¡Me convertiré en la villana que pasará a la historia! – Capítulo 17

Traducido por Yonile

Editado por Lugiia


Tan pronto como termino de cenar, vuelvo a mi habitación.

Había estado planeando tener todo lo que necesito listo antes de mi gran partida, pero… no podía pensar en nada que realmente necesitara preparar.

Como solo voy a ir al pueblo para observar su condición con mis propios ojos, no necesito llevar nada conmigo.

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¡Me convertiré en la villana que pasará a la historia! – Capítulo 16

Traducido por Yonile

Editado por Lugiia


Aunque se lo mencioné al rey antes…, me pregunto cómo es realmente la situación en esos pueblos empobrecidos.

Quizás, no sea lo mejor hablar de ellos con tanta confianza sin haberlos visto, ¿verdad?

Y… una imagen vale más que mil palabras, así que… tal vez debería intentar ir allí por mi cuenta, ¿no?

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Reencarné en una mujer egoísta – Capítulo 47: Dos héroes

Traducido por Sharon

Editado por Sakuya


En tiempos antiguos, este mundo estaba hundido en la oscuridad. La atmósfera estaba estancada, y las personas sentían que la muerte se acercaba solo por respirar. Todos vivían sus vidas con ojos sin esperanza, y tanto sus cuerpos como sus mentes morían poco a poco.

Cada quien se arrastraba por la vida con miedo, sin futuro y sin esperanza.

En tal mundo, una… No, dos luces aparecieron.

Sus orígenes eran desconocidos para el mundo, pero las historias de sus encuentros se volvieron famosas en poco tiempo. Seguí leyendo “Reencarné en una mujer egoísta – Capítulo 47: Dos héroes”

Querida “amiga” – Capítulo 49: No crucemos la línea

—Pero lady Dorothea… —protestó madame Reavoir. Su voz era firme, pero sus ojos temblaban y parecía bastante nerviosa—. Ya hice una promesa con lady Mariestella. No puedo cambiar mis palabras ahora. Eso me perjudicaría…

—Marie. —Dorothea interrumpió las palabras de Madame Reavoir y pronunció mi nombre. Seguí leyendo “Querida “amiga” – Capítulo 49: No crucemos la línea”

Contrato con un vampiro – Capítulo 42: Amanecer (Punto de vista de Kyouya)

Traducido por Herijo

Editado por Ayanami


Punto de vista de Kyouya

Transcurrieron varios minutos mientras nos mirábamos fijamente, inseguros de qué hacer. Mantenerla presionada debajo de mi en el sillón en una posición embarazosa no era nada bueno mentalmente para ninguno de los dos. Me retorcí un poco para retroceder, intentando no lastimarla.

No tengo idea de cómo interpretó mis movimientos, pero cerró firmemente sus ojos con resignación. Giro su rostro exponiendo su cuello tensando el rostro. Observándola temblar atemorizada, hizo que quisiera darme un golpe. ¿Qué bien me hace asustarla de esta manera?

—Lo lamento… Seguí leyendo “Contrato con un vampiro – Capítulo 42: Amanecer (Punto de vista de Kyouya)”

La Emperatriz se volvió a casar – Capítulo 94: El hombre en la fuente

—Ahora que lo pienso, desde que apareció la reina se ha vuelto más difícil de encontrar. Quizás… ¿La Reina está escondiendo a Lord Koshar?

—¡Qué grosero!

Ante la exclamación de Rose, Aprin se arrodilló de nuevo y se disculpó en voz alta. Parecía cada vez más extraño, despertando mi curiosidad sin darme cuenta. Seguí leyendo “La Emperatriz se volvió a casar – Capítulo 94: El hombre en la fuente”

La Tierra está en línea – Capítulo 66: Tu nombre es Víctor

Traducido por Shisai

Editado por Meli


Al terminar la explicación de la torre negra, Tang Mo y Fu Wenduo desaparecieron del puente Nanpu. Sin entrar en pánico, comenzaron a observar a su alrededor. Cada uno a un lado del estrecho y oscuro callejón en el que se encontraban.

—Hay un pequeño río por allí y no veo a nadie —expuso Tang Mo.

—Hay una calle. Deben ser tres o cuatro personas. No están vestidos como jugadores. Son más bien gente d Seguí leyendo “La Tierra está en línea – Capítulo 66: Tu nombre es Víctor”

¡No quiero ser Princesa! – Capítulo 119: El alboroto de la hija del Conde (1)

Traducido por Lucy

Editado por Ayanami


—Me pregunto dónde estará esa mujer.

