Traducido por Maru
Editado por Sharon
—¿Quién…? ¿Quién…?
—Shh…
Rihannan luchó para pronunciar sus palabras con la boca bloqueada, pero dejó de resistirse al escuchar esa voz familiar. Seguí leyendo “No quiero ser amada – Capítulo 39: Huye, chica”
Traducido por Maru
Editado por Sharon
—Dimi, tío, se está haciendo tarde. Descansemos por ahora y hablemos de nuevo mañana con la mente clara.
Rihannan los envió fuera del estudio, frotándose la frente en el proceso. Si ella dejara sus heridas intactas, se formaría una cicatriz irreparable. Seguí leyendo “No quiero ser amada – Capítulo 38: Un futuro mucho peor”
Traducido por Maru
Editado por Sharon
El marqués explicó en detalle lo que ocurrió en la reunión de emergencia de asuntos estatales hace horas. Arundell logró rodear a Crichton en el mar y transmitió oficialmente las intenciones del rey a través de un enviado. Arundell deseaba paz y armonía, nunca el antagonismo de Crichton. Como prueba, pidió un miembro real de Crichton. Ella sería su reina.
Rihannan escuchó la historia con atención, con el semblante rígido. Seguí leyendo “No quiero ser amada – Capítulo 37: Pena y vergüenza”
Traducido por Maru
Editado por Sharon
—¡Maldición! —El marqués Preibus maldijo cuando pensamientos sombríos invadieron su mente.
¿Qué pasaría si… el rey de Arundell realmente buscara la mano de la princesa en matrimonio y luego se enfureciera al ver a Rihannan? Toda la ira acumulada se colocaría sobre su sobrina. No, él no lo permitiría. Él no podría; él no lo haría. Seguí leyendo “No quiero ser amada – Capítulo 36: Sufrir el mismo destino”
Traducido por Maru
Editado por Sharon
Un silencio pesado y terrible llenó la sala de conferencias. Después de la noticia de su derrota, la ira extrema despertó en sus corazones inquietos, pero ahora, solo una melodía sombría llenaba el lugar.
—¿Pero no se convertirá esto en una boda nacional? No es que esto no haya sucedido en el pasado. No necesitamos preocuparnos demasiado… Seguí leyendo “No quiero ser amada – Capítulo 35: La novia será…”
Traducido por Maru
Editado por Sharon
Rihannan durmió toda la noche sola y con un corazón lleno de preocupaciones.
Y entonces… pasó la noche y llegó la mañana en paz.
Rihannan viajó al palacio de la princesa. Dentro de los muros, Helena estaba llena de una considerable conmoción. Seguí leyendo “No quiero ser amada – Capítulo 34: Hombre nuevo”
Traducido por Maru
Editado por Sharon
Los sueños destrozados de Dimitri ocurrieron cuando todos los herederos principales del trono cayeron en sucesión consecutiva junto con la peste.
Muchos de los nativos de Crichton se enfermaron y encontraron las manos de la muerte demasiado pronto. La causa era desconocida y, después de mucha investigación, se reveló que sus vías fluviales habían sido infectadas. No existían métodos conocidos para Seguí leyendo “No quiero ser amada – Capítulo 33: Plaga, masacre y derrota”
Traducido por Maru
Editado por Sharon
—La princesa Helena, sé que es tu amiga, pero querida prima… debes tener cuidado con los demás… especialmente con el príncipe heredero. No te acerques demasiado a él. Lo digo en serio, Rhia.
Ante la repetida advertencia de Dimitri, Rihannan asintió. La verdad del asunto, el príncipe heredero era el verdadero rey de Crichton. Era un hombre cruel, alguien que sabía manejar su fuerza, Seguí leyendo “No quiero ser amada – Capítulo 32: El sueño”
Traducido por Maru
Editado por Sharon
Rihannan sonrió débilmente.
—No, Mary. Estoy acostumbrada a vivir aquí. Además, ¿cuál es el punto? No tengo familia en Arundell. ¿Y tú, Mary? ¿Extrañas tu hogar?
—Para ser sincera, señorita… —Mary respondió con cautela—. La última vez que el conde falleció, pensé que iría a Arundell para una visita. Y… está… también… la tumba de su madre… Seguí leyendo “No quiero ser amada – Capítulo 31: Amor incondicional”
Traducido por Maru
Editado por Sharon
Rihannan miró a los pájaros que se agolpaban en el cielo, con sus chirridos eran muy distintos. Podía ver un nido encima de un gran árbol cercano, y a la madre alimentaba ansiosamente a sus hijos.
—Sois tan grandes como yo… niños, crecéis rápido —susurró Rihannan. Seguí leyendo “No quiero ser amada – Capítulo 30: Hubo un tiempo…”
Traducido por Maru
Editado por Sharon
Después de eso, Rihannan se despidió y salió de la habitación.
Cuando llegó a Crichton hace seis años, Rihannan se convirtió en la compañera de Helena, la hija real más joven y amada por la Casa de Crichton. Muchos nobles intentaron y cortejaron el corazón de la princesa, pero incapaces de soportar su temperamento, renunciaron. Pero Rihannan, que también era de la realeza por sangre y de la misma edad que la princesa, llegó como un caballero con una armadura brillante y se convirtió en la verdadera amiga de Helena. Seguí leyendo “No quiero ser amada – Capítulo 29: Otro funeral”
Traducido por Maru
Editado por Sharon
Rihannan no sabía por qué Igor detestaba a Crichton; tal vez porque su madre descendía de allí. Aunque ya no le importaba.
De todos modos, cada vez que intentaba usurpar a Crichton aumentando el poder marítimo de Arundell, Igor se enfrentaba a la fuerte oposición de la reina. Mientras la alianza con Crichton permaneciera intacta, la reina pensó que era apropiado que Arundell hiciera más esfuerzos para mantener bajo control el Imperio de Toulouse. Seguí leyendo “No quiero ser amada – Capítulo 28: Joven rey”
Traducido por Maru
Editado por Sharon
La mujer de cabello plateado sacudió la cabeza.
—No, no lo haré.
—¿Por qué? Vamos, elige uno —dijo la princesa. Seguí leyendo “No quiero ser amada – Capítulo 27: Soy de Crichton”
Traducido por Maru
Editado por Sharon
Seis años después…
Tars, capital de Crichton.
Nobles gentiles se reunieron en el jardín lleno de hojas caídas. Muchos vestían muy bien, con sus cálidas ropas de lana que insinuaban un toque del claro clima otoñal, un claro contraste con sus rostros tensos. Seguí leyendo “No quiero ser amada – Capítulo 26: Años después”
Traducido por Maru
Editado por Sharon
Cucharones y platos volaron por encima y pronto, la posada se volvió bulliciosa. Mientras tanto, el niño y el hombre sentados en la esquina comieron en silencio.
—¡Es mejor que vigiles bien tu ingle, para que no te encuentres sin pelotas! —dijo la mujer enojada. Seguí leyendo “No quiero ser amada – Capítulo 25: El niño y el sol”