Traducido por Selena
Editado por Ayanami
Han Yunxi salió de sus habitaciones enfadada y regresó al Pabellón de la Nube Tranquila, evitando, por los pelos, chocar con Zhao mama que había salido.
—Estimada wangfei, tú… ¿qué te ha pasado? —Dijo Zhao mama preocupada. Por supuesto, ella sabía que la estimada wangfei acababa de salir de los aposentos de Su Alteza.
Han Yunxi tenía el estómago lleno de ira y empezó a subir las escaleras sin decir una palabra, pero Zhao mama la retuvo. —¡Estimada wangfei, hay una carta para ti!
Han Yunxi se detuvo.
¿Una carta?
¿Quién le escribiría cartas? En este mundo, no parecía tener ningún amigo por correspondencia.
—Estimada wangfei, ¿qué amigo tuyo escribió la carta? —Preguntó Zhao mama con curiosidad. Era un niño pequeño el que había entregado la carta, que había sido dirigida para ser abierta personalmente por Qin Wangfei. No había nada más escrito en el sobre.
Zhao mama era una anciana extremadamente curiosa, pero no tenía el valor de abrir el sobre por sí misma. Al ver esta curiosidad, Han Yunxi se limitó a arrebatarle la carta antes de seguir subiendo las escaleras sin decir nada.
¿Quién había escrito la carta?
Han Yunxi también estaba llena de curiosidad. Sin embargo, en cuanto abrió el sobre, descubrió que se trataba de Gu Beiyue. Había quedado de juntarse con ella mañana en la Casa de Té Fragancia Tierna[1].
¡Ese tipo ya debería haber dejado el palacio!
Con su personalidad, definitivamente usaría este método para reunirse con ella si no pudiese pedirlo directamente. ¿Pero qué clase de asunto privado tenía con ella? Bueno, probablemente lo averiguaría mañana. Han Yunxi no reflexionó sobre ello, sino que se dirigió hacia la ventana para contemplar las luces de los aposentos de Long Feiye, sintiéndose un poco sofocada.
Este odioso Long Feiye, ¿por qué se comportaba con tanta ferocidad? Ella le había esperado durante tres días, sólo para encontrarse con su temperamento. Él fue quien se lo prometió en primer lugar, así que ¿no podía hacer algunas preguntas para saber qué estaba pasando? Era cierto que la Familia Han estaba perfectamente bien ahora. En el mejor de los casos, él seguiría protegiéndolos. Si no, volvería a ser igual de feroz.
Han Yunxi estaba condenada a una noche de insomnio.
♦ ♦ ♦
A la mañana siguiente, se levantó en cuanto amaneció para sentarse en los jardines y preparar su té. No tardó en ver a Long Feiye preparándose para salir.
Tosió un poco a propósito. Long Feiye detuvo sus pasos para mirarla.
—Su Alteza, ¿viene a tomar una taza de té? —Preguntó con calma, como si nada de la infelicidad de la noche anterior hubiera ocurrido.
Long Feiye ni siquiera pensó antes de negarse. —No hace falta.
Después, se puso la capa y se apresuró a salir, como si tuviera asuntos urgentes. Han Yunxi mantuvo su expresión despreocupada hasta que él desapareció, tras lo cual sus ojos se entrecerraron. ¡Este tipo! Incluso había cedido un paso por iniciativa propia, así que ¿qué más quería? ¿No podía sentarse a hablar con ella como es debido por una vez? Si realmente hubiera dificultades con la Familia Han, ella podría entenderlo e incluso ayudarle a pensar en soluciones, ¿no?
Incluso estaba al tanto del asunto de los espías ocultos, así que ¿qué más tenía que ocultarle? ¿Se estaba apresurando a salir por asuntos de espías otra vez?
Han Yunxi tenía una mentalidad fuerte. Calculaba que sólo Long Feiye podía enfadarla hasta tal punto. Justo en medio de su mal humor, Chu Xifeng pasó por allí. Han Yunxi lo llamó inmediatamente. —Chu Xifeng, ven aquí.
