El gato blanco que juró venganza – Capítulo 18: Ángel marino flotando en el aire

Traducido por Yonile

Editado por Meli


Después de su primer momento íntimo con Jade, Rurí pensó que debía hacer algo antes de que fuera demasiado tarde.

Él parecía adicto a la sensación, era como si dormir con Ruri fuera algo de sentido común.

Quería tenerla a su lado en todo momento, incluso preparó una pequeña cama en su oficina solo para ella, aun cuando ella permanecía en sobre s regazo la mayor parte del tiempo.

Ruri estaba viviendo una rutina de dormir, comer, dormir… Se estaba desviando cada vez más de su propósito inicial al ir a la capital: aprender las formas de vida en ese mundo. A ese paso, iba a ser una ca inútil.

Así que, comenzó a trabajar para salvarse del destino aterrador; ser un humano inútil.

—Entonces… ¿Qué es lo que quieres? —preguntó un poco molesta Euclase mientras sostenía un documento en una mano.

Ruri no tenía en quién más confiar, Joshua verificaba en otro país la información de la chica en la Jade parecía tener interés, así que Euclase era la única persona que conocía su dilema gato-humano.

—Me gustaría trabajar si eso es posible…

—¿Entiendes la posición en la que estás? ¡Eres un Amado! ¿Y si te pasa algo? Te proporcionaremos todo lo que necesites, así que relájate y trata este lugar como si fuera tuyo.

—Quiero trabajar y obtener ingresos para mantenerme. Además, la razón por la que vine a la capital fue para aprender sobre este mundo. Si Chelsea supiera que solo estoy holgazaneando todos los días, imagina lo enojada que se pondrá…

 El solo pensamiento le puso la piel de gallina a Ruri.

—Entiendo, sin embargo, sabes cómo se preocupa Su Majestad cuando no estás a su lado. ¿Qué excusa darás? Él no sabe que eres humano, ¿cómo le dirás “estoy trabajando”?

—Puedo mantener mis sesiones cortas. Los gatos normales también caminan sin ningún destino en mente.

—Pero aun así…

—¡Por favor, Euclase! ¡Eres la única persona que puede ayudarme!

Y con eso, Ruri de alguna manera logró convencer a Euclase para trabajar a tiempo parcial en un restaurante propiedad de un conocido suyo en el pueblo vecino.

⧫ ⧫ ⧫

—¡Bienvenido! —dijo Ruri con su cabello rubio oculto por una peluca preparada por Euclase.

Para no causar una gran conmoción al irse demasiado tiempo, solo trabajaba durante la hora pico de la mañana.

Los dueños del restaurante eran una pareja que había sido empleada por la familia de Euclase, pero debido a su vejez, dejaron su trabajo en el hogar y comenzaron el restaurante juntos.

—¡Tener a Ruri es como un regalo del cielo! Escuché que solo vas a trabajar por un período corto, pero si tenemos oportunidad, te daríamos el empleo en un abrir y cerrar de ojos.

—También he deseado trabajar en esta profesión, así que me estoy divirtiendo mucho.

Aunque el restaurante era diferente, Ruri siempre había querido trabajar en un café.

Sin embargo, sin importar a qué tipo de entrevista de trabajo asistiera, Asahi siempre aparecía y se quedaba con el empleo, mismo que abandonaba porque ella solo quería trabajar con Ruri, algo que la hacía enfurecer. Por ello y con la esperanza de no ser contratado junto con Asahi, siempre buscó trabajos donde empleaban a pocas personas.

Al final, el único trabajo a tiempo parcial que logró conseguir en su mundo original fue como modelo, algo que obtuvo por una conexión de negocios de su madre. No obstante, vestir lindos atuendo y tomarse fotos no es algo que Ruri quisiera hacer, sin embargo, el hecho de que Asahi no estuviera allí le resultaba cómodo. Además, como estudiante, necesitaba ese dinero extra para su vida social, ya que nunca parece ser suficiente.

