Traducido por Shroedinger
Editado por Sakuya
Sabía de ramos de flores, pero un ramo de joyas…
—¿Qué significa esto?
Cuando le pregunté, nerviosa, repitió la explicación de antes.
—El Reino Occidental es la capital de las joyas; cuyas minas pertenecen a la familia real. Tenemos muchas joyas. Seguí leyendo “La Emperatriz se volvió a casar – Capítulo 90: Preparaciones para la boda”
Traducido por Shroedinger
Editado por Sakuya
Ante el atrevido comentario, Christa me miró, perpleja.
Si lo corrigiera de nuevo, parecería que lo estaba regañando, por lo que estaba tratando de que él se diera cuenta de quién era yo… Desafortunadamente, el cortesano no se dio cuenta.
Sin entender nada, el cortesano continuó ‘alabando a la verdadera reina’. Christa me miró con desesperación esta vez. Seguí leyendo “La Emperatriz se volvió a casar – Capítulo 89: Posición incómoda (II)”
Traducido por Shroedinger
Editado por Sakuya
—Oh, Reina. Te gusta el dorado, ¿verdad?
—¿No leíste la carta?
—Sí, pero cuando me fui, la habitación aún no estaba terminada…
Podía escuchar a Heinley reír en voz baja. Seguí leyendo “La Emperatriz se volvió a casar – Capítulo 88: Contraste”
Traducido por Shroedinger
Editado por Sakuya
La caja parecía grande, pero no se sentía así una vez que estuve dentro. Abracé mis rodillas y pensé para mí misma “¿Qué diablos estoy haciendo ahora?” No importa cómo se mire esta situación, yo no era una reina, sino una fugitiva.
El carruaje se movía suavemente, pero la caja estaba ubicada cerca de las ruedas. Cada pequeño golpe sacudía mi cuerpo, haciendo que mi cabeza golpeara la parte superior de la caja, seguida por mi trasero y piernas en el suelo. Después de varios impactos dolorosos, logré encontrar una posición que me sometió a un poco menos de abuso. Seguí leyendo “La Emperatriz se volvió a casar – Capítulo 87: Posición incómoda (I)”
Traducido por Shroedinger
Editado por Sakuya
¿Cómo podríamos romper esto? ¿Cómo podríamos atravesar ese muro de caballeros?
Me quedé en el pasillo, ocasionalmente mirando por la ventana y mirando la barrera. Sin embargo, por mucho que pensara, no se me ocurrió un plan. Los caballeros inspeccionaron minuciosamente a cualquiera que entrara y saliera de los terrenos, por lo que cubrirme la cara estaba fuera de discusión. Si intentaba pasar el muro, solo me empujarían hacia atrás y el camino para los carruajes estaba bloqueado. Seguí leyendo “La Emperatriz se volvió a casar – Capítulo 86: El shock de Sovieshu (II)”
Traducido por Shroedinger
Editado por Sakuya
—Por favor, quédese aquí un momento.
El Marqués Farang salió hacia la puerta y habló con un guardia, pero el guardia no dio señales de que lo reconociera. El Marqués Farang luego trepó a una gran roca cerca de la pared y miró por encima de ella. Regresó adentro, chasqueando la lengua.
—Los caballeros no solo han rodeado la puerta principal, sino también toda la mansión. Seguí leyendo “La Emperatriz se volvió a casar – Capítulo 85: Sorprendida junto con Heinley”
Traducido por Shroedinger
Editado por Sakuya
¿Qué iba a decir? ¿Me daría palabras de enojo o me desearía lo mejor? Ciertamente no diría que estaba feliz de que me volviera a casar. Las chispas parecían volar de sus ojos, por lo que no podía ser bueno.
—Emperatriz. No, Navier. ¿Qué te pasa? Seguí leyendo “La Emperatriz se volvió a casar – Capítulo 84: El shock de Sovieshu (I)”
Traducido por Shroedinger
Editado por Sakuya
Rashta se dio cuenta de que su vida pronto cambiaría por completo. La gente en el Palacio Imperial era generalmente amigable con ella, pero en los últimos días, había sido en un grado excepcional. Cuando caminaba, los nobles se acercaban discretamente y le hablaban, aunque el tema a menudo se refería a lo lamentable que era la Emperatriz. Era obvio que los nobles querían buscar el favor de Rashta.
