Violet Evergarden – Folleto 11: “Si” Dietfried Bougainvillea

En los límites de su soledad, cierta bestia salvaje había encontrado esperanza. La esperanza más fuerte y a la vez frágil que había visto hasta entonces entre los seres vivos.

La esperanza de la bestia, Dietfried Bougainvillea, era ese tipo de persona. Seguí leyendo “Violet Evergarden – Folleto 11: “Si” Dietfried Bougainvillea”

Violet Evergarden – Folleto 10: Gilbert Bougainvillea y el sueño transitorio

Y así, amarían el paso de su tiempo por toda la eternidad.

El niño se despertó solo en una habitación llena del sonido de la lluvia.

Llovía suavemente afuera. El chico, con el pelo del color del crepúsculo y los ojos verde esmeralda, miraba por la ventana, pareciendo un poco feliz. Seguí leyendo “Violet Evergarden – Folleto 10: Gilbert Bougainvillea y el sueño transitorio”

Violet Evergarden – Folleto 9: “Si” Violet Evergarden

Traducido por Maru

Editado por Yusuke


Cierto hombre recogió una bestia salvaje.

Era hermosa hasta un punto asombroso. Catastróficamente tonta. Irónicamente ignorante y violenta.

Sin embargo, también era un tipo de bestia extremadamente rara, que tenía apego por las personas y las obedecía.

Su pelaje era dorado. Sus ojos eran de un azul límpido. Seguí leyendo “Violet Evergarden – Folleto 9: “Si” Violet Evergarden”

Violet Evergarden – Folleto 7: El pequeño ángel de Oscar

Los escritores eran como sombras.

Lloviera o hiciera sol, permanecían en sus diminutas habitaciones, escribiendo. Eso era todo. Era un trabajo insípido y, a decir verdad, solitario. Nadie imaginaba nunca quién estaba detrás de las historias que leía. Si lo hicieran, se decepcionarían. Seguro que sí. Nadie quería descubrir que, tras las historias que amaban, había alguien tosiendo penosamente mientras, a pesar de todo, sostenía la pluma. Seguí leyendo “Violet Evergarden – Folleto 7: El pequeño ángel de Oscar”

Violet Evergarden – Folleto 6: El sastre y la muñeca de recuerdos automáticos

Traducido por Maru

Editado por Yusuke


Ella era una chica que ocultaba una belleza salvaje. Su cabello dorado parecía teñido con estrellas empolvadas del cielo nocturno. Sus ojos azules parecían joyas de la mejor calidad que uno encontraría engastadas en coronas reales. Materiales de la mejor calidad. Sin embargo, no llevaba maquillaje, simplemente se había despertado, se había lavado la cara, se había vestido y había venido hasta aquí. Su atuendo parecía nada más que eso.

Estaba vestida con prendas que probablemente le habían dado los ancianos. Las telas eran buenas pero no elegantes. El vestido básico de una pieza parecía algo que una pareja de ancianos había comprado para su nieto. Le sentaba bien. Sin embargo, esta chica encajaba mejor con algo más audaz. Seguí leyendo “Violet Evergarden – Folleto 6: El sastre y la muñeca de recuerdos automáticos”

Violet Evergarden – Folleto 4: Amy Bartlett y la lluvia de flores

Desperté en la habitación aún oscura.

Probablemente llovía en ese momento. Las gotas golpeaban las ventanas como pidiéndome que las abriera. El viento también parecía soplar con fuerza. Si alguien ya estaba levantado y afuera, tenía que ser un santo. Seguí leyendo “Violet Evergarden – Folleto 4: Amy Bartlett y la lluvia de flores”

Violet Evergarden – Folleto 3: Charlotte Abelfreya Fluegel y el Reino del Bosque

En ese momento, me encontré pensando: Ah, quizá si desapareciera, si me desvaneciera ahora mismo, nadie se daría cuenta.