Acompañando a mi padre, entré en el Palacio Real por primera vez en un tiempo. Buscaba a una mujer.

♦ ♦ ♦

Han pasado unos meses desde el anuncio de compromiso y matrimonio del príncipe heredero de este país, Su Alteza Friedrich.

Su pareja era una joven de la preeminente casa ducal de Vivoir, Lady Lidiana. Durante mucho tiempo, su nombre había encabezado la lista de sus candidatas a prometida. Padre también estaba convencido por el resultado demasiado natural. Si de todos modos tenía que ser la casa ducal Vivoir, ojalá se hubiera anunciado antes, se quejó con amargura. No había forma de ganar contra esa casa, expresó. Pero, no podía estar de acuerdo con lo que me decían.

Había muchas jóvenes que anhelaban al Príncipe Heredero. Si una joven pertenecía a una casa con cierto rango en la corte, era muy probable que sueñe con ser elegida como la princesa consorte. Por supuesto, soy una de ellas. Nacida como la segunda hija de un conde, desde que lo vi por primera vez, he albergado un débil amor por el Príncipe Heredero.

Con cabello rubio y ojos azules, el Príncipe Heredero es hermoso. Las jóvenes que esperan ser amadas por él son infinitas. Con la esperanza de ser elegidas antes de que se decidiera a la prometida del Príncipe Heredero, las jóvenes habían pospuesto sus compromisos. A pesar de ello, al final, sin sorpresas ni giros inesperados, como si todo estuviera predeterminado, se decidió con facilidad por una joven.

El anuncio del compromiso fue seguido de inmediato por la ceremonia de compromiso. El príncipe heredero declaró de manera digna que no tomaría a ninguna concubina. También debía haber mujeres que aceptarían ser concubinas si eso significaba quedarse al lado del Príncipe Heredero, de seguro deben estar decepcionadas por esas palabras. Y hablando de la hija del Duque Vivoir que acaparó al Príncipe Heredero, los rumores de su debilidad van por ahí, es una mujer que no sale a socializar.

Tal mujer robó al Príncipe Heredero… Sin duda, ella concluyó a la fuerza el compromiso con el poder de la casa ducal Vivoir. Pobre Príncipe Heredero. Encontré consuelo en ese pensamiento. Sin embargo, los rumores que empezaron a llegar poco tiempo después fueron increíbles para nosotros.

“El Príncipe Heredero está encaprichado con su prometida…”

Cuando me dijeron eso, no podía creerlo. Era natural, ya que pensaba que era un matrimonio de conveniencia. Pero cuando por la duda participé en la fiesta de celebración de la victoria, y después los vi juntos durante la fiesta nocturna, lo entendí, aunque lo odiara. Sobre todo, la expresión del príncipe heredero era diferente. Al dirigir una expresión dulce, que nunca le había mostrado a nadie hasta entonces, hacia su prometida, parecía un joven enamorado. Y como para demostrar que este compromiso no será anulado pase lo que pase, la Flor Real estaba en plena floración en su pecho. Sentí que era el golpe final.

Aunque todavía había tiempo hasta la ceremonia de matrimonio, ya había sido reconocida como la Princesa Consorte del Príncipe Heredero. No se puede contar con una mano el número de jóvenes que se derrumbaron en shock ante ese hecho. En cuanto a mí, he pensado que quiero decirle unas palabras sin importar lo que pase. Ya está decidido. No se puede evitar. Sin embargo, no podré sentar cabeza si no le digo algo a la hija del duque que robó las esperanzas y los sueños de todas las jóvenes solteras. Eso pensé. Por eso, hoy le pedí a mi padre, sin razón, que me acompañara al castillo… Esa joven parece estar alojada en el Palacio Real desde hace una semana. En ese caso, con la esperanza de encontrarme con ella en algún lugar, merodeé por los alrededores, pero no iba bien. El tiempo sólo pasaba, así que estaba ansiosa de volver a casa sin hacer nada. Aturdida, como último recurso llamé a una dama de la corte que caminaba cerca. Pensé que sería inútil si no hacía algo.

—Usted de ahí.

—Sí.

Al girar la cabeza, la dama de la corte se fijó en mí y, dando un paso atrás, se inclinó. Sólo dije lo que me importaba.

—Escucha, ¿has visto por casualidad a lady Lidiana por aquí? Está en el Palacio Real, ¿verdad? Me gustaría ofrecerle unas palabras de saludo.

Las cejas de la dama de la corte, mientras le hablaba, se crisparon.

—Se refiere a la princesa consorte… ¿verdad?

