Traducido por BeeMiracle
Editado por Ayanami
Por un largo tiempo, Shi Jin no reaccionó, y se mantuvo de pie, cubierto de cintas y confeti.
Lian Jun esperó a su lado, guardando silencio.
Xiao Si gritó de sorpresa, pero su voz disminuyó y preguntó ansioso.
【¿Qué pasa JinJin?】 En lo que a él respecta, el cumpleaños de Shi Jin y ‘Shi Jin’ es el mismo día, así que esta fiesta sorpresa, realmente, es para él.
—No es nada.
Shi Jin volvió a sí mismo después de escuchar la voz de Xiao Si en su mente. Levantó la mano y se limpió la cara, luego, sonrió y sacudió las cintas de su cabeza. Girando para mirar a Lian Jun, sintió el sobre rojo en su mano y preguntó intencionalmente:
—Jun-shao, ¿qué me diste? ¿Por qué parece ser una tarjeta y no dinero?
Lian Jun lo miró y lo ignoró, moviendo su silla de ruedas, con la intención de entrar en la sala de estar.
Shi Jin agarró audazmente el reposabrazos y arrastró la silla de ruedas hacia atrás. Se inclinó y extendió sus manos hacia Lian Jun, luego, preguntó mientras trataba de ocultar su nerviosismo:
—Jun-shao, ¿puedo…puedo abrazarte?
Lian Jun lo miró, claramente, indispuesto.
—Hoy es mi cumpleaños, ¿no? ¿Por favor?
Shi Jin se aprovechó descaradamente, de su condición de cumpleañero.
Lian Jun lo miró por un momento, luego, aparentemente decidiendo que no tenía otra opción, levantó la mano y la puso sobre el hombro de Shi Jin, inclinándose ligeramente hacia adelante. Luego, lo soltó y retrocedió de inmediato, diciendo:
—Ve y corta el pastel. Además, Gua Uno y los demás tienen regalos para ti.
El abrazo fue superficial y deficiente, pero Shi Jin estaba satisfecho con él. Sonrió ampliamente y agarró los mangos de la silla de ruedas. Dijo gentilmente, u de inmediato, su voz se volvió aguda porque estaba feliz:
—Jun-shao, hoy te permitiré comer un pedazo de pastel, ¡y no necesitas beber sopa en la cena!
Lian Jun frunció el ceño y le advirtió:
—No acabes tu suerte.
—Jeje.
Shi Jin dejó escapar una risa tonta y aumentó su velocidad, corriendo hacia el pastel.
Otras personas siempre habían sido muy cautelosas al empujar la silla de ruedas de Lian Jun: la velocidad sería cómoda, no demasiado rápida ni demasiado lenta, y nunca se atrevieron a hacer nada excesivo. Lian Jun se sorprendió por la aceleración repentina de Shi Jin e instintivamente agarró los reposabrazos de la silla de ruedas; cuando se las arregló para controlarse, el dulce olor a pastel le golpeó la cara. Poco a poco, se relajó y la comisura de su boca se alzó ligeramente, pero aún reprendió a Shi Jin:
—Ahora, eres un adulto, ¿por qué sigues jugando? En el futuro, debes actuar con más dignidad.
Shi Jin respondió con una sonrisa, ya ocupado con insertar velas de cumpleaños en el pastel.
Tan pronto como se encendieron las velas, Gua Uno y lo demás empujaron un carrito lleno de todo tipo de comida. Su marco estaba envuelto con luces navideñas multicolores que, probablemente, fue la decoración más exquisita que pudieron lograr estos hombres rudos.
A Shi Jin no le importó y ayudó felizmente, a todos, a armar las cosas, luego, movió una silla a un lado de la mesa de té y se subió para estar a la altura adecuada. Después de pedir un deseo y apagar las velas, cortó el pastel.
Obviamente, la primera rebanada se le dio a Lian Jun y Shi Jin tomó la segunda, luego, le pasó el cuchillo a Gua Uno, dejando que los demás se sirvieran sus propias porciones. Gua Dos lo regañó por no tener hospitalidad, pero Shi Jin lo ignoró y se acurrucó junto a Lian Jun para abrir los regalos.
Después de comer el pastel y abrir los regalos, Shi Jin aprovechó su condición de cumpleañero nuevamente, haciendo que los empleados de la casa club alejaran la mesa de la sala y trajeran una mesa de mahjong.
Gua Uno levantó las cejas y recordó las hazañas de Shi Jin en el salón de mahjong en la Provincia Y. Ni siquiera espero la invitación de Shi Jin para negarse directamente a jugar y dijo que nunca participaría en este tipo de actividades de apuestas.
Frustrado, Shi Jin echó un vistazo a Lian Jun.
Lian Jun lo miró con ojos tan fríos e indiferentes como la muerte.
