Barra de Progreso de la Muerte – Capítulo 45: Barco

Traducido por BeeMiracle

Editado por Ayanami


Después de que terminó el abrazo, Lian Jun instó a Shi Jin a quitarse el disfraz de oso, preocupado de que pudiera sufrir un golpe de calor. Shi Jin, sin embargo, insistió en ello y tomó muchas fotos con Lian Jun para compensar a los desaparecidos en su infancia. Solo después corrió a la cocina y se quitó el disfraz, lavándose la cara mientras estaba allí.

Usar un disfraz de cuerpo entero en este clima era realmente demasiado. Shi Jin solo se lo puso por un corto tiempo, pero su cabello y ropa estaban empapados de sudor. A pesar de estar caliente e incómodo, cuando recordó la felicidad en el rostro de Lian Jun, pensó que valía la pena.

—Eh, para hacer feliz a tu hijo, pasar por al menos esto es un hecho. 

Shi Jin suspiró con satisfacción, sintiendo que era un gran “padre”.

Xiao Si: 【Snif…】

Ingenuo, Shi Jin lo consoló:

—No llores. Sé que estás preocupado por el cumpleaños de tu Darling, pero has estado llorando durante tanto tiempo, ten cuidado de no sufrir un cortocircuito.

Xiao Si comenzó a tener hipo, y sus sollozos se intensificaron.

Shi Jin miró al cielo y dejó escapar un largo suspiro. Decidiendo dejarlo pasar, regresó al área exterior.

Todos los demás ya estaban allí. Lian Jun se sentó frente al pastel, abriendo regalos.

—¿Por qué no has cortado el pastel todavía?

Shi Jin preguntó mientras se acercaba, frotando su cabello sudado con una toalla.

Gua Dos se volvió hacia él y le guiñó un ojo evocador.

—Obviamente lo estamos esperando, señor pastelero.

Shi Jin puso los ojos en blanco con una sonrisa y miró a Lian Jun. De repente, la imagen del hombre cerrando los ojos y besándolo pasó por su mente, e inconscientemente se detuvo.

No está bien, esa imagen tuvo demasiado impacto, todavía estaba abrumado.

—Shi Jin, ven aquí.  —La voz de Lian Jun sonó justo a tiempo.

No sabía si era su imaginación, pero hoy, la voz de Lian Jun parecía ser extraordinariamente suave y agradable de escuchar.

Shi Jin se limpió las orejas con una toalla y siguió caminando.

—¿Por qué no has cortado el pastel todavía? ¿Realmente me estás esperando?

Cuando se acercó lo suficiente, Lian Jun tomó su mano y respondió:

—Por supuesto que te estoy esperando.

Todavía sosteniendo la mano de Shi Jin, tomó el cuchillo con la otra y cortó la capa superior del pastel.

Emocionado, Gua Seis sacó una cámara y tomó fotos como loco. Empujó a Gua Dos fuera de la lente, ya que estaba obstruyendo la vista. Gua Dos lo miró con una cara estoica.

—Incluso tiene capas… ¿cuánto tiempo te llevó hacerlo? —Lian Jun miró a Shi Jin, apretando su mano.

La mano de Lian Jun estaba fría. Debería ser cómodo sostenerla en un clima tan cálido, sin embargo, Shi Jin sintió que sus palmas sudaban. Lo soltó y, para que su acción no se notara, se limpió el sudor del cuello con una toalla.

—No mucho, todos me ayudaron bastante.

Lian Jun miró la camisa empapada pegada a su cuerpo y frunció el ceño. Extendió la mano y lo ayudó a sacarla de la piel, enviando a Gua Seis una mirada.

A Gua Seis le tomó solo un segundo entender. Él asintió y se alejó un poco, luego hizo una llamada.

Distraído por que le quitaran la ropa, Shi Jin no se dio cuenta de su intercambio silencioso. Giró la cabeza para mirar detrás de él. Sintiendo la brisa marina en la brecha enfriando su piel caliente, entrecerró los ojos con comodidad y le agradeció a Lian Jun.

Una vez que se cortó el pastel, todos se reunieron para tomar un pedazo y comenzaron a conversar en un ambiente cálido.

Cinco minutos después, Gua Seis se acercó a Shi Jin, con un conjunto limpio de ropa, y le dijo:

—Cámbiate, te sentirás más cómodo.