Chu Xifeng llegó al instante a su lado. —Estimada wangfei, ¿cuáles son sus órdenes?
—¿Ha estado Su Alteza en el Recinto Solitario o en el palacio estos días? En cuanto al caso de los espías, ¿cómo va su progreso? —Preguntó Han Yunxi con seriedad.
Estas preguntas pusieron a Chu Xifeng en una posición difícil. Aunque era el guardia personal de Su Alteza, no tenía claros todos sus asuntos. Aunque lo estuviera, ¡no podía revelarlos libremente! Como subordinado, uno de sus deberes más importantes era mantener silencio.
—Para responder a la estimada wangfei, su subordinado no lo sabe con claridad, —respondió Chu Xifeng con la misma seriedad.
—¿Todavía está interrogando a los prisioneros en el Recinto Solitario? ¿También han interrogado a Han Ruoxue? No creo que supiera algo del envenenamiento, —volvió a preguntar Han Yunxi.
—Estimada wangfei, tu subordinado realmente no lo sabe. ¿Qué tal si le preguntas de nuevo al duque cuando regrese? Tu subordinado todavía tiene que…
Chu Xifeng se estaba escabullendo cuando Han Yunxi interrumpió perezosamente. —¿Su Alteza podría haber ido a informar? Tenía pensado ir a palacio, podría echar un vistazo.
Chu Xifeng se detuvo, con el rostro un poco nervioso. —Estimada wangfei, Su Alteza no estará en el palacio hoy. Será mejor que no vayas.
—¿Así que está en el Recinto Solitario? —Continuó preguntando Han Yunxi.
Chu Xifeng evitó su mirada mientras pensaba rápidamente en una excusa. —Estimada wangfei, hoy es la fecha límite para la apuesta. ¿No te preocupa la situación de la finca del general?
¿Acaso era necesario recordárselo? Por supuesto que Han Yunxi era consciente de la fecha.
—Todavía no has respondido a mi pregunta —insistió Han Yunxi.
—¡Estimada wangfei, su subordinado realmente no sabe nada! —Chu Xifeng no pudo resistir más y desapareció antes de terminar de hablar.
Por supuesto, Han Yunxi sabía que Chu Xifeng era muy reservado, pero no era como si le estuviera pidiendo información de alto secreto. ¿De verdad tenía que ocultar las cosas? Han Yunxi no podía evitar sentir que algo no encajaba, pero no entendía qué.
♦ ♦ ♦
Después del desayuno, descansó un rato, antes de salir de la casa. Cuando pasó por la finca del general, vio una multitud llena de gente junto a las puertas delanteras en medio de chismes y excitación. Esas mismas puertas estaban bien cerradas. Incluso la puerta lateral, utilizada para salir de la propiedad, estaba cerrada.
Han Yunxi aspiró con frialdad. Aunque esperaba que Mu Liuyue fuera el centro de atención, ¡nunca pensó que las cosas fueran a estallar hasta este punto! Sin embargo, cuando lo pensó mejor, se dio cuenta de que, con el carácter malcriado y arrogante de Mu Liuyue, probablemente, había ofendido a muchas personas. Muchos de ellos, probablemente, querrían ver su caída y aprovecharían esta oportunidad para hundirla más en el pozo con piedras. Después de todo ese drama, todos se habían reunido en la puerta de su casa. ¿Mu Liuyue saldría? ¿Realmente el general protegería a Mu Liuyue de esta manera?
♦ ♦ ♦
Han Yunxi se anticipaba a los resultados, pero, al final, decidió marcharse primero. No se dio cuenta de que una silla de manos se había detenido entre la multitud, en la que se encontraba, nada menos, que la princesa Changping de incógnito.
