Traducido por Akatsuki
Editado por Ayanami
Las crecientes aguas del lago abrazaron el cuerpo de Nangong Qian. Aún con ello, llenó sus pulmones de aire y luchó contra la corriente para encontrar al joven que se apropió de su corazón.
¿Cuántos eran de los suyos? ¿Cuántos eran espías?
Estas preguntas abundaban en la mente de Nangong Qian, aumentando su ansiedad. Sabía que el Príncipe Heredero hacía planes así, y en ocasiones también resultaba herido. Si algo realmente le sucediera esta vez, Nangong Qian definitivamente se arrepentiría.
Shang Wu Xin, luego de caer al lago, se había alejado nadando. No se atrevía a mostrarse por miedo a que fuera el objetivo de alguien que se aprovechará de su situación. Sin embargo, terminó sorprendida luego de ver a Nangong Qian nadando cerca.
No conocía este sentimiento. La túnica púrpura se mezclaba con el agua como la seda. Su mirada era fría, pero saber que esta persona vino a buscarla no estaba mal. Aunque se enteró tarde de que se trataba de una emboscada, aun así, fue detrás suyo. Shang Wu Xin sintió que no era el momento, pero no tenía el corazón de ir contra él.
Nangong Qian la busco por mucho tiempo antes de poder encontrarla. Quizás, fue por el miedo de ser arrastrado por el agua, su cabello estaba extendido, como si fueran algas cubriendo su alrededor. Aquel joven, cuyo rostro ya era hermoso, ahora tenía un encanto especial, haciendo que el corazón de Nangong Qian ardiera.
Nangong Qian sabía que estaba loco, pero en ese momento solo pensaba en mantener al joven a su lado, mimarlo y protegerlo extremadamente, hasta convertirse en su persona. Quizás, antes tuvo un pensamiento similar pero nunca como este. Realmente le gustaba este joven, cuya posición y poder estaba a la par con la suya.
Nangong Qian nado hacía el frente del Príncipe Heredero. Luego de confirmar los sentimientos en su corazón, se abalanzó intencionalmente hacia Shang Wu Xin para abrazarlo.
Su suave cintura formaba un intenso contraste con sus fuertes brazos. Cuando sus labios se encontraron, Nangong Qian sintió que el mundo se volvió hermoso. Aunque sus labios estaban fríos eran demasiado suaves, eran como un tipo de droga que era imposible dejar después de probarla.
Nangong Qian nunca antes había besado a una mujer. Mejor dicho, aparte de su hermana, nunca tuvo algún tipo de relación con otra mujer. Pero ahora, sintió que el hombre en sus brazos olía mejor que cualquier mujer a su alrededor.
Con cuidado y suavidad, movió la punta de su lengua para delinear los labios del joven. Ingresando lentamente en la boca del joven, con el uso de su lengua trato de encontrar su pequeña lengua.
Para Nangong Qian este ‘beso’ fue extremadamente hermoso. Pero para Shang Wu Xin, era lo contrario. Cuando Nangong Qian descubrió que algo andaba mal, notó que Shang Wu Xin estaba temblando, incluso sus dientes lo hacían.
Nangong Qian entró en pánico, pensó que era por su identidad que empezó a temblar. No importa cuán poderoso fuera el Príncipe Heredero, era solo un joven de quince años. No pudo evitar sentirse culpable y desear golpearse a sí mismo.
Shang Wu Xin había recordado su pesadilla, pero no tenía tiempo para preocuparse por ello. Soportando el dolor en su corazón, Nangong Qian ayudó al Príncipe Heredero a poder respirar. Sin pensamientos ambiguos, su corazón estaba lleno de pesar y satisfacción.
Sujetándolo con fuerza, ambos salieron del escondite. No sabían dónde estaban o a qué distancia se encontraban del barco. Llegando a una orilla cercana dejó caer suavemente a Shang Wu Xin sobre la orilla. Ver al joven terriblemente pálido, ocasionó que fuera la primera vez en odiarse tanto. ¿¡Cómo llegué a esto!?
—Wu Xin, si no estás cómodo… Golpéame y regáñame… ¡Dime algo! —Nangong Qian mantuvo la cabeza baja sin decir una palabra. Claramente, admitió que estaba conmovido e incluso pensó en convertirlo en su “esposa”. Pero, bajo su expresión de disgusto y miedo ante Shang Wu Xin, ella se despertó.
Shang Wu Xin se sentó y comenzó a vomitar. Su estómago estaba vacío, pero aun así se sentía asqueada, tanto que casi vomitó su bilis. Nadie supo que tuvo el deseo de cortarse la piel y limpiarla con el agua del lago. Sin embargo, cuando miró sus suaves y delicadas manos, supo que su cuerpo estaba limpio incluso si su corazón estaba sucio.
Nangong Qian entendió que Shang Wu Xin estaba vomitando como resultado de sus acciones. Después de todo, que dos hombres se besaran era inaceptable, y mucho menos siendo uno de ellos el Príncipe Heredero.
Pero al ver que Shang Wu Xin escupía sangre, Nangong Qian no pudo evitar acercarse y palmear su espalda. La espalda de Shang Wu Xin era muy delgada, y Nangong Qian pudo sentir que su cuerpo se endurecía. Su rostro no cambió, pero sus ojos se oscurecieron.
Cuando Shang Wu Xin se sintió mejor, se puso de pie y buscó a Nangong Qian. Cuando entró en su campo de visión, a pesar de que su ropa estaba empapada, sus rasgos faciales eran hermosos, aunque no dijo una sola palabra, su imponente aura era suficiente para intimidar a muchas personas.
