Una generación de militares – Capítulo 12: El rescate de Han Shu (3)

Traducido por Yue Liang

Editado por Sharon


Al mismo tiempo, Gu Jun corrió hacia Han Shu.

—¡Bing Lian! —gritó.

El eco de su voz aún no había terminado antes de que se viera una brillante luz blanca.

Bing Lian, desenfrenada, voló hacia el otro lado del cañón cayendo en las manos de Gu Yun.

Yan Ge estaba conmocionado. ¡La espada realmente era mágica! Esto sería un verdadero desastre. Su espada era una eterna brisa fría mientras que la de Su Ling era tan caliente como la lava. Si estos dos rescataban al rehén, ¿cómo tendrían la cara para enfrentarse al resto de la tribu?

—¡Disparan las flechas! —digo Yan Ge a las personas a ambos lados de la selva.

El bosque se movió colectivamente. Un lado del cañón estaba lleno de rebeldes, cada uno con un arco en la mano y dos carcaj de flechas en la espalda. También se podía ver que tenían muchas armas.

Del otro lado, los soldados tenían sus arcos preparados para disparar en cualquier momento.

—¡Protejan de las flechas! Tropa de tigre, ¡ataquen! —ordenó rápidamente Yu Shi Jun cuando vio a Su Ling sacar su espada.

—¡Sí, señor! —Las líneas de soldados estaban armadas con escudos.

Ambos lados dispararon simultáneamente sus flechas. Gu Yun tuvo que evitar varios proyectiles mientras rescataba a Han Shu. Era una tarea difícil. Su Ling pensó en ir y ayudarla pero fue obstruido por un pesado ataque de flechas que evitó con calma. Coincidentemente, sus ojos se encontraron con unos ojos indiferentes en la copa de un árbol. Como se esperaba, esta persona era difícil de tratar.

La mayoría de los rebeldes se encontraban en las copas de los árboles. Del lado de los rebeldes, el impacto del ataque era muy bajo. Al mismo tiempo, la tropa de tigre terminó sus preparativos y arrojaron los ganchos.

Instantáneamente, tres cuerdas conectaron los dos lados del Valle.

—¡Disparen! —dijo Wu Ji cuando lo vio.

Las personas en los árboles sostenían sus arcos sin entender qué era lo que estaba pasando. No habían nada más que cuerdas, ¿por qué necesitaban disparar? Mientras dudaban, una por una, varias figuras se acercaron a gran velocidad desde el otro lado. La velocidad era demasiada. Era tan rápida que, para cuando posicionaron las flechas en el arco, diez personas ya habían cruzado. Los soldados volaban como águilas mientras cruzaban. Para el momento en que dispararon, ni siquiera lograron golpear a uno.

Los rebeldes estaban distraídos, y algunos fueron a pelear con la tropa de tigre. Gu Yun aprovechó la oportunidad y corrió hacía la gran roca. Balanceó su espada e inmediatamente las gruesas cadenas cayeron al suelo. Debido a que perdió su soporte, Han Shu cayó. Gu Jun no fue a ayudarlo, sino que de inmediato atacó a los enemigos que se acercaban.

—¡Han Shu! ¿Eres capaz de ponerte de pie?

—Sí! —Agarrando firmemente la roca como soporte, se puso de pie con lentitud. Incluso si su vista aún se encontraba borrosa debido a que el General y la Señora habían arriesgado sus vidas para salvarlo, se ordenó recuperar el control. ¡No debía arrastrarlos hacia abajo!

¡El truco era realmente bueno! Su Ling merecía ser llamado así. [1]

—¡Captúrenlos! —dijo Wu Ji con calma.

Obedeciendo su orden, la parte del cañón donde estaban los rebeldes comenzó a temblar. Los ojos de Gu Jun se ensancharon.

¡Estamos condenados! Sus habilidades de camuflaje son muy buenas. Más importante aún, sus capacidades de organización son comparables a las tropas del ejército. Ellos se escondieron por mucho tiempo, sin atreverse a moverse hasta que la orden llegara.

Los rebeldes vestidos de negro se arrastraron desde el suelo hasta donde alcanzaba la vista. ¡Venían de todas partes!

El primer lote de soldados llegó al lado de Gu Yun. Ella no dijo mucho y empujó a Han Shu hacia ellos.

—¡Tómenlo y vayan! —El lado de los rebeldes estaba repleto. Incluso si trajeran a los 7000 soldados aquí, todos podrían morir. Era mejor retirarse ahora.

—¡Sí!

En ese momento, se escuchó un estruendo, y cuando Gu Yun se giró a mirar, vio que los rebeldes pretendían cortar las cuerdas.