Shi Jin parpadeó sorprendido, luego se sintió tocado.

—Eres tan amable, hermano Seis.

—Deberías decirle esto a Jun-shao, fue él quien me pidió que te trajera ropa fresca. Hay un pequeño baño en la parte trasera de la cocina, puedes lavarte allí. Tu sudor está casi seco, pero debe ser pegajoso e incómodo —respondió Gua Seis, sin dejar pasar la oportunidad de ayudar a Lian Jun a ganar puntos brownie.

Aturdido, Shi Jin se volvió para mirar a Lian Jun, que hablaba con las personas que lo rodeaban, con un plato de pastel sobre sus rodillas. Sus manos agarraron la ropa con más fuerza. Agradeció a Gua Seis y fue a la cocina.

—Tu Darling es un buen tipo.

Shi Jin no pudo evitar exclamar mientras se lavaba.

Xiao Si comenzó a tener hipo nuevamente, y sus lamentos se hicieron cada vez más fuertes.

Lian Jun, a quién no le gustaba comer dulces, se llenó de pastel en su cumpleaños.

Shi Jin quien no había jugado mahjong real durante mucho tiempo finalmente tuvo la oportunidad de hacerlo y se ocupó con entusiasmo.

Y así, todos estaban felices… pero desafortunadamente, algunos tuvieron que pagar el precio de su felicidad; para compensar sus lecciones perdidas, Shi Jin tuvo que sufrir durante las clases de recuperación de la noche.

Se programaron de 7:00 a 9:30 después de la cena, por lo que terminaba un poco tarde. Lian Jun, preocupado porque Shi Jin se cansara demasiado, quería cancelar las sesiones de masaje hasta que terminara las clases de recuperación.

Shi Jin se opuso a su propuesta, sintiendo que el mantenimiento de las piernas de Lian Jun no podía retrasarse ni un día. Hizo un gran esfuerzo para tratar de convencer a Lian Jun, y finalmente logró que aceptara. Sin embargo, teniendo en cuenta la hora, acortó el tiempo, solo masajeando las piernas de Lian Jun antes de acostarse.

Y así, Shi Jin, quien sufrió una pérdida, pero pensó que ganó el premio, dijo con satisfacción:

—Sí, así, Jun-shao, tienes que ser positivo y mirar hacia adelante en la vida.

Lian Jun, que en realidad obtuvo todos los beneficios, pero parecía que no tenía más remedio que admitir:

—Mhm.

Xiao Si: 【…】 Bien, a veces, la estupidez de Shi Jin no era algo malo.

Esa noche, Shi Jin llamó a la puerta de Lian Jun después de terminar las lecciones correctivas.

Debido a que no sería un masaje completo, la mesa de masaje fue abandonada temporalmente. Como era tarde y Lian Jun descansaría inmediatamente después, simplemente se metió en la cama para no tener que moverse más tarde.

Shi Jin no tuvo objeciones. Una vez que Lian Jun se acostó, levantó el dobladillo de la bata y comenzó a frotar su pantorrilla.

Después de masajear y masajear, Shi Jin miró la cama, sus brazos le dolían un poco. El ancho de la cama hacía que cambiar de lado fuera inconveniente, a diferencia de la mesa de masaje. Si continuaba de pie y se inclinaba, sería cada vez más difícil masajear adecuadamente.

Lian Jun pronto entendió su situación y, pensativamente, sugirió:

—Solo sube a la cama. Es tarde: cuanto antes termines, antes podrás descansar.

Shi Jin dudó. —No, pero aún no me he lavado.

—Está bien, no me importa. —Las palabras de Lian Jun no solo fueron amables, sino que incluso extendió una mano para ayudar a Shi Jin a levantarse.

Shi Jin estaba conmovido, efectivamente, Lian Jun realmente era agradable. Obedientemente, se subió al otro lado de la cama, se sentó en el edredón que se retiró antes y continuó el masaje.

Nunca se dio cuenta de que el problema que acababa de encontrar podría resolverse si Lian Jun se daba la vuelta o se movía hacia el otro lado. No había necesidad de que Shi Jin se subiera a la cama.

Pero él subió y ahora, era imposible volver a bajar.

