojos estaban llenos de miedo. Se ahogaba cada vez más.

Sí, la actual Claire podría matar a Lashia, quien tenía la intención de matarla. ¡Ya no era simplemente intencional! ¡Ella era tan mimada, no entendía lo que era salirse de los límites! Seguí leyendo “Al borde de lo impresionante – Capítulo 9: Siempre Protegiendo”

Mientras Lashia cantaba furiosamente, dos personas miraban tranquilamente desde lo más profundo del bosque. Digna de su nombre, Lashia el genio, la onda mágica era muy fuerte. Los dos se miraron, alzando las cejas. Estaban seguros de averiguar ahora lo que le había sucedido a la loca por los hombres Claire. Seguí leyendo “Al borde de lo impresionante – Capítulo 8: La lucha de las hermanas”

Claire no tenía clases por la tarde, así que caminó alrededor del pacífico campus. Pensó primero en visitar la biblioteca.

—Disculpa, ¿cuál es el camino a la biblioteca? —preguntó Claire a un chico al azar que pasaba por allí. Seguí leyendo “Al borde de lo impresionante – Capítulo 7: Llegar al infierno fuera de la escuela”

Al caer la noche, el castillo del duque seguía brillando, y no era sólo el duque. Todas las casas de las familias ricas de la capital tenían sus casas iluminadas por la noche, sólo los plebeyos que no podían permitirse velas vivían en la oscuridad. Seguí leyendo “Al borde de lo impresionante – Capítulo 6: Dudas, Averiguando”

Jean, que esperaba pacientemente fuera de la puerta, oyó el sonido anormal, pero no se apresuró a entrar. No hubo intención de matar o atacantes ocultos. El mago en el interior servía a la familia Hill, así que era leal. Era normal que los magos hicieran sonidos extraños. Seguí leyendo “Al borde de lo impresionante – Capítulo 5: Horóscopo ilegible”

¿Ella no me verá? ¿¿¿No tiene tiempo???

El cerebro de Nancy casi dejó de funcionar. Se quedó mirando a la criada, y ella le devolvió la mirada sin decir nada con timidez. Los criados no se atreven a decir una mentira. Entonces, ¿significaba que la cabeza hueca que está loca por los hombres realmente dijo eso? ¿Por qué? ¿Cómo era posible? Seguí leyendo “Al borde de lo impresionante – Capítulo 4: Un poder espiritual aterrador”

A partir de este momento, la vida de Claire cambió para siempre.

Gordan contrató al primer discípulo del erudito más prominente en la capital para Claire, el legendario joven estudiante que superó incluso a su maestro – Camille. Un caballero joven y guapo con el pelo rubio brillante y suaves ojos azules.
Seguí leyendo “Al borde de lo impresionante – Capítulo 3: No hay tiempo”

Claire… la chica en la cama, murmuró en voz baja ese nombre. El nombre de la persona sonaba lindo, pero nadie podía soportar su actitud. Sus recuerdos estaban llenos de ser rechazada por hombres guapos y viéndose tonta. Seguí leyendo “Al borde de lo impresionante – Capítulo 2: La Nobleza”

—¡Nancy, espérame! —Una linda muchacha rubia llamaba infantilmente, recogiendo su falda debajo de ella.

El mero sonido de su voz da a uno, una piel de gallina. Ella se precipita hacia adelante, corriendo tras una figura desaparecida. La figura era alta y delgada, con un largo y fluido cabello marrón, que podía capturar el corazón. Él no dio ningún indicio de detenerse o mirar hacia atrás. Aunque su decisión estaba perfectamente clara, la chica detrás de él continuó persiguiéndolo. Seguí leyendo “Al borde de lo impresionante – Capítulo 1: Joven cazadora de hombres hermosos”

—¡De prisa!

—Gordo estúpido, date prisa. Si no vas ahora, esa persona maléfica despertará y volverá al cielo y no tendremos suerte.

—Eso es, eres lento. Date prisa.

Con suelos de jade blanco y pilares de topacio, el magnífico Palacio del Cielo estaba lleno de caos. Todos los dioses estaban frenéticos, todos urgiendo a un inmortal gordo. Seguí leyendo “Al borde de lo impresionante – Prólogo”