¡No quiero ser Princesa! – Capítulo 110: Él y su cambio

Traducido por Lucy

Editado por Ayanami


¿Qué debo hacer…? Lidi es demasiado linda.

Después de haberla recuperado del príncipe Maximiliano por los pelos, siento que su actitud hacia mí ha cambiado un poco. Puede que solo sea mi arrogancia. Sin embargo, siento que, en su mirada dirigida a mí, ha comenzado a mezclarse un evidente afecto. Así lo demuestran sus acciones de ayer en la oficina, y ahora mientras me está observando desde detrás de un pilar. Una mirada mezclada con sentimientos claramente diferentes a los de antes. Muestra un afecto imposible de ocultar mientras me observa con atención. No puedo evitar encontrar que me mira con ojos cosquilleantes. Su cara muestra que tiene la intención de esconderse. Por lo que, Alex tenía una cara complicada mientras se acercaba a mí. Quiero decir…, no puedo evitarlo, ¿verdad?

Hasta ahora, Lidi nunca me había dirigido una mirada tan directa. Me gustaría ver a un hombre capaz de mantener la compostura cuando lo mira la mujer que ama con los ojos llenos de pasión. Suponiendo que hubiera un hombre así, seguro no le gustaba tanto esa mujer. Incapaz de aguantar, levanté la cara y me encontré con sus ojos. Cuando ella me sonrió con dulzura en un arrebato, le devolví la sonrisa como si estuviera tentado. Sus mejillas se tiñeron de un rojo intenso, como una manzana. Linda… Demasiado linda. Esa apariencia es maravillosa y adorable. Quién hubiera pensado que estaría sufriendo una molesta enfermedad llamada amor. Lo entiendo. Lo entiendo, pero no puedo parar, no quiero.

Pensando en que ella se sintió asustada anoche, solo dormí abrazándola cerca. Había pasado por una experiencia desagradable. No quise forzarla a hacerlo cuando su cuerpo y su mente debían estar cansados. Su cuerpo, al que abracé con firmeza, era suave y cálido, su aroma al acurrucarse de forma espontánea contra mí me hacía cosquillas en las fosas nasales, era insoportable. Mentiría si dijera que no fue doloroso, pero pensando en ella pude soportarlo. No me arrepiento de no haberlo hecho, pero no se puede negar que estaba hambriento en consecuencia. No se podía evitar… Me reí de mí mismo por desear ver solo su versión llena de lujuria. Y, los ojos de Lidi se apartaron de mí. Cuando seguí su mirada preguntándome qué había pasado, vi a Alex caminando hacia ella. Desagradable… Teníamos un precioso buen humor.

Me reprendí por tener pensamientos tan lamentables. No había necesidad de ser impaciente. Al final, sus sentimientos, que no podía entender, tomaron una forma clara. Aun así, no conozco su grado. Es insoportable que se haya alejado. No importaba si era poco a poco, quería llegar a gustarle. Y al final, quiero obtener su amor. Si es ella, cuando llegue ese momento, seguro me dirá esas palabras. Por eso, hasta entonces, por muy hambriento que esté, no se lo pediré. No quiero apresurarla. Hasta que me lo diga, pienso tratarla como hasta ahora para que se enamore de mí, la esperaré con obediencia. Estoy seguro de que ese momento no está lejos. La forma en que me miraba ahora me hacía creer eso.

—Estaré esperando así que… cae rápido, Lidi.

Así murmuré y, sacudiendo mi desgana volví al despacho.

♦ ♦ ♦

—Tonto, Freed.

—¿Qué es eso de la nada?

Una hora más tarde. Alex volvió con una cara de abatimiento. Cuando abrió la puerta, pronunció esas palabras.

—No… Qué digo… Creo que tú también lo tienes difícil.

—¿Con qué? No entiendo a dónde quieres llegar.

Mientras yo fruncía el ceño sin entender a qué se refería, él negó con la cabeza con una expresión cansada que no era nada.

—Tú… bien hecho por amar a Lidi, podría decir… te respeto.

—Qué es eso de la nada. ¿Qué quieres decir?

Aunque sea su hermano mayor, no voy a perdonar que se burle de Lidi. Cuando fruncí el ceño al pensar así, Alex se rió de forma seca.