—Sí…

Al no querer usar ese título, la llamé por su nombre a propósito y, sin embargo, como si entendiera ese sentimiento, la dama de la corte lo reformuló como Princesa Consorte. Aun así, cuando asentí de alguna manera, la dama de la corte levantó su rostro y dijo con claridad:

—La princesa consorte se aloja en los aposentos reales, es raro que visite la zona general. Además, ahora mismo se supone que está con Su Alteza, no es recomendable molestarlos.

—Ya… ya veo.

Al decirme con tanta claridad que provocaría el disgusto de Su Alteza, me quedé sin palabras. Mientras vacilaba, la dama de la corte sonrió un poco y me informó:

—Su Alteza favorece a la princesa consorte. Si se les molesta, me pregunto qué pasaría. Recomiendo retirarse por el día de hoy.

—Tiene razón…

—Bien entonces. Tengo trabajo, así que con esto me excusare.

Me pregunto si es mi imaginación, que en el instante en que la dama de la corte pasó después de decir eso, sentí que su sonrisa era desdeñosa, diciendo: “Alguien como tú no debería acercarse a ellos”, sentí que me contenía.

—Solo es una dama de la corte, pero es demasiado impertinente… ¿Eh?

Me enfadé por la actitud de la dama de la corte, pero no puedo hacer nada al respecto. No es que ella haya hecho nada directo. Mientras la miraba indignada por la espalda, pasó un hombre conocido mío.

—Hey… ¡Espera! Geese.

—Eh… Ah, es señorita.

El hombre que giró la cabeza hacia mi voz era un cocinero joven que había trabajado en la cocina de mi residencia hasta el año pasado. Como era un excelente cocinero, recibió una invitación del castillo y decidió trasladarse aquí. Recordando que había estado bajo mi cuidado hasta ahora, he decidido utilizar a este hombre.

—Oye, tengo una pequeña petición.

—¿Una solicitud? ¿La señorita tiene una para mí?

Sin disimular su actitud molesta, Geese se acercó, y haciendo tiempo diciendo “Estoy ocupado”, lanzó un suspiro frente a mí.

—No tengo más que una desagradable premonición. Hasta ahora, la señorita nunca me ha pedido nada bueno, ¿verdad?

—No pretendo pedir algo en especial importante. Es solo que quiero que me preparen una galleta con medicina.

—La señorita quiere que me convierta en un criminal…

Como los ojos de Geese se pusieron vidriosos, nervioso, le expliqué que no era algo tan grave.

—No te preocupes, no es algo tan extraño. Es solo una broma. Solo se me ocurrió alterar un poco el estómago.

—Haa… Otra vez, huh. ¿Cuántas veces tengo que decirlo para que la señorita lo entienda? Es imposible que un cocinero prepare eso. ¿Se está burlando de mí?

—Esa no es mi intención.

—¿Con quién pretendes usarlo esta vez? ¿No está bien desafiarlos de forma limpia sin hacer esas cosas?

Mientras Geese hablaba con exasperación, murmuré un —porque…

—Ni siquiera yo creo que vaya a salir muy bien. Pero, la otra parte es Lady Lidiana. Por lo general no podría entregárselo a ella. Si está mezclado con un regalo, tal vez exista la posibilidad de que se lo coma.

—Tienes la intención de entregárselo a la maestr… Princesa Consorte, ¿de verdad?

Aunque sospechaba del cambio repentino del tono de voz de Geese, asentí.

—Sí… sí.

—¡Así que pretendías que hiciera algo que ella comiera… además ese algo contendría medicina! Increíble… Señorita, como estoy en deuda con usted por todo lo ocurrido hasta ahora, fingiré que no he oído nada. Sin embargo, no habrá una segunda oportunidad. La próxima vez, suponiendo que piense en hacerle algo a la maest… Princesa Consorte… Por favor, considere a todos los cocineros de la cocina como sus enemigos.

—Eh… por qué…

Mientras me quedaba perpleja, sin entender por qué Geese se abalanzó de repente, frunciéndome el ceño. Agregó un —¿entiendes? —Enfatizando con una voz aterradora. Abrumada por su actitud, me limité a asentir.

—Está bien si lo entiende. Sin embargo, lo que dije hace un momento era serio. Suponiendo que piense en actuar, piénselo bien. Por favor, no vuelva a hablarme.

Diciendo esto, Geese se alejó sin girarse. No tengo ni idea de por qué se enfadó. Pero, al menos entendí que no cooperaría.

—Qué quiso decir… Inútil. Muy bien, ¡cielos!

