Traducido por Maru
Editado por Ayanami
Maru
Con esto comenzamos el segundo volumen 🙂
Una vez cada pocos años, Mary se hacía una fuerte permanente.
Por supuesto, esto era para desenrollar su cabello de taladro vertical, pero era demasiado difícil deshacerse de él…en el salón, ese taladro de aleación era conocido como el asesino de esteticistas.
Sin embargo, ella siguió asumiendo el desafío, porque era, después de todo, una adolescente que anhelaba tener un peinado suave. Por encima de todo, ahora que estaba en su segundo año de la universidad, quería una figura elegante con el pelo plateado ondulado, al igual que su madre.
Después de todo, al combinar sus rizos verticales con su vestido parecía demasiado infantil. Hasta la escuela secundaria, dicho estilo era adecuado para una hija noble, pero en la universidad se veía inadecuado. Seguí leyendo “La hija de la Casa Albert – Capítulo 41”