—En realidad, no me estoy burlando de ella. Es porque lo que dice Lidi está muy distorsionado. Solo me cansé un poco.

—Ah, no es un aspecto lindo.

Cuando afirmé con una cara seria, Alex bajó los hombros cabizbajo.

—Después de todo, eres increíble… Te voy a dejar a mi hermanita.

Cuando me dio una palmada en el hombro al decir eso, aunque sentí desconfianza, asentí. Por supuesto que estoy dispuesto a aceptarla por completo. Mejor dicho, quiero aceptarla ahora.

—Después de todo sigo sin entender a dónde quieres llegar, ¿Lidi te ha dicho algo?

—Algo así. Pero no sé nada. Averígualo tú mismo.

—No entiendo muy bien lo que dices.

—No pasa nada si no lo entiendes. De todos modos, lo harás tarde o temprano.

—¿De verdad?

Mientras se acercaba a mi escritorio, Alex dejó escapar un gran suspiro. Luego sacudió la cabeza varias veces para cambiar.

—Ah, Freed. ¿Has comprobado el estado de la barrera…? ¿Cómo fue?

—Ah sí, fue increíble.

—¿Increíble?

Recordando lo que vi hace un rato, también cambié mis pensamientos. Después de escuchar la historia de Lidi ayer, revisé el estado de la barrera en las profundidades del jardín de los aposentos reales.

—La barrera desapareció por completo. No había ningún rastro. Parecía que nada había estado allí desde el principio. Siendo honesto, me inquieta que se haya filtrado la existencia del camino secreto.

Un camino entre el área general y los aposentos reales no puede dejarse como está. Volví a poner la barrera, pero por qué demonios había ocurrido eso.

—Si es así, no se podía evitar que Lidi se desviara. No tiene sentido ocultarlo cuando se convirtió en un camino por completo ordinario. En especial si se filtró a los asesinos, podría ser utilizado para traspasar el lugar. Da miedo pensar cuánto tiempo ha estado en ese estado.

Puedes usarlo para llegar con facilidad a la parte más profunda del Palacio Real. No puedo mantener la calma pensando que ese camino podría haber estado expuesto durante mucho tiempo.

—¿Cuándo fue la última vez que revisaste la barrera?

—Como hace dos meses… Fue cuando fui al baile de máscaras. A mi regreso, puse una barrera más fuerte en lugar de una simple. No pensé que volvería a usarla.

—En ese momento, eh…

Usé ese camino secreto cuando iba y venía de los bailes de máscaras. Desde el principio tenía la intención de que ese baile fuera el último, pero después de conocer a Lidi solo podía pensar en ella, así que en cuanto volví al castillo sellé el camino con una barrera. Aunque no pudiera encontrarla, nunca abrazaría a otra mujer que no fuera ella. Estaba lleno de esa determinación.

—Siendo sincero, me sorprende que la barrera se haya deshecho. Tenía la intención de poner la mejor barrera que pudiera.

Una barrera que no pudiera ser rota con facilidad ni siquiera por mí mismo. Porque también era una prueba de mi determinación, usé todo lo que pude. Que se deshaga con tanta facilidad es un golpe a mi orgullo.

—¿Tienes alguna idea acerca del culpable?

—No hay manera de que lo haga.

Cuando declaré eso, Alex regresó un “vaya”.

—Will es el único que se me ocurre que podría romper la barrera de Freed.

—Creo que no fue un mago. No quedó ningún rastro de artes mágicas.

—Entonces, ¿cómo se rompió?

—También quiero saber eso.

No había ningún rastro de artes mágicas. Si alguien las usaba, siempre quedaba algo. Sin embargo, no había ninguno, al contrario, no quedaba nada de la barrera que había puesto. Era como si no existiera en absoluto.

—Veamos… Más que deshacerse, puede ser más correcto decir que se borró.

Al decir esto mientras recordaba la escena de hace un rato, Alex también comenzó a reflexionar.

—Borrado… eh. ¿Tuviste la impresión de que nunca había existido?

—Ah, así es. Eso podría ser lo más acertado para describir lo sucedido.

—Usuario de neutralización…, tal vez.

—De ninguna manera.

