Traducido por Hime
Editado por Sharon
—Aah, aah…
—De acuerdo. Hemos terminado con el trabajo matutino, tomémonos un descanso —dijo Richard, el viejo mayordomo, a Mary, que estaba empapada en sudor.
Desde la mañana, la mansión fue limpiada, las ropas y sábanas fueron lavadas, las camas fueron hechas, etc. Mary, quien casi no tenía ya energías, no podía hacer más que asentir. Leer más…