—¡Retirada! —ordenó Su Ling, que también había notado la situación.

—¡Sí! —Teniendo nuevas órdenes, los soldados quienes escoltaban a Han Shu llegaron al borde del cañon. Los soldados del lado opuesto comenzaron a jalar las cuerdas y los trajeron de vuelta. Al final, Han Shu fue evacuado exitosamente.

Gu Yun utilizó a Bing Lian para defenderse de los rebeldes. Era bastante afilada y su brisa helada obligaba a las personas a retirarse, sin embargo, en este momento era fuertemente superada en números. Estaba cada vez más y más cansada pero el número de rebeldes no hacía más que aumentar. Si no se retiraban en este momento no serían capaces de irse. Además, su brazo aún estaba lastimado.

—¡Ve primero! —le gritó Su Ling, matando a los rebeldes cerca suyo.

—Bueno—. Gu Yun tomo la oportunidad y rápidamente se giró hacía la cuerda más cercana. Sin ella sería más fácil para Su Ling salir.

Ella se movió con rapidez, sin tener intenciones de quedarse junto a Su Ling.

¿Realmente son marido y mujer?, pensó Wu Ji asombrado. En su corazón, había decidido que debía detener su escape.

Gu Yun puso el gancho en la cuerda. Wu Ji utilizó el arco corto en su mano, apuntando a las muñecas. Cuando estaba por disparar, miró a Yan Ge quien había sido acorralado por Su Ling a un lado del cañón. ¡Era realmente valiente a pesar de que su látigo estaba quemado! Los ojos de Wu Ji brillaron, cambió su objetivo a la cuerda sobre la cabeza de Gu Yun y disparó.

La pequeña flecha atravesó el aire sin ningún error, y perforó la cuerda, la cual se movió violentamente mientras era cortada.

—¡Ah… ! —Junto con las cuerdas rotas, el pequeño cuerpo de Gu Yun fue tirado hacia la corriente de abajo.

En el momento antes de que la cuerda estuviera completamente rota, ella atrapó el extremo delantero de la cuerda. La fuerza de gravedad y la tensión de la cuerda rota incrementaron la aceleracion de caída. Su mano estaba completamente adolorida debido a la quemadura por la fricción, sin embargo, Gu Yun solo tenía un pensamiento: no podía soltar la cuerda o definitivamente caería en el río.

Su Ling escuchó su voz y miró en su dirección solo para ver el momento en que la cuerda se rompía. El pequeño cuerpo de Gu Yun estaba cayendo como una cometa cuya línea fue cortada.

Su corazón repentinamente se sobresaltó. Todavía no había entendido el dolor cuando su cuerpo ya se había movido por sí solo. Él corrió hacia el borde del cañón y saltó.

¡Era el momento!

Los ojos de Wu Ji se entrecerraron ligeramente y sus labios formaron una sonrisa fría. De nuevo, sus manos levantaron el corto arco y apuntaron al brazo de Su Ling. Con toda su fuerza, la flecha aceleró y golpeó directamente el objetivo.

—Ugh…

Gu Yun sintió a una figura corriendo hacia ella. La cuerda se balanceó mientras sus oídos captaron un bajo gemido. Mirando hacia arriba encontró que a medio cuerpo de longitud se encontraba la gran figura de Su Ling. ¿Que quería hacer? ¿Por qué saltó?

Caer hacia el río era un asunto extremadamente peligroso debido a que la corriente era demasiado fuerte. Si no podían controlar sus movimientos cuando se encontraran en el agua serían barridos por la corriente fácilmente. Sin embargo, si no caían en el agua la cuerda se balancearía desde un lado del cañón hacia el otro con una gran inercia. El poder sería suficiente para romper algunas de sus costillas.

Con sus pies acariciando la superficie del agua, secretamente se sintió aliviada de que no era demasiado profunda. No necesitaba preocuparse por ser arrastrada. Sin embargo, mirando a las dos personas que casi golpean la superficie irregular de la pared del cañón, la cual estaba hecha de roca, Gu Yun solo podía esperar que su actual cuerpo de señorita adinerada pudiera resistir el golpe.

A medida que la distancia se acercaba, Gu Yun forzó su cuerpo a endurecerse. Sus manos apretaban fuertemente la cuerda y sus ojos se cerraron anticipando el dolor.

Su hombro de repente empezo a doler. Ella podía sentir cómo su cuerpo era cargado por alguien más. Su cintura fue agarrada con fuerza. Abrió los ojos solo para ver la armadura roja de Su Ling. Antes de que fuera capaz de preguntar por qué saltó, Su Ling ajustó la posición y giró en medio del aire. Gu Yun estaba pasmada.