Las personas relacionadas con su madre la priorizaron, incluso cuando Asahi estaba presente. Creyó que el encanto de su madre era mayor que el de Asahi y que ella no era encantadora en lo absoluto.

En ese entonces, Asahi debió usar magia de encantamiento inconscientemente. Y según Chelsea, aquellos sin defensa contra la magia sentirían el efecto de una magia encantadora con más fuerza.

Pero era extraño, la magia de encantamiento no funciona en personas cuyo poder mágico es más fuerte que el lanzador, o en aquellos que ya están bajo la influencia de una magia de encantamiento en curso lanzada por otra persona.

Chelsea también dijo que el poder mágico es algo heredado. Aquellos con un fuerte poder mágico tendrán una mayor probabilidad de tener un hijo con el mismo poder.

Ruri recordó los relatos divertidos de supervivencia de su abuelo: durante su servicio, él solo diezmó a todo un pelotón de soldados enemigos mientras recibía una lluvia de balas; y derribó un árbol enorme con solo su puño. Parecían exagerados, pero si la magia estaba involucrada…

Además, su madre y abuelo tendían a hablar solos mientras miraban al espacio, conversaban como si alguien más estuviera presente. Su abuelo preguntaba “¿es capaz de…?” y su madre respondía “Todavía no”. Luego ambos mostraban una expresión decepcionada mientras ella veía al espacio confundida.

Tal vez, las hadas a su alrededor podrían completar el rompecabezas. Cuando pensó en las hadas, asumió que deberían estar cuidando a la distancia en ese momento para no interferir con su trabajo de medio tiempo.

No hay manera… ¿Verdad? Quiero decir…

En ese momento, Ruri sintió como si acabara de tropezar con la verdad del mundo.

Se quedó en blanco al tratar de explicar las acciones de su madre y su abuelo. No tenía forma de comprobar su hipótesis, así que abandonó el asunto.

Sin embargo, se sintió un poco aliviada. En su mundo original, su repentina desaparición debió convertirse en un caso de persona desaparecida, mismo que se cerraría porque ella no sufrió un accidente o un secuestro, aunque la situación fuera similar. Se encontraba en un mundo paralelo, sin poder regresar a su mundo original. Aunque es posible que no pueda reunirse con ellos, el solo pensamiento de que podrían saber que estaba en un mundo paralelo le dio cierto nivel de consuelo.

Podrían estar preocupados por ella, pero no había razón para que estuvieran tristes. Después de todo, tanto su madre como su abuelo la criaron para que pudiera sobrevivir en una situación como esa. Deberían pensar que lo está haciendo bien por sí misma. Ruri sintió que una de las cadenas que la mantenían en su mundo original desapareció.

♦ ♦ ♦

—Lamento molestarte, pero ¿podrías hacer un último recado antes de terminar por hoy.

—Con mucho gusto.

Debía ir al mercado porque la hora pico de la mañana, los dejó sin suministros para la noche.

Pero durante su regreso del mercado. Algo que no debería estar en medio de la carretera flotaba justo frente a ella.

—¿Hmm? ¿Un ángel del mar? … Ah, se cayó.

El ángel del mar cayó al suelo como si acabara de renunciar a la vida. Ella sabía que los ángeles del mar eran de color transparente. Y a pesar de que este era casi del tamaño de su puño, tenía un color blanco lechoso y una aleta ligeramente rosada, no había ningún error, en que esa majestuosa forma de criatura era sun ángel marino.

¿Y por qué esta criatura del mar, llamada el hada del hielo estaba flotando en el aire donde no hay agua de mar o hielo?

Ruri se agachó para mirar bien al ángel del mar.

—A-Agua…

—¿Habló? —Se alejó sorprendida.

A pesar de la confusión, tomó al ángel marino y corrió a toda velocidad hacia el restaurante. Dejó la funda en el mostrador y llenó un balde con agua del pozo, lo llevó a la parte trasera de la tienda y soltó al ángel del mar en él. Luego entró para buscar sal y depositó una montaña que sobresalía del cubo.

