Traducido por Anissina
Editado por Ayanami
Lo sabía. Tal y como esperaba.
Esta vez, Wave-dre volvió a separarse del grupo por su cuenta y se dirigió hacia el palacio donde residía el Emperador. Aquella cosa maloliente estaría, sin duda, en el bolsillo de su pecho. Esta conspiración era la razón por la que incluso ahora, el Emperador era incapaz de levantarse de su lecho de enfermo. Leer más…