Prometida peligrosa – Capítulo 14

Traducido por Maru

Editado por Tanuki

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—Gracias por sus cumplidos, pero envidio aún más tu puesto. Ya que sirve al emperador en cuestión, siempre ve que todos lo respetan, ¿verdad? Según he oído, está más cerca de su excelencia que cualquier otro ministro. Parece que su excelencia valora mucho sus talentos.

—Bueno, el emperador es una persona benevolente. Aunque mis talentos son limitados, él dice que necesita mi ayuda, así que estoy tratando de ayudarlo lo mejor que puedo.

Mientras respondía a sus preguntas por cortesía, Colin le sonrió con suavidad.

¿Estaba tratando de sondearme?

Al instante se sintió así, pero no le importó porque era cierto que él era uno de los ministros más cercanos del emperador.

—Por cierto, me gustaría ver al emperador de cerca.

No debería haberlo dicho porque Colin estaba sorprendido por sus comentarios inesperados.

—¿Perdón?

—Bueno, quiero ver a su excelencia de cerca.

—En ese caso, puede enviar una solicitud de audiencia con el emperador y esperar entre tres y siete días.

Colin de repente se calló mientras decía eso. Sintió que ella, como hija del duque, debía conocer el proceso básico de tener una audiencia con el emperador.

—¿Está diciendo que quiere ver al emperador por recomendación mía?

—Sí, eso es correcto.

—Y supongo que la razón por la que quiere ver al emperador con mi recomendación es porque no puede permitirse esperar su aprobación o no quiere que su audiencia con el emperador sea conocida fuera, ¿verdad?

—Sí, eso es correcto. Es bastante bueno para comprender mi intención.

Marianne respondió con alegría, aplaudiendo, como si estuviera alabando a un cachorro que trajo una pelota que tiró. Él sonrió ampliamente antes de darse cuenta cuando ella lo elogió, pero rápidamente cambió su expresión. Cuando sus ojos se encontraron con los de Iric, que estaba de pie detrás del sofá, incluso se aclaró la garganta y dijo:

—No sé por qué quiere ver a Su Excelencia, pero no acepto la solicitud privada de nadie.

—Oh, respeto su integridad, por supuesto. Como funcionario del imperio, debe tener cuidado con cualquier corrupción. Además, debe trabajar por el bien público como un burócrata leal de su majestad.

Parpadeando con sus grandes ojos, Colin preguntó:

—Sí, tiene razón. ¿Por qué está pidiendo un favor así cuando lo sabe?

—Sir Colin, ¿lo puse en una posición difícil cuando le dije que me gustaría ver al emperador de cerca?

Cuando escuchó su descarada pregunta, sintió algo siniestro en sus comentarios.

—Estoy aquí para informar al emperador sobre la traición.

Solo tomó tres segundos para que el emperador escuchara su ominosa advertencia.

—¿Traición? —preguntó Eckhart como si estuviera estupefacto. Cerró nerviosamente el libro que sostenía.

—Sí, eso es verdad. Aunque fue una expresión blasfema, me pidieron que le transmita lo que ella dijo exactamente —dijo Colin, mirando alrededor del pasillo de su estudio una y otra vez.

—¿Tiene alguna evidencia específica?

—Le pregunté al respecto tres veces porque pensé que era importante, pero no creo que haya encontrado ninguna evidencia material sólida.

Eckhart frunció aún más el ceño ante su respuesta. Colin, que era simplemente inocente, estaba inquieto.

—¿Se rompió la red de información en la zona norte? Nunca escuché a la hija del duque Kling volverse loca ni nada por el estilo.

—Bueno, hay algunas pruebas sobre la premisa de que confías plenamente en ella.

—Colin, por lo que recuerdo, leí algo en el informe de inteligencia del mes pasado que Ober visitaba a menudo a Lennox.

—Sí, eso es correcto. Era un informe de inteligencia de que era necesario prestarle atención porque parecía estar conociendo al duque Kling. La hija del duque me dijo que el marqués Chester estaba haciendo todo lo posible para ganarse el favor del duque Kling y de ella misma.

—A pesar de eso, ¿me estás obligando a confiar en sus palabras? —Eckhart refutó en tono molesto.

Si eligieran a la familia más influyente entre las familias famosas del imperio, podrían nombrar a los tres duques: Hubble, Lamont y Kling.

Entre ellos, Hubble no estaba satisfecho con la familia imperial, aunque era un pariente de la familia desde hacía mucho tiempo. Lamont continuó siendo neutral y no trató de sobresalir, como correspondía a su familia que produjo la mayoría de los jueces. El duque Kling era un amigo cercano del padre del emperador, Cassius.

Pero Eckart no creía que Kling lo apoyaría plenamente como aliado de su padre. Kling era el hombre de su padre, de principio a fin. Fue una suerte que Eckart no estuviera del lado de Hubble en términos de su poder. De todos modos, era inadecuado para ser considerado su aliado confiable.

