Traducido por Kavaalin
Editado por Sharon
Fue Al quien reaccionó al seco golpeteo reverberante.
Supuse que había sentido la presencia de alguien incluso antes de que llamaran a la puerta. Me miró, aparentemente preguntándome qué debía hacer, pero no tenía más opción que asentir. No sabía quién era, pero probablemente habían venido sabiendo que estaba dentro de la habitación. Sin embargo, por unos instantes Al no se movió de su lugar. Como no había ninguna sirvienta presente en este momento, solo él podía abrir la puerta. Parecía que quería decir algo, curvó los labios y suspiró un poco antes de hablar en voz baja.
—Continuaremos esta conversación más tarde.
Probablemente quería asegurarse de que su voz no llegara al otro lado de la puerta. Entonces, de repente, cerró el libro y me lo devolvió silenciosamente. Continue reading