Lian Jun observó a Shi Jin sentarse en su cama, completamente enfocado en sus piernas, y sus labios se curvaron ligeramente.

Al final, Lian Jun parecía haberse quedado dormido. Shi Jin se arrastró con cuidado fuera de la cama. Cuando se enderezó y estaba a punto de irse, sintió una mano fría agarrar la suya.

Se detuvo y miró hacia atrás.

Lian Jun, quien pensó que estaba dormido, abrió los ojos y se inclinó ligeramente hacia un lado. Al ver que Shi Jin lo miraba, le dio una sonrisa al adolescente, no demasiado obvia, pero definitivamente una sonrisa.

—Gracias por su arduo trabajo —dijo.

Esa sonrisa derritió el corazón de Shi Jin. Sentía que había obtenido un retorno inesperado pero maravilloso por algo por lo que nunca había tenido que pagar. Se volvió, apretó la mano de Lian Jun y se agachó para darle un suave abrazo. Luego, se puso en cuclillas y lo miró a la cara, feliz:

—Tu sonrisa es hermosa, deberías sonreír más… ahora duerme, buenas noches, Jun-shao.

Lian Jun grabó cuidadosamente la expresión de Shi Jin en su memoria. Cerró los ojos y respondió en voz baja: —Buenas noches, Shi Jin.

Shi Jin no pudo evitar sonreír. Se quedó al lado de la cama, mirando la cara dormida de Lian Jun hasta que el entumecimiento en sus piernas lo despertó. Parpadeó, preguntándose de paso por qué de repente quería ver a Lian Jun dormir. Su estado de ánimo seguía siendo extrañamente boyante. Ayudó a Lian Jun a acomodar la colcha, se levantó y salió silenciosamente de la habitación, sin olvidar apagar las luces antes de irse.

Una vez que la puerta se cerró, Lian Jun abrió los ojos en el cuarto oscuro. Se quitó la colcha que Shi Jin había metido y echó un vistazo a la mano que había sostenido, suspirando suavemente. Chico tonto, ¿cuándo entenderá?

¿Es porque es demasiado joven?

Debe ser eso, bajó la mano y esta vez realmente se durmió.

♦ ♦ ♦

El tiempo continuó pasando. El último día de las clases correctivas de Shi Jin, llegó el aviso oficial: se había decidido la fecha y el lugar de la conferencia. Según los cálculos, si querían llegar a tiempo a las coordenadas enviadas por los funcionarios, tenían que partir, al menos, con tres días de anticipación.

Ya era finales de marzo, y la conferencia estaba programada para mediados de abril. Lian Jun, como la fuerza represiva del gobierno, tenía que estar allí antes que los líderes de otras organizaciones, por lo que la hora de salida se adelantó otros dos días.

Como tal, tenían menos de diez días para prepararse.

Las agradables vacaciones terminaron sin previo aviso. Todos volvieron al estado mental correcto y se apresuraron a prepararse para el viaje.

Como “estudiante”, a Shi Jin solo se le permitió mirar.

En el pequeño aeropuerto de la isla, los aviones aterrizaban y despegaban todos los días. Las pilas de carga descargadas de ellos fueron transportadas a un gran barco, que reemplazó al de tamaño mediano en el que llegaron.

Durante otro descanso entre clases, Shi Jin se apoyó en el alféizar de la ventana en el gran estudio, observando el bullicio en el puerto distante. Pensó en la barra de progreso estática de Lian Jun, y no pudo evitar suspirar.

Solo espero que siga así.

—¿Por qué estás suspirando? —Preguntó Lian Jun, a quien Shi Jin no sabía cuándo había aparecido a su lado. Siguió la mirada del adolescente hacia el puerto ocupado. —¿Quieres bajar y echar un vistazo?

Shi Jin volvió a sí mismo y sacudió la cabeza. —No. No sé nada al respecto. Si voy, solo molestaré a todos.

Lian Jun no trató de persuadirlo, simplemente observo la nave con él. Después de un momento, cambió el tema:

—Casi terminamos de investigar la vida de Shi Xingrui, el informe se transmitirá en unos días. Sin embargo, no hay mucha información sobre el aborto de Xiang Qing, fue hace mucho tiempo, la investigación no avanzó mucho y, probablemente, tomará más tiempo.

