Querida “amiga” – Capítulo 17: Una respuesta breve

Traducido por Kiara

Editado por Ayanami


En ese momento, la puerta de la recepción se abrió, junto con el anuncio del sirviente. Rápidamente, dejé el té y me levanté de mi asiento. En contraste con el traje color crema del banquete, el dia de hoy, Xavier lleva un uniforme azul marino.

Eso, en realidad, no es un detalle muy importante. Después de todo, su belleza no ha cambiado desde la última vez hasta hoy.

Ah, pensar que volvería a ver esa cara…fue un verdadero honor para nuestra familia.

—Saludo humildemente al Pequeño Sol del imperio, Su Alteza, el Príncipe Heredero. Que haya gloria para Yohnas.

—Tome asiento, lady Mariestella —dijo Xavier, con una elegante sonrisa. —Es un gran placer verla de nuevo.

Oh, buen señor arriba, ¿cómo podría un humano ser tan guapo?

—Muchas gracias por su invitación, Su Alteza.

¿Cómo hace que todo parezca un desfile de modas sin importar lo que lleve puesto?

Volví a sentarme con la mayor gracia posible, aceptando, interiormente, que su apariencia complementa la moda.

¡Estaba increíblemente nerviosa en el momento en que estuvimos bailando, y ahora nos reunimos en privado! No sé si mi corazón podrá aguantar esto todo el día. Es muy parecido a conocer a una celebridad frente a mis propios ojos.

— ¿El té se adapta a sus gustos, lady Mariestella?

—Sí, su Alteza. Es absolutamente maravilloso.

No solo estaba tratando de ser cortés, en realidad, fue maravilloso. Pensé que el té en la casa Bellefleur era fantástico, pero el té servido en el Palacio Real es realmente diferente. Incluso para mí, que no se nada sobre el té, de alguna manera, pude entender que es un té de primera calidad.

—Lo más importante… ¿es cierto que me invitaste solo para preguntar qué tipo de diseño me gustaría para el pañuelo, Su Alteza? —Pregunté.

— ¿Perdón? Oh…

No estaba segura de qué estaba pensando, pero el Príncipe Heredero parecía un poco nervioso. Parece que no había entendido mi mensaje, así que volví a hablar.

—En realidad, no me importa ningún diseño…me siento un poco mal de que tenga que pasar por todos estos problemas por mi culpa, Su Alteza. Escuché que estás muy ocupado.

—Eso es cierto, por supuesto, pero también es un hecho innegable que su pañuelo se ensució por mi culpa.

—Pero, si ese es el caso, fui yo quien ensució su chaqueta primero, oh, nunca tuve la oportunidad de preguntar sobre eso —Me había olvidado por completo hasta este momento. — ¿Puedo preguntar sobre los costos de reparación de la chaqueta?

—No debe preocuparse por eso, lady Mariestella. No se siente bien el esperar una recompensa por un error —dijo con una mirada tranquilizadora.

—Eso significa que Su Alteza tampoco tiene la necesidad de comprarme un pañuelo —señalé —de hecho, incluso pisé los pies de Su Alteza por, al menos, unas doce veces ese día. Así que quien está en deuda soy yo.

—Quince veces —corrigió Xavier despreocupado, debe haberle dolido mucho recordarlo, sentí una punzada de culpa por ello, antes de continuar como si nada hubiera pasado. —En cualquier caso, no te preocupes demasiado por lo que pasó ese día. Mis pies también están bien.

Eso sería imposible, a menos que sus pies estuvieran hechos de titanio. Aunque, realmente, no confiaba en su reclamo, me pareció extraño insistir en lo contrario, cuando él mismo dijo que está bien. Decidí dejarlo ir y volví al tema original.

—En realidad, no soy tan versada en la moda para tener una preferencia en algún diseño.

— ¿De verdad? —Dijo Xavier.

—Sí. Así que, realmente, no creo que sea de mucha ayuda. Estaré agradecida con lo que sea que Su Majestad me dé.

— ¿Hay algo que te gustaría que se borde en él? —Preguntó.

—Hmm… —después de pensarlo un poco, hablé lentamente. —Me gustan mucho las rosas. Estaría muy agradecida si pudiera tener una sola rosa bordada en él.

— ¿Le gustan las rosas?

—Sí, es mi flor favorita. Las rosas rojas son mis favoritas entre todas.

Xavier asintió solemnemente y empecé a preocuparme por ser demasiado exigente al respecto. —Um…no necesitas preocuparte demasiado por las cosas que digo, alteza —agregué tentativamente.

