El Perseguido – Capítulo 140: Justo a la derecha

Traducido por Shisai

Editado por Sakuya


Chi Yan era como un niño que había ido a visitar su ciudad natal después de mucho tiempo. Tenía que caminar y ver todo a su alrededor.

Lo más abundante en el reino era el espacio, por lo que Ye Ying Zhi tenía en su reino todas las casas en las que vivieron durante las cinco reencarnaciones. Chi Yan se rio de él.

—Si siempre harás todo esto, después de algunas reencarnaciones más, tendrás que construir un museo dedicado a exhibir todas las casas en las que vivimos en cada vida.

En cambio, Ye Ying Zhi parecía estar pensando seriamente en esta propuesta.

—No es una mala idea.

Chi Yan caminó lentamente todo el camino hasta que finalmente llegó al área que Ye Ying Zhi le dio al principio.

Su casa, bosque, mar y yate estaban tal cual como cuando se fue, no habían sido movidos, todo estaba como nuevo.

Todo en la eternidad no cambiaría.

Las inteligentes amas de llaves de la casa saludaron calurosamente a su dueño, ajenas al tiempo en que no había estado. Como su dueño no estaba cerca, no tenían nada que limpiar y ordenar, por lo que se quedaron estacionados a un lado, como el cronómetro.

Chi Yan miró todo lo que tenía frente a él con nostalgia. Ye Ying Zhi sonrió y lo siguió en silencio, mirándolo intensamente.

—¿Nadie tocó estas cosas aquí cuando yo no estaba cerca?

Esta pregunta estaba originalmente dirigida a Ye Ying Zhi, pero no esperaba que su mayordomo inteligente respondiera primero.

—No, este caballero detrás de ti ha estado aquí. Durmió en su cama, usó su almohada, usó su edredón, leyó sus libros, jugó con sus consolas de juegos, usó sus platos para comer, usó sus tazas para beber agua… Pero su autoridad es muy alta, lo siento, Maestro, no podíamos detener el comportamiento de este caballero.

Después de todo, eran productos de la civilización de la tecnología mecánica. Aunque su inteligencia juzgó que esto no era bueno para su Maestro, no pudieron detener a Ye Ying Zhi.

El nombrado tosió levemente detrás de él.

—… Cuando formé por primera vez esta figura humana, vine a vivir por unos días para experimentar la vida de un humano.

Por supuesto, había otras razones como que tenía dificultades para hablar, pero no quería mencionarlo.

Sin embargo, Chi Yan solo lo miró y no lo siguió.

No había nada que perseguir. Amándolo en secreto y abiertamente durante las últimas decenas de miles de años, y habiendo vivido cinco vidas juntos, realmente no había nada que esconderse el uno del otro.

Finalmente escogieron vivir en la casa en la que Chi Yan originalmente vivía, ya que él había vivido ahí durante decenas de miles de años, tenía ricos recursos y era la más cómoda.

Los dos descansaron ahí durante dos días. Una noche, justo antes de irse a la cama, Chi Yan de repente abrazó el cuello de Ye Ying Zhi, se inclinó para besarle la oreja y preguntó: —Ying Zhi, ¿no deberíamos regresar? Desaparecimos así de repente. ¿Qué pasa con mis padres y amigos en esta vida? De todos modos, nos quedaremos aquí así todo el tiempo, ¿por qué no regresamos y terminamos esta vida primero?

—Claro, —Ye Ying Zhi acarició suavemente su espalda desnuda—, pero hay un polo maligno en ese mundo, y ese polo maligno ha sido asimilado por mí durante décadas, así que esta vez tengo formas de retener mi memoria después de regresar. En cambio, tú te olvidarás de todo y solo recordarás las cosas de ese mundo cuando regreses. Solo puedo esperarte y traerte de regreso aquí después de tu muerte en esta vida.

—No importa —Chi Yan sonrió y lo besó—, incluso si sólo recuerdo las cosas de ese mundo, también sé que te amo.

El eterno mal no pudo negarse y solo pudo mimar y complacer a su amante llevándolo de regreso al mundo donde solo habían pasado la mitad de sus vidas.

♦ ♦ ♦

Chi Yan se despertó en la única posada de Villa Hongtu.

Abrió los ojos, aturdido, y miró a su amante que estaba acostado a su lado, se levantó y lo sacudió.

—Ying Zhi, despierta, ¿por qué estamos aquí?

El rostro del hombre estaba más confundido que el suyo.

—¿Dónde deberíamos estar si no es aquí?

—Recuerdo… —Chi Yan frunció el ceño—, entramos en esa cueva y solo éramos nosotros dos. No importa cuánto caminamos, no pudimos encontrar la ruta que tomé en el pasado. Más tarde, cuando decidimos volver por el mismo camino, no pudimos encontrar la entrada de la cueva por donde entramos. En cambio, entramos en un pasillo de piedra sin salida.

