Traducido por Naremi
Editado por Sakuya
Corregido por YukiroSaori
—No importa. —Dibei Chen negó con la cabeza—. Es solo que, es casi la hora de la competencia de caza de la familia real. Si quieres obtener una buena clasificación sería muy ventajoso para ti.
Al escuchar las palabras de Dibei Chen, Baili Hongzhuang entendió de inmediato su plan y asintió con la cabeza.
—Entonces cerraré el hospital Doctor Divino y Justo por ahora.
Si sus suposiciones eran correctas, ella probablemente era la hija de Lan Yunxiao.
Si quería enfrentarse a toda la familia Lan, no había tiempo que perder dirigiendo el hospital.
Baili Hongzhuang cerró temporalmente, pero dejó las píldoras de inmortalidad para la venta, luego regresó al palacio del príncipe para cultivar en silencio.
Quedaba solo medio mes antes de que comenzara la competencia de caza. Ella necesitaba aumentar su fuerza lo antes posible.
Al día siguiente, Baili Hongzhuang entró directamente en la habitación de al lado, tratando de encontrar a Dibei Chen.
—Dibei Chen, conoces algún lugar en la Ciudad Imperial que sea bueno para la cultivación, ¿como una cascada o algo así?
Después de pensarlo, ella creía que quedarse en la casa solo aumentaría su cultivación, mas no fortalecería su cuerpo.
En su vida anterior, desde joven se empapó con todo tipo de baños medicinales y de hierbas, lo que hacía que su físico fuera muy poderoso. Desafortunadamente, era muy diferente en esta vida.
El cuerpo de Baili Hongzhuang no era en absoluto más fuerte que otros, y debido a la desnutrición, su constitución era aún más débil que la mayoría.
Incluso si cultivaba ahora, todavía era incapaz de usar todo su poder porque su base, su cuerpo, era demasiado débil.
Como era así, Baili Hongzhuang decidió abandonar el palacio para cultivar afuera.
Solo mejorando su físico, podía salir su verdadera fuerza de lucha.
Además, cultivar el cuerpo también podía traerle grandes beneficios.
Si aprovechaba su corta edad para establecer una base sólida, cultivar en el futuro sería mucho más fácil.
Dibei Chen entendió al instante lo que quería decir, su corazón, en secreto, estaba asombrado.
Él ya entendía que Baili Hongzhuang no era la hija de Baili Zhentao, pero los cambios en ella no eran pequeños.
La gran mayoría de los cultivadores solo le prestaban atención a la mejora de su cultivo, e ignoraban por completo su físico.
Especialmente los cultivadores más jóvenes, que no tenían idea de cuán importante era fortalecer el cuerpo.
Solo algunos de los cultivadores más fuertes del mundo enseñaban a sus discípulos más jóvenes la importancia de mejorar su físico.
Ese problema con el cultivo no solía ser muy obvio al principio, pero se volvía un problema a medida que el cultivo de alguien llegaba a su etapa final.
A pesar de que Baili Hongzhuang era hija de la familia Lan, solo se enteró de ello hace unos días, entonces, ¿cómo pudo haber sabido sobre la importancia de mejorar su físico?
Parecía que Baili Hongzhuang era aún más misteriosa que él.
—Hay una pequeña montaña no muy lejos de la Ciudad Imperial, dentro hay una cascada —respondió Dibei Chen.
Los ojos de Baili Hongzhuang se iluminaron, sus labios se relajaron en una suave sonrisa.
—¿En serio? ¿Puedes decirme exactamente dónde?
—¿Piensas ir sola? —preguntó Dibei Chen—. Aunque no está muy lejos de la Ciudad Imperial, no faltan demonios y bestias vagando por ahí. Ir sola para fortalecer tu cuerpo es demasiado peligroso.
—No importa, conozco mis límites.
Las esquinas de la boca de Baili Hongzhuang se curvaron en una sonrisa, su expresión era firme. En su vida anterior, a menudo había salido a cultivar sola. ¿Quién sabe cuántas experiencias peligrosas vivió en ese entonces? Pero una cosa era segura. Tenía mucha experiencia.
Incluso si no tenía mucha fuerza ahora, estaba segura de que podía regresar sana y salva.
—Te acompañaré, iremos juntos. —La voz de Dibei Chen era indiferente, pero su tono revelaba certeza y decisión, no cambiaría de opinión.