Una vez que la princesa Changping recibió la carta de Mu Liuyue, se apresuró a regresar a la capital. Desgraciadamente, estaba demasiado lejos y sólo consiguió volver ahora. Había planeado tratar a Han Yunxi junto con Mu Liuyue, pero ¡quién iba a saber que Mu Liuyue había perdido! Ahora mismo, estaba levantando las cortinas de su ventana para observar el bullicio con una expresión indefinida. Ella y Mu Liuyue habían sido compañeras de juego desde que eran niñas y podían considerarse mejores amigas. ¿Cómo podía permitir que Mu Liuyue fuera intimidada así? Además, su acosadora no era otra que la despreciable Han Yunxi.
—Princesa, la señorita Liuyue es tan lamentable. La señora Li es de la familia Han, ¡así que Han Yunxi debe haberlo sabido todo desde hace tiempo! Por eso incitó a la señorita Liuyue a propósito para apostar —dijo en voz baja su sirviente Shuang Hong[2]. Ella había recibido un sinfín de cosas buenas de Mu Liuyue, así que, por supuesto, tenía que hablar bien por ella.
—¡Eh, Liuyue, esa idiota ha calculado mal! No sé cómo han investigado este caso los tribunales de justicia, pero tal y como lo ve esta princesa, ¡Han Yunxi y la Familia Han son todos sospechosos! —Dijo enfadada la Princesa Changping.
Shuang Hong se alegró y añadió: —Princesa, hoy es la fecha límite de la apuesta. Si Qin WangFei es sospechosa, entonces podemos posponerla, ¿verdad?
Sus palabras iluminaron a la princesa Changping, quien le ordenó a la silla de manos que diera la vuelta y se apresurara a ir a palacio. Pediría ver a la Madre Imperial. Si eso no funcionaba, buscaría al Padre Imperial directamente y le contaría la situación. Tal vez, aún hay esperanza. La princesa Changping se apresuró a volver a palacio y se dirigió directamente donde la emperatriz.
—Muhou, tienes que ayudar a Liuyue. Además, si Han Yunxi es realmente sospechosa, ¡no podemos dejarla escapar tan fácilmente! ¡Esta es una buena oportunidad! ¡Muhou, esta es nuestra oportunidad de buscar venganza! ¿Estás escuchando?
La Princesa Changping realmente había sido malcriada. Tiró de las mangas de la emperatriz sin ningún sentido del decoro.
—¡Basta ya! Ella es la salvadora de tu hermano mayor —dijo la emperatriz con disgusto. Por supuesto, la princesa Changping también lo sabía. Sin embargo, no se lo tomaría a pecho en absoluto. A sus ojos, Han Yunxi debería sentirse honrada por haber salvado a su hermano mayor. Después de todo, él iba a ser el futuro emperador de Tianning.
—Madre, no la estás tratando realmente como tu benefactora, ¿verdad?
Si Han Yunxi podía ser utilizada por la emperatriz viuda, por supuesto que ésta la trataría como su benefactora. Pero Han Yunxi había ignorado la rama de olivo que la emperatriz viuda le lanzó la última vez. Ahora mismo, la emperatriz viuda seguía en un estado de «espera y observa», por lo que no era conveniente que la emperatriz hiciera un movimiento.
La princesa Changping no era de las que podían guardar un secreto. Dado que la emperatriz viuda estaba intentando ganarse a Han Yunxi de forma encubierta, la emperatriz no le contaría estos detalles.
—Changping, el harén imperial no se involucra en la política. El caso de Madame Li es algo que ni tú ni yo podemos censurar, así que no te metas. En cuanto a Mu Liuyue, esta chica es sólo una fuente de problemas. No te relaciones con ella tan a menudo —advirtió la emperatriz. La princesa Changping no aceptó en absoluto estas palabras. Dio un pisotón y salió corriendo. Iría a buscar a su padre imperial.
Pero el eunuco Xue la detuvo en cuanto llegó al estudio imperial. —Princesa, Su Majestad está recibiendo invitados en este momento. Si tiene algún asunto, por favor venga otro día.