En este punto, se acostó junto a su amante, el cual estaba acostado tranquilamente en la cama. Tembló un poco, pero no se mantuvo alejado, en cambio se inclinó sobre su pecho.

—Entonces de repente te veías muy extraño y aterrador. Sea lo que sea, tu reacción fue muy anormal.

—¿Te asusté y aun así te estás acurrucado conmigo? —Ye Ying Zhi se rio entre dientes y lo abrazó con fuerza—. No tengas miedo, ya no pasará nada. Había una especie de gas que hacía alucinar a la gente en esa cueva. Inhalamos el gas en ese momento y tuvimos alucinaciones, por lo que no pudimos encontrar la abertura de la cueva para salir. Entonces de repente te desmayaste. Después de descubrir que algo andaba mal, usé el cilindro de oxígeno en la bolsa y logré rescatarnos a los dos en el último momento.

De hecho, Chi Yan había empacado cilindros de oxígeno portátiles en sus bolsas como medida de precaución.

Originalmente quería hacer la mentira más completa, diciéndole que nunca habían estado en la cueva, pero esto definitivamente haría que Chi Yan se sintiese aún más confundido. Además, su amante se había visto afectado mentalmente antes cuando les contó a las personas que lo rodeaban todo lo que sucedió en la cueva y nadie le creyó. Después de pensarlo un poco, decidió no hacer esto y en su lugar dijo una pequeña mentira.

No importa cuántas vidas hayan pasado juntos, mirando el rostro inocente y dependiente de Chi Yan, simplemente no podía confesar el hecho de que no era un ser humano, aunque sabía que, si un día Ah Yan descubriera de repente la verdad, solo tendría más miedo. Entonces, él era como un procrastinador serio, trataría de procrastinar día tras día diciendo pequeñas mentiras.

Esta explicación encajaba perfectamente con la memoria de Chi Yan. Más tarde, sintió un desmayo momentáneo y no pudo recordar nada. No dudó y se acurrucó suavemente en sus brazos.

—Entonces, ¿qué pasó con ese anciano? Todavía quiero agradecerle.

—Le he dado las gracias en tu nombre. Ya ha vuelto con su asistente —Ye Ying Zhi le besó la frente—. No te preocupes, me dijo antes de irse que ya había enviado a tu primo y a las otras almas buenas para renacer, mientras que las almas malvadas se convirtieron en energía fantasma por el polo maligno en la cueva. Por eso no vimos nada cuando estuvimos ahí.

Chi Yan soltó un sonido de sorpresa, sintiendo alivio. Recordando lo que dijo Ye Ying Zhi hace un momento, sintió que recuperó su vida después de experimentar una calamidad. Apreciaba aún más lo que tenía y abrazó a su amante con fuerza.

El asunto aquí finalmente había llegado a un cierre. Los dos descansaron un rato antes de levantarse para empacar su equipaje y prepararse para emprender el viaje a casa.

Primero tuvieron que tomar el autobús de regreso a la capital. La estación de autobuses de larga distancia estaba abarrotada de gente. Ye Ying Zhi caminó junto a Chi Yan, agarrando su mano sin darse cuenta.

Ya fuera solo ellos dos en la infinitud de la eternidad, o en medio de miles de criaturas, abrazaría a su amante con fuerza y nunca lo soltaría.

Quizás algún día, al igual que antes, Chi Yan podría descubrir que el hombre que dormía junto a su almohada en realidad no era un ser humano.

Pero, ¿qué importaba?

De todos modos, ya habían pasado por esa situación en algunas vidas.

De todos modos, sus días aún eran largos, tenía mucho tiempo y un sinfín de mundos donde podía ‘castigar’ a su amante.

De todos modos, sabía que no era humano cuando se enamoró de él.

De todos modos, nunca pensó que un día estaría en la eternidad y estaría enamorado de la eternidad.

Chi Yan estiró los dedos y los entrelazó con los de Ye Ying Zhi.

♦ ♦ ♦

Ye Yan Chi Ying Zhi.

Decenas de miles de años de compañía y espera, cinco vidas de la mano hasta que envejecen. Todo estaba perfecto.


Shisai
Este es el final de la historia principal. Nos quedan 40 y pico de capítulos extras. Gracias por acompañarnos. Llevamos 3 años con este proyecto, el tiempo ha volado. Nos vemos en los extras.

Sakuya
Me encantó el final, me sacó lágrimas :\') No puedo creer que ya sean 3 años o.o!! Como vuela el tiempo. Espero sigan con nosotros más tiempo :3

Una respuesta en “El Perseguido – Capítulo 140: Justo a la derecha”

  1. Aaaaa me encanto, de verdad que me ha sacado mis lagrimas, la historia de amor de YingZhi y Chi Yan es la mas bonita que he leido. Muchas gracias por traducirlo💗💗

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

 

error: Contenido protegido