Era un error intentar confiar en un hombre así. Pensando así, pensé en diferentes medidas, cuando varios guardias reales pasaron ante mí.

—¡Oye! ¿No has visto a la princesa consorte?

—No la he visto aquí. ¿Es cierto que se ha escapado de su habitación?

—Lo es. Su Alteza la está buscando ahora. Nos han ordenado que la encontremos como sea.

—Ella huyó de nuevo, eh. Te he dicho que no le quites los ojos de encima y, sin embargo…

—¡Aunque digas eso, no hubo señales de que la puerta se abriera! De verdad, ¿cómo se escapa esa señora de la habitación cada vez?

—¡Ni idea! ¿No estaba con Su Alteza?

—Parece que aprovechó la oportunidad mientras Su Alteza salía para un asunto oficial. Creo que está en algún lugar dentro del castillo, ¡revisen todos los rincones!

Qué tema tan oportuno… En apariencia, estos soldados la están buscando. Esperando alguna pista, llamé a uno de ellos.

—Disculpe, ¿acaso está buscando a Lady Lidiana?

—¿Sabe dónde está?

Cuando se acercó con increíble vigor, por reflejo di un paso atrás. Al ver mi comportamiento asustado, el hombre que parecía ser un guardia asintió, y cambió un poco su actitud.

—Señorita. Suponiendo que sepa el paradero de la Princesa Consorte, quiero que nos lo diga por todos los medios.

—No es que lo sepa en particular… Es que también tengo asuntos con ella.

Cuando dije eso, el hombre me miró con desconfianza. Me irritó su actitud mientras decía sin pudor:

—¿Ah, sí?

—Qué sucede, acaso es extraño que tenga negocios con Lady Lidiana.

—No he dicho nada de eso. Pero, la joven no parece ser amiga de la princesa. Es impensable, pero sí busca a la princesa consorte para decirle algo innecesario, le imploro que se vaya a toda prisa. Solo incurrirá en el disgusto de Su Alteza en vano.

—Su Alteza…

—¿No sabe que Su Alteza favorece demasiado a la Princesa Consorte? Si algo le ocurriera, sufriríamos. Por favor, no haga nada que no corresponda. ¿De acuerdo?

—Entiendo…

Mientras me miraba fijamente, di una pequeña respuesta.

El caballero me miró con desconfianza, aun así, cuando sus compañeros le pidieron que no perdiera el tiempo, se apresuró a irse. Al verlo partir, exhalé.

—Todo el mundo habla de la Princesa Consorte… ¿¡Qué pasa con esa mujer!?

Me irrité. Era como si todo el castillo la aprobara y le diera la bienvenida como la princesa consorte. Era una actitud impensable hacia una mujer que solo era una compañera en un matrimonio por conveniencia.

—Aah, estoy enfadada.

Mi rabia se desbordó. Con este sentimiento seguí caminando hacia el interior del castillo. Ya casi estaba en los aposentos reales. No esperaba entrar allí, y no pensaba en ello. Entiendo que sería un delito, sólo quería observar un poco desde la distancia. Aunque no nos encontremos, mientras escupo insultos a esa mujer en mi mente pensando que está allí, podré rendirme. Eso pensé, pero cuando de camino a los aposentos reales, vi a una mujer que venía hacia mí, mis pies se detuvieron. Era una hermosa mujer con inusuales ojos violeta y cabello largo y liso de color marrón claro. Sus miembros eran delgados… Sobre todo, en su pecho estaba grabada la rosa azul de la Flor Real.

—Te he encontrado, lady Lidiana…

♦ ♦ ♦

Nota del autor:

Damas de la corte → “¡Esos dos están enamorados! No dejaremos que nadie los moleste.

Soldados → “¡Por el bien de Su Alteza (y por el nuestro) no dejaremos que la princesa consorte se escape!”

Cocineros → “¡La pérdida de la Maestra es la pérdida de un tesoro! ¡Veremos el matrimonio de Su Alteza hasta el final!”

Padre → “Ah… De todos modos, quiero terminar la ceremonia rápido… ¡Me duele el estómago!”

Por las razones mencionadas, los que parecen molestar a Lidi y Freed apenas pueden acercarse. En cuanto son descubiertos, son eliminados rápido por la fuerza ♡〜⸜(。 ˃ ᵕ ˂ )⸝〜♡

Apaga las Luces – Extra 8 (I)

Traducido por Shiro

Editado por Sakuya


—Es hora de mi premio favorito. ¡Mucho han esperado! Esta noche, estamos todos reunidos aquí y ya sabemos quién es el ganador de este gran premio. ¿Perdón? ¿Ustedes no saben? Cielo santo, ¿de qué hablan? ¿Que ya está en panta…? Oh, oh, cielos. ¿Haley? ¡Hola!

