Villana sanadora – Capítulo 22

Traducido por Mei

Editado por Nemoné

Corregido por Aurora Blue


—¿Estás seguro de que aquí es donde están? —le pregunto a Luler.

Él asiente moviendo la cabeza.

Paso en puntillas a través de algunos arbustos, lo más silenciosa posible. Según lo que ha dicho Luler, la pareja se había dirigido hacia el jardín. A estas hora del día es difícil que alguien venga por aquí. A los demonios no les gusta que su piel se queme por la luz del sol; prefieren visitarlo de noche. Por ello, debo ser cuidadosa si quiero espiar sin ser descubierta.

Es algo extraño que la escuela abra en la mañana en vez de en la noche, pero eso tiene una explicación: es más peligroso para un demonio joven estudiar durante la noche, ya que los demonios mayores son mucho más fuertes a esas horas. Esta escuela admite a muchas personas importantes que son blanco de asesinos; es por eso, que es más seguro realizar las clases en la mañana.

Finalmente, logro vislumbrar una cola de zorro brillando a la luz del sol. Akane está siendo empujada contra un árbol, los brazos de Teo la acorralan impidiéndole huir. Le hago una señal a Luler para que se mantenga en silencio y camino de puntillas hacia donde están ellos.

—Príncipe Teo, creo que tu comportamiento es totalmente inapropiado —escucho decir a Akane. Ella evita mirar a sus ojos.

—¿Ahora te atreves a responderme? ¿Ellos no son íncubos? ¿Estás tan desesperada al punto de ofrecerte a ti misma? —la increpa Teo.

—¿De qué estás hablando? ¡Ellos son los primos de Shiwa!

—¿Sí? ¿Y dónde está ella, entonces?

—E-Está en una reunión con la directora.

—¡¡Ella ya te regaló a sus primos!! ¡Nadie se reuniría con la directora a esta hora!

—¡¡No la acuses sin pruebas!! ¡Eres una persona grosera y salvaje!

¡Oh! Eso fue como un puñetazo en su cara… Tropiezo y casi caigo al suelo;por suerte, Luler detiene mi caída.

¡¿Qué está mal con la industria de villanas?! ¿Cómo pueden dejar que una villana como ella: tan dulce y frágil, aparezca en este juego?

Las orejas de Akane tiemblan de ira, ella rechina los dientes y lo fulmina con la mirada. No quedan rastros de la niña educada que conozco en su semblante.

—¿Qué? ¿Piensas que me puedes hacer algo? —se burla Teo—. Sacudir tus orejas no me va a intimidar, ¿sabes?

Teo sujeta sus orejas de zorro. Estas son grandes, suaves y sensibles al tacto, en comparación a las suyas, que se parecen más a las de los perros.

—¡Ah! ¡¿Q-Qué?! ¡No toques mis orejas! ¡Pervertido! —Los ojos de Akane brillan producto de la vergüenza, su rostro se ruboriza.

—Suave… —murmura Teo y las frota con fuerza.

—¡Ah! ¡Detente! ¡Déjalas! ¡Qué grosero! ¡Quiero romper este compromiso! ¡Suficiente…! ¡¡¡Ya no quiero esto!!! —Akane trata de huir de su agarre. Su rostro se torna cada vez más rojo.

¿Qué debería hacer? ¿Debería interrumpir y ayudarla? ¿No luciré sospechosa por estar aquí? Aunque, Luler también está conmigo. ¿No parecerá extraña tanta coincidencia?

—¿Qué? ¿Con quién crees que estás hablando? —Él sonríe de manera sádica.

¿Por qué pone esa cara? ¿Acaso se está sintiendo feliz al molestar a Akane?

—¡¡No puedes tocar mi cola!! ¡Pervertido! ¡Sabes que es inapropiado! —chilla ella cuando este aprieta su esponjosa cola.

Se dice que la cola es la parte prohibida de un perro. La mayoría de sus nervios se reúnen allí, haciéndolos sensibles al tacto y despertando también su deseo sexual.

—¿Qué? Tengo todo el derecho sobre tu cuerpo así que ¿por qué no puedo hacer esto?

—¡Romperé este compromiso! —grita ofendida.

—Inténtalo —la desafía él .

—¡¡Ya deja de molestarme!! ¡¡Saca tu mano de mi cola!! —Akane rompe en llanto. Sus lágrimas se deslizan copiosas sobre sus mejillas, sus orejas se aplanan sobre su cabeza por causa del miedo hacia la persona enfrente suyo.