—¡Será demasiado tarde si es un día diferente! ¡Hazte a un lado! —Incluso el príncipe heredero tenía que respetar a este Eunuco Xue, pero la Princesa Changping actuó de forma totalmente agresiva contra él.
El Eunuco Xue estaba acostumbrado a esto, pero aun así la contuvo. —Princesa, son invitados de Zhou Occidental… —bajó la voz y continuó… —el Príncipe Heredero Ye de Zhou Occidental.
La Princesa Changping se sobresaltó y soltó: —¿Ha venido también su hermana menor? ¿Es por motivos de matrimonio?
Tianning y Zhou Occidental eran aliados por matrimonio. Las dinastías sucesivas siempre tenían relaciones por matrimonio, aunque en el pasado siempre eran las princesas de Tianning las que se casaban con los príncipes de Zhou Occidental. La Princesa Changping había oído que esta vez, la Princesa Rongle[3], Duanmu Yao de Zhou Occidental tenía en mente visitar Tianning con el propósito de casarse, aunque no estaba claro a quién elegiría.
La princesa Rongle era una persona extraordinaria. De noble cuna, era la hija de la emperatriz de Zhou Occidental y la hermana menor del príncipe heredero. Además, era hermosa como una flor y hábil tanto con el pincel como con la espada, la única mujer con tanto talento en todo el Continente del Reino de las Nubes.
En la corte, había dos conjeturas sobre su destino. Algunos predijeron que la princesa Rongle se casaría con el príncipe heredero Long Tianmo y se convertiría en la emperatriz del país de Tianning. Otros especulaban que la princesa Rongle se casaría con su compañero de secta Long Feiye, estableciendo dos consortes de oriente y occidente en el estado del duque de Qin. No importaba a quién eligiera, sólo promovería las relaciones y la cooperación entre Zhou Occidental y Tianning.
Por supuesto, la Princesa Changping prefería personalmente que Duanmu Yao se casara con su tío imperial Qin. Así los días de Han Yunxi serían más difíciles. ¡Habría que tener agallas para ser una Qin Wangfei al lado de una mujer con tales logros!
—La Princesa Rongle también vino. El Duque de Qin debe estar acompañándola en este momento. En cuanto a si esta visita implicaba conversaciones matrimoniales, este viejo sirviente no lo tiene claro —sonrió el eunuco Xue.
—¿El tío imperial Qin está con ella? —La princesa Changping se sorprendió. Desde que era joven, nunca había oído que el Tío Imperial Qin pasara tiempo con ninguna mujer.
El eunuco Xue asintió misteriosamente. Él también se había sorprendido. Ayer, el Duque de Qin había pasado todo el día con el emperador a puerta cerrada para discutir el caso de Madame Li. En cuanto a los detalles, no lo tenía claro.
Inesperadamente, cuando la princesa Rongle vino a saludar hoy, el duque de Qin se la había llevado. A sus ojos, ¡había esperanzas de una unión entre el Duque de Qin y la Princesa Rongle!
[1]Tender Fragrance Teahouse (茗香茶楼) – mingxiang chalou, en el que Ming se refiere a <hojas de té tiernas>
[2]Shuang Hong (霜红) – su nombre significa literalmente <escarcha roja>
[3]Princesa Rongle (荣乐公主) – Rongle significa <próspera/floreciente/gloriosa alegría>, se trata de la misma Duanmu Yao a la que se refirió anteriormente como Princesa Changle, que apareció en el Valle de la Píldora de Fuego en el capítulo 60. No está claro por qué el autor le cambió el nombre de repente: ¿quizás se parecía demasiado a Changping? ¿O tal vez se le cambió el título de Duanmu Yao antes de llegar a Tianning para darle un significado más fortuito? En cualquier caso, el resto de la historia se refiere a ella como Princesa Rongle/Duanmu Yao.