A Shi Jin le tomó unos segundos asimilar sus palabras, luego asintió para mostrar que entendía. De repente, se dio cuenta de que desde el cumpleaños de Lian Jun, nunca pensó en Shi Xingrui y los asuntos de su familia. Todos los días, su mente estaba ocupada estudiando, planeando a dónde ir con Lian Jun el fin de semana o jugando, nada serio.

Efectivamente, las vacaciones hacen floja a la gente.

Reflexionó profundamente sobre su comportamiento y miró las dos barras de progreso en su mente, una estable en 490 y la otra en 500. Reflexionando sobre lo que sabía de la trama, volvió la vista hacia el barco en el puerto y se hundió en sus pensamientos. —El valor restante de las barras, probablemente, será problemático de reducir.

Lian Jun no dijo nada, acompañándolo en silencio en la ventana. Tenía una mirada lejana en sus ojos, y no se sabía en qué pensaba.

♦ ♦ ♦

Una vez que terminaron las clases nocturnas, los masajes volvieron a su horario anterior.

Cuando terminó la sesión de hoy, Shi Jin envió a Lian Jun al baño. Después de decir buenas noches, se detuvo frente a la puerta cerrada del baño, echó un vistazo a la hora y otra a la cama cuidadosamente hecha. De repente, su corazón se sintió un poco vacío. Soltó un suspiro y le dijo a Xiao Si:

—Hoy no puedo ver a Lian Jun hasta que se duerma, tal vez, en secreto, seguirá trabajando hasta tarde otra vez.

Xiao Si, que ya había recuperado el ánimo, sugirió pensativamente: 【Sabes, tu habitación está justo enfrente de la de Darling. Puede visitarlo fácilmente e instarlo a dormir.】

El corazón de Shi Jin, instantáneamente, dejó de sentirse vacío. Pareciendo que se había iluminado, dijo:

—Así es, puedo ir a ver cómo está. Como dicen “acostarse temprano y levantarse temprano hace a un hombre sano, rico y sabio”. Sí, eso es todo, lo haré.

Xiao Si, inmediatamente, expresó su apoyo entusiasta por esta decisión.

A las 10:30 de la noche, Shi Jin, con una camiseta sin mangas y pantalones cortos como pijama, se paró frente a la puerta de Lian Jun. Levantó una mano pero vaciló:

—Xiao Si, sí Lian Jun ya se ha ido a la cama, ¿mis golpes lo despertarán?

Xiao Si le aseguró apresuradamente, 【Acabo de comprobar: ¡Darling no está durmiendo, está leyendo documentos!】

¿¡Qué!? ¿Todavía está trabajando a esta hora?

Shi Jin frunció el ceño y golpeó firmemente la puerta.

Ésta se abrió rápidamente, revelando a Lian Jun vestido con un camisón y que parecía listo para dormir. Sin embargo, Shi Jin miró detrás de él y vio una pila de archivos y la computadora portátil encendida en la mesa junto a la ventana.

Le lanzó una mirada acusadora a Lian Jun.

Al comprender de inmediato lo que significaba la expresión de sus ojos, Lian Jun explicó:

—Estoy a punto de irme a dormir. ¿Por qué no duermes todavía?

—Estoy a punto de dormir también, solo quería ver cómo estaba antes de hacerlo —respondió Shi Jin, rodeando la silla de ruedas para agarrar las manijas y empujándola al lado de la cama sin pedir la opinión de su ocupante. —Duerme. Te levantas muy temprano todos los días, también debes acostarte temprano para dormir lo suficiente.

Lian Jun lo miró. —Todavía estoy leyendo un documento. Es urgente, tengo que lidiar con eso ahora.

Shi Jin lo miró por unos segundos. Después de asegurarse de que no estaba mintiendo, se volvió hacia la mesa y preguntó: —¿Cuál es? Métete en la cama, te lo llevaré.

Como Shi Jin estaba así de decidido, Lian Jun nombró el archivo que necesitaba y se acomodó obedientemente en la cama, apoyándose contra la cabecera.

Pronto, la situación se convirtió en Lian Jun leyendo el archivo en la cama, y ​​Shi Jin sentado al lado de la cama, jugando tranquilamente mahjong en su teléfono, sin molestarse. Una vez que Lian Jun terminó de revisar el documento y notificó a sus subordinados de su aprobación, Shi Jin terminó el juego, ayudó a Lian Jun a poner el archivo sobre la mesa y lo miró hasta que se acostó.

