Felicidades Emperatriz – Capítulo 3: Fuerte


Al salir por la puerta trasera. Hua Jin Lan, siente con fuerza, la necesidad de reunir las monedas de este mundo, para comprarse un abrigo de invierno. Como tal, su primer destino fue la Gran Torre Lin

La Gran Torre Lin, el burdel más extravagante de la Capital Imperial en la Ciudad Gloria. Junto, con el Pabellón Ti Tou, dan forma a las torres gemelas. Situados en ambos extremos de la ciudad, se les conoce como “El paraíso de la Ciudad de la Gloria”

En tal ciudad, y sin mucha ayuda de la Familia Hua, no le fue fácil vivir, a la anterior huésped. Cuando recibía la comida, apenas le era suficiente para sobrevivir. Sin embargo, ella era capaz de visitar el Pabellón Ti Tou. Naturalmente tiene que haber alguna fuente de ingreso en alguna parte. Por supuesto, que ella no tenía ninguna habilidad especial, lo único que hacía era, estirar la mano y pedir dinero.

Cuando la huésped anterior tenía solo cinco años, salvo a una mujer de morir. El término “salvado” se usa   flojamente, lo único que había hecho era, darle la mitad de su comida a la asesina, permitiéndole vivir y cambiar su camino. Con el fin de devolver el favor, cambió su nombre a Su Huan y se fue a la Gran Torre Lin a trabajar. Con el fin de esconderse de su organización previa, Su Huan destruyó su rostro y se ocultó en medio de bellezas.

Por lo tanto, era una rutina mensual del huésped anterior, el ir a recoger cuentas con Su Huan, ansiosamente, y lo recibía en el Pabellón Ti Tou.

—Joven Ama, ¿vamos a visitar a la hermana Su Huan?—Chu Yun pregunto–En ese caso, permítame comprar un poco de Pastel Osmanthus, ¡a la hermana le va a encantar!

Hua Jin la miro por encima —¿Aún tenemos taels?

[Nota sobre Taels: Moneda antigua china]

Al presionar la cartera Chu Yun respondió—Mei Er sólo nos dio un poco, lo suficiente como para proporcionar solo la comida de este mes. No es suficiente para los viajes de la Señorita al Pabellón Ti Tou.

Hua Jin suspiro levemente, levanto la mano y toco la frente de Chu Yun—No se preocupe, no voy a arrebatar sus taels nunca más.

—Joven ama…considero que usted está siendo especialmente buena hoy.

—Bien entonces, ¡corre rápido ahora! Jia Yue y yo vamos a estar esperando por ti acá.

Con Chun Yun fuera, Hua Jin encontró una zona con sombra para descansar. Seguro, los gastos de manutención son ajustados.

—¿Dónde están las personas de la casa?— Pregunte a Jin Lan, mientras recuerdo vagamente que tomaron un viaje a alguna parte, pero no estaba segura de adonde.

—¿Se refiere al Maestro y a Señora?—Yue Jiao asombrada con la pregunta, giro su cabeza, y me explicó– él Maestro y la Señora fueron a la Montaña Xiang Zi de visita y no volverán pronto.

—¿Montaña Xiang Zi?

—Es el lugar donde se encuentra el maestro de artes marciales Jiao Yue. Esta próxima primavera habrá un encuentro de artes marciales, como el líder de los cuatro pilares principales, es costumbre, que los enviados den la bienvenida en la Montaña, como preparación para el encuentro.

El Imperio Yue es bien conocido en la tierra por mantener las artes marciales. Hay cuatro familias principales, que actúan como pilares, con la Casa Hua actuando como el líder. Todos los años, la Familia Hua  invita a los maestros de artes marciales a la Montaña Xiang Zi, con el fin de probar las habilidades de cada familia.  Desde que las artes marciales tienen un nivel tan alto, no es de extrañar que ella haya sido abandonada por su familia.

La expresión de Hua Jin, se volvió sombría, pero fue interrumpida por una voz familiar.

—¡¡¡¡AH, MIS TARTAS!!!!

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