Traducido por Rencov
Editado por Yonile
Desde aquella ocasión, Zhu Yao le insistió a su maestro durante tres días, sin embargo, no cedió. Y se dio cuenta de que cuanto más hablaba bien de Wang Xuzhi, más fuerte era la negativa. Ella comenzó a sospechar un poco y se preguntó si su maestro había sido molestado por algún niño mimado en el pasado.
No obstante, la supervisión de Yu Yan sobre el cultivo de ella se había vuelto más rigorosa, y gracias a eso pudo estabilizar su reino actual. Él le dijo que podría avanzar a Azoth pronto. Pero, al final nunca tuvo la oportunidad de hacerlo. Seguí leyendo “Mi discípulo murió una vez más – Capítulo 30: Los hombres deben ser fuertes y musculosos”
Traducido por Akirie
Editado por Sakuya
El ruido exterior desapareció lentamente.
Ye Zhizhou analizó la línea de tiempo. Se alegró de descubrir que la trama solo había avanzado hasta el punto en el que el protagonista ingresó a la Universidad B. Ya eran finales de agosto. El ruido de afuera era la familia ayudando a preparar la fiesta de cumpleaños de Si Han. Por supuesto, era el cumpleaños del Si Han original. El verdadero cumpleaños de Qin Bao, ahora conocido como Si Han, realmente era a finales de año, diciembre. Desafortunadamente, incluso Qin Bao había olvidado su verdadero cumpleaños.
El cumpleaños de un chico de 18 años definitivamente tenía que ser espectacular. Zhong Min estaba ocupada preparando la fiesta, pero Si Youqian, quien sabía que su hijo era una falsificación, estaba completamente desinteresado. Su actitud enfureció a Zhong Min y causó que discutiera con él. Si Youqian se sintió agraviado por su esposa, pero no podía decirle la verdad. Su disgusto hacia la falsificación de su hijo se hizo cada vez más profundo. Así que, simplemente se fue y solo regresó a casa después de que la fiesta terminó. Seguí leyendo “Prevenir un Harem – Capítulo 53: Baobao no es un reemplazo”
Traducido por Bee
Editado por Sakuya
Las tres personas esperaron con torpeza hasta que llegó la olla.
El camarero colocó los platos uno por uno en el lugar vacío de la mesa, que también estaba entre Shang Jin y Shang Ming y frente a Ye Zhou.
La base de la olla de pato mandarín estaba caliente y picante, de un rojo brillante por un lado y fresca, fragante y ligera por el otro. El ochenta por ciento de lo que pidieron los tres, fue todo carne. Seguí leyendo “Todos creen que él me gusta – Capítulo 47”
Traducido por Bee
Editado por Sakuya
Shang Jin arrojó su ropa sobre la mesa. Las dos personas de la litera superior ni siquiera se dieron cuenta. El extraño chico resopló y todavía abrazó a Ye Zhou con más fuerza.
Shang Jin respiró hondo y caminó hacia la puerta del dormitorio. Abrió la puerta y luego la cerró con fuerza.
La puerta del dormitorio se cerró con un estruendo. Las dos personas de la cama se despertaron. Seguí leyendo “Todos creen que él me gusta – Capítulo 46”
Traducido por Yonile
Editado por Sharon
—S-Su Alteza, e-eso es… —comenzó a hablar la señorita Mary, quizás percibiendo un gran problema.
Su Alteza podría ser alguien a quien ella podía manipular de alguna manera, pero ciertamente no tenía la confianza para engañar al poder judicial.
Sin embargo, Su Alteza la detuvo con una mano. Seguí leyendo “Joven esposa del Capitán (de 62 años) – Capítulo 57: La intromisión de Su Alteza III”
Traducido por Army
Editado por Ayanami
Xia Yuqing sonrió siniestramente y comió su comida con calma. Moviendo su cuerpo aquí y allá, pronto se había movido al lado de He Wenzhong. Agarró un trozo de la sabrosa pierna de pollo asado y la agitó frente a He Wenzhong.
Al oler el delicioso olor, de inmediato levantó la cabeza, tomando un descanso de la comida que estaba devorando. Sus ojos siguieron la pierna de pollo mientras se movía adelante y atrás frente a él. Seguí leyendo “Escapó otra vez – Capítulo 86: ¡Ben Gong quiere escalar la pared!”
Traducido por Army
Editado por Ayanami
Al salir del túnel secreto, una ráfaga de aire frío golpea mi cara. El cielo negro como la tinta está cubierto de estrellas centelleantes. Los fuegos arden brillantemente al otro lado del horizonte. El agradable aroma de la hierba flota en el aire, mezclado con un toque de tierra.
Con avidez, respiro hondo antes de poner mi capucha sobre mi cara. Eidolons flanquean mis costados de cerca. Dejamos atrás el Templo Yi Xin, cuando divisamos a un grupo de varias docenas de soldados armados que esperan a diez zhang. Seguí leyendo “Indiferente a las Arenas Frías – Capítulo 36: Llamas”