Reencarné como la villana de un juego otome, pero me volví demasiado malvada – Capítulo único

Traducido por Kavaalin

Editado por Raine

Corregido por Sharon


Hablando con honestidad, pienso que fui demasiado lejos.

Sin importar que hubiese reencarnado en un juego de chicas que jugué en mi vida pasada como la villana que moriría dependiendo de la ruta; aún así, odiaba vivir con miedo, a la sombra de la heroína.

Como era de esperar, pienso que disfruto demasiado del rol de villana.

—¡Eres muy cruel! No importa cuánto me odies, ¡que rompieras mi cuaderno…!

La voz llena de aflicción de la heroína resonó alrededor del salón de clases. Subsecuentemente, los miembros del Consejo Estudiantil irrumpieron en el salón siguiendo el grito de la heroína. En ese instante entendí.

Ya veo, así que esto es así.

Este es un evento indispensable para el final del harem inverso del popular juego de chicas “Tú y tu historia escolar”, acortado como “Tu Historia”.

Es el evento en donde la villana, en otras palabras, yo… seré pillada con las manos en la masa mientras acoso a la heroína, y los influyentes chicos guapos del Consejo Estudiantil vendrán a salvarla. Al hacer eso, nacerá un sentido de solidaridad entre la heroína y los objetivos de captura y entonces será una línea directa hacia el harem inverso.

Tal vez… Ella, la heroína, debe estar impaciente. Al parecer, es una persona reencarnada como yo y debió sentir la crisis de terminar en el final normal después de la graduación ya que yo no la acosaba sin importar qué.

Tal vez por eso pretende ser acosada: ella misma rompió el cuaderno y me invitó al salón con un mensaje falso. Y entonces, el evento fue generado a la fuerza.

Ya veo, parece que me dirigí hacia una trampa. Si esto fuera a ir como está escrito en “Tu Historia”, yo sería arrinconada por los influyentes chicos guapos del Consejo Estudiantil y mi destino sería suicidarme después de ser echada de la escuela.

Como sea, no estoy ni un poco nerviosa. Y eso es porque, después de todo, he ido demasiado lejos.

—¡Así que tú eres la criminal, Kageyama Yuiko! —La heroína me apuntó con un dedo mientras decía mi nombre completo como si fuera una detective que había encontrado al verdadero culpable.

“Kageyama Yuiko” era mi nombre. Ya que había pasado un tiempo desde que me habían hablado sin honoríficos, lo encontré refrescante.

La egocéntrica heroína ya se estaba sintiendo victoriosa. En su imaginación, tal vez ya se encontraba en el final del harem inverso. O tal vez fantaseaba conmigo siendo destruida por el Consejo Estudiantil.

Si ese es el caso, lo siento. Nadie responderá a tus expectativas.

—¡¿Piensas que puedes escaparte después de hacer algo así?! Oigan chicos, díganle algo… —Con esas palabras, se dio vuelta hacia los objetivos de captura detrás suyo.

Y entonces… vió algo inconcebible.

El egocéntrico Presidente del Consejo Estudiantil e hijo de una distinguida familia, Gadou Motoharu; el Vicepresidente e hijo del Gobernador de la Prefectura, Yanagita Shuuya; el Secretario y tercer hijo del Jefe de la Policía, Akimoto Yuu; el Tesorero e hijo del Director de la Academia, Mineuchi Soutarou y el Encargado de asuntos generales y popular ídolo, Takiura Renji… Todos me miraban asustados y temblando.

—¿Eh?

La heroína estaba estupefacta. Se encontraba en un estado en el cual no entendía qué estaba pasando. Aún así, lo ignoró y miró al primero de los chicos.

—S-S-S-Señorita Kageyama… ¿Cuál es, emm, el significado de esto…? —dijo con un tono de voz inesperado que no se ajustaba a la habitual apariencia del “Príncipe egocéntrico”, Gadou Motoharu.

Si las fanáticas de “Tu Historia” vieran sus lamentables apariencias, seguramente se desmayarían.

—¿Significado? ¿De qué significado estás hablando, Gadou? —le pregunté con una sonrisa en el rostro.

—Q-Quiero decir… de e-esta situación…

—¿No puedes entender esta situación? Qué coincidencia, yo tampoco. De todos modos, si creemos en las palabras de la chica de allí, soy culpable de acosarla y ustedes, chicos del Consejo Estudiantil, quienes me pillaron con las manos en la masa, deberían aprehenderme… Parece que es esa clase de situación.

—¿E-En… serio?

—Sin embargo, no tengo recuerdos de haber hecho algo así. Por eso me gustaría escuchar la opinión imparcial del Presidente del Consejo Estudiantil Gadou. Como la opinión del hijo de tal distinguida familia y el próximo jefe planeado del Grupo Gadou, Gadou Motoharu… ¿Crees que soy culpable?

—N-No… Eso es, emm… Uuh… —El egocéntrico Presidente ya estaba al borde de las lágrimas, siendo aplastado por la presión.

¿Era tan fácil de vencer, aunque normalmente era un sádico?