—¿Por qué le agregaste sal? Eso solo hará que el agua esté muy salada, ¿no? —gritó furioso con los ojos rojos y saltones. 

Ruri confirmó que no imaginó cuando él pidió agua.

—¿Pensé que el ángel del mar era una criatura marina?

—¡Soy una criatura de agua dulce!] —se quejó mientras agitaba la aleta.

Claro, él era diferente a un ángel marino, sobretodo porque ellos no flotan en el aire.

—Dejemos el asunto así. Me salvaste y te conocí de una manera segura.

—¿Querías conocerme? —preguntó confundida.

—¡Eso es correcto!

No había ninguna razón para que un ángel marino quisiera conocerla.

—¡Dame un nombre!

—¡¿Eh ?! ¿Un nombre? ¿Por qué?

—¿Le diste a Kotarou su nombre, verdad? ¡Quiero que me des un nombre para que pueda lucirlo con orgullo! ¡Dame un nombre!

El único “Kotarou” que Ruri conocía era esa persona, o mejor dicho, ese animal.

—Por Kotarou, ¿te refieres a la bestia mágica que parecía un cerdo?

—Así es. Ese hada del viento idiota ignoró su propio atributo y poseyó un cuerpo de atributo de la tierra. Debido a eso, no pudo usar su poder en absoluto.

Su declaración llamó la atención de Ruri.

—¿Ehh? ¿Kotarou es un hada? ¿No una bestia mágica?

—El cuerpo es de una bestia mágica. El alma en el cuerpo es de un hada. Las hadas no tenemos cuerpo físico. Pero las de nivel superior a veces poseen el cuerpo de una bestia mágica o incluso personas.

—Ah.

—Hasta hace poco, yo no poseía un cuerpo físico. Para conocerte, fui al río a pedir prestado este cuerpo. Sin embargo, a mitad de camino, no pude reponerme con el agua que necesito. Mi situación era tan crítica que casi tuve que buscar un cuerpo nuevo.

—¡Oh! —respondió sin saber qué más decir ante el bombardeo de información—. ¿Por qué tienes un cuerpo para conocerme?

—Las hadas que te rodean dicen que te gustan las cosas lindas. ¿Qué opinas de este cuerpo?¿Es lindo? Escuché que te gusta el mofu mofu, así que fui a buscar un cuerpo semi-humano adecuado, pero no encontré a nadie con el atributo adecuado para mí. Sin embargo si prefieres mofu mofu yo puedo buscar, hay tantos semi-humanos aquí que estoy bastante seguro de que podré encontrar a alguien adecuado.

El cuerpo era lindo, pero el contenido de la segunda mitad de la conversación era aterrador.

Ruri negó con la cabeza vigorosamente, mostrando su firme rechazo a la oferta del hada.

¿Por qué el patrón de pensamiento de las hadas siempre se sobrepasa?

—¡Ese cuerpo es lo suficientemente bueno!

—Oh, es así. Bien entonces. ¡Dame un nombre!

¿Qué quieres? ¿Por qué la conversación está volviendo así?, se quejó, pero no pudo rechazar la petición ante la mirada llena de esperanza del hada, así que pensó en un nombre.

—En ese caso… ¿cómo suena Rin?

—¿Rin? Ese es mi nombre, ¿verdad? ¡Muy bien, lo tomaré!

Lleno de alegría por tener un nombre, Rin aleteó felizmente y salió volando del cubo. Ruri se alegró de que Rin estuviera satisfecho con el nombre que dio y se sintió aliviada cuando vio a Rin girando de alegría.

—Oh cierto. Kotarou mencionó que vendrá más tarde.

—¡¿Qué?! ¡Espera un segundo! No podrá entrar a la ciudad sin destruirla, con ese enorme cuerpo suyo, ¿verdad? ¡Va a crear pánico!

—Sí. Por eso ahora está buscando un cuerpo nuevo. Dijo que se encontrará contigo con un cuerpo que te complacerá.

Ruri se inquieto.

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