—Buenas noches. —Con las cejas arrugadas, Shi Jin ayudó a Lian Jun a meter la colcha.

Lian Jun le agarró la mano y le preguntó: —¿Estás enojado?

Su pregunta sorprendió al adolescente, y le tomó un momento responder. Sacudió la cabeza. —No lo estoy… pero deberías dejar de trabajar tan tarde, eso afecta tu calidad de sueño.

—Hoy fue un accidente —respondió Lian Jun, apretando su mano. Al ver que Shi Jin dejó de fruncir el ceño, aparentemente, ya acostumbrado a este grado de contacto físico, sus latidos se aceleraron un poco. No pudo evitar mirar profundamente a los ojos de Shi Jin y decir implícitamente: —También quiero mejorar rápidamente. Entonces, sería yo mirándote quedarte dormido… lo siento, todavía no puedo cuidarte adecuadamente.

Sin embargo, Shi Jin no entendió el significado más profundo de sus palabras: solo sabía que Lian Jun lo sentía, y su expresión se relajó un poco más. Se agachó para mirar a Lian Jun, metió la mano del hombre debajo del edredón y lo consoló:

—No te preocupes, seguramente te recuperarás. Te ves mucho mejor que antes. No es que quiera decirte cómo organizar tu día, solo estoy preocupado… de todos modos, una vez que estés sano, puedes supervisar mi sueño. Estoy esperando. —Sus ojos estaban llenos de aliento.

…Entonces, no se dio cuenta del otro significado de esa oración.

Lian Jun miró la expresión seria de Shi Jin, viéndola indefenso y divertido. Esta persona, de alguna manera, lograba malinterpretar la atmósfera ambigua en el habla y el comportamiento, una y otra vez. Sin embargo, por extraño que parezca, no hacía que se enojara, solo le hacía pensar que era tonto, tonto pero… muy lindo.

—Está bien, espérame —asintió Lian Jun. Se sentó y se inclinó para darle un abrazo a Shi Jin, luego volvió a acostarse y levantó la colcha. —Buenas noches, nos vemos mañana.

Shi Jin estaba acostumbrado a sus abrazos, así que simplemente le devolvió las buenas noches, se levantó, apagó las luces y salió de la habitación.

♦ ♦ ♦

En un abrir y cerrar de ojos, pasaron diez días. Un día a principios de abril, Lian Jun con Shi Jin empujando su silla de ruedas abordó el barco, junto con Gua Uno y los demás. Estaban listos para salir de la isla.

—La próxima vez que vengamos, el año terminará, o tal vez ya sea el año que viene.

Shi Jin se apoyó en la barandilla, viendo desaparecer a Playa de la Isla Creciente en la distancia, un poco reacio a irse.

Lian Jun se sentó a su lado, también mirando la isla. Su mirada se detuvo en cada lugar que él y Shi Jin visitaron juntos.

—Si lo deseas, podemos venir un poco más temprano este año. Para entonces, debería estar mejor y podré ir a pescar contigo.

Shi Jin pasó todas las vacaciones estudiando o acompañando a Lian Jun. Aunque se divirtió, desafortunadamente, no tuvo la oportunidad de probar ninguna de las actividades que consumían más tiempo.

El joven sonrió y dijo: —Eso sería perfecto. Jun-shao, tienes que trabajar duro para que tu cuerpo esté sano, o contará como que me has mentido.

Al ver su sonrisa, Lian Jun se sintió aliviado. Él sonrió en respuesta: —Nunca te mentiré, lo prometo.

Gua Uno y Gua Dos estaban parados en la pequeña plataforma detrás del puente, apoyados contra la barandilla, observando a Lian Jun y Shi Jin hablar en la cubierta. Se miraron unos segundos. Finalmente, Gua Dos rompió el silencio:

—¿Cuándo va a hacer Jun-shao su jugada? ¿No debería aprovechar el tiempo? La atmósfera entre ellos ya ha cambiado mucho.

En el pasado, Shi Jin nunca se atrevería a comportarse de manera tan informal frente a Lian Jun, y mucho menos ser lo suficientemente valiente como para manejarlo así.