Shi Jin tuvo que disipar la idea de compartir la felicidad del mahjong con su “patrocinador”, así que se dio la vuelta y agarró a Gua Dos, luego, llamó a Gua Tres y Gua Cinco. Gua Nueve, un miembro recién transferido al club, era un joven siempre somnoliento con cara de bebé; que, en este momento, estaba dormitando en el sofá, por lo que, Shi Jin no lo molestó.
Las cuatro personas se sentaron a la mesa de mahjong. Gua Dos era un rey para perder puntos: su técnica era tan mala que la gente no podía soportar verla, pero, aun así, le encantaba jugar. El callado Gua Tres tenía cierta habilidad y siguió haciendo grandes jugadas sin decir una palabra. Las habilidades de Gua Cinco eran tan simples y honestas como su rostro, pero parecía que siempre se divertía, sin importar si ganaba o perdía. Naturalmente, en términos de habilidades, el gran maestro Shi Jin estaba muy por delante de todos, pero, incluso cuando ganó, solo ganó poco y sonreía de oreja a oreja todo el tiempo.
Como adicto al mahjong, Shi Jin había estado jugando fervientemente hasta la medianoche, hasta que Gua Uno lo arrojó a su habitación y le ordenó que durmiera. Siguió jugando mahjong incluso en sus sueños, olvidándose por completo de la emoción de conocer a sus hermanos ese día.
Sin embargo, cuando se despertó, la cruel realidad llegó, Shi Weichong no se había ido después de su charla de anoche. En cambio, hizo que su asistente trajera un automóvil y pasó la noche afuera de la casa club, exigiendo, reiteradamente, ver a Shi Jin.
Shi Jin miró por la ventana en el segundo piso de la casa club, observando el automóvil de lujo negro estacionado frente a la puerta principal. Preguntó nerviosamente:
—Xiao Si, ¿qué significa esto? ¿Quiere matarme con sus propias manos?
De hecho, Xiao Si también estaba en pánico, pero se las arregló para decir con consuelo: 【No tengas miedo, JinJin. Este lugar le pertenece a Darling, tus hermanos no podrán contactarte.】
—Pero no puedo pegarme a tu Darling toda mi vida como pegamento, si nunca me voy de su lado, aun si quisiera, él no estaría de acuerdo.
Shi Jin sintió un sabor amargo en la boca. Dijo con disgusto:
—Actuar por impulso fue un error, no debería haber dejado todo a la intemperie ayer. Salvar mi vida es una cosa, pero nuestra tarea principal es vaciar la barra de progreso. ¿Cómo puedo hacer esto ahora, cuando arrojamos todas las pretensiones?
Xiao Si gimió. Tampoco podía ofrecer buenas sugerencias y sólo podía preocuparse.
—No, tengo que encontrar una manera de facilitar la relación con estos hermanos, al menos, lo suficiente como para que la barra de progreso vuelva al valor seguro.
Shi Jin agarró el marco de la ventana con fuerza, miró hacia el auto nuevamente, luego, se giró para correr hacia el estudio de Lian Jun.
Shi Weichong mostró una gran persistencia, pasando días y noches frente al club. Incluso cuando tenía que irse ocasionalmente, debido a necesidades laborales o de necesidad básica, regresaba en unas pocas horas, dejando en claro que no se rendiría hasta que volviera a encontrarse con Shi Jin.
Después de seis días de esto, Shi Weichong logró ingresar a Nightlight una vez más.
Shi Jin lo recibió en la sala de recepción, había varios documentos en la mesa frente a él.
—Xiao Jin, necesito hablar contigo.
Dijo Shi Weichong tan pronto como entró. Sus cejas estaban arrugadas, lo que indica que su estado de ánimo no era bueno.
—Espera un momento, Hermano Mayor, escúchame primero. —Shi Jin lo interrumpió. Le indicó que se sentara, luego, colocó los documentos frente a él y explicó, señalando a cada uno: —Esto es sobre la oferta por el área oeste de la Ciudad Y, deberías renunciar a ella, es una trampa; este es el plan de desarrollo del Distrito K del Condado J, te sugiero que hagas un seguimiento, sería bueno para la expansión de Ruixing; este es el programa de tres pasos que papá había planeado antes de su muerte, puedes leerlo como referencia; esto es…finalmente, esta es la lista de los confidentes de papá. Si deseas trasladar el negocio de Ruixing de vuelta a China, te aconsejo que no los emplees, ya que te causarán problemas.
Cuanto más tiempo seguía escuchando Shi Weichong, más seria se volvía su expresión. Levantó los documentos y los hojeó uno por uno, luego, miró a Shi Jin como si no lo conociera y preguntó:
— ¿De dónde sacaste esto?
Incluso hay información sobre un acuerdo que acaba de comenzar a planificar.