—Bueno… Entonces, Vicepresidente del Consejo Estudiantil Yanagita. ¿Qué piensas tú?

—Yo… Yo…

—Vi a tu padre, el Gobernador Yanagita en las noticias de ayer. Hablaba sobre el problema del acoso. Decía que era un acto imperdonable.

—Yo, yo…

—Vaya, ¿qué pasa? ¿Estás llorando? Pobrecito… ¡Ya sé! Traeré dulces la próxima vez, así que deja de llorar, por favor. Serán dulces de maní, realmente deliciosos, ¿sabes?

—¡Por favor, detente! ¡No lo digas! Por favor, te lo ruego.

¿Qué? ¿Yanagita odia el maní? El Gobernador Yanagita acepta con deleite los maníes [1] de varias personas… Parece ser que los gustos de padre e hijo son diferentes.

—No obstante, realmente pienso que sería un serio problema si hubiera acoso a alguien. Aunque romper un cuaderno es de clase baja, es un crimen apropiado. Dime, Yuu, como el hijo del Jefe de la Policía, ¿no vas a arrestarme?

—¿Eh? ¡Eso está fuera de cuestión! ¡No puedo hacer algo así!

—¿Pero qué estás diciendo? Claro que puedes. Es posible arrestar a alguien a quien has pillado con las manos en la masa, ¿cierto? Además, a pesar de que tienes una complexión pequeña y adorable, eres el amo de los arrestos, ¿no? Retenerme es fácil para ti, ¿no lo crees?

—Eso es imposible, imposible, ¡imposible! ¡Ponerle las manos encima a Kageyama es impensable!

Buuh… Aún cuando quería ser arrestada como una villana por una vez, ¿realmente no hay servidores públicos en esta nación que puedan hacerlo? No hay nada que se pueda hacer, sigamos preguntando.

—Entonces, Mineuchi. Me gustaría escuchar tu…

—Lo siento, lo siento, lo siento, lo siento, lo siento, lo siento, lo siento, lo siento, lo siento, lo siento, lo siento, lo siento, lo siento, lo siento, lo siento…

—Ups, parece que no está en condiciones de hablar.

El hijo del Director de la Academia, a quien ni los profesores podían contradecir, se mantuvo disculpándose asustado… y dando un mal ejemplo para otros estudiantes con esa actitud.

—En ese caso, Takiura, ¿qué vas a hacer tú?

—Yo…

—¿Qué pasa? ¿Por qué tu encantador rostro está tan sombrío?

—En realidad no soy encantador ni nada de eso…

—No necesitas ser humilde, Takiura. Eres muy encantador. Tanto, que quisiera mostrarles esa fotografía a todas tus admiradoras. Seguramente notarán un nuevo aspecto tuyo.

—Por favor, no. Te lo ruego. Cualquier cosa menos eso…

—¿En serio? Qué lamentable.

En verdad era lamentable. La verdadera personalidad de Takiura estaba expuesta en esa fotografía y se sentía muy encantador, así que obtendría nuevas admiradoras… Pero no hay nada que se pueda hacer si la persona misma no quiere.

—¡H-Hey! ¡¿Qué pasa, chicos?! ¿Por qué están temblando? ¡Hey!

Mientras tanto, la voz de la heroína resonaba en vano: los cinco solo temblaban sin moverse.

Aquí no había lugar ni siquiera para la amada heroína, aunque originalmente se suponía que ellos me echarían de la escuela.

En serio, que cruel desenlace.

Lo diré de nuevo.

Honestamente, he ido demasiado lejos.

Si de todos modos me iban a atrapar, pensé que bien podía ir más lejos y terminé tomándome el rol de villana demasiado en serio.

Con la apariencia de un infante de quien nadie sospecharía, busqué por información peligrosa. Así es, como nadie sospecharía de mí siendo una niña, escuché a escondidas y tomé fotografías, manipulé despreocupadamente a las personas y, a veces, los amenacé para que cooperaran.

Corrupción, malversación, escándalos… Había aprovechado tales debilidades de la gente influyente.

Actualmente, yo era la mayor bribona, dominando varias áreas desde las sombras. Unos chicos guapos que tomaban prestado el poder de sus padres no eran oponentes para mí.

Querida, en serio… Como pensaba, fui demasiado lejos.

¿Seré feliz si esto termina? Ya que todo salió bien al final, consideremos que los resultados son aceptables.

Con tal convencimiento… empecé a moverme para terminar con la heroína.

En realidad, no la odio ni nada. De hecho, tengo una buena impresión de ella, quien fue malévola conmigo debido al final del harem reverso. Desafortunadamente, haré que la heroína se dirija hacia el final malo.

En cualquier caso, soy la villana.

No necesito una razón para destruir a la heroína, ¿verdad?


 [1] Maní = sobornos

Sharon
Cuando empecé a leer este one-shot, no sé por qué no me esperaba la gran cosa. Realmente lo amé. Me encantaría ver esto en una historia larga, pero supongo que tendré que contentarme con esto nada más.

Una respuesta en “Reencarné como la villana de un juego otome, pero me volví demasiado malvada – Capítulo único”

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