—Shi Jin es demasiado estúpido, el enfoque lento parece ser el más efectivo. —Aunque las palabras de Gua Uno fueron descorteses, su expresión era mucho más suave de lo habitual. Hizo una pausa y luego agregó: —En estos días, Jun-shao sonríe más a menudo.

Gua Dos miró hacia abajo y también vio la sonrisa que Lian Jun le dio a Shi Jin. Estaba aturdido por un momento, luego suspiró,

—Su temperamento se está volviendo más suave y cálido… normalmente, diría que es algo bueno, pero la conferencia está por comenzar.

La expresión severa habitual volvió instantáneamente a la cara de Gua Uno.

—Jun-shao tiene todo bajo control.

—Lo sé, pero me preocupa que esas personas noten algo —dijo Gua Dos. Mientras recordaba las conferencias anteriores, la mirada en sus ojos lentamente se volvió helada. Él susurró: —Solo espero que no haya idiotas este año, o tendremos que sufrir otra limpieza.

—En nuestra línea de trabajo, nunca faltan idiotas —respondió fríamente Gua Uno, su expresión despectiva. No esperaba que la conferencia de este año pasara pacíficamente.

♦ ♦ ♦

Dos días después del viaje, la barra de progreso de Lian Jun aumentó a 600. La de Shi Jin también aumentó a 500, no fue mucho, pero aun así.

Shi Jin dejó escapar un suspiro. —Fue afectado por Lian Jun. Obviamente, la reunión de los jefes del inframundo es peligrosa.

Xiao Si aplacó, 【No tengas miedo, JinJin, Darling te protegerá.】

Sin embargo, Shi Jin no se consoló, por el contrario, su estado de ánimo se volvió aún más pesado.

Sí, todos pensamos que todo estará bien porque, incluso si algo sucede, Lian Jun definitivamente encontrará una manera de protegernos. ¿Pero quién va a proteger a Lian Jun? Lian Jun es solo un mortal, no un dios. Su cuerpo es de carne y hueso. ¿Quién lo protegerá?

♦ ♦ ♦

Un día después, en la tarde del tercer día, el barco del gobierno finalmente apareció en el horizonte.

Era enorme y parecía un barco civil, no un buque militar. No parecía muy amenazante, contrario a las expectativas de Shi Jin.

Gua Uno ordenó que su propio barco se detuviera y escaneara el mar con radar. Solo después de asegurarse de que no hubiera amenazas ocultas se contactó con el lado oficial. Luego, envió a Gua Dos y Gua Cinco, junto con un pequeño grupo de personas, para abordar el barco del gobierno. Oficialmente, fue para organizar su alojamiento, pero, de hecho, fue para evaluar la situación.

La hora era demasiado tarde, y el resto de las fuerzas de Annihilation se moverían mañana. Cuando Shi Jin se quedó afuera, observando el ajetreo en la cubierta inferior, descubrió que la temperatura bajó más de lo que esperaba y tuvo que cerrar su grueso abrigo. Mirando el mar negro como la arena, le preguntó al sistema:

—Xiao Si, con este frío, si alguien cae al mar, ¿cuánto tiempo crees que podría durar?

Xiao Si se estremeció. 【¿Estás tratando de establecer una Bandera de la Muerte para ti, JinJin?】

La cara de Shi Jin se puso rígida, de hecho, hacer esa pregunta era prácticamente pedir una Bandera de la Muerte a gritos. Su mente, instantáneamente, produjo demasiados escenarios en los que terminaba cayendo al agua. Tragó saliva y preguntó:

—¿Hay algún beneficio que puedas darme si realmente me caigo?

Xiao Si lo pensó. 【¿Como una ventaja de sirena? Puedo convertirte en un pez temporalmente.】

… ¿Convertirse en un pez?

Por un momento, la expresión de Shi Jin se distorsionó. Él muy, muy cuidadosamente se alejó de la barandilla, decidiendo mantenerse alejado de la cubierta de ahora en adelante.

2 respuestas a “Barra de Progreso de la Muerte – Capítulo 45: Barco”

  1. Waaa sii que ehemos avanzado bastante! Me encanta la paciencia de Jun. Definitivamente me encanta la historia, pero por hoy descansaré xD

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