Seguí leyendo “La Emperatriz se volvió a casar – Capítulo 83: Pido aprobación para volver a casarme”
Traducido por Shroedinger
Editado por Sakuya
Tomé la mano de Heinley y asentí, agradecida de que dijera exactamente lo que estaba pensando. Él sonrió y se incorporó lentamente. Mis manos naturalmente se alejaron, y las junté torpemente. Después de regocijarme por la reunión, me sonrojé al pensar en él abrazándome de nuevo. Sin embargo, a diferencia de mí, Heinley parecía más sereno.
—¿Quieres un café? Seguí leyendo “La Emperatriz se volvió a casar – Capítulo 82: La noche antes del divorcio”
Traducido por Shroedinger
Editado por Sakuya
Tan pronto como vi el pájaro dorado caído, solté un grito.
¡No!
Me apresuré a acercar a Queen a mi pecho y luego cerré la ventana. Me molestó que los arqueros todavía estuvieran ahí, pero primero tenía que ocuparme de Queen. Corrí la cortina para tener privacidad y lo acosté en mi cama. Seguí leyendo “La Emperatriz se volvió a casar – Capítulo 81: No estar sola por mucho tiempo”
Traducido por Shroedinger
Editado por Sakuya
Sovieshu le mintió a su madre. Navier se había comido las galletas mezcladas con drogas.
—Los efectos secundarios no se manifiestan con todo el mundo.
Después de que Sovieshu terminó su historia, presionó su mano contra su sien y cerró los ojos. Seguí leyendo “La Emperatriz se volvió a casar – Capítulo 80: Esperando la felicidad”
Traducido por Shroedinger
Editado por Sakuya
Pensé que Sovieshu no caería en las mentiras ridículamente obvias de esa pareja. Sin embargo, en lugar de aceptar mi punto, Sovieshu lo rechazó rotundamente.
—Si la Emperatriz insiste en llamar frijol rojo a una soja, la mayoría de la gente lo llamará frijol rojo. Seguí leyendo “La Emperatriz se volvió a casar – Capítulo 79: Una historia secreta”
Traducido por Shroedinger
Editado por Sakuya
Asentí, pero luego me detuve. ¿Comedero…? Recordé cómo Queen se indignó al ver insectos. Me preguntaba con preocupación si volvería a pasar lo mismo con el subordinado de Queen.
—¿Su Majestad? No te ves bien. —El Marqués Farang me miró con ansiedad—. ¿Está bien? Seguí leyendo “La Emperatriz se volvió a casar – Capítulo 78: Están mintiendo”
Traducido por Shroedinger
Editado por Sakuya
—Lord Koshar. Este es el Rey Heinley I del Reino Occidental.
La escolta abandonó sus modales juguetones y presentó al Rey Heinley, y Koshar se inclinó ante Heinley con perfecta gentileza. El hombre imaginaba que Koshar era demasiado rufián para suceder a la familia Troby, pero cuando se trataba de eso, Koshar tenía modales impecables. El hombre miró entre Koshar y Heinley, en vilo por el tipo de conversación que tendrían.
—Buen trabajo. Te puedes retirar. Seguí leyendo “La Emperatriz se volvió a casar – Capítulo 77: ¿Por que me llamas hermano mayor?”
Traducido por Shroedinger
Editado por Sakuya
—¿Realmente se está divorciando, Su Majestad?
—No dije que lo estuviera.
El rostro de Sovieshu estaba rígido. El Marqués Karl salió de la habitación con expresión sombría y regresó unos quince minutos después con algunos documentos en la mano. Era una solicitud de divorcio del Sumo Sacerdote. Seguí leyendo “La Emperatriz se volvió a casar – Capítulo 76: Encuentro con el Reino Occidental”