—Para nada, lady Mariestella. Los regalos son solo valorados de verdad cuando el destinatario está contento con ellos. De lo contrario, no sería más que un simple adorno.

Ugh, ¿cómo es posible? ¡Incluso su perspectiva es perfecta!

Puedo entender por qué Dorothea está tan ilusionada con él.

Pensé que debería mencionar a Odelette, y tomé un sorbo del té de rosas que me pusieron delante. La fragancia es sumamente encantadora.

—Um, su alteza …

— ¿Sí, lady Mariestella?

— ¿Hay alguna dama con la que planee casarse?

De repente, Xavier comenzó a toser y escupir su té.

Mis ojos se abrieron por la sorpresa.

— ¿Está bien, alteza? ¿Quieres mi pañuelo…?

Bien, perfecto, olvide traer uno. Torpemente, cerré la boca, y Xavier levantó la mano como para indicar que estaba bien.

—Estoy bien. Me atraganté un poco, eso es todo. Sin embargo, debo preguntar, ¿por qué, de repente, me pregunta sobre el matrimonio?

—Bueno, está en edad de casarse ahora…y liderarás este Imperio en el futuro. —Eché un vistazo a la expresión de Xavier con un brillo sutil en mis ojos. Afortunadamente, no parecía ofendido, y suspiré aliviada — ¿quizás, has considerado a alguien para ser tu consorte?

—No —dijo Xavier en breve. —Aún no. ¿Pero por qué quiere hablar de eso?

— ¿Oh, en serio? —Sonreí una vez después de escuchar la respuesta de Xavier. Para ser honesta, después de leer la novela original, sabía que no tenía a nadie en mente…pero era mejor prevenir que curar. Mi voz tembló de emoción sin darme cuenta.

—No es mi intención molestarle su Alteza, pero si me lo permites me gustaría presentarte a alguien.

—¿Presentame? —Preguntó, remarcando cada sílaba, asentí como respuesta. Parecía haber sido tomado por sorpresa. Frunció un poco las cejas y las enderezó una vez más. — ¿Presentarme a quién?

— ¿Conoce a lady Odelette?

—Oh. —Xavier asintió en reconocimiento. —Solo de nombre. La joven dama de Trakos, ¿correcto?

— ¡Sí, ella misma! —Sonreí y continué. —Personalmente, no creo que haya nadie más adecuado para convertirse en la princesa heredera que Lady Trakos. Por supuesto, no soy quién para tomar esa decisión, podría ir en contra de tu juicio…pero le aseguro que lady Trakos es realmente una buena persona.

—Bueno… —Xavier asintió distraídamente y agregó —escuché que es una persona sobresaliente, tanto en apariencia como en personalidad.

— ¿Verdad? —Levanté la voz, emocionada por su respuesta positiva, pero luego, lentamente, cerré la boca después de mirar la expresión de Xavier.

Aunque la estaba felicitando con sus palabras, su expresión…no era, particularmente, la de alguien que está contento con el tema. No parecía que odiara por completo la idea, pero tampoco parecía que le encantará…tal vez, solo estaba en el límite.

¿No está realmente entusiasmado con ello? ¿Presioné demasiado mis pensamientos personales sobre él? Pero, no pensé que me acercaría demasiado a él ni nada… ¿o mencioné esto demasiado pronto? Tal vez, debería haberlo mencionado cuando estaba a punto de irme…

Todo tipo de pensamientos zumbaban alrededor de mi cabeza cuando Xavier, de repente, me llamó.

—Lady Mariestella.

— ¿Sí, su Alteza? —Respondí automáticamente, pero Xavier continuó mirándome sin decir nada más.

Justo cuando comencé a sentirme incómoda y me preguntaba qué diría a continuación, escuché su voz una vez más.

—El jardín trasero del Palacio Thurman es muy hermoso. Hay muchos tipos de flores.

¿Por qué la repentina charla en el jardín? Me sorprendió el cambio drástico de tema, pero respondí con una expresión neutral.

— ¿De verdad?

—Sí. El clima también es muy agradable. ¿Le gustaría unirse a mí en una caminata?

Las cosas se pondrán aún más incómodas si digo que no. Ese fue el único pensamiento que pasó por mi mente, mientras respondía rápidamente.

—Me encantaría.

8 respuestas a “Querida “amiga” – Capítulo 17: Una respuesta breve”

    1. No sé pero creo que a esta altura debería darse cuenta hacia quien apunta el interés del príncipe. Ojalá no sea de esas protas negadas.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

 

error: Contenido protegido