Ella puede parecer fuerte en el exterior, pero no existe una chica que le guste ser acosada de esta manera… ¡Una persona vil como él se atreve a hacer llorar a una chica tan dulce y, además, lucir feliz por ello! ¡¡¡Tan solo dejenme golpearlo una o dos veces!!!

—¿Por qué estás llorando? —pregunta Teo como si no comprendiera su reacción—. Deja de llorar… De lo contrario, te molestaré de nuevo.

Varios sollozos escapan de los labios de la chica.

—¡No puedo parar!

—Umm… Así que no se pueden detener.

Él utiliza su lengua para lamer sus ojos llorosos, Akane se pone rígida ante el contacto repentino.

—¡¡Ahhh!! ¡¡Qué estás haciendo!!

Lo empuja lejos, su cara se ha puesto roja como un tomate. En mi fuero interno, le doy dos pulgares arriba por su habilidad de empujar a una persona más grande que ella. Akane toca su ardiente rostro y huye del jardín sin voltearse a mirar atrás.

Me levanto de mi posición, hirviendo de ira y me acerco a Teo. Este se voltea a mirarme con una expresión sorprendida, consciente de que ha sido pillado infraganti

—¡¿Estabas espiándonos?! ¡¿Tú también, Luler?! —nos reclama.

No le respondo, en cambio, golpeo su estómago con todas mis fuerzas. Si golpeara su cara, eso se notaría, entonces podría meterme en problemas. Sin embargo, es una lástima que el dolor del golpe le dure solo un rato ya que su cuerpo se cura demasiado rápido… ¡De todas formas no importa! ¡¡Solo quería darle un buen golpe en su intestino!!

—¡Ack…! ¡¿Por qué hiciste eso?!

—¡Esto es por las lágrimas de Akane! —le respondo—. Iré tras ella. Luler, encárgate de Teo.

Me doy la vuelta y corro de vuelta al edificio.

♦ ♦ ♦

Las clases están por comenzar y aún no puedo encontrar a Akane por ninguna parte.

—¡Oh…!

Reviso en la enfermería y la encuentro sentada en el piso, junto a la puerta, abrazando sus rodillas contra su pecho. Seguro se ha escondido en este lugar, porque, por lo general, nunca viene nadie por aquí.

—¿Akane…?

Ella me mira, sus ojos aún están empapados en lágrimas.

—Shiwa… Él abusó de mi dignidad… —Vuelve a llorar.

Tocarse entre sí puede ser algo común para un niño normal, pero no para los de su especie. Para ellos, esto es algo muy serio.

Suelto un suspiro.

—¿Qué sucedió?

Actúo como si no supiera nada sobre el tema. Si ella se entera de que todo era parte de mi plan, entonces estaría mucho más agraviada que esto.

—Teo… me insultó —me cuenta—. Debería estar enojada con él; pero, en cambio, me siento triste. ¡No sé qué hacer! ¡Si él no va a terminar este compromiso, entonces no hay nada que pueda hacer! Si esos lobos escuchan lo que sucedió hoy, la guerra podría estallar nuevamente. ¿Qué voy a hacer?

—Akane, deberías calmarte —le aconsejo—. Es mejor que te quedes aquí un rato. Le diré a nuestro profesor que no te sientes bien, ¿de acuerdo? —Ella asiente y entonces añado—: Volveré a clases, tú intenta dormir. Regresaré a verte cuando el periodo termine.

—Entiendo…

—Solo preocúpate por dormir, yo llenaré el papel por ti.

Se levantó del suelo despacio, con su cuerpo debilitado producto de las emociones recientes, se dirigió hacia la cama y se acostó. Yo llené la solicitud para utilizar la habitación de primeros auxilios para que pudiera descansar tranquila.

—Shiwa… —Akane me detiene cuando estoy a punto de alcanzar la puerta y toma mi mano.

—¿Qué ocurre?

—Gracias…

—Está bien. Deberías dormir.

Cierro la puerta de la enfermería y me dirijo a mis clases con algo de culpa; ya que, en parte, esto también es culpa mía

Nemone
¿Es Teo lo mismo que Shiwa? Un S, quiero decir. Aun así es un maldito. La ignora y luego, cuando ella trata de pasar de él, se porta así. K pdo.

2 respuestas a “Villana sanadora – Capítulo 22”

  1. ahora si no estoy entendiendo mucho o todo es parte del plan de Shiwa para que Teo admita su relación con akane o es para que el haga algo malo akane lo odie y se rompa el compromiso?

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