No me digas que él quiere…

El sonido del golpe hizo eco por el Valle.

Su Ling utilizó su propio cuerpo como parachoques y golpeó pesadamente la pared de roca. Gu Yun estaba fuertemente encerrada en sus brazos para que no sufriera ninguna lesión. Sin embargo, debido a que estaba muy cerca de su pecho aún pudo sentir la fuerza del impacto. Incluso con su protección, la cabeza de Gu Yun seguía girando.

¡Ese tipo de golpe debe haberle hecho heridas internas! 

Gu Yun levantó la mirada rápidamente. La expresión calmada de Su Ling no mostraba ningún signo de dolor. Solo su tez parecía un poco lívida, sus cejas y frente estaban un poco húmedas. No estaba claro si era debido al sudor o la humedad.

Cuando Gu Yun quiso preguntarle su condición, escuchó la profunda voz de Su Ling más baja de lo normal.

—¡Subamos! Te llevaré en mi espalda.

Él debía estar sufriendo una seria herida debido a el último golpe.

—No es necesario. Puedo hacerlo por mi misma. Ve primero —negó Gu Yun.

Agarrando la cuerda, Gu Yun quería apartarse para permitirle escalar. Sin embargo, la mano en su cintura la agarró con fuerza, impidiendo sus movimientos. Ella miró hacia esos profundos ojos negros de manera extraña. En su mirada pudo encontrar ansiedad e incluso un rastro de impaciencia en su voz.

—¡No hables tonterías! ¡Sube rápidamente!

Su respiración estaba entrecortada y sus ojos rojos. Gu Yun aceptó decisivamente y no peleó con él. Por la personalidad de Su Ling, aunque dijera más no conseguiría nada, incluso el tiempo de paz podía ser destruido.

Entonces, ella decidió callarse y continuar discutiendo cuando estuvieran de nuevo en la cima del cañón.

Utilizó la mano de Su Ling para trepar hacia su espalda, pudo ver con claridad una hendidura llena de sangre y polvo. No pudo evitar sentirse estupefacta.

—Tú… —La sangre carmesí siguió cayendo a lo largo de su omóplato. ¡Estaba perdiendo mucha sangre! El cerebro de Gu Yun rápidamente recordó la herida que había sufrido Ge Jing Yun, donde la sangre continuamente fluía.

La pequeña flecha de plata podía ser vista en la herida.

¡Maldición! ¿Él realmente no quiere su vida? Su espalda fue herida por la flecha, ¡y aun así utilizó su espalda para aguantar el golpe! ¡Ese tipo de fuerza hizo que la flecha se incrustara por completo!

Gu Yun uso una de sus manos para alcanzar la bolsa de la cintura. Sin preocuparse por su figura desaliñada, empezó a aplicar presión sobre la herida que sangraba continuamente. Los soldados arriba empezaron a tirar de ellos, y no mucho después, llegaron a la cima del cañón. Yu Shi Jun fue a recibirlos.

—Señora, ¿Se encuentra bien? — preguntó con urgencia mientras tiraba del brazo derecho de Su Ling.

—Estoy bien, pero Su Ling no —dijo, sacudiendo su cabeza.

Habiendo llegado a este lado del cañón, Gu Yun quería bajarse de su espalda para aliviar su carga. Sin embargo, encontró que su pantorrilla estaba fuertemente agarrada por la gran mano de Su Ling.

Los rebeldes del lado opuesto los miraban con furia. Yan Ge estaba cada vez más enojado.

—¡Si tiene las capacidades no escapen! ¡Vuelvan y peleen! —gritó, arrojando lo que quedaba de su látigo.

Su Ling la llevó a cuestas y arrogantemente se encontró con los ojos del contrario. Sus ojos de águila miraron al calmado e indiferente Wu Ji. Bajo su mirada, Wu Ji se encontraba un poco sorprendido.

¿No fue alcanzado por la flecha? ¡Imposible! Si no fuera así, ¿cómo podría mirarlos mientras lleva a su Señora sin esfuerzo?

Gu Yun bajó su cabeza. El hombro derecho de Su Ling tenía la armadura de guerra cubierta de sangre. ¡Él no quería que los rebeldes supieran que tan seria era la herida!


[1] Su significa antiguo mientras que Ling significa elevarse alto.

La cuarta parte de este capítulo ya se encuentra disponible en la edición 36 de Kovel Times

Una respuesta en “Una generación de militares – Capítulo 12: El rescate de Han Shu (3)”

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

 

error: Contenido protegido