—Solía seguir a papá por todos lados. Si él subía algo, por supuesto que yo también lo haría. —Respondió Shi Jin. Sirvió una taza de té a Shi Weichong y dijo: —He terminado lo que quería decir. Hermano mayor, ¿de qué quieres hablar conmigo?
Xiao Si estaba desanimado. 【Tu barra de progreso todavía está en 900. Le has dado a Shi Weichong información tan jugosa, ¿por qué no hay cambio?】
Shi Jin también estaba un poco frustrado, pero, aun así, lo tranquilizó:
—No te preocupes, escuchemos de qué quiere hablar Shi Weichong primero. Al menos, ahora que probé que no me opongo completamente a él, su actitud debería ser más suave.
Cuando Shi Weichong escuchó a Shi Jin decir que toda la información provenía de Shi Xingrui, su expresión se volvió inescrutable y comenzó a leer los documentos cuidadosamente. La atmósfera tensa a su alrededor se relajó un poco y preguntó en un tono más tranquilo:
— ¿Por qué me estás diciendo esto?
—Por la misma razón que elegí renunciar a la herencia. —Shi Jin lo miró con compostura y repitió su pregunta anterior: —Hermano mayor, ¿de qué querías hablar?
Esta vez, Shi Weichong respondió muy rápidamente:
—Quiero que vuelvas conmigo.
—No quiero.
El rechazo de Shi Jin fue contundente.
La segunda parte de la conversación llegó a un callejón sin salida, así como así.
La cara de Shi Weichong permaneció tranquila y dejó de hablar.
Shi Jin se preparó. Si bien era reacio a hacer esto, estaba preparado para pelear con sus hermanos por completo, si era necesario; gracias a la existencia de Lian Jun, lograría mantener su vida, incluso si las cosas se ponen difíciles.
El aire pareció solidificarse lentamente. Después de mucho tiempo, Shi Weichong finalmente, abrió la boca nuevamente y preguntó:
— ¿Viviste bien después de que te fuiste?
—… ¿Eh?
¿No está mal este script?
—Has cambiado mucho. Has perdido peso, has crecido más alto, tu gusto por la ropa es diferente…
Los ojos de Shi Weichong se cerraron lentamente, mientras decía esto, y un rastro de impotencia y fatiga apareció en su rostro. Él suspiró.
—Seguí preocupándome por ti todos los días desde que desapareciste. Después de todo, habías sido mimado desde la infancia, ¿cómo podrías vivir solo en el mundo exterior?
A Shi Jin comenzó a ponérsele la piel de gallina. No podía entender cómo las cosas salieron así, y preguntó con una expresión tonta:
—Xiao Si, ¿qué está haciendo? ¿Está tratando de engañarme jugando con mis emociones?
Xiao Si dudaba. 【T-tal vez? Probablemente, sabe que Darling es demasiado poderoso y que no puede ganar por la fuerza, ¿así que decidió probar este método?】
—Entonces, es un manipulador más venenoso que una mujer harén.
Xiao Si asintió locamente, totalmente de acuerdo con él.
—Tu expresión tonta sigue siendo la misma que cuando eras niño, no ha cambiado en absoluto.
Shi Weichong miró la cara sorprendida de Shi Jin y sonrió de repente, pero la sonrisa fue reemplazada rápidamente por un suspiro.
—Xiao Jin, si no quieres volver conmigo, no te obligaré, no puedo obligarte. Solo quiero que entiendas que nos has malentendido. Somos tus hermanos y si cambias de opinión, siempre te daremos la bienvenida a casa.
¿Darme la bienvenida a casa para controlarme y aplastarme como un insecto en tu mano? Shi Jin le dirigió una sonrisa suave y se negó cortésmente:
—Me gusta mucho mi vida actual, y también me gusta estar al lado de Jun-shao.
Shi Weichong se calló y luego susurró:
— ¿Es ese Jun-shao, realmente, más importante para ti que tus hermanos?
¡Qué carga de basura, por supuesto, mi gota que salva vidas es más importante que un montón de asesinos!
Shi Jin, que no podía soportar el “ataque dulce” de Shi Weichong y prefería que lo golpearan. Se retorcieron en su asiento y no respondieron.
—Entiendo.
Shi Weichong suspiró. Dudó por un momento, luego, continuó con seriedad:
—Xiao Jin, todavía eres joven y no entiendes muchas cosas. Lian Jun no es tan bueno como crees. Su pasado y el de su familia…no está realmente limpio.
Xiao Si se enojó tanto que estaba a punto de explotar: 【¡Wah, en realidad se atreve a calumniar a mi Darling! JinJin, no le creas, ¡solo quiere abrir una brecha entre ustedes dos!】
Shi Jin también se puso furioso, ¡efectivamente, Shi Weichong era una perra maliciosa! No podía forzar a Shi Jin, pero, aun así, trataría de desacreditar a Lian Jun, ¡despreciable!