—¡No estoy diciendo que debas creerle en absoluto! Todavía tengo algunas dudas. Quizás ella podría ser una espía de la fuerza de la familia antiimperial, ya que estás preocupado.

Aclarando su posición, Colin empujó sus gafas redondas con las yemas de los dedos.

Pero el jefe de la traición que señaló la hija del duque fue el marqués Chester.

Eckart, que miraba a Colin sin ocultar la expresión desagradable, preguntó con los hombros endurecidos.

—¿Quién dijo ella?

—Ober von Chester, marqués Chester, el ministro de Relaciones Exteriores.

La confirmación de Colin fue un golpe final para él. Colin comenzó a ofrecer muchos consejos sorprendentes a Eckart, quien instantáneamente se asustó en gran confusión.

—Según ella, el marqués Chester se le acercaba para quitarle los territorios y la caballería del duque. Su objetivo era usurpar el trono real, y mataría al duque Kling y a ella cuando no encontrara ningún uso para ellos. Dijo que se arrepintió cuando confió en su favor.

Eckart se volvió a un lado después de un momento de silencio. Su dobladillo dorado ondeaba entre las estanterías más del doble de la altura de cualquier hombre adulto. Colin lo siguió rápidamente.

—¿Existe alguna posibilidad de que ella fuera parte del plan de traición de Ober?

—No puedo negar eso completamente. Pero las posibilidades no son tan altas porque los términos y condiciones que presentó como un trato eran muy extraños.

—¿Términos de un trato? ¿Ella propuso un trato?

Mientras caminaba lentamente, Eckart se detuvo y miró ferozmente a su hombro. Colin también se detuvo cuando lo seguía como un pollito que perseguía a su madre gallina.

—Sí, lo hizo. Fue grosera y ridícula. De todos modos, ella quería que yo te viera y te transmitiera su mensaje por todos los medios. Y si estás dispuesto a castigar a los traidores, ella te ayudará utilizando todos los medios y formas.

—¿Usando todos los medios y formas?

—¡Sí! Incluso me dijo que estaba dispuesta a recopilar información sobre Ober pretendiendo cooperar con él. También dijo que podrías usarla para ese propósito tanto como quisieras.

—¿Qué quiere ella a cambio?

—Dijo que no pediría ningún honor o riqueza mientras pudieras garantizar la seguridad de ella y de su padre.

Obviamente, su condición era extraña. Eckart comenzó a caminar de nuevo, solo mirando hacia adelante.

—Sospecho aún más de su condición. ¿No podría su condición ser de doble filo? Ella podría sobrevivir incluso si ambas partes se arruinan. ¿Quién sabe? Ober pudo haberle ordenado que presentara esta condición.

—Eso tiene mucho sentido, pero…

—¿No estás de acuerdo conmigo?

—Si el marqués Chester logró controlar al duque Kling, ¿necesitaría este tipo de juego? En ese caso, no querría darnos la riqueza y las personas talentosas demasiado valiosas para él.

—Mmmmm…

—Además, el duque Kling, aunque no era nuestro aliado, estaba más convencido de su legitimidad, que era el único hijo del emperador anterior. Si hubiera sabido del truco sucio de Ober, no habría cooperado con Ober. Y si no lo hubiera sabido, eso es prueba de que el argumento de su hija es cierto. —Colin enfatizó repetidamente el punto mientras miraba con sus ojos rojos.

Mientras el duque Kling estuviera vivo, Ober no podría controlar a Lennox. Si ese era el caso, su mención de la amenaza de Ober hacia ella y su padre era una suposición plausible.

—E incluso si ella fuera una doble espía para el marqués Chester, ¿no podría ser nuestra doble espía también si usted tomara la iniciativa en este trato? Después de todo, lo que importa es asegurarse de que sea una espía leal al marqués Chester.

Lo que dijo Colin fue que ella era un arma de doble filo, después de todo.

En otras palabras, como ras un arma afilada, aunque peligrosa, sería bueno manejarla bien. Eckart pensó que las palabras de Colin tenían sentido.

Sin embargo, no tomó la decisión fácilmente.

No era porque fuera lo suficientemente ingenuo como para negar la situación, o porque no creía que el grupo de Ober no fuera tan malo. Personalmente, haría que se arrodillaran ante él y los castigara a todos con dureza. Pensó que por eso necesitaba una motivación y pruebas más específicas.

También necesitaba un poder y una causa fuertes. Su decisión apresurada motivada por la ira lo arruinaría a él, no a Ober.

Como si tuviera el número de Eckart, Colin lo condujo al mapa del segundo piso. Cuando tiró del hilo rojo, retorcido con seda, se desplegó el mapa continental que mostraba la enorme tierra de Aslan.