Tomando la hoja corta que había traído consigo, se la entregó a Shang Wu Xin. Con una voz llena de determinación dijo: —Si me odias, usa esta arma… Yo… —Nangong Qian no sabía cómo explicar. Él era una persona sincera, y no podía evitar estar enamorado de él.
Shang Wu Xin pensó que Nangong Qian era bueno, aun así, estaba disgustada. La primera vez que quiso ocultar algo fue cuando enloqueció, pero ahora, la segunda era un beso de Nangong Qian. Aunque no era tan repugnante como en su vida anterior, hizo que su alma se sintiera disgustada.
Sujetando el arma, la puso sobre la nariz recta de Nangong Qian, luego sobre sus labios, pasó por su cuello tocando su manzana de adán y se detuvo en el pecho.
Nangong Qian podía sentir la fría sensación del arma, pero no sabía por qué tenía miedo. Siempre había sido una persona que actuaba con valentía. Si no hubiera visto a Shang Wu Xin en un estado lamentable, tal vez, habría hecho todo lo posible para capturarlo. Pero ahora, sabía que, si lo hacía, no sólo arruinaría al propio Príncipe Heredero.
Shang Wu Xin miró a Nangong Qian, quién parecía haberle entregado su vida, a pesar de que todavía estaba disgustada. Incluso si realmente quisiera hacerle daño con la espada, si mostraba resistencia, realmente podría haberlo hecho. Sin embargo, el estado actual de Nangong Qian hizo que se calmara. Sabía que no podía morir, y mucho menos aquí. En cuanto a ese beso, ella prefirió olvidarlo.
—Rey Qian. Shang Wu Xin le apuntó nuevamente en el pecho con la espada. —Los asuntos privados del Rey Qian necesitan su atención, no lo retendré más. —Mientras hablaba, usó la espada para pinchar el pecho de Nangong Qian, incluso su ropa fue cortada, revelando su pecho bien formado.
Nangong Qian sabía que lo estaba alejando, pero también sabía que no podía decir que no. Tenía que haber regresado a su reino hace mucho tiempo, pero se había quedado tanto tiempo que terminó interesándose en él. No quería perder su corazón, si pudiera hacerlo de nuevo, lo haría porque sabía que nunca sería tentado excepto, tal vez, por este joven.
Después de reprimir la tristeza en su corazón, ocultó esos sentimientos débiles que nunca le pertenecieron. Nangong Qian, no quería que Shang Wu Xin lo despreciará.
—Ciertamente es hora de que este rey regrese a casa. —Mirando en dirección al lago agregó: —Sin embargo, espero seguir siendo amigo del Príncipe Shang antes de poder partir. Si el Príncipe Shang no está de acuerdo, sería bueno quedarme algunos días más.
No era una amenaza, sino una advertencia. No quería terminar su relación con él. Shang Wu Xin era lo suficientemente inteligente como para saber qué hacer y qué no hacer.
Como era de esperar, Shang Wu Xin ni siquiera se molestó en pensar mientras lo decía con calma: —El Príncipe Qian y yo somos amigos después de todo, eres una persona demasiado educada. —Sin el disgusto de antes, Shang Wu Xin sabía que Nangong Qian era una persona extremadamente difícil de tratar, y no creía que fuera bueno para ellos convertirse en enemigos.
—¿Qué sucedió? —Nangong Qian había calculado entre el setenta y ochenta por ciento de lo que pasó, pero aún quería encontrar un tema sobre el cual hablar. De lo contrario, la atmósfera entre los dos sería muy incómoda, y no quería que Shang Wu Xin recordará su repugnante beso, incluso si era el más hermoso del mundo.
Shang Wu Xin sintió que no había nada que ocultar, por lo que comenzó a explicarle.
Desde que comenzó la emboscada mantuvieron como objetivo tanto a ella como al Tercer Príncipe. Sabía muy bien que su hermano no era tan estúpido como para atacarla en su banquete, pero con estos asesinos podría deshacerse de él.
Así que los retrasó deliberadamente para que Wu Ju y los suyos se deshicieran de los verdaderos asesinos. Wu Ju y los demás eran dignos del hecho de que se habían dedicado tanto a cultivar el ‘Immoveable Breath’, a pesar de que no había muchos asesinos entre ellos. Luego hizo que Wu Wei y los demás vinieran para atacarla a ella y a Shang Chen Ying. El plan era que resultará herida y cayera al lago, así darían por hecho que lo habían asesinado. Esto era imprescindible para lograr asesinar al Tercer Príncipe, Shang Chen Ying. Ya que al tener a su lado a Kong’er, ella terminaría con la misión. El siguiente paso era encontrar al cerebro que orquestó el ataque hacia ella y matarlo.
—¿Esa mujer no era del Tercer Príncipe? —Pregunto Nangong Qian dudoso.
Shang Wu Xin negó. —De hecho, pensé que Kong’er era una infiltrada de Shang Chen Ying. Mejor dicho, Kong’er es una infiltrada de Shang Chen Ying, pero fue alguien más quien la puso a su lado, pero él la envió a mi lado.
Si no supiera qué Kong’er tenía a alguien respaldándola desde las sombras, incluso luego de tantas investigaciones, ella habría sido engañada.
—¿Has adivinado quién es el responsable?
—Creo saber quién es… Estoy un cincuenta por ciento seguro de saber de quién se trata.