La cámara se enfocó en Haley, quien se encontraba sentado en la fila delantera con las piernas cruzadas. Silbidos, aplausos y gritos del público se escucharon al tiempo que él, con expresión tranquila y soñolienta, saludaba hacia la cámara con una sonrisa. Esa hermosa sonrisa desencadenó otra ronda de gritos. Seguí leyendo “Apaga las Luces – Extra 8 (I)”

Al límite – Capítulo 136: Una gran sorpresa

El precio de las acciones de la Compañía Zhong Ding Film & Television había subido con el éxito de taquilla de «Sombras Robadas», y en menos de tres semanas, el patrimonio personal de Wang Zhong Ding había aumentado en más de mil millones de dólares.

Por no hablar de Xia Hongwei, que era un inversor de la película y tenía más del 40% de la recaudación en taquilla a su nombre. Seguí leyendo “Al límite – Capítulo 136: Una gran sorpresa”

Lector Omnisciente – Episodio 47: Selección del Rey Demonio (5)

Pronto llegamos al Complejo Industrial de Yoo Jonghyuk, el que antes era de Syswitz.

Durante el trayecto, Yoo Jonghyuk no pronunció ninguna palabra y actuó de forma similar una vez que llegamos. En el momento en que el Ferrarigini de grado X se detuvo, se bajó del coche y me dijo: —A partir de ahora, actuaré por separado.

—… ¿Vendrás para la selección? Seguí leyendo “Lector Omnisciente – Episodio 47: Selección del Rey Demonio (5)”

Lector Omnisciente – Episodio 47: Selección del Rey Demonio (4)

Traducido por Shisai

Editado por Sakuya


El suelo y el cielo se agitaron como engranajes. Algo gigantesco descendía y había alguien que lo bloqueaba. El poder mágico y la historia gigante provocaron un estallido de chispas brillantes al chocar.

【Faltan 40 segundos para el inicio del escenario de destrucción.】

El oponente era un dios exterior. Poco a poco, se iba acercando. La Santa de la Espada rompiendo el cielo no retrocedió a pesar de la presión que pesaba sobre todo el castillo. No, ella no podía retroceder. Nunca se echaba atrás en sus creencias. Este era el estandarte de un trascendental que transitaba por un único camino. Seguí leyendo “Lector Omnisciente – Episodio 47: Selección del Rey Demonio (4)”

Lector Omnisciente – Episodio 47: Selección del Rey Demonio (3)

Traducido por Shisai

Editado por Sakuya


El mensaje apareció en un momento inesperado y me hizo pensar por un momento.

Otra revisión significaba que el futuro seguiría cambiando debido a mis acciones. En otras palabras, tras recibir la primera revisión, contribuí a la creación de un nuevo futuro.

Mi corazón palpitaba al pensarlo. ¿Tenía éxito en la tercera regresión? ¿Empezaría de nuevo desde la cuarta? ¿Llegó Yoo Jonghyuk al final en la historia que cambié? Seguí leyendo “Lector Omnisciente – Episodio 47: Selección del Rey Demonio (3)”

¡Juro que no volveré a acosarte! – Capítulo 24: Gente contradictoria

Traducido por Lugiia

Editado por Freyna


Al final, Violette y Yulan perdieron la mayor parte de su descanso para comer. Tuvieron unos minutos para sentarse juntos, pero a ella solo le dio tiempo de comer un aperitivo.

En realidad no le importaba, pues no era mucho menos de lo que solía comer y, de todos modos, era culpa suya que llegaran tarde. Sin embargo, Yulan había crecido tanto y necesitaba mucha comida para alimentar un cuerpo de ese tamaño. Esperaba que fuera capaz de concentrarse durante las clases de la tarde. Se preocupó por él durante toda la tarde, aunque se las arregló para tomar los apuntes adecuados al mismo tiempo.

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¡Juro que no volveré a acosarte! – Capítulo 23: Maryjun Vahan

Traducido por Lugiia

Editado por Freyna


—¿Eh…? —susurró Maryjun, paralizada y confundida por la inesperada pregunta. ¿Acaso alguien que no estaba de acuerdo con su sentido del bien y del mal era malvado? Violette prácticamente podía oírla pensar en ello.

—No lo son, ¿verdad? Hay gente que cree en un tipo de justicia diferente al tuyo. Creen que están haciendo lo correcto. No se consideran malvados.

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