Rechacé las palabras de Alex en el acto. Usuario de neutralización. Aunque la literatura en verdad los menciona con claridad, en realidad son una existencia rara.

—No, yo también lo creo… Pero la sensación que has descrito parece similar al fenómeno que provocan los usuarios de neutralización.

—Eso es cierto…

No puedo negarlo. Como dice Alex, lo que está escrito en la literatura sobre la capacidad de los usuarios de neutralización se aplica a la perfección a la situación actual. Sin embargo, es difícil imaginar que un usuario con dicha habilidad esté cerca. En primer lugar, un usuario con esa habilidad estaría hace tiempo bajo la protección de un país… No sufriendo o de paso en el nuestro. Después de un pequeño quejido, Alex se levantó.

—Nn, no sé… Intentaré preguntarle a Will.

—Ah, claro. Si hay una mínima posibilidad, no podemos permitirnos ignorarla. De paso, pregúntale por la herramienta mágica de ayer.

Mientras aprovechaba para instruirlo, Alex habló mientras se rascaba la cabeza.

—De acuerdo. Bueno, puede que haya dicho eso, pero tampoco creo que sea un usuario de neutralización.

—Aun así, mientras la posibilidad no sea nula, debemos investigar. Eso es todo, pero para estar seguro me gustaría tener un listado de los magos que podrían romper la barrera. Por supuesto, tanto dentro como fuera de nuestro país.

Al escuchar mis palabras, con una expresión tensa, Alex demostró a la brevedad su reconocimiento.

—Sí, lo entiendo. Como es posible que nuestro lugar más importante haya sido invadido, lo investigaré a fondo.

Sin querer me quejé ante este Alex.

—Pero de verdad, los problemas empezaron de repente. Durante el año que no estuviste aquí, nunca fue tan agitado.

Al escuchar eso, Alex sonrió de forma significativa.

—Por supuesto, decidiste involucrarte con Lidi. Ya lo he dicho antes, pero ella es una extraordinaria alborotadora. Mientras estés involucrado con ella, no estás destinado a la paz y la tranquilidad.

Así ha sido siempre para mí, mientras Alex se reía con alegría, yo me sentía celoso. Si me causa algún problema, lo acepto con una sonrisa. Mientras tenga que ver con ella, los problemas o lo que sea no son nada. Más bien, no puedo dejarlos en manos de otros. Es solo para mí.

—Si Lidi es la causa, yo me encargo de todo. No tienes que hacer nada.

—Oi, solo estaba bromeando. No pongas una cara tan seria.

Sonreí con alegría ante aturdido Alex y declaré.

—No hay ningún problema, aunque sea serio, ¿verdad?

—Tú… Si Lidi lo deseara, conquistarías al mundo entero…

Pensé un poco en la queja de Alex. Lidi deseando que conquistara el mundo… eh. Habiendo llegado a una conclusión, asentí una vez.

—Si Lidi de verdad lo deseara. Pero es una pregunta sin sentido. Ella nunca diría o pediría algo así.

—Por supuesto que lo entiendo. Sigo siendo su hermano mayor, ¿de acuerdo?

—Si insistes en ello, no hagas preguntas tontas. Ahora bien, ¿terminamos todo? Quiero volver a mi habitación rápido.

Al insinuar que quiero volver al lado de Lidi, con un sí, Alex se encogió de hombros y comenzó a moverse.

—Al escuchar de ti que quieres regresar a tu habitación. El efecto prometido de mi hermanita es inmenso.

—Así es… Incluso yo estoy sorprendido.

Pensando que era así, asentí sin negarlo. De verdad, nunca había pensado que un día así llegaría. Nunca pensé que desearía estar al lado de alguien a quien quiero tanto. Mis días son más felices de lo que había imaginado, cada día era brillante y colorido.

—Nunca hubiera pensado que tu pareja sería Lidi pero… me alegro.

—Gracias…

Rezo para que puedas encontrar a tu amada… Hace un año, estas fueron las palabras con las que se fue. Todavía estaba fresco en mi memoria, cómo durante nuestra despedida justo antes de que se fuera a su territorio, le contesté que sería difícil. En aquel momento no tenía ninguna expectativa. Recordando eso y reflexionando sobre mi felicidad actual, una vez más le dije palabras de gratitud.

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