Mi hermana, la heroína – Capítulo 70

Traducido por Sharon

Editado por Tanuki


Mishuli es la primera persona en darme la bienvenida a casa.

Cuando salí del carruaje y entré a la casa, ella saltó hacia mí con una linda sonrisa que me sanó al instante.

El hecho de que la adorable Mishuli sea a quien más amo no ha cambiado. Palmeé su cabeza en felicidad.

Ella me interrogó.

—… Hermana mayor.

Mishuli me llamó lentamente y con un tono dulce, pero sentí una presión extraña.

Tragué.

No lo sabía, pero al parecer estoy nerviosa.

En sus dedos hay un pelo de color negro que estaba en mi hombro. Lo noté cuando me saludó.

Sin embargo, no veo el punto.

—¿Qué es esto?

No sé a qué se refiere. Hay algo indescriptible en su sonrisa, pero no sé qué es, o por qué siento esta presión. No sólo está enojada. Es algo más.

Bueno, ¿cómo debería ponerlo?

Pero permanecer en silencio es la peor opción y la más estúpida.

Soy una genio, así que no recurriré a la táctica pasiva del silencio. Tengo que ser determinada y honesta.

—¿A qué te refieres…? ¿No es mi cabello?

—¡No intentes engañarme!

No lo estaba intentando, pero ella me gritó con fiereza por alguna razón.

—¿Huh? Bueno…

—¡No hay forma en que sea tuyo! ¡¿Realmente crees que no lo sé?! ¡Hmph!

—Ah, um, lo lamento. No sé qué está sucediendo, pero lo lamento.

Mishuli está completamente enfurecida. No estoy asustada. De hecho, ver un ángel enojado es adorable.

Aunque todavía no sé por qué está enojada.

Lo lamento, Mishuli. Sé que estás en verdad enojada. Creo que lo sé… Es porque no supe que era mi cabello.

No, lo digo en serio.

Es del mismo color y textura. Seguro, es un poco corto, pero no es suficiente para decir que no es mío.

—¿En verdad no lo es?

—¡Es totalmente diferente! ¡Lo sé! ¡No es el mismo color negro!

—Y-Ya veo…

Para mí se ve igual, pero no hay forma en que Mishuli esté mintiendo. Está segura de que no es mío, así que tiene que tener razón. De alguna forma ella lo sabe, aunque no sé su método.

Vamos a decir que no es mi cabello.

Todavía no sé por qué está enojada.

El cabello tiende a caerse sin importar cuán cuidadoso se sea. No hay forma en que Mishuli sea tan cerrada de mente como para enojarse por algo como eso… ¿O sí?

—Bueno, entonces hermana, ¿qué sucede? ¿De quién es?

—¿Huh? Quizás es de Leon.

—… Leon.

Él es la única persona de cabello negro que vi hoy. Mishuli se congeló cuando mencioné su nombre.

No parece que lo recuerde, porque inclinó su cabeza ligeramente.

—¿Leon…?

Intentó recordar al repetir su nombre. Al parecer no lo recuerda para nada.

Es probable que sea extraño viniendo de mí, porque le llamé basura en nuestro primer encuentro, pero le tengo lástima por ser olvidado completamente tanto por Surfania como por Mishuli.

—¿Recuerdas a ese chico? ¿El plebeyo que escaló la pared y se cayó hace tiempo? Lo curaste, ¿verdad? Y lo encontramos en el Festival de la Fundación juntas, ¿verdad?

—Ah… Sí, lo recuerdo. Ese chico de cabello negro… ¡Y ojos negros!

Adivinó correctamente.

Palmeé su suave cabello dorado, elogiándola por tomar el esfuerzo de recordarle.

—Lo recordaste. Buen trabajo, Mishuli.

—Ehehe. ¿Hice un buen trabajo?

—Sip. Lo hiciste genial. ¡Y eres tan linda, mi adorable Mishuli!

—Ehehe. Y tú eres la más genial… ¡Hey, espera!

No pudé evadirla.

Desvié la mirada de Mishuli. Pensé que dejaría el asunto pasar a través de nuestra conversación habitual, pero no funcionó. Oh, bueno, era una pequeña oportunidad. Sip, no importa.

—Hermana, no desvíes la mirada.

—Muy bien.

Quizás detectó mis sentimientos de culpa, pero está bien ahora. Estoy preparada mentalmente para desviarla con una conversación.

Miré sus ojos.

—No viste a Leon desde entonces, ¿verdad? ¿Por qué te encontraste con ese tipo? ¿No ibas a ver a la Señorita Surfania hoy?

Infló sus mejillas como si dijera que no estaba de buen humor.

Quiero pinchar su suave y adorable mejilla con mi dedo, pero probablemente la hará enojar en su lugar.

—Pero lo hice. Como siempre, ella se la pasa encerrada.

—¿En serio?

—Sí. La llevé a ver a Leon.

—¿Fuiste con la Señorita Surfania?

—Sí. Te llevaste bien con ella bastante bien la primera vez. Son sorprendentemente compatibles.

Mishuli cruzó los brazos mientras pensaba.

—Ya veo… Está bien entonces. Siempre y cuando no sean como Charles…

—Sí. Leon está estudiando en la Iglesia bajo la guía de Marywa. Gratis.

Me detuve antes de quejarme sobre las injusticias por tener que pagar por mi educación. No es como si quisiera molestar la privacidad de Marywa de cualquier forma.

—Ah, la Señorita Marywa también estaba allí.

—¿Bueno? Si quieres verlo, podría llevarte la próxima vez, ¿sabes?

Estaba pensando en volverlo una rutina cuando Surfania y yo estemos libres.

Saqué el tema porque recuerdo ver a Mishuli mucho más feliz después de su primer encuentro con Leon, pero ella sacudió su cabeza sin pensarlo demasiado.

—Nope, está bien. No le recuerdo bien de cualquier forma. Ya que parece que se están llevando bien, ¿por qué no llevas a la Señorita Surfania?

—Sí, tienes razón.

Buena suerte, Leon.

Estoy aliviada de que no se lo tome a pecho, pero también voy a animarlo por sus esfuerzos que no obtuvieron recompensa.

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