Felicidades Emperatriz – Capítulo 70: Una farsa

Traducido por Kiara

Editado por Sakuya


La conmoción no era pequeña.

Hua Fei Zheng y Hua Que Qui corrieron apresuradamente. Hua Wang Yu les siguió y vio a Miao Luo Xiang arrodillada en el suelo. Se apresuró a ayudarla y ansioso gritó.

— ¡Madre, date prisa y levántate!

— ¡Ah…! —La pierna de Miao Luo Xiang fue golpeada por un bastón de nuevo.

Ella miró a Cui Xiu Lin con incredulidad.

— ¡¿Madre?!

Cui Xiu Lin estaba furiosa.

— ¿Cuántas veces les dije que no provocarán problemas? La Conferencia de Artes Marciales se acerca y los héroes del mundo estarán presentes. ¿¡No puedes controlarte un poco y tratar de evitar los problemas!? Ustedes salgan y escuchen cómo Yecheng dice cosas feas sobre nuestra familia Hua. ¡Todos ustedes me hacen pasar vergüenza!

Una ocasión alegre se convirtió en una tragedia. Aunque la gente de Jianghu no hablaba directamente, todos miraban en secreto como si se tratara de una broma. Pero algunas personas desvergonzadas no tienen sentido de conciencia. ¿Cómo podría Cui Xiu Lin no estar enojada?

Hua Fei Zheng y Hua Que Qui ayudaron a Miao Luo Xiang de ambos lados.

—Abuela, no te enojes y dañes tu cuerpo.

La cabeza de Miao Luo Xiang estaba baja. Hua Wang Yu no estaba convencido.

— ¡Todo esto es por lo que Hua Jing Lan está haciendo!

Hua Jing Lan parpadeó inocentemente

—El Emperador emitió el decreto. El Príncipe Heredero fue quien se casó contigo. ¿Qué tiene esto que ver conmigo?

Hua Que Qui tiró de su brazo y en voz baja le dijo — ¡No agregue combustible al fuego!

Hua Jing Lan se encogió de hombros.

—Es verdad que alguien me ha estado difamando, alguien inventó el hecho de que estaba destinada a ser Emperatriz y que él fue quien se retiró del matrimonio, no solo conforme con eso, otra persona arruinó los planes que teníamos, lo que hizo que la reputación de la familia Hua cayera en el fondo… ¡Quizás esta situación será inmortalizada para las próximas generaciones!

La mano de Cui Xiu Lin que descansaba sobre su bastón fue apretada fuertemente.

—Abuela, no…

Las palabras de Hua Wan Yu fueron interrumpidas por la bofetada de Cui Xiu Lin. — ¡Regresa a tu habitación y piensa en tus errores! —le dijo enojada.

— ¡Abuela! —Hua Wan Yu todavía quería discutir.

— ¡Suficiente, Wan Yu! —Hua Fei Sheng la agarró. — ¿No es lo suficientemente vergonzoso?

Hua Wan Yu se mordió los labios y las lágrimas cayeron.

Hua Que Qui miró a Hua Jing Lan y se volvió para ayudar a Miao Luo Xiang a levantarse.

—Madre, volvamos.

Esta farsa estaba a punto de terminar.

Hua Wang Yu miró a Hua Jing Lan con ojos resentidos. Luego ayudó a Miao Luo Xiang a salir del patio oeste.

Los criados sacaron los cadáveres y se dispersaron como pájaros. Cui Xiu Lin se volvió para mirar a Hua Jing Lan. Ella dijo enojada —Si tienes la habilidad, obtén fama en la Conferencia de Artes Marciales. ¡La familia Hua ya no te dificultará las cosas!

Hua Jing Lan quería reír. Esta anciana realmente calculó bien.

Al ver que ella no respondió, Cui Xiu Lin dijo lentamente —El matrimonio entre usted y Xiao Yao Wang ha sido cancelado. La familia Hua es tu apoyo. Piénsalo.

Hua Jing Lan sonrió fríamente a su espalda. La gente decía que la sangre era más espesa que el agua. La familia Hua realmente excedió su reputación. ¡La así llamada familia era de esta manera en el fondo!

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