Estimada esposa del Príncipe – Capítulo 17

Traducido por Kiara

Editado por Sakuya

Corregido por YukiroSaori

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—No es nada.

¡Xuanyuan Huan respondió indiferentemente mientras su mano se extendía para recoger una taza de té, arrojando su contenido sobre la cabeza de Baili Hongzhuang!

Él debe estar completamente seguro de este hecho. Zhang Ping y Song Ji habían sido noqueados por Hongzhuang, pero sí Hongzhuang no era Baili Hongzhuang, ¿por qué iba a escribir esas palabras ridiculizándolo a sus espaldas?

Debido a esto, se había convertido en el hazmerreír de la ciudad. Incluso su padre, el emperador, estaba insatisfecho con él.

Viendo los movimientos de Xuanyuan Huan, un rayo de luz fría rápidamente revoloteó sobre los ojos de Baili Hongzhuang. ¡Este cabrón realmente se atrevió a idear este método para ponerla a prueba!

¡Baili Hongzhuang se detuvo sensiblemente, y la taza golpeó fuertemente su frente!

—¡Ah! —Baili Hongzhuang convenientemente aprovechó la oportunidad para caer de su lado. Ella entendió que, si no hacía al menos algo, ¡Xuanyuan Huan definitivamente no la dejaría salir fácilmente!

Su fuerza aún no es lo suficientemente fuerte como para defenderse, por lo que en este momento ella solo podría continuar actuando como una basura ciega.

Al ver a Baili Hongzhuang golpeada por la taza, los ojos de Xuanyuan Huan estaban llenos de satisfacción. Cualquier otra cosa podría cambiar, pero el instinto no podría.

Baili Hongzhuang, esa basura ciega, ¡realmente quería más!

—Su alteza real, príncipe heredero…

Baili Yuyan se sintió aliviada. Si Xuanyuan Huan trataba así a Baili Hongzhuang, entonces probablemente no tenga ningún sentimiento por ella.

—¡De acuerdo, vamos!

Xuanyuan Huan tenía una sonrisa orgullosa. La única razón por la que vino aquí fue para confirmar si Baili Hongzhuang estaba verdaderamente ciega o no.

Ahora que estaba seguro, ¿por qué debería seguir mirando esta basura?

Escuchando sus palabras, aunque bastante confundida, Baili Yuyan obedientemente se preparó para irse, siguiendo a Xuanyuan Huan.

Levantándose un poco del suelo, Baili Hongzhuang miró a Xuanyuan Huan irse, esa escoria. Sus profundos ojos negros eran como un estanque pacífico que brillaba con luz fría. Sus dedos se movieron, ¡las dos bolas de pelo blanco y negro volaron!

Confié en ustedes dos la última vez como cojines, pero esta vez, ¡confiaré en ustedes como armas ocultas!

Aunque Little White y Little Black no estaban satisfechos, saltaron obedientemente a los cuerpos de Baili Yuyan y Xuanyuan Huan.

Después de un rato, cuando los dos finalmente habían salido del pabellón Elegante Lirio, las dos bolas volvieron a la habitación.

—¿Terminaron? —Baili Hongzhuang miró las dos bolas de pelusa, sus labios enlazados en un arco superficial.

—¡Por supuesto! Si entramos en acción, ¿qué no podemos hacer? —dijo Little Black arrogantemente, obviamente complacido consigo mismo.

Trató de copiar a Baili Hongzhuang, intentando levantar la frente, sin embargo, sus ojos parecían estar a punto de saltar de sus órbitas en su lugar, ¡ya que en primer lugar no tenía cejas!

La cara de Baili Hongzhuang se iluminó con una sonrisa que aumentaba por completo:

—¡No hay tiempo para una venganza completa, pero si para cobrar los intereses!

Baili Yuyan acababa de entrar al pabellón Elegante Feliz, estaba preparándose para servir bien a Xuanyuan Huan cuando su expresión cambió de repente. ¿Por qué sentía picazón en su cuerpo?

Cuando Xuanyuan Huan vio la expresión tonta y en blanco en el rostro de Baili Yuyan mientras permanecía inmóvil, no pudo evitar preguntar:

—Yuyan, ¿qué pasó?

—Nada, nada.

Baili Yuyan forzó una sonrisa, pero su cuerpo no pudo evitar balancearse de lado a lado. La picazón comenzó a volverse más y más intensa, como si hubiera miles de insectos subiendo y bajando sobre su cuerpo.

—¿Qué te pasa?

Xuanyuan Huan frunció el ceño. Él ya estaba de mal humor debido al regaño que recibió de su padre, por lo que cuando vio el movimiento constante del retorcido trasero de Baili Yuyan, su corazón tuvo un estallido de ira inexplicable.

—¿Te burlas de mí? ¿De que soy inadecuado?

—Su Alteza Real, príncipe heredero, no es eso. —Baili Yuyan movió sus manos en negación una y otra vez.

—Entonces, ¡¿qué significa eso?!

—A mí… —Baili Yuyan estaba tan ansiosa que su cara se puso roja—, solo me está picando.

Al decir esto, Baili Yuyan ya no pudo soportar la intensa picazón en su cuerpo y comenzó a rascarse sin control.

Baili Yuyan sintió un estallido de alivio mientras se rascaba, pero cuanto más se rascaba, peor era el picor. ¡Simplemente no podía parar!