Traducido por Naremi
Editado por Sakuya
—¡Es un engaño! —Baili Haoxuan resopló fríamente—. Solo espera hasta que tu hermana regrese, ¡quiero ver cómo actuará ella entonces!
Una luz despiadada pasó por los ojos de Su Wanjing.
—¡Incluso si esta basura tuvo la suerte de salir con vida esta vez, no pasará mucho tiempo hasta que muera!
La lucha de Baili Hongzhuang con los lobos inferno hizo que todos la reevaluaran. ¡Absolutamente no deben dejar que Baili Hongzhuang se lleve la atención de Baili Yuyan!
Tan pronto como el banquete de caza haya terminado, buscará un asesino a sueldo. ¡No importa qué, necesitaba a esta basura muerta!
Muy rápidamente, los cultivadores comenzaron a abandonar los cotos de caza. Al ver a sus hijos salir a salvo, los diversos funcionarios no pudieron evitar respirar un suspiro de alivio.
Independientemente de los logros de sus hijos, siempre que estuvieran sanos y salvos, serían felices.
Pero mientras que casi todos los cultivadores estaban fuera de los cotos de caza, los dos cultivadores más esperados de la multitud, Xuanyuan Huan y Baili Yuyan todavía no abandonaban el coto de caza durante mucho tiempo, la duda apareció en los ojos de todos.
—¿Por qué su alteza, el príncipe heredero todavía no ha salido? ¿Podría seguir peleando con el lobo tormenta?
—Tal vez el lobo tormenta es muy difícil de tratar. Entonces, tomarse mucho tiempo sería natural.
Al escuchar a los cancilleres de la corte hablar en el escenario, todos los cultivadores de la competencia miraron a Baili Hongzhuang.
¿Xuanyuan Huan y Baili Yuyan estaban matando al lobo de la tormenta?
Jaja, el verdadero lobo tormenta ya fue asesinado por Baili Hongzhuang, ¡ah!
El tiempo pasó lentamente. Finalmente, todos vieron una figura amarilla brillante salir del campo de caza.
—¡Huan’er!
Al ver la túnica familiar, Jiang Jinying no pudo evitar levantarse y sonreír. Finalmente salió.
Pero cuando Jiang Jinying vio el cuerpo de Xuanyuan Huan, su cara no pudo evitar ponerse pálida.
¡Porque sus brillantes túnicas amarillas estaban teñidas de rojo!
Podía decir por la cara de Xuanyuan Huan que su lesión era grave. Jiang Jinying inmediatamente se acercó y llegó a Xuanyuan Huan.
¡Xuanyuan Huan era su único hijo!
Ahora, al verlo sufrir una lesión tan grave, su corazón fue apuñalado con dolor.
—Huan’er, ¿qué te pasó? —La cara de Jiang Jinying estaba llena de preocupación, a punto de tirar de la mano de Xuanyuan Huan. Pero cuando ella tiró, la cara de Jiang Jinying se puso aún más pálida.
—T-tu mano…
La cara de Xuanyuan Huan era amarga. Nunca pensó que hubiera salido de la competencia de caza con semejante presencia.
La cara de Xuanyuan Yutian también cambió. Aunque sabía que siempre habría víctimas en la competición de caza y que este año era incluso más difícil que los anteriores, creía que la fuerza de Xuanyuan Huan era suficiente.
Pero ahora Xuanyuan Huan no solo estaba lastimado, sino que estaba gravemente herido.
Todos los cancilleres de la corte quedaron en shock. Xuanyuan Huan estaba en la etapa inicial del misterioso eón, pero aún resultó gravemente herido. De esto se podía ver claramente cuán fuerte era realmente el lobo tormenta.
Los cultivadores que compiten no pudieron evitar aspirar un frío aliento. La mano de Xuanyuan Huan ya estaba completamente mutilada.
Incluso como el príncipe heredero, todavía no era fácil para él curar completamente su herida.
Ya se había preparado para que los médicos imperiales asistieran a Xuanyuan Huan y le atasen la herida antes de tratar también las lesiones de otro cultivador.
Al ver a Xuanyuan Huan tan gravemente herido, Baili Zhentao se puso algo pesado. Incluso ahora, todavía no han visto salir a Baili Yuyan.
Sonó un fuerte gong. ¡La competición de caza había terminado!
La entrada del campo de caza fue cerrada. Sólo se abriría el día de la próxima competición.