Una vez que ese pensamiento echó raíces, ya no pude pensar en nada más. Antes de darme cuenta, mis manos y pies se movían solos. Lentamente, me puse en pie y abandoné aquel lugar. Nadie me llamó. Nadie intentó detenerme. Seguí leyendo “Violet Evergarden – Folleto 3: Charlotte Abelfreya Fluegel y el Reino del Bosque”

Violet Evergarden – Folleto 2: Leon Stephanotis y la primera estrella

Traducido por Maru

Editado por Yusuke


Una vez había visto un cometa que solo aparecía cada doscientos años junto con una chica.

Había sucedido hace años. Esa fue una hermosa noche. Incluso ahora, todavía puedo recordar vívidamente el centelleo de las estrellas que observamos ese día mientras nuestros cuerpos se estremecían ante la frialdad del viento nocturno. Como joyas esparcidas sobre un dosel oscuro, el cielo estrellado fue suficiente para hacer que uno se olvide incluso de respirar. Al pasar, arrastrando su cola blanca, el meteoro parecía un hada en vuelo con escamas de insectos esparcidas por sus alas.

Cada vez que miraba un hermoso cielo nocturno, pensaba muchas veces, “Aah, ahora que he marcado este momento en mi corazón, no me arrepentiría si alguien cosechara mi vida”. Si perdiera la vida, quería que fuera en una noche estrellada como esa. Quería morir con el recuerdo de presenciar algo impresionante. Seguí leyendo “Violet Evergarden – Folleto 2: Leon Stephanotis y la primera estrella”

Violet Evergarden – Folleto 1: Ann Magnolia y su decimonoveno cumpleaños

 Traducido por Maru

Editado por Yusuke


Había varias cosas que tenía que hacer en el día especial llamado hoy.

Me despertaba por la mañana y miraba el clima. Como si comenzara un cuento, volvía las cortinas y miraba por la ventana.

La radiante luz del día brillaba sobre mis ojos. Hoy estaba soleado. Saber eso me hizo feliz. Que me había despertado envuelta en el sol. Que no tenía que preocuparme de que mi carta se mojara con la lluvia. Era casi como si la verdad de estos hechos estuviera bendiciendo el día. Seguí leyendo “Violet Evergarden – Folleto 1: Ann Magnolia y su decimonoveno cumpleaños”

Violet Evergarden Ever After – Capítulo 5: Cazadores de sueños y la muñeca de los recuerdos automáticos

Lo más probable es que todos los continentes tuvieran una ciudad así.

Una ciudad a la que se dirigían las chicas solitarias que no tenían adónde ir y los chicos que solo tenían grandes sueños después de huir de sus hogares, llevando solo un poco de equipaje y dinero para el viaje. Un lugar donde apostarían toda su vida para emprender un gran desafío al subir al tren nocturno. Tanto la gente que conocía esa tierra como los que no, aconsejaban a otros que fueran a ella si tenían un sueño que querían realizar. Les decían que fueran a Alfine, la ciudad de los cazadores de sueños. Seguí leyendo “Violet Evergarden Ever After – Capítulo 5: Cazadores de sueños y la muñeca de los recuerdos automáticos”

Violet Evergarden Ever After – Capítulo 4: “Querido tú” y la muñeca de recuerdos automáticos

Traducido por Maru

Editado por Yusuke


Una carta era lo mismo que tener el corazón sellado en un sobre. Las palabras que uno nunca podría decir frente a la otra persona nacían fácilmente en letras. Herirse y mostrar amor fue tan simple, precisamente porque la otra parte no estaba a la vista. Por eso tuvo un efecto más letal y provocó más soledad. Lo que se podía sentir por el olor a papel y tinta, así como por las cadenas de caracteres que quedaban allí, era “ausencia”. Y también el “tiempo” que el otro había gastado por ti. Cuanto más extrañara uno al otro, más solos se sentirían ante el hecho de que solo se habían expresado sus sentimientos. Sin embargo, incluso si fueran solo sus sentimientos, querían transmitirlo. Por eso la gente tomaba sus bolígrafos en la mano y escribía “querido”. Seguí leyendo “Violet Evergarden Ever After – Capítulo 4: “Querido tú” y la